Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

UNA TRISTE Y DULCE CANCIÓN DE AMOR por sayaka no sekai

[Reviews - 45]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo: Hola a tod@s, aquí les dejo el sig cap d esto, a ver como me salió pero tengo la fé de que les guste y se diviertan con el n_n.... aun tngo algo de tiempo libre (algo me dice que estoy olvidadno algo, sino porque tanto tiempo libre tengo, eh? ¬¬) y lean y disfruten!!!
SENCILLO 2: CENA

-¿Esta es la nueva canción? Tiene demasiados rayones -Hiro leía rápido el contenido del papel porque sabía que esto era la guerra de quien leía primero y rápido la hoja; apenas la terminó de leer, le fue arrebatada por el pelirrosa-
-Es que no está terminada, apenas la empecé ayer -apneas la tenía en las manos y K se la quitó como si se tratara de algo prohibido: increíblemente rápido-
-Mmmm, tiene temática triste, ¿no crees? No es tu estilo este tipo de letras
-Es que… -la chica panda le arrebata la letra-
-Pero tiene buena letra para ser párrafo y medio
-¿Qué pasó aquí Shuichi, porque una letra así?
-Simplemente se me ocurrió -le había dado la espalda a esas personas, era mucha la pena que sentía en su alama como para poder confrontarlos ahora-
-¿Y dónde está ese depravado tuyo? ¿Supongo que esto es culpa de él, o no? -dijo la chica quien revisaba con la mirada el cuarto, en busca de algún rubio-
-Está en rueda de prensa y… ya no quiero seguir hablando -sin siquiera voltear a ver a los presentes, el chico se sale de la habitación, sin consideración alguna-
-Se los dije: no está nada bien, algo pasó aquí…-Hiro veía la puerta por la cual segundos antes se había ido su amigo-
-¿Pero qué? No lo entiendo, tú lo sabes K?
-No, I don´t know, but… -sacaba la magnum- lo averiguaré… hahahahahaha! -se ríe como demente y ambos sólo lo miran mientras les salen gotas en la cabeza-
_____________________________________________________________________________
-Fue una buena respuesta de su parte joven Yuki, no pensé que fuera tan hábil para hablar -dijo una Asuka con una hermosa sonrisa en los labios, casi risa inocente-
-Murmurando -Me hubiera gustado decirle eso hoy en la mañana…
-¿De qué habla?
-Ehhh…. de nada

-FLASHBACK-

-Una pregunta de índole personal: si tuviera que elegir entre su carrera y su pareja ¿Cuál elegiría?
-Preguntas personales acerca de Shindou-kun y Yuki-san no est…
-Pues la verdad, si tuviera que elegir entre mi carrera o mi pareja, escogería estar con la persona que me quiere tal como soy, no por las personas que me quieren por lo que escribo; sé que mis novelas sólo son exitosas ahora, pero pasado un tiempo se que alguien más escribirá algo innovador y dejarán de ser éxito
-¿Entonces esa es su conclusión? Creo si sus fans se enteran de ese tipo de respuesta tal vez dejarían de comprar sus obras -se oyen las risas-
-Tal vez…

-FIN FLASHBACK-

-¿Qué es lo que dice nuestro itinerario, Asuka? -el rubio conducía a cierta velocidad por las carreteras de Japón-
-Ehh, pues… ¡ah! Una sesión de autógrafos de sus libros y… ya en la tarde, la cena. Eso es todo por hoy -veía a su portafolios, el cual no dejaba de temblar por los nervios de ella y por la velocidad del auto-
-¿No hay nada para mañana, verdad?
-Me temo que sí: mañana en la tarde tiene una entrevista con una revista que quiere publicar un artículo suyo -la chica miró casi de inmediato para evitar una confrontación directa con esos orbes gatunos, esos ojos que podrían conquistar a cualquiera-
-¿No se puede remediar eso, como adelantarla o cancelarla?
-Imposible ya que el reportero es extranjero y su vuelo llega a las 6 de la tarde. Es de USA
-Mmm, ya veo.. -pensaba en las consecuencias de esa acción-

Shuichi ha vagabundeado todo el día, lográndose ocultar de la gente con una gorra y unos lentes que le hacían ver como un loco hasta que logra llegar a un pequeño parque, donde mira a unos niños jugar con la arena. Se sienta en un columpio y fija su mirada en aquellos niños quienes ignoraban los tantos problemas que tenía en la cabeza y sin saber cuándo, empieza a mecerse con el viento de la tarde soplando por detrás suyo haciendo que entre a su mundo de pensamientos, en lo que no dejaba de ver hacia el cielo amarillento.

-Oye Sarah, ¿Ese no es un artista? -dijo uno de los niños que miraba a Shuichi-
-¿Eh? creo que sí pero no lo sé hermano…
-¡Vamos a pedirle un autógrafo, vamos! -el niño pelinegro se acerca junto a su pequeña hermana al cantante-
-Ya es algo tarde, tengo que regresar, aunque sea a dormir… -veían su reloj y suspiraba calmadamente, estaba tan dentro de su mundo que no notó que uno de los niños se le acercó tanto que logró jalarle la chaqueta que traía-
-D-Disculpe, ¿no eres de casualidad Shindou-san?
-¿Eh? Me encontraste -dijo al quitarse la gorra y los lentes para ellos-
-¿Nos das un autógrafo? por favor… -la niña era la que ahora jalaba la chaqueta del pelirrosa, con ojos suplicantes-
-Claro, no se le puede negar nada a una linda señorita que lo pide de esa manera, aunque espero que tengan todo, yo estoy limpio
-¡¡Claro!! -en lo que ambos niños gritaban en coro por la felicidad, no logró notar que se acercaban Rage y Hiro, casi sin aliento por tanto correr en el día- ¡Gracias! -los niños se alejaban corriendo, felices de tener entre manos ese tan anhelado autógrafo; detrás de él se iban deteniendo sus perseguidores, ya casi se desfallecían del cansancio en las piernas-
-Vaya… sí que sabes desaparecer… -dijo la chica que apenas y logró sentarse en el columpio de al lado, para respirar profundamente-
-¿Hiro? ¿Rage? ¿Cómo me…?
-¿Encontrarte…? Ay monito, para algo tengo un rastreador satelital conmigo. Debes fijarte en todos mis movimientos
-¿Por qué te fuiste de esa manera sin decir nada? A pesar de que teníamos cómo encontrarte, parecía que querías que nadie te siguiera -dijo esta vez su amigo Hiro, quien también de tanto correr, no le quedó de otra más que sentarse entre la arena, no importándole donde se metiera ésta-
-La verdad es que… ya no aguanto más esto… -dijo mirando al cielo, ese atardecer que recordaba a los ojos gatunos de su escritor-
-¿Qué ya no aguantas más?
-Es sólo que pareciera que Yuki prefiriera estar con otra persona y ya no le importara mi presencia. Hoy le pregunté sí iría al concierto y sólo contestó que tiene mucho trabajo y que lo verá en casa. Ya le di los boletos con días de anticipación, se lo vine recordando casi dos semanas y ahora… estoy seguro de que mañana me dirá que tiene trabajo y que no podrá ir pero lo que pasa es que no quiere estar conmigo
-Bueno y por qué no lo compruebas, tal vez estés sufriendo en vano…
-Ella tiene razón, no saques conclusiones tan apresuradas y asegúrate -logró poner una de sus manos sobre una de las rodillas del chico, quien al sentir la calidez de la mano de su amigo, sólo sonrió-
-Tienen razón: lo haré, esta noche según él, tiene una cena de negocios con uno de los directivos de la editorial, podemos ir a ver con quien anda…
-¡Entonces los espiaremos! ¡Jojojojojo! -la risa maligna de la chica-panda era como si se oyera reír al mismo demonio-
-Sabes Hiro, a veces ella me da miedo
-Jejejejeje -ambos chicos tenían gotas en la cabeza, que no dejaban de resbalar al ver a esa chica-
_____________________________________________________________________________

Al fondo de sus pensamientos, oía levemente el eco de una voz familiar, quien trataba de poder oír sus pensamientos, pero la voz era muy molesta que no podía evitarla- ¿¡Eiri Yuki, me escucha!? -dijo un hombre ya entrado en edad, de unos 60 años, con las canas ya marcadas en sus cabellos y con una barba blanca, notándose de nuevo las canas en ella
-¿Umm? Sí, lo siento, ¿qué me decía? -tratando de ser amable ante el señor-
-¿Cómo va ese libro? -dijo con uno de los cubiertos en sus manos, probando su filete-
- Bien -dijo con una grandiosa sonrisa, pero en el fondo pensaba “deje de hacer preguntas idiotas”, ocultando su verdadero yo-
Le entrega un documento sellado en sobre- Señor Wakabayashi, le pido que firme esto, es un aplazamiento de tiempo para la entrega de los escritos del joven Yuki
-Mmmm, de acuerdo………. Por cierto Eiri, que conveniente es de tener cómo novia a tu editora, aparte de ser muy eficiente, es muy linda
-¿Eh, yo? No… -la chica no pudo evitar el sonrojo al oír aquellas palabras que tanto deseaban que fueran verdad-
-Se equivoca, ella no es nada mío, sólo es un apoyo en mi trabajo -dijo sin el más deje de sentimiento en sus palabras, cosa que no pasó desapercibida por los demás en la mesa-
-Es verdad, lo siento, olvidé por completo que su pareja es ese jovencito artista, jejeje -al decirlo, tomaba su barriga entre sus manos para reir-
-… -mirada asesina-

Mientras tanto, fuera del restaurante estaban espiando Rage y K, tratando de pasar desapercibidos (cosa que hubiera sido fácil de lograr sino hubieran puesto su tienda de campaña tan “disimuladamente” escondida enfrente del local), ambos vestidos de militares, con todo y equipo a la mano, dándole instrucciones a Shuichi, quien se encontraba dentro del restaurante, camuflajeado.

- Are you ready Shuichi? Nosotros esperamos tu señal, ¡cambio! -dijo hablando por un transmisor que casi a la velocidad de la luz terminó en las manos de la chica-
-Cuando tú nos digas, entramos por el paquete, ¿Entendido monito?
El ruido de los platos apenas lo dejaban oír claramente - Si, ya sé; ¡cambio y fuera!
________________________________________________________________________
-Eiri, dime ¿irás a Nueva York a promocionar tu libro personalmente, verdad? Eso me dijo Asuka
-Aún no lo sé, es muy apresurado y… aún no le he dicho nada
-Asuka, ¿pues cuantos boletos le diste?
-Pues dos señor…
-¿Y por qué no vas con él? Así serías de gran ayuda…
-Lo siento, pero ya me he entrometido demasiado en la vida del joven Yuki y de Shindou-san y no quiero causarles más molestias -se acerca un mesero con la comida en un carrito-
-Entonces habla con el chico...
-Buenas noches, soy su mesero por esta noche… -dijo el mesero que se había detenido a atender a los presentes-
Todos en la mesa habían palidecido, sobre todo cierto escritor al ver que era Shuichi quien se había disfrazado de mesero para poder entrar al restaurante: hasta un bigote falso se había puesto. El rubio, que después de ese susto que duró una eternidad a su parecer, al fin logró reaccionar, haciendo que al instante se pusiera de pie y tomara por la muñeca al mesero-

-Disculpen un momento, tengo que hablar con el mesero -todos asintieron como pudieron-

En eso estaban cuando fuera del local se oyen ruidos de botes de basura; cómo si alguien chocara con ellos y alguien grita la frase “abortar misión”, mientras un rubio y un pelirrosa se encerraban en el baño, sacando a todos los que estaban ahí.

Miraba al chico como si con ella quisiera matarlo -¿Me quieres decir que haces aquí, vestido de esa manera tan ridícula mocoso latoso?
-Es que yo… -decía tratando de no ver a la cara al chico-
-Quítate ese ridículo bigote, no te queda -le arranca el bigote de un jalón, sin remordimiento-
-¡Auch! Eso duele -dijo frotándose la zona lastimada-
-Contesta a lo que te pregunté
-Que-quería saber… que estabas haciendo… a-además, ¿Quién era la chica que estaba sentada a tu lado, acaso ella es mi rival?
Se acercaba hacía él, dejándolo acorralado en unas de las esquinas, sin ninguna posibilidad para escapar- ¿Celoso… -acariciaba su rostro mientras acercaba su boca a la oreja del chico- …verdad?
-…. -trataba de disimular el sonrojo por el contacto del aliento del rubio en su persona-
-Eres un gran tonto, ella es mi representante y me tiene que acompañar en cada cena de negocios que tenga y tu… acabas de arruinarla -dijo apoyando una de sus manos en la pared, a un lado del chico-
-¡No es cierto! Tú no me dijiste que cenarías junto con ella ni que te irías a Nueva York junto con ella
-Eso es sólo un viaje de negocios y nada más
-¡¡Mientes, vi cómo ella te miraba y es claro que le gustas!! Dime, ¿ella igual te… gusta…?
-En realidad, ella no es nada desagradable
-Lo sabía: ella te gusta -levanta la mirada que estaba ocultando al novelista, para verse reflejado en los ojos de éste- ¿ya no te importo, verdad? ¡¡Entonces quédate con ella!! -sale corriendo del baño y el otro no hace nada por detenerlo: sólo miraba cómo se iba y segundos después, la puerta por la cual el chico se había salido, sin nada más que poner una cara de tristeza-
El chico iba alejándose del lugar, con lágrimas en los ojos y con su corazón lastimado: había olvidado por completo a Rage y a K; quienes le iban hablando por el auricular que colgaba de su oreja izquierda. Todo era ignorado por su mente, hasta llegar al grado de no darse cuenta de que casi era atropellado por un coche en su huída: todo ahora daba igual ante sus ojos. Era más el dolor de las palabras de aquel hombre hacia esa chica, que muy bien podrían haberle disparado y no se daría cuenta hasta que se viera desangrado. Siguió corriendo hasta llegar a su casa, donde se encerró en su cuarto poniéndolo bajo llave y tirándose en la cama a llorar tristemente, repasando las palabras en su mente y las imágenes de la chica y él juntos, golpeando el colchón una y otra vez mientras maldecía el nombre de Yuki y a aquella mujer. No logró dormirse del coraje que tenía más sí logró tranquilizarse, abrazando una almohada. Miraba el vacío de la cama, pensando la infinidad de veces que siempre estaba así, a no ser de las noches de pasión que le daba su escritor, para de nuevo amanecer solo y…. otro espacio vacío. De pronto, el sonido de su teléfono lo sacaba de esas ideas que lo atormentaban, mirando en la pantalla un número más que familiar.
-¿Si? Habla Shindou… -tenía la voz entrecortada, trataba de no llorar-
-¿¡Donde rayos te metiste enano miserable!? ¡Crawd y yo te estamos esperando hace más de media hora en el lugar donde habíamos quedado!
-Estoy en mi casa, en mi cama, no quiero hablar con nadie
-¿Eh? No me digas que…
-Adiós -dijo colgando la llamada, para luego tirar el teléfono al fondo de la habitación, estrellándose contra el cesto de ropa sucia-
Con el teléfono en las manos, viendo a su compañero con una cara de decepción -Está peor que antes: fracasamos…
-Que mal…
Mientras tanto, del otro lado de la ciudad…
-Lo odio, es un… -se escucha que tratan de abrir la puerta pero no lo logra por estar bajo llave, no quedando remedio más que tocar-
-Shuichi soy yo, abre la puerta -la cara del rubio demostraba preocupación, más no el tono de la voz-
-¡Vete, no quiero saber nada más de ti! -avienta una almohada a la puerta, asustando al rubio, para luego recargarse en la puerta, con un cigarrillo en la boca-
-¿Seguirás haciendo pucheros de eso, mocoso? Pensé que eras tonto, pero veo que eres infantil…
- ¡Yo no soy un niño! -se sienta sobre la cama y a un lado, la hoja de la canción, a medio completar-
-¿No piensas abrir? -dijo tirando la colilla del cigarro al piso- De acuerdo, entonces te lo diré así: mañana no iré al concierto, tengo una entrevista a las 6 y…
-¡Ya basta! No más mentiras, ya no me importa si vas o no, no quiero verte ahí… ¡NO VAYAS!
-…………….. -el rubio miraba al piso, las palabras casi en susurros le salían- lo siento...

Shuichi, inspirado por el momento que está pasando, toma la hoja de la canción y se va a una mesa de noche donde escribe la letra pero sólo hasta la mitad, porque el pobre -con esa imaginación tan activa- va imaginando lo que se supone que estaba pasando con esa chica y cada vez que lo recuerda, hace rabieta para luego maldecir pero de tanto cansancio que sentía, se queda dormido en la mesa.
Una hora más tarde -con llaves en su mano- logra entrar Yuki al cuarto, dónde al entrar, lo primero que encuentra es a un pelirrosa dormido sobre la mesa ya bien acomodado y en un sueño profundo. Se conmueve al ver al chico dormir tiernamente de esa manera, que le toma entre sus brazos y le acomoda en la cama, arropándolo. Simplemente se sienta a su lado para mirarlo dormir: estando ahí, acaricia su rostro suavemente junto con su cabello algo despeinado. Es en ese momento cuando siente lástima por hacerle sufrir constantemente por los malentendidos; entre sueños, Shuichi nombra a Yuki y se le sale la frase “Yuki…. te amo”, haciéndole sonreír al rubio quién se levanta y le da su beso de las buenas noches en la frente y con esa sonrisa en los labios, sale de la habitación, cerrando la puerta delicadamente, sin el menor ruido posible.

Amanece siendo por fin el día ansiado: sábado por la mañana, 7:00 AM. La luz del día apenas se colaba por la habitación, dejando ver a un bulto rosa que estaba casi en posición fetal, muy bien acomodado y dormido, abrazando una almohada como si fuera algo importante. Una sombra se aparece frente a la imagen angelical del chico con una magnum en las sienes y haciendo ruido con su garganta: K llevaba media hora esperando a que el vocalista sintiera su presencia, era inútil eso y estaba decidido a actuar.
-Good morning guy! -la magnum no se separaba de la cabeza del chico- It´s time for wake up, hurry! -dispara sin remordimiento alguno-
-¡Por una vez en tu vida, deja de dispararme! ¿¡Acaso me quieres matar!? -la muy clásica hemorragia en la cabeza por el disparo, levantado casi al instante-
-No pensé que te molestara tanto… -guardaba su magnum en su funda, casi incrédulo por las palabras que decía el artista-
-Pues ya lo sabes…. ¿eh?... estoy en, ¿la cama? -dijo reaccionando al verse cubierto con parte de las sábanas de ésta-
-Que ocurre, ¿te extraña dormir en cama? ¿O es que estás acostumbrado a amanecer acompañado?, jejejeje -lo dijo sin pensar y obtuvo una mirada melancólica del chico hacia la cama-
-No es eso, será que… nah, lo dudo creo caminé a la cama ya tarde
-Ok -le toma por la cintura desprevenidamente y se lo arroja al hombro- ¡Vámonos!
-¿Tendré que acostumbrarme, verdad? -dijo con varias gotas en la cabeza y con mucha resignación en lo que su manager le sacaba del edificio por la ventana-
_____________________________________________________________________________
El sonido de celular lo saca de sus pensamientos suicidas y nerviosos: el pobre productor estaba con los nervios de punta -para variar- porque el problema que tenía nadie que no fuera su amado “Seguchi-sama” lo podía resolver. Sentado en el sofá de la sala de estar de la parte del edificio que le pertenecía a la banda; desde la mañana intentaba comunicarse con el manager que no aparecía por ningún lado, , hasta que ese sonido glorioso se hizo presente y supo quien era: el tono que le había puesto lo delataba.
-¿B-Bueno? ¡Habla Sakano! -las manos le temblaban, esperaba que sus oídos no le fallaran-
-Por favor Sakano-san, tranquilícese no grite -decía mientras caminaba en dirección a una casa familiar, con un pequeño regalo para el dueño de la misma-
-¿¡Je-jefe!? ¿¡Dónde está!? ¡Ya es tarde y tiene que hacer los últimos arreglos para el concierto de la noche! -se levanta de golpe, dejando caer varios papeles que estaban cerca de él, incluyendo la corbata que se había quitado en su ataque de nervios-
-Jejeje, justo te llamaba para decirte que llegaré más tarde
-¡¡Pero jefeeeee!!
-Todo estará bien, cuando llegue firmaré lo que quieras
Cayendo sentado en el sofá, un poco mas relajado- Por lo menos dígame a donde se dirige… -se retira los lentes y se frota los ojos vigorosamente-
- Voy a casa de Eiri y…ya tengo que colgar, bye! -cierra el teléfono y toca el timbre de la casa para que, luego de unos segundos, abra la puerta un rubio recién levantado y con cara de pocos amigos-
-¡No, espere jefe..! -se escucha el sonido de que se corta la línea- mmm, colgó… -apenas lograba estabilizarse de la notica de su jefe cuando se abre la puerta casi de golpe, con los clásicos gritos de cierto cantante y manager- ¡Por fin, ya era hora de que llegaran! ¡Shindou-kun, vea la hora que es!
-Apenas son las 9 de la mañana… -el chico se acomoda en una de las sillas del lugar y el productor se le acerca casi enojado-
-¡Sí, pero aún no has ensayado! Nakano-san y Fujisaki-kun ya están en el lugar ensayando, sólo faltas tú, K-san, ¿¡porque llegas tan tarde!? Se supone que llegarías a las 8 no ahora
-I´m sorry! Había perdido mi magnum y…
-Nada de peros… -el productor toma de la mano tanto al manager como al vocalista, con el ceño fruncido- vamos al escenario, apenas tienes unas cuantas horas para la prueba de audio, ropa y ensayar
________________________________________________________________________
Tomaba una taza de café con la mirada clavada en cierto punto, estando sentado frente al rubio que ya había devorado los pastelillos que le había llevado su cuñado -¿Entonces piensas viajar a Nueva York sin él, verdad?
-Aún no lo sé Seguchi, no sé si ir o no, tengo que confirmar el lunes a mediodía
Se acerca al chico y se hinca para acercarse, casi pareciera que lo va a abrazar, quedando a centímetros de la boca del rubio mirándole directamente a los ojos- ¿Y a esto, que es lo que dice Shindou-san?
-… Está furioso… y no quiere escucharme -casi la sonrisa de felicidad se le salía, pero tenía que disimular muy bien y actuar como si nada-
-Mmm, ya veo, tarde o temprano aceptará tus decisiones
Se levanta y deja a su cuñado en el piso, para caminar hacia la ventana, donde se recarga y mira al vacío -Está celoso de mi representante, tanto como para arruinarme una cena de negocios anoche -la mirada que se refleja en el vidrio es de tristeza con melancolía al recordar como se había dormido en la mesa la noche anterior-
-Y a ti… ¿ella te gusta? -el tono de su voz cambiaba a uno de molestia, casi denotando los celos que sentía al oír hablar a Eiri de esa chica; , pensaba-
-No es nada desagradable, pero…
-¿Pero…? -la mueca que tenía era de enojo-
-No me agrada, es muy tímida… y reservada, no es mi tipo
-Mmmmm -cambia inesperadamente su cara de enojo a una de alegría, para terminar de levantarse y tomarse esa taza de café que dejó a un lado-
_____________________________________________________________________________
-Hola!!
La histeria era tanta que lo agarra por el cuello y lo agita fuertemente- ¿¡Ya viste la hora que es!? ¡Son las 11 de la mañana y no has hecho nada!
-Tranquilo Fujisaki, ha de haber una buena razón para que esté llegando a esta hora, ¿no es así Shuichi?
-Ehh, si tenía que hacer una llamada y algo de comer -dijo con algo de tono morado en su cara por el agarre-
-K, ¿Por qué tienes esa cara? -dijo al ver al manager mirando al vacío con tristeza-
-Es que… perdí la frazada de mi magnum…
-¿Fra-frazada?-Shuichi que, al oír eso, mira a ver a su manager-
-Sí, es para que no tenga frío -acaricia a su arma como si fuera un ser vivo y le dice cosas en su idioma-
Se acerca a su amigo y le susurra sin que lo notara el manager- A veces me da mucho y pienso si no es mejor cambiar de manager…
-Jejejeje -risa nerviosa- por cierto Shuichi, ¿cómo anda la canción que estas componiendo, va bien?
-Pues sí, tengo algo pero no la traje -dijo recordando la noche anterior, donde se había dormido pensando en mil y un cosas, sin importarle donde quedara la letra-
-¿Y vendrá Yuki-san? -la pregunta salió sin ser pensada y cuando se dio cuenta de la cara de su amigo, se arrepintió de haber preguntado: la cara de furia y de resentimiento se hizo presente-
-¡No me importa si viene o no, no quiero verlo! -El hecho de que su amigo dijera esas palabras le recordaron lo que hizo hacía unas horas atrás, una de las razones por la cual se atrevió a llegar tarde. K le esperaba sentado en el auto en lo que el chico estaba en el teléfono de monedas más cercano, decidido a hacer una llamada rápida al causante de las cosas-
-“El número que usted marcó no se encuentra disponible, pero si gusta dejar un recado delo después del tono –bib-”
-¿Yuki, estas ahí? -la paciencia del chico era casi nula al oír la contestadora: siempre la dejaba el novelista, aunque estuviera en casa- Si estas o no lo diré: no te quiero ver en el concierto, no vayas ¿¡entiendes!?, no quiero verte ahí ni saber nada de ti, si vas te mataré!!! -cuelga con toda la fuerza que tenía, tanto que se lastima la mano al dejar caer el auricular al pedestal- aunque…. quisiera tener el suficiente valor cómo para poder cumplir mi amenaza
-Hey, Shuichi!! Come on! It´s late! -el sonido del claxon de K lo había sacado de su mente en un parpadeo-
-Ya voy, ya voy…

-¿Sabes? ¡Me da igual si viene o no! -notando que su amigo lo miraba detenidamente, cambia de gesto -Díganme, ¿¿acaso no tenemos un ensayo que hacer?? Es tarde…
-Nakano-san, ¿Qué le pasa a…?
-No lo sé, nunca lo vi tan enojado con Yuki-san, ¿tú sabes K? -mientras hablaban, el chico se había acercado a los técnicos de audio, quienes al verlo, se pusieron a mover los aparatos-
-Lo único que es seguro es que Yuki hizo algo que enfadó al chico

Eran las 6:30 de la tarde en casa de Yuki; Asuka miraba inocentemente el reloj de pared en lo que esperaba sentada con una taza de café en las manos y Yuki caminando de lado a lado de la habitación. Era desesperante para el novelista que el de la entrevista aun no llegara y a él se le hacía tarde, demasiado…. Y su editora no decía palabra alguna que no fuera >. El mensaje de la contestadora lo puso de nervios y molesto: casi podría matar al reportero con la pura mirada.

No dejaba de ver el reloj cada 10 segundos sin dejar de poner una cara de fastidio y enojo de tan solo ver la hora —Es demasiado tarde y no llega, por eso te dije que mejor canceláramos esto -la cara del rubio pasó a una de furia cuando veía a la chica no decirle nada-
-Ya le repetí que no se puede, el sólo vino a hacer la entrevista e irse… -al asentar su taza en la mesita, nota el boleto para el concierto debajo de la billetera del rubio —¿Y eso…? ¿Piensa ir?
-Aún no lo sé, supongo -de repente, suena el timbre de la puerta con suma insistencia y termian abriendo Asuka-
-Siento la tardanza Mr. Eiri Yuki, soy del “The American”
-Llegas tarde… -la cara de fastidio del novelista era mucho más evidente que nada a esas alturas; el periodista entra y se quita el abrigo que trae-
-Lo sé, lo que pasó fue que mi vuelo se retrasó y el tráfico está horrible, pareciera que hay un concierto…
-Lo hay: es el concierto de la pareja de… -nota lo que iba a decir sin pensar-…. ¡perdón!, no debí decir nada -sonrojo total-
-¿Y a qué hora es el concierto? -dijo el periodista sentándose a un lado de la chica, mirando como si nunca hubiera entrado a una casa-
-En media hora, ¿puede darse prisa por favor?
-De acuerdo, pero ¿dígame porque está tan molesto? -la cara de Eiri no era de fastidio, sino ya de un enojo leve-
-Es que tiene que hacer las paces con… -vuelve a pasar por lo mismo de hace unos segundos y se cubre la cara con ambas manos, ocultando lo rojo de su cara-… ay no, otra vez hice lo mismo…
-Entonces esa era la razón, hahahahaha -el periodista reía abiertamente frente a la cara de los dos personajes en lo que un rubio con cara de asesino veía intimidatoriamente a su editora en lo que ella, apenada, apartaba su rostro de la mirada de su escritor-
_____________________________________________________________________________
El club Ruido era un mar de gente: no cabía un alma en él y eso que eran las 6:50 PM, unos minutos antes de que comenzara el concierto. A pesar de que todos sabían de que era un lugar demasiado pequeño se hizo ahí porque era el mejor lugar para que la gran mayoría de los fans pudieran asistir y poder abrir una serie de conciertos si es que ese funcionaba.
-Vaya, no pensé que fuera a estar tan lleno -dijo llegando con unos lentes y un sombrero que cubría su cabellera rubia-
-¡Jefe! -se lanza sobre su jefe y no lo suelta de su abrazo de oso-
-Llegas tarde, Tohma -dijo una chica con mirada gatuna y enojada, sentada alado del productor-
-¿Mi-mika? ¿Qué haces aquí…? Pensé que… -la cara de sorpresa era evidente-
-¿Estaría en casa aburrida…? Shuichi me invitó hace dos semanas y decidí venir, ¿no sabes sí Eiri vendrá?
-Creo no… tiene una entrevista ahora mismo -muy cerca de ellos se escucha la voz de K hablando con alguien, o mejor dicho, regañando a alguien que no dejaba de hacer berrinches-
-Ryuichi, deja de estar corriendo por ahí -la magnum colgaba de una de las manos del rubio, pero no podía apuntar porque unas manos se lo impedía de tanto berrinche-
-¡¡Es que estoy aburrido!! -la cara de Ryu era su modo infantil, aquél que le nublaba el juicio y no permitía que nada fuera como debiera- Kumagoro quiere correr para ver a Shuichi…. -dijo juntando los dedos-
-¡Ryuichi!, ¿Qué haces aquí..? -era raro ver a sus conocidos en ese lugar, y más que cada uno de ellos habían sido invitados por el chico-
-¡Tohma no da! -era la felicidad del ex vocalista de Nittle Gasper que se lanza contra él y le cae encima- ¡Igual a mí me invitó!
No dejaba de ver a Ryu de una manera medio pervertida desde que había llegado al lugar — ¿Entonces mi hermanito no vendrá?
-No, no vendrá -dijo la chica viendo que nadie de los presentes lograra identificar a sus amigos y familiares al mismo tiempo que tenía una cara de tristeza ante tal hecho-
-Pobre chico: entonces para él le importa más su trabajo que él…
Amarraba a Ryuichi en una silla, su arma no servía contra alguien tan hiperactivo —Tal vez llegue más tarde…
_____________________________________________________________________________
Mientras tanto eso ocurría fuera del escenario, detrás del telón, estaban un Fujisaki nervioso, Hiro tomando agua en lo que veía los acordes de las letras a tocar y Shuichi deprimido, recordando las palabras que le había dicho a su amado horas atrás, sin poder quitar la cara de pesimismo que traía.
-¿Qué te sucede Shu? -el pelirrojo se acercó a su amigo al notarle tan callado, era muy raro que estuviera así-
-Nada… no es nada -fingió una sonrisa, pero el chico no dijo nada y simplemente se limitó a verlo a los ojos-
-¿Quieres que venga, verdad?
-Te mentiría si te dijera que no, pero con esto me he dado cuenta de que en verdad no importo para él y que su supuesto trabajo y ella son los importantes. Sino fuera cierto, al menos me hubiera dicho que haría el intento de venir a verme…
-Tal vez te equivoques, ¿no dijo que tenía una entrevista ahora mismo? -se pone de pie el chico al oír en los altavoces la voz de y camina con determinación hasta el escenario, en lo que deja ir un suspiro casi sin hacer ruído, pero notado por los demás-
-Bueno, no es hora de lamentaciones… ¡es hora de cantar!

Sube el telón y se presenta la banda, todo el público presente se emociona y se hacen presentes los famosos carteles con mensajes de adoración hacía cualquiera de los integrantes de la banda. El lugar estaba a tope y eso que hay un espacio de seguridad entre los fans y el escenario; Ryuichi se emociona y se pone a cantar las canciones del repertorio, pero algo anda mal. A la mitad del concierto, se escucha un crujido tan fuerte en el escenario que hace que la banda se detenga a media canción y los asistentes se pusieran a ver de dónde venía ese sonido; Hiro trataba de averiguar de dónde provenía viendo varias veces hacia arriba y se logra dar cuenta del error pero era demasiado tarde: la mayor parte de las luces del escenario se vienen abajo justo sobre un Shuichi que no sabía que pasaba, que al oír el ruido sobre si, se queda de pie impresionado, no logrando escapar del lugar y siendo sepultado por ellas sin poder hacer algo por cubrirse. El público gritaba de la desesperación y de miedo al ver aquel horror que había sucedido en cuestión de segundos. Ryuichi y K bajaban a toda prisa, directo al escenario seguidos de Tatsuha que aún no terminaba de procesar la información en su mente.
Suguru no sufrió ni un daño y sólo por que Hiro lo empujó hacia atrás en el momento exacto, a Hiro sólo le cayeron unos barrotes que le ocasionaron unos golpes sobre todo en los brazos. El, junto con los otros tres se ponen a retirarle el escenario al chico… El llanto inundó el lugar, y los de seguridad iban vaciando el local, reembolsando el dinero a los fans.
_____________________________________________________________________________
Las 8:15 PM, aún en la casa del novelista y con más preguntas por responder que al principio de la entrevista. El reloj era el inseparable juez y verdugo del rubio, al saberse de antemano que el concierto debía de estar en su apogeo y no podría ni siquiera verlo por TV porque por algo se habían vendido boletos: para que se tuviera que ir a verlos.
-¿Y bien, cuando piensa ir a Nueva York a promocionar su libro? Ya tiene tiempo que no se le ve por allá -el periodista estaba bien acomodado en uno de los muebles de la sala, sin importarle que el rubio tuviera varias venas en la frente-
-Supongo que en dos semanas, eso es lo que tengo planeado -su grado de resignación era elevado a esa hora de la entrevista, al ver la hora-
-¿Y viajará con usted su pareja?
-Tal vez si, tal vez no… > Pensamiento único del rubio en toda la entrevista
-Disculpe, usted ha de saber… -suena el teléfono de Yuki- Ehh, joven Yuki, su teléfono…
-¿Qué es lo que quieres Mika? Estoy ocupado… -malhumorado había respondido a su teléfono, sin saberse de lo que se enteraría-
-¿¡Tienes una televisión cerca!? -el tono de la voz de su hermana le llamó la atención: ella jamás estaba en ese tono, no a menos que a él le hubiera pasado algo realmente malo-
-Si, ¿Por qué…?
-¡Solo préndela! -ignorando a los presentes, se acerca a la televisión y la enciende, topándose con una noticia de última hora-
La chica se mostraba algo alterada y viraba a ver a cada rato atrás de ella, tratando de ver lo que ocurría detrás suyo —Soy Kazumi de noticias 23, noticia de último minuto: me encuentro en el club Ruido ya que el vocalista de la banda Bad Luck, Shuichi Shindou ha sufrido un terrible accidente a la mitad del concierto que él ofrecía aquí, las luces del escenario le cayeron encima, dejándolo sumamente herido. El joven…
Mientras veía la noticia, lentamente fue dejando caer el teléfono al piso de la sorpresa y susto, al igual que los presentes quienes no dejaban de estar impresionados. Se oye la voz de Mika gritando por éste y sin pensarlo, sale corriendo de casa para ir a ver al chico. Ya dentro del auto se le vienen a la cabeza las tantas veces que lo hizo sufrir casi hasta el grado de llorar, son tantos sus remordimientos que se le salen las lágrimas sin sentirlas.
Media hora más tarde, llega al hospital donde todos están reunidos con el alma a punto de romperse: Hiro con algunas vendas en la cabeza y en los brazos y Suguru con un ataque de nerviosismo, sin contar a los demás presentes que tenían la cara pálida de lo que había ocurrido.

-¿¡Donde está Shuichi!? -el miedo le hizo decir las únicas palabras que podían salir de su boca en el momento, temiendo la respuesta de ésta-
-Está en urgencias…. Muy mal herido… -a pesar de todo, el era el único con algo de cordura en su mente, claro que andaba con su aspecto serio-
-¡Por favor, dime qué fue lo que pasó! -dijo agarrando de los hombros a Ryuichi-

Continuará…
Notas finales: ¿Qué les pareció? Jajajajajaja yo toda dramatica en mis fics, ¿no creen? Pues a ver que pasa con esta historia porque verán, mi hada de la inspiracion se fue de vacaciones todas pagadas al caribe desde hace 8 meses y su descanso duraba 4.... no me hagan mucho caso, es que en su lugar dejó a su prima, la hada de la imaginación, imagina y no me deja hacer nada esta desde hace tiempo, bien instalada... ¬¬

Bueno ya me terito y wiiii!!!! pude comer mi pib hoy!!! *¬* dios, muero del empacjo, pero estaba delicioso, jajajajaja
Hasta la próxima x3!!!!

Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).