Es raro, cuando la vida de una persona se entrelaza con otra, haces que los lazos humanos se junten más.
Después del divorcio con mi esposa, se me fue la vida, mi hijo, era una de las cosas que me hacia pensar que tenia que seguir adelante, pero debido al trabajo, no podía verlo, sus cumpleaños me los perdía, las fiestas navideñas de igual manera, pero la vida de alguna forma, te da una oportunidad para rehacer el camino.
Era un investigador de alto renombre en América, trabaje en varias instituciones gubernamentales, y termine cuidando a un escritor de un enfermo mental, la razón…alejarme de los vínculos que tenía con mi esposa e irme a vivir muy lejos del abismo, el dinero no me interesaba, pero, tenia cierto rencor con Yuki Kitazawa, años atrás, había violado, atormentado y amenazado a un chico de 16 años, el chico por defensa propia le disparo, pero no lo llego a matar, el chico presentaba traumas, no por la violación, si no, por que en verdad el chico lo amaba y no pensó nunca que le llegaría a hacer una cosa tan cruel.
Fue un escandalo en el país, lo condenaron, pero desapareció ese ser tan vil.
Eso fue hace años, y en ese tiempo, tenia varios contactos, y varios favores que pagar, como al inversor mas influyente en la música, Tohma Seguchi.
El era cuñado de aquel niño de 16 años, y se quedo frustrado al saber que el agresor de su familiar se fuera y no pagara por lo que había hecho.
A partir de aquel suceso, vivo en la sobra de Eiri Uesugi protegiéndolo de todo a todo, el chico de 16 años se convirtió en un escritor y salió como un hombre valiente de una guerra, era honorable.
Cuando se corrió el rumor de que el agresor de Eiri se encontraba cerca de la zona donde el vivía, se alerto mucho mi jefe, la verdad era que si asustaba, por que no sabes hasta donde puede llegar una persona enferma, movimos contactos e hicimos que desapareciera el escritor.
Me daba algo de tristeza, por que había hecho una amistad muy buena con un estudiante, había tenido otra vez la oportunidad de volver a amar, y no tener miedo.
La poca estabilidad emocional que había recuperado desde hace años, se le iría tan fríamente, eso lo quería evitar.
La situación más difícil fue hablar con el escritor y convencerlo de que tenia que alejarse un poco de su vida.
-necesitas salir de tu departamento, solo serán unas semanas…-tenia mi vista fija en el, sus ojos intimidaban, sus gestos eran serios.
-no…-aquel hombre rubio era de un carácter terrible, desenfunde mi 9 mm. Y la puse en la mesa de vidrio que había en la sala de aquel departamento.
-sabes que el esta aquí, y que le puede hacer daño a Shuichi-solo abrió los ojos mas, sorprendido por lo que dije, pero era cierto.
-mmm…a ¿donde iría?- relajo un poco los gestos de la cara.
-a una casa cerca de aquí, solo es esconderte unas semanas para despistarlo, Shuichi, su amigo y Suguru estarán protegidos.-Hiro, Hiroshi Nakano, amigo de Shuichi, me había llamado la atención por su forma de ser, alivianada, tranquila y pacifica, una cosa que yo no lo era.
-me niego.-cruzo los hombros el escritor más malhumorado de lo que era.
-es por tu bien.-saque la magnum y la deje en la mesa de estar, el escritor se sintió mas presionado.
-una semana, y quiero ver a Shuichi.-
-ok!-tendríamos que arreglar todo, el encuentro de shu con el, el lugar indicado era la librería, deshabitar el departamento, e ir con las personas de la zona para saber si no habían visto a aquel sujeto.
La primera parada fue a la casa del amante de Eiri, después a la de su amigo, ya habíamos hecho buena amistad, y sabia todos los problemas detrás de aquella relación.
Su amigo era un buen informante, pero algo iba mal, unos días después, siempre estaba nervioso cuando iba a su casa a hablar, la verdad desde un principio me acerque a el, por que…por que…no lo se, impulso, quizás.
Y de buena fuente días después me entere, que Yuki Kitazawa, había amenazado a Hiro.
-K…-esa noche, lo había invitado a salir, me tenia que decir lo que había pasado aquel día, y tenia pensado decirle que me gustaba, aunque siempre dije, “esto nunca me va a pasar a mi, por que soy un hombre, y anduve con una de las actrices mas guapas de mundo y me case tuve hijos y bla… bla… bla…y véanme aquí, cortejando a un chico de preparatoria.”
-wath?-tome un sorbo de cerveza, y la coloque en la mesa de aquel restaurant.
-Yuki…Eiri…esta…bueno, vino Kitazawa a mi casa…-
El mundo te puede dar vueltas en segundos, puedes viajas en lo mas profundo de los pensamientos en instantes, cuando te dan malas noticias…
Ese momento sentí que se derrumbaba mi vida, esa persona enferma había amenazado a Hiroshi, por cambio de información, solo hablo poco, pero nunca me percate, de que se movía con dificultan desde que empezó a estar nervioso, lo había torturado, sin dejar marcas en su cuerpo, Kitazawa sabia el paradero de su victima, eso era de pensarse.
Se me fue el hambre, hable a números de personas cercanas al domicilio, todo, pero no había ninguna señal ni nada, ¿que ocurría?, ¿que había pasado?
Salimos del establecimiento, tome el auto y conduje como diablo, los semáforos los ignoraba, tenia un mal presentimiento.
-Hiro, no es momento, pero, hoy te iba a decir, de verdad me gustas, y por ello descuide mi trabajo, es un error… ¿verdad?
Y así, es cuando te das cuenta que sigues viviendo detrás de una persona, y haces que se junten lazos humanos, nunca hubiera conocido a Hiro, si nunca hubiera cuidado de Eiri…
Y fue uno de los errores más agradables y estúpidos que pude haber cometido…