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Junjou Babys por Son Yamuri

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Notas del capitulo:

Perdón por no haberme reportado antes. No diré las razones por las cuales me ausenté, pero si se preocuparon por mi, ¡muchas gracias!

No estaba muerta ni perdida.

Por cierto, ¡Junjou Babys fue nominado a ser uno de los mejores 3 fics del año!

Compito contra otros 4 fics. Deseénme suerte.

En fin, solo tengo unas pocas palabras:

A mis hermanas, que me apoyaron en todo.

A Zuzu577 por ayudarme con algunas ideas y editar algunos capítulos.

A Kim Usagi-san, que me estuvo presionando e incluso me ayudo a mejorar este capítulo.

A Yue Uzumaki, porque si no hubieramos tenido aquella plática, Junjou Babys jamás hubiera nacido.

Y a todos ustedes, por seguir Junjou Babys hasta ahora.

Muchas gracias.

Espero que les guste:

Al día siguiente, Nowaki se preguntaba cómo habían llegado a esa situación:

Estaban todos en un avión, obviamente malhumorados porque los bebés no dejaban de llorar, tenían hambre y aún faltaban unas horas de viaje.

Akihiko llevaba poco de haberse despertado así que su malhumor matutino se mezclaba junto con el hecho de que en todo el rato Misaki no le había hecho caso por andar cuidando de los bebés y que su noche de sexo se había acabado gracias a las agruras de Misaki. Ah... y tal vez algo tuviera que ver con la llamada que recibió...

Misaki tenía dolor de cabeza y algo de agruras por las enchiladas que se había comido la noche anterior, tampoco ayudaba que los bebés anduviesen llorando sin control y que sus berridos se mesclaran con el de los otros bebés, además de que la noche de sexo con Usagi se había interrumpido gracias a sus estúpidas agruras. Además... la llamada que Usagi había recibido le había bajado los ánimos...

Shinobu andaba malhumorado ya que no solo su "noche de pasión" con Miyagi se había interrumpido, sino que fue interrumpida gracias a la estúpida llamada de su hermana indicándole que leyera un maldito correo que su padre le había enviado, además de que los bebés lloraban -aparentemente- sin razón alguna. Aunque en el fondo, Shinobu sabía que no era nada de eso. TODA la culpa la tenía el maldito correo de su padre.

Miyagi tenía cara de zombi con 2 meses de descomposición. Ayer habia tenido lo que podía llamarse "una prometedora noche de sexo" con Shinobu, pero justo en la mejor parte Risako lo había llamado. Obviamente, no contestó, pero después de 8 intentos TUVO que contestar, y todo se arruinó gracias al correo que su jefe-suegro le había mandado. Aunque, la cara que traía tal vez tuviera algo que ver con que los santos bebés no se callaban.

¡Y ni hablar de Hiro! No tenía cara de malhumorado, ni de adolorido, ni de zombi descomponiéndose: de hecho, no tenía expresión alguna, y era eso lo que, de haber estado bien, les hubiera dado miedo a los demás.

¡Tanto tiempo había pasado ansiando ir a México! ¡Con cuanta emoción había bajado del avión! Y ahora, se encontraba en otro avión, pero que iba de regreso a Japón. ¡Ahora, para volver a ir...! Además, los malditos bebés no se callaban, ya llevaban unas horas llorando...

Ok, de acuerdo, NADA de eso tenía que ver. No era el regreso a Japón lo que le molestaba, sino la razón por la cual regresaban.

Si... TODA la culpa la tenían tanto la llamada de Akihiko como el correo de Miyagi.

¿Y Nowaki?

El andaba... ¿triste?...

Aunque pareciera imposible, el saber del correo de Miyagi y de la llamada de Akihiko, le ponían triste. Sabía que ese día llegaría, pero... nunca imaginó que la idea de que sus dos ex-enemigos se alejaran lo pusiera así.

- ¡Suficiente! -dijo Hiro- ¿porqué tienen que hacer caso?

- No lo veas de esa forma Kamijou -dijo Miyagi con un intento de sonrisa- mira, es mejor para los dos: yo consigo lo que quería y a ti te ascienden de puesto

- Pero tú no querías estar ahí, sino en Sapporo, ¿verdad?

- Bueno es cierto... pero también es cierto que la paga es mucho mayor

- ¿Y tu que tienes que decir en tu defensa Akihiko?

- Que Misaki siempre quiso ir allá...

- ...

Akihiko suspiró.

- Mira Hiroki... no importa cómo lo veas, siempre hay que aprovechar las buenas oportunidades... sin importar que es lo que vayas a dejar atrás

Hiro se quedo congelado ante eso.

Antes de todo el asunto de los embarazos, siempre había pensado eso. "Siempre aprovecha las oportunidades de crecer y salir adelante, sin importar que o a quién vayas a dejar atrás".

Hace tiempo, ese era su lema. ¿Qué le había pasado?

- Cierto... -dijo Hiro- ... lo lamento, Akihiko... no sé que...

- Sí lo sabes, es solo que no lo quieres aceptar

Al final, los bebés ya se estaban calmando. El avión se llenó con un silencio extraño.

Un silencio pesado y triste.

- Así que... irás a Inglaterra para la promoción de tus libros... ¿Cuánto tiempo estarás allá? -dijo Hiroki al fin mirando a Akihiko

- Tiempo indefinido -dijo Akihiko- tanto que... se podría decir que puedo ir pidiendo mi mansión de ahí. Isaka-san me llamó para decirme que ya estaba todo arreglado

- ¿Y tú Miyagi? ¿Cuánto tiempo estarás en Australia?

- Pues... -dijo Miyagi- el puesto de profesor en esa escuela no es muy fácil de ocupar... tengo... una residencia asegurada... el padre de Shinobu me mandó el correo diciéndome la fecha en la cual debo estar ahí...

- Vamos, no se desanimen -dijo Nowaki mirándolos- no se van a ir para siempre...

Todos voltearon a verlo con una mirada extraña. Casi premonitoria.

- Bueno... no puede ser para siempre, ¿verdad? -volvió a decir Nowaki, solo que esta vez un poco más inseguro

- Hablamos con Nii-chan -dijo Misaki- él está de acuerdo. Dice que me extrañará, pero que quiere lo mejor para mi

- Y hablé con el padre de Shinobu -dijo Miyagi suspirando- puede conseguir que Shinobu termine sus estudios en otro lado y puede tener asegurada la educación para nuestros hijos

- Al igual que a mi -dijo Akihiko- los estudios de Misaki, su trabajo y la educación de nuestros hijos están asegurados...

- No tenemos ninguna razón para decir que no -dijo Shinobu

- Y aunque la tengamos... no será aceptable -dijo Misaki meciendo a su hija

Nowaki bajó la mirada, derrotado. La cruda verdad estaba frente a ellos y no había manera de evitarla.

¿Qué podían hacer?

 

- Nosotros... -dijo Misaki dudando un poco- en verdad... nos hemos llegado a apreciar, ¿cierto?

- Más de lo que imaginé alguna vez -dijo Miyagi con una sonrisita

Y Akihiko no dijo nada, solo se quedó demasiado pensativo.

- ¿Cuánto tiempo tienen antes de irse? -dijo Akihiko en forma repentina, mirando a Shinobu y a Miyagi

- Alrededor de tres dias -dijo Miyagi- creo que para el amanecer del tercer dia ya deberiamos estar en el aeropuerto

- Igual que yo -dijo Akihiko- entonces, tienen el día de hoy libre, ¿no?

- Si se puede decir -dijo Hiroki- aún tengo que llegar a casa de mis padres por las llaves del departamento

- Pero nosotros tenemos que empacar -dijo Shibonu

- Eso pueden hacerlo después -dijo Misaki, comprendiendo lo que Akihiko quería hacer- el día de hoy lo tenemos libre, ¿no?

- Sí -dijo Akihiko- además, Hiroki... ¿aún lo tienes?

- ¿Tener...?

- ¿Recuerdas lo que usábamos para divertirnos en días lluviosos?

- ¿Te refieres a ese trasto viejo? Sí -dijo Hiro

- ¿Aún funciona?

- ¡Claro que sí! Lo he cuidado bastante

- ¿En dónde está?

- En casa de mis padres, pero si vamos por el...

- No hay problema, nosotros no hemos llegado del viaje

Los demás se quedaron con cara de "?" mientras veian como Akihiko y Hiroki se perdían en su mundo.

- ¿No sería mejor comprar uno nuevo? -dijo Akihiko

- ¿Y porqué no? Tengo uno genial que trata sobre autos...

- Entonces ya está -dijo Akihiko con una sonrisita

- ¿De qué rayos hablan? -dijo Shinobu

Akihiko y Hiroki se miraron seriamente, pero más que mirada seria, era una sonrisa cómplice.

- ¿Alguna vez los he invitado a nuestro departamento...? -dijo Akihiko con esa rara mirada

*****

- Nowaki-san, ¿qué es eso?

- Es la cámara con la cual grabamos a los bebés poco después de que nacieran

- ... ¿Aún siguen esas escenas vergonzosas...?

- Me parece que sí

 

Estaban en el departamento de Akihiko y Misaki. NADIE de la familia de ellos se había enterado de que habían llegado a Japón. Miyagi y Shinobu estaban en la habitación de Akihiko acomodando a los bebés para que durmieran, Nowaki y Misaki estaban acomodando botanas y bocadillos en la sala, y Hiroki y Akihiko habían desaparecido misteriosamente poco después de llegar al departamento.

 

- ¿Aún funciona? Después de aquél golpe que recibió por parte del Sensei...

- Veamos...

 

Nowaki comenzó a picar botones y luego sonrió cuando vio una lucecita verde.

 

- Misaki-kun, ¡sonríe!

 

Misaki sonrió en forma algo avergonzada al notar que Nowaki lo estaba grabando. Se escucharon pasos por las escaleras, y Nowaki volteó la cámara.

 

- ¡Miyagi-san, Shinobu-kun, sonrían!

 

Miyagi de inmediato puso una gran sonrisa y comenzó a saludar (como tonto), en cambio Shinobu solo miró a Nowaki con cara de "muérete".

 

- Shinobu-kun, ¿podría poner una sonrisa? En un futuro nuestros hijos verán este video...

- Como si fuera a permitir que mis hijos se acercaran a ti -dijo Shinobu mientras reprimía una carcajada y una sonrisa

 

Nowaki sonrió y luego caminó hacia la cocina (todavía grabando).

 

- ¿Qué haces Misaki-kun?

- Tenía planeado hacer unas galletas

- Genial, te ayudo -dijo Shinobu caminando hacia ellos

- No creo que sea buena idea... -dijo Miyagi en un murmuro

- ¿Qué rayos dijiste? -dijo Shinobu mirándolo fijamente

- No, nada, solo que creo que hay que poner la tetera

 

Shinobu fulminó con la mirada a Miyagi y luego caminó hacia la cocina con los demás. Miyagi se sentó en el sillón y luego escuchó que los bebés hacían ruidos.

 

Rápidamente corrió escaleras arriba y cuando abrió la puerta, se dio cuenta de que los bebés no estaban NADA dormidos, todo lo contrario: estaban jugando entre sí, abrazando a Suzuki-san. Por tres segundos Miyagi creyó ver que al oso le brillaban los ojos y sonreía, pero parpadeó y el oso estaba inmóvil, siendo abrazado por los bebés.

 

No tuvo más opción que bajarlos, y despues de 4 subidas y bajadas de escaleras, puso a todos los bebés en el corral que estaba un poco apartado de la sala y lleno de juguetes.

 

Una vez todos los bebés estuvieron juntos, sus tiernas risitas no se hicieron esperar. Miyagi no pudo evitar el sonreír y reir un poco. Y es que, ¡¿cómo no hacerlo, si su hermosa niña Shungiku estaba acostada, intentando chuparse un pie?!

 

Justo en esos momentos, llegaron Hiroki y Akihiko, cada uno con una bolsa negra en la mano.

 

- ¿Qué traen ahí? -dijo Nowaki curioso dirigiendo la cámara hacia ellos

 

Akihiko semi sonrió y mostró lo que traía en la bolsa:

 

Un YBox del más moderno, color rosa con osos dibujados y de hasta 8 jugadores, con controles inalambricos e incluso podía modificarse para que el juego se pudiera ver 3D.

 

Por su parte, Hiro traía los mejores videojuegos del momento: Resident Evil (I, II, III, IV, V y VI), Mario Cart, SMASH! 2012, etc.

 

Todos los miraron extrañados.

 

- ¿Qué? -dijo Hiro con una vena saltándole

- ¿Para qué es eso? -dijo Nowaki acercando el zoom de la cámara hacia los videojuegos.

- Para esto

 

Dicho eso, Hiro lanzó uno de los videojuegos hacia la cabeza de Nowaki -que obviamente le atinó- y en el rebote fue atrapado por Shinobu.

 

- ¡Obviamente que para jugar, idiota! -le dijo Hiro con muchas venas saltándole

- ¡Genial! -dijo Shinobu con algo de emoción- ¡siempre quise jugar al smash!!

- Entonces, primero terminemos con las galletas y después podremos jugar -dijo Misaki con una sonrisita

- Bien -dijo Nowaki con una sonrisa y poniendo la cámara (sin apagar) encima de una mesita.

 

Solo que, con los movimientos, la cámara fue a dar hacia el corral de los bebés, pero nadie exepto Hiroto y Mamuro (quienes desde que nacieron parecían ser los mejores amigos) se dieron cuenta. El pequeño Hiroto comenzó a dar manotazos, mientras Mamoru, sonriente, picaba unos cuantos botones.

 

Quien sabe que tipo de cámara era, el caso es que antes de que Akihiko se diera cuenta, los bebés sacarón tres fotografías instantáneas, idénticas todas:

 

Salían Akihiko y Hiro sentados en el sofá más grande, Akihiko con una vena saltando y Hiro abrazando al enorme Suzuki-san, con una sonrisa rara ya que se había estado burlando del peligris.

 

Frente a ellos salía Miyagi con una copa de vino, quien a su vez miraba hacia un lado con cara de "WTF?!" ya que olía a quemado.

 

Y eso fue porque también salía Nowaki, Misaki y Shinobu. Nowaki traía un delantal y traía flores en una mano, ya que estaba desocupando la barra, mientras miraba a Misaki quien traía un bol en su mano porque estaba mesclando la masa y le preguntaba a Nowaki "¿así estará bien?", y delante de ellos estaba Shinobu con cara de "WTF?!" ya que las galletas que había estado cuidando estaban quemadas.

 

Una escena un tanto estúpida, pero de cierta manera linda. O al menos fue lo que Akihiko pensó al momento de quitarle la cámara a los bebés (que por cierto, protestaron al ver que ese hombre les quitaba su nuevo juguete). Al ver las fotos, sonrió y sin que los demás se dieran cuenta, le entregó una copia a Hiro y otra a Miyagi.

 

Ambos se quedaron extrañados, pero sin decir más las guardaron y continuaron lo que hacían.

 

Al final, Shinobu logró hacer unas galletas... tal vez no buenas, pero al menos no quemadas. Misaki hizo un hermoso (y delicioso) pastel, enorme y con apariencia de castillo, y estaba rodeado de flores y rosas que Nowaki había brindado.

 

Una vez que los bocadillos quedaron listos, Nowaki, Misaki y Shinobu comenzaron a servir la mesita que estaba frente al televisor, mientras que Hiro y Akihiko se peleaban con los cables y Miyagi leía el instructivo... el cual a pesar de estar en japonés, no entendía nada.

 

- Dice que el cable rojo y el blanco siempre deben estar juntos... -decía Miyagi un tanto dudoso- pero... también dice algo del amarillo

- ¿Qué dice del rojo y el blanco? -dijo Hiro, quien estaba agachado junto con Akihiko detrás de la tele de 70 pulgadas

- Que deben ir conectados juntos en la entrada de sus respectivos colores...

- ¡¿En cual de todas?! ¡¡Hay como 10 entradas rojas y blancas!! -dijo Hiro frustrado

- ¡¿Y yo qué sé?! -dijo Miyagi usando a Suzuki-san para protegerse de la ira de Hiro- ¡¡aquí solo dice entrada roja y blanca!!

- De acuerdo -dijo Akihiko- probémoslas todas

 

Y así estuvieron durante 10 minutos, cambiando y combinando cables y entradas. Miyagi tuvo que ir para ayudar con las combinaciones.

 

- ¿Qué tal así? -dijo Akihiko

- No, se ve azul -dijo Miyagi- que tal si movemos esto... así... y ponemos esto acá... ¿se ve?

- Se ve peor, está todo amarillo-dijo Hiro- dame eso Miyagi

 

Hiro comenzó a mover cables y combinar entradas hasta que...

 

- ¿Se ve?

- Kamijou... -dijo Miyagi- ahora todo está negro. Al menos Akihiko y yo logramos imagen

- Bueno, no muevas este cable de ahi, solo moveremos esto... -dijo Akihiko

- Que gracioso -dijo Miyagi con una risita- ahora se ve morado

- No te rias y ayúdanos -dijo Hiro

 

Mientras, Nowaki, Misaki y Shinobu veían lo que hacían los demás. Al final, terminaron apostando para ver de que color se pondría la televisión en los siguientes movimientos.

 

- Tres chocolates a que la próxima se pone verde -dijo Shinobu

- Eso es algo muy temerario Shinobu-kun -dijo Nowaki con una sonrisa-

- Tal y como dice Nowaki-san, el amarillo y el azul ya pasaron... pero acepto su apuesta -sonrió Misaki

- Oye Miyagi -se oyó la voz ahogada de Hiro detrás de la tele- ¿de qué color es?

- ¡¡Ahora es verde!!

- Temerario pero efectivo -sonrió Nowaki dándole tres chocolates a Shinobu

- Sí, buena apuesta -sonrió Misaki aceptando su derrota

 

Después de otros diez minutos, Miyagi, Hiro y Usagi ya estaban por explotar, maldiciento a los montones de cables y a las diez entradas, hasta que Nowaki, Misaki y Shinobu, cansados de hacer apuestas y de ver tantos colores, se decidieron a entrar en el asunto.

 

- ¿Podemos intentarlo? -dijo Nowaki, preparado para esquivar cualquier objeto

- Como quieran -dijo Hiro en un gruñido- no me importa ya

 

Mientras Miyagi, Akihiko y Hiro se apartaban, Shinobu, Nowaki y Misaki tomaban los lugares de sus respectivas parejas.

 

- Esa cosa es un desastre -dijo Miyagi

- Sí, mejor hubiera sido hacer otra cosa... -dijo Hiro

- Hablando de otra cosa... -dijo Akihiko- ¿qué pasará con la boda?

- ¡¿Eh?! -dijo Hiro mirando a su amigo- ¡¿todavía sigues con eso Akihiko?!

- Claro que sí. Al menos yo iba en serio -dijo Akihiko en forma tranquila

- Pues no es mi culpa -suspiró Hiro un tanto aliviado- son ustedes los que se van a ir, no yo

- Ya veo... así que ese es el problema... -dijo Akihiko más para si mismo

- ... ¿Akihiko...?

 

La voz de Misaki los interrumpió.

 

- ¿Se ve Shinobu-san? -se escuchó su voz ahogada detrás de la enorme televisión

- Sí -semi sonrió Shinobu con suficiencia, con el manual en la mano- se ve perfectamente

- Eso quiere decir que está listo para usarse -dijo Nowaki con una sonrisa- ahora solo... ¿huh? ¿qué pasa? -se extrañó al notar que los otros tres los miraban en forma horrible

- ¿Qué pasa? -dijo Misaki

- Nada -dijo Miyagi con un suspiro- mejor comenzemos

 

Así, después de unos cuantos minutos, los seis ya se encontraban jugando un juego llamado RallyCross, que obviamente era de carreras. Hiro, con su espíritu de competición, se encontraba en el segundo puesto. Shinobu se encontraba en el tercero, mientras que Misaki ocupaba el sexto puesto y Miyagi el quinto. Nowaki iba justo detrás de Shinobu ocupando el cuarto puesto, y Akihiko iba en el primero.

 

- Maldito Akihiko... -decía Hiro entre gruñidos en cada curva, donde ocupaba el primer lugar solo para después volver a quedar detrás de Akihiko

- ¿Qué pasa? Creo que en verdad estás envejeciendo -decía Akihiko cada vez que volvía a rebasar a Hiro

 

Nowaki, por su parte, estaba demasiado ocupado intentando rebasar a Shinobu, mientras que Miyagi intentaba mantener al menos el quinto puesto y de vez en cuando intentando rebasar a Nowaki.

 

- Misaki, vas en último lugar -dijo Akihiko mirándolo de forma burlona- ¿no es eso tierno?

- No me subestimes Usagi-san -dijo Misaki

- Eso es aún más tierno -dijo Akihiko

 

Misaki, en el sexto puesto, solo sonreía.

 

Poco después comprendieron que podían empujarse entre si para hacerse chocar, pero no era my efectivo ya que se chocaban entre sí y al final o los dos se salían del camino o ninguno. En esos momentos, Hiro se encontraba intentando sacar a Akihiko del camino, quien a su vez, solo sonreía y se mantenía firme. Nowaki y Miyagi estaban igual, y Shinobu se encontraba intentando esquivar los demás autos.

 

Faltaban 30 metros para el final, y seguían en los mismos puestos. De pronto, Misaki soltó una risa un tanto maligna, haciendo que a los demás se les erizara la piel. De la nada el auto que manejaba Misaki se adelantó y chocó entre los de Miyagi y Nowaki, haciendo que ambos se salieran del camino y llevándose de paso al de Shinobu. Esquivando hábilmente los pedazos de los demás carros, Misaki frunció el ceño aún sonriendo y chocó por atrás los carros de Hiro y Akihiko, pasando por en medio de ellos y moviéndose de un lado a otro, haciendo que ambos se salieran del camino y estrellándose. Ya con todos demasiado atrasados, Misaki llegó fácilmente en primer puesto.

 

Todos voltearon a ver a Misaki, un tanto anonados. Misaki los miró aún con su sonrisita.

 

- ¿Estabas en último lugar a propósito? -dijo Akihiko al fin-

- Algo así -dijo Misaki riendo - es mucho más fácil deshacerte del enemigo cuando estás al último y ya no te consideran competencia.

 

Akihiko lo miró un tanto sorprendido.

 

- Te dije que no me subestimaras, Usagi-san -dijo Misaki sonriendo mientras iniciaba otra partida

 

Siguieron jugando por otra hora (donde al final, Akihiko y Misaki competían por el primer puesto) y luego dejaron el juego de lado para alimentar a los bebés, quienes sorpresivamente se negaron a dejar el corral, por lo que cuando los Semes los sacaron, comenzaron a llorar.

 

Entre todos alimentaron a los bebés, y después los pequeños se quedaron dormidos. Los llevaron a un cuarto y los recostaron en siete cunas que "casualmente" habían llegado ahí.

 

Bajaron y comenzaron a comer. Poco después llegó el turno de la cerveza, y para el final de la tercera ronda Hiro ya estaba llorando y estrujando a Akihiko y a Miyagi, llamándoles "idiotas insencibles" y acusándolos de irse y dejarlo atrás.

 

Debido al estado de Hiro, Nowaki decidió que era hora de irse, pero Akihiko se negó.

 

- Pero Usami-san, mire a Hiro-san...

- ¡Essshtúpido Bakahiko! ¡Eressh igual a cuando eramos hip niñossh! ¡Sshiempre me dejasshte atrassh! ¡hip! -Hiro estaba acostado en la mesa con una lata en la mano

- No puedes irte con Hiroki así

- Entonces nosotros nos retiramos -dijo Miyagi algo rojo, cargando a un dormido Shinobu-

- ¿Y cómo harás para irte solo con él y los bebés? -dijo Akihiko

- Ah...

- No hay remedio -dijo Akihiko en un suspiro- en verdad que no soportan el alcohol... pasarán la noche aquí

- Ah, no es necesario Usami-san, en serio... -dijo Nowaki

- No importa, tengo las habitaciones suficientes. Misaki, ¿podrías guiarlos, por favor?

- Claro. Vengan, por favor.

 

Mientras Misaki los llevaba a las habitaciones, Akihiko aprovechó y marcó un número.

 

- Soy yo -dijo- solo quería decirte que todo se adelanta. A mañana. Sí, pero no es mi culpa que el idiota de tu jefe... está bien.

 

Colgó y subió a su habitación la cual "tendría" que compartir con Misaki, ya que los invitados ocuparían las demás. Cuando entró, se desvistió y se metió a la cama, cubriéndose con las sábanas.

 

Poco después entró Misaki, ya cambiado y con una almohada en mano. A pesar de la oscuridad Akihiko podía notar que estaba bastante rojo y apenado, y solo pudo sonreír. Cuando Misaki se acomodó a su lado, dándole la espalda, Akihiko lo acercó y lo pegó a su pecho.

 

- ¡Oye! ¡¿q-qué crees que haces?! -dijo Misaki intentando separarse

- Shh, guarda silencio o los despertarás

- Usagi-san, ¡suéltame! -dijo Misaki un poco más bajo

- Misaki, los planes se adelantaron

- ... ¿Los planes...? ¡ah! ¿aún sigues con eso?

- Será mañana

- ¡¿Mañana?!

- Sí

- Pero, ¿porqué tan de pronto?

- ...

- ¿Usagi-san? ¿porqué?

- ...

 

Misaki se quedó extrañado de que Akihiko no le respondiera. Creyendo que se había dormido, volteó la cara para confirmarlo. Sus sospechas eran ciertas: ya se había dormido, pero... estaba sonriendo.

 

Misaki no podía creer lo que veía: Akihiko se había quedado dormido con una sonrisa. Raras veces había visto eso, pero esas pocas veces en que se quedaba dormido sonriendo era después de... err... hacer "eso".

Pero entonces comprendió. Ya sabía porqué Akihiko había sonreído.

 

Y poco después, Misaki se quedó dormido, también con una sonrisa en los labios.

 

/**/A LA MAÑANA SIGUIENTE/**/

Miyagi despertó por un gran golpe que había escuchado, junto con el llanto de los bebés. Del apuro que tenía por ver lo que había ocurrido, se levantó de la cama pero se atoró con las sábanas, provocando que se cayera con todo y sábanas y llevándose se paso a Shinobu.

Como pudo Miyagi salió al pasillo (arrastrando las sábanas) y entonces...

- ¿Pero qué demo...?

Todo estaba adornado de blanco con listones, moños y flores. Había un par de mujeres caminando de arriba a abajo y todo lucía muy alegre. Recordó el motivo por el cual había salido, y más adelante en el pasillo se encontró con Akihiko y Nowaki, apoyados en una puerta. Nowaki se sobaba la cabeza y Akihiko fumaba un cigarrillo.

- Oigan, ¿qué fue ese golpe?

- Fue Hiroki lanzando la lámpara -dijo Akihiko tranquilamente

- ¿Y qué es todo esto? ¿qué ocurre? -dijo Miyagi mirando a su alrededor

- Es solo... -dijo Akihiko

Llegó una mujer con un traje blanco.

- Usami-sama, ¿en dónde dejo esto?

- Dáselo a él -dijo Akihiko señalando con la cabeza a Miyagi

- ¿Para qué es esto? -dijo Miyagi extrañado tomando el traje

- Para Shinobu

- Pero...

- ¡Usagi-san! -dijo Misaki corriendo hacia él- ¿qué pasa? ¿qué es todo esto?

- ¿No te lo dije ayer?

- ¡No me digas que...!

- Hoy nos casaremos -dijo Nowaki mirando a Miyagi

z88;

*****

z88;

- Desgraciados, malditos, estúpidos, bastardos...

A Hiro ya se le estaban acabando los insultos para los Semes. Había gritado todo su repertorio junto con uno que otro insulto aprendido en México.

Pero, más que enojado, estaba nervioso.

Alguien tocó a la puerta. "Enfurruñado", caminó para abrir la puerta.

- ¿Señor Kamujou? -dijo una sonriente chica con una enorme funda en brazos

- Sí...

- Tome, es de parte de Usami-sensei

- ¿Qué es?

- Es su traje -dijo la chica para luego irse

Hiro miró unos momentos la funda para luego sacar el traje, el cual era color blanco, con una camisa de un hermoso celeste y una corbata elegante negra con azul.

- Entonces... todo es verdad... -dijo Hiro para sí mismo

- ¿Te molesta? -dijo una suave voz detrás de él

Hiro volteó y encaró a un sonriente Nowaki.

- No es eso -dijo Hiro- es solo que... esto no es natural

- Hiro-san -dijo Nowaki con una risita- somos pareja, incluso tuvimos bebés... nada de esto es natural... pero, tampoco estamos cometiendo ningún crimen

- Supongo que tienes razón -dijo Hiro bajando la mirada- ¿y los bebés?

- Aikawa-san se encargará de ellos

- ¿Quién es Aikawa?

- ¿Recuerda a aquella chica pelirroja?

- Ah, la editora de Akihiko, ¿no es así?

- Sí, ella

- Pero no le conosco...

- No te preocupes Hiro-san, Misaki-kun y Usami-san confían en ella... o al menos Misaki-kun lo hace...

- ¿Estarán bien?

- Claro que sí. Ella los cuidará y así nosotros tendremos tiempo para alistarnos

- ¿Pero que ocurrirá con mis padres y los tuyos?

- Usami-san dijo que de eso él se encargará, que nosotros solo nos preocupemos en alistarnos...

- Ya veo...

- Bueno Hiro-san, me voy a alistar en el otro cuarto -dijo Nowaki caminando hacia la puerta- después de todo...

Nowaki miró a Hiro con una sonrisa un tanto pícara...

- Se supone que no debo ver a la novia antes de la boda

... Y salió corriendo de la habitación antes de que Hiro pudiera apuntar a su cabeza con la lámpara que había tomado.

 

z88;

*****

 

Shinobu se encontraba en la habitación que se le había asignado. Ya se había bañado, y ya traía los pantalones de su traje. Por supuesto ya traía puesta la camisa, que era de un suave verde menta, junto con la corbata que era verde jade con negro.

En esos momentos se estaba acomodando el cabello, sentado frente a una clase de tocador, mirándose al espejo. Cierto, la noticia de que se iban a casar lo había sorprendido. Sorprendido, más no molestado.

Estaba terminando de arreglarse cuando tocaron su puerta. Se fue a asomar y vio a una chica bastante sonriente.

- ¿Takatsuki-san?

- Sí -dijo Shinobu algo extrañado

- Tome, Usami-sensei le envía esto -dijo la chica extendiéndole un enorme lirio- es para que lo coloque en el bolsillo de su saco

Shinobu tomó la flor un tanto sonrojado. Aún no podía creer que fuera a casarse con la persona que tanto amaba.

- Gracias -dijo para después cerrar la puerta

Se sentó en el borde de la cama, a espaldas de la puerta, mirando el lirio blanco adornado con un listón verde menta. Con un ligero suspiro comenzó a acariciar los pétalos, un tanto sonrojado. Así se quedó unos minutos hasta que sintió que alguien se sentaba a su lado.

- Qué locura, ¿no lo crees? -dijo Miyagi suspirando

- Sí... -dijo Shinobu

Miyagi ya traía su traje puesto, aunque no arreglado. Incluso así lucía tan apuesto...

- Tus padres ya vienen en camino -dijo Miyagi

- ¿Les avisaste?

- No, fue Usami quien lo hizo...

- Entonces, ¿qué ocurre? -dijo Shinobu al notar que Miyagi estaba demasiado raro

- Pues... Risako vendrá

- ¡¿Qué?! ¡Yo no la quiero en mi boda!

- Shinobu, después de todo, Risako es tu hermana

- A ella no se le puede llamar "hermana"

- Lo sigue siendo

- A alguien que te intenta quitar a tu pareja no se le puede llamar hermana

- Romperás el corazón de Risako, y de paso el de tus padres

- No me importa romper el corazón de Risako -dijo Shinobu dejando el ramo a un lado- después de todo, ella no tuvo consideración con el tuyo...

- He de admitir que me dolió un poco la situación con Risako, pero no me sorprendió y tampoco me deprimió. De hecho, me sentí un tanto aliviado...

- ¿Aliviado?

- Las últimas semanas de nuestro matrimonio no fueron muy agradables. Ella llegaba tarde a casa y yo no le preguntaba su paradero por estar leyendo o haciendo investigaciones, o simplemente durmiendo. Nos estábamos distanciando y yo ya sospechaba que ella me engañaba, pero nunca hablé con ella y nunca tuve el interés de averiguarlo

- ¿En serio?

- Sí. Fue como quitarme un enorme peso de encima. Pero, no tienes porque preocuparte por mi -dijo Miyagi mirando a Shinobu sonriendo- después de todo, en estos momentos te tengo solo a ti

Shinobu se sorprendió ante esas palabras y se sonrojó tanto que hasta sus orejas se pusieron rojas. Miyagi rió y luego se acercó a Shinobu al punto de casi besarlo, pero el menor se apartó.

- ¿Qué ocurre? -dijo Miyagi un tanto extrañado

- No debes besarme... antes de la boda -dijo Shinobu bastante rojo y ladeando la cabeza

Miyagi miró a Shinobu unos momentos un tanto sorprendido y luego comenzó a reír, acariciando su cabeza.

- Al menos... fue lo que Usami-san dijo...

- Ya veo... bueno, entonces...

Miyagi tomó la barbilla de Shinobu y le dio un beso corto pero muy tierno.

- Dejemos esto como un pequeño secreto entre nosotros ¿de acuerdo?

- I-idiota... -dijo Shinobu bajando la cara y poniendose aún más rojo

Miyagi solo rió bastante alegre.

 

*****

 

Misaki ya estaba arreglado. Su traje era blanco, bastante blanco, pero su camisa era lila, y su corbata morada con negro. Se estaba poniendo arreglando su corbata (la cual había quedado torcida) mientras hablaba por teléfono.

- ¿Sí? Con Sumi Keiichi por favor... ah, Sempai. Verá, ¿recuerda lo que ayer le dije? Sí, siempre será hoy... a las tres de la tarde, me agradaría mucho si pudiera asistir... Por supuesto, puede traer a su hija...

- Gracias Misaki. ¿Te molestaría si llevo a un acompañante?

- ¿Un acompañante? Claro que sí, no hay problema.

- Gracias Misaki. Ten por seguro que estaré ahí

Misaki colgó el teléfono bastante feliz. Todou había aceptado con mucho gusto el ir a su boda, y ahora Sumi Sempai. Estaba muy feliz de que sus únicos dos amigos pudieran asistir a un evento tan importante para...

Espera, ¡¿importante?!

Bueno, sí, era algo muy importante... ¿pero cuándo se convirtió en un evento importante en su vida?

Ah... debía de culpar al maldito ambiente de boda que había por todo el lugar...

- Misaki-kun -Aikawa entró a la habitación. Llevaba un precioso vestido color rosa y su cabello en una coleta. Lucía realmente bella.

- Aikawa-san -dijo Misaki un tanto sorprendido- se ve muy bien

- Gracias, tú también -dijo Aikawa con una sonrisa- ya es hora Misaki-kun

- ... ¿tan pronto?

- Sí, Sensei apresuró las cosas

- Ya veo... -dijo Misaki en un suspiro, pensando en Sumi- de acuerdo, bajemos

- Ah, por cierto -Aikawa tomó una rosa y la puso en el bolso del saco de Misaki- es una baby romantica. Creí que te quedaría muy bien. Ahora, bajemos.

Misaki salió al pasillo, y se encontró con Hiro y Shinobu. Aikawa lo dejó ahí y bajó.

- Ya es hora... -dijo Misaki mirando a Hiro y a Shinobu- ¿están bien?

- No sé si lo que siento ahora en el estómago son nervios o el desayuno que intenta regresar- dijo Hiro tocándose el estómago, y colocándose un bello jazmín blanco en el bolso de su saco.

- Entonces... es hora -dijo Shinobu acomodándose su lirio

Misaki se sorprendió. Nunca había visto a Shinobu tan nervioso.

- ¿Quién baja primero? -dijo Misaki

- ... Yo lo haré -dijo Hiro, bastante nervioso pero con el orgullo de ser el mayor

Tambaleándose un poco, caminó hacia las escaleras. Comenzó a bajar, tomando el mango de las escaleras por miedo a caerse, pero el ver a las personas ahí solo lo empeoró todo. Misaki y Shinobu caminaban detrás de él, así que no había manera de echarse hacia atrás. Justo cuando iba a la mitad vio que los semes se acercaban a esperarlos al final pero, ¿porqué los tres tenían esa cara de idiotas?

En cuanto bajaron, todos comenzaron a aplaudir, o al menos las pocas personas que habían asistido. Nowaki extendió su mano a Hiro para ayudarle a bajar los últimos dos escalones. En cuanto Hiro tomó la mano de Nowaki, este le acerco y lo comenzó a caminar hacia el centro, donde estaba la persona que los casaría, al menos por lo civil.

- Hiro-san, luces en verdad hermoso

- ¡No digas esas cosas mocoso!

- Lo digo en serio -dijo Nowaki sonriendo- y en verdad no fui el único que pensó eso

- ¿A que te refieres?

Antes de que pudiera decir alguna otra cosa, la puerta de la entrada se abrió, dejando entrara a un niño pequeño seguido de un hombre vestido completamente de negro.

- Ciel-kun -dijo Akihiko sonriendo- me alegro de que hayas podido venir

- Calla -dijo Ciel un tanto huraño- fui obligado por la tía Frances, así que...

- Ah, esa mujer tan dulce. Sebastian, gracias por acompañarlo

- No es nada -dijo Sebastian poniendo su mano en el pecho y haciendo una pequeña reverencia- después de todo, solo soy un simple mayordomo

- Vamos, Sebastian -dijo Ciel caminando hacia los asientos

Las tres parejas llegaron hacia una mesa donde estaba el Juez. Takahiro estaba al lado de su esposa Manami, y el pequeño Mahiro estaba en brazos de su madre. También estaban los papás de Hiro, los de Nowaki, los de Shinobu y... Risako.

No muy lejos de ellos, se había sentado Ciel, con Sebastian atrás de él. Todou estaba sentado a un lado de Ciel, y lucía bastante emocionado al ver a Misaki casarse.

La ceremonia estaba a punto de comenzar cuando la puerta de entrada se volvió a abrir. Entró Sumi con una bebé en brazos y detrás de él venía...

- ¿Haruhiko-san...? -dijo Misaki bastante extrañado al ver entrar al hermano mayor de Usagi-san

- Lamentamos interrumpir -dijo Sumi haciendo una pequeña reverencia

- Ustedes... ¿que hacen aquí? -dijo Akihiko frunciendo el ceño, y ya iba dispuesto a sacarlos de su casa cuando Misaki le detuvo

- ¡Está bien Usagi-san! Yo invité a Sumi-sempai a nuestra boda...

- Tal vez a él sí, ¿pero invitaste a Haruhiko?

- Yo... bueno...

- Está bien Akihiko -dijo Haruhiko mirando a su medio hermano- yo vine aquí solo porque Keiichi me lo pidió. No quería venir hasta aquí solo y con la bebé

- Aún así, tú no eres bienvenido en...

- ¡Usagi-san! -dijo Misaki en un susurro- Haruhiko-san vino en paz. No vino a molestarnos

- Ese es tu problema Misaki, confías demasiado en...

- ¿Y tú porqué no puedes confiar en él?

Akihiko se quedó unos segundos callado y luego hizo una pequeña reverencia.

- Gracias por venir a acompañarnos. Por favor, tomen asiento

Sumi y Haruhiko se sentaron en las sillas más alejadas de los invitados y de la mesa del Juez.

Una vez ya todo arreglado, la ceremonia dio comienzo.

 

*****

 

- Entonces, Usami Akihiko, ¿está usted dispuesto a compartir tanto sus bienes materiales como su vida con Takahashi Misaki, en las buenas y en las malas?

- Acepto

- Usted Takahashi Misaki, ¿está dispuesto a compartir tanto sus bienes materiales como su vida con Usami Akihiko, en las buenas y en las malas?

- Acepto

El Juez ya estaba un tanto cansado, ya que había dicho exactamente las mismas palabras pero 4 veces. Fue muy difícil hacer la boda pero al menos ya llegaba el final.

- Ahora, el intercambio de anillos, por favor -dijo el Juez deseando que ya todo terminara

Los semes sacaron unas cajas y los Ukes otras. Cada Seme puso un anillo en el dedo de su Uke, al igual que los Ukes a sus respectivos Semes.

Para entonces, la madre de Hiro, la de Nowaki, la de Shinobu y Takahiro ya lloraban, incluido Toudo, quien abrazaba a Ciel.

- Muy bien -dijo el Juez con un suspiro de alivio, ya una vez firmados los papeles, cambiado los anillos y jurado aceptarse, solo falta que sellen este compromiso y juramento

Sin esperar a más, tanto Nowaki, Akihiko y Shinobu tomaron a sus respectivas parejas y les besaron. Hiro se tensó un poco, Misaki se sonrojó bastante y Miyagi se sorprendió, pero al final todos terminaron correspondiendo el beso, dando una escena tanto extraña como linda al ver a las tres parejas besarse a la vez.

Cuando se separaron, todos comenzaron a aplaudir. Entonces, destaparon el magnífico pastel: era de piezas individuales redondas, acomodadas en niveles. En la base tenía una pequeña fuente con flores de loto blancas con las puntas rosadas. Algo en verdad hermoso.

Misaki, sonriendo, tomó la baby romántica que traía en el bolsillo de su saco y la puso encima del pastel, a modo de adorno.

Sumi se acercó a Misaki para felicitarle, y Haruhiko se quedó sentado. Aprovechando eso, Akihiko caminó hacia Haruhiko y se paró frente a él.

- ¿Qué haces aquí?

- ¿No te lo dije? -dijo Haruhiko sin inmutarse- Keiichi me pidió que le acompañara porque no quería venir solo con la bebé...

- No me engañas, viniste aquí por Misaki, ¿cierto?

- ... ¿Y qué si así fuera?

- Pues, por si no lo acabas de ver, Misaki es completamente mío

Haruhiko suspiró y antes de que Akihiko pudiera evitarlo, ya se encontraba a un lado de Sumi y enfrente de Misaki. Akihiko casi corrió para detenerlo cuando...

- Felicidades, Misaki -kun -dijo Haruhiko mirándolo a los ojos- aún sigo sorprendido de que alguien sea capaz de soportar a Akihiko

- Ah... está bien Haruhiko-san... gracias... -dijo Misaki un tanto sonrojado- d-disculpe pero... ¿qué es usted de... Sumi-sempai?

- En estos momentos soy su pareja

Akihiko abrió los ojos bastante sorprendido, y Misaki abrió hasta la boca.

- ¡¿Eh?! ¡¿En serio?! Entonces, esa niña...

- Esa niña es mi hija

Ahora si que eso fue todo. Misaki no podía creerlo, ¿en qué momento se habían conocido? Por su parte, Akihiko estaba en verdad sorprendido. Su medio hermano, ¿con hija? Eso era en verdad tan increíble pero... ¿porqué incluso Sumi parecía bastante sorprendido con las palabras de Haruhiko?

- S-su hija... -dijo Misaki- ya veo... Sumi-sempai, no sabía que conociera al hermano de Usagi-san...

- Una larga historia Misaki -dijo Sumi con un suspiro- pero, en ese caso, todo esto nos convierte en...

- Cuñados -dijo Akihiko acercándose- tal y como está la situación, esto los convierte en cuñados. Haruhiko, no te lo había dicho pero... felicidades por tu hija

- Lo mismo digo, Akihiko. Por cierto... ¿puedo conocer a mis sobrinos?

Akihiko lo dudó un poco, y luego asintió, y guió a Haruhiko hacia el cuarto donde tenían a los bebés.

- Eh... eso significa... -dijo Misaki mientras los veía irse- que después de tanto tiempo, ¿hicieron las pases?

- Creo que sí... cuñado -dijo Sumi sonriendo

Misaki le devolvió la sonrisa.

 

*****

 

El baile había comenzado. Todos los invitados bailaban, excepto Sumi y Haruhiko, quienes estaban sentados en la mesa pero nada incómodos. Hiro había cedido a los ruegos de Nowaki de bailar, y Miyagi intentaba enseñar a Shinobu a bailar. Misaki y Akihiko se encontraban frente al pastel, listos para comenzar a partir su parte y repartirla a los invitados.

- Así no -decía Miyagi a Shinobu- es de esta manera...

- ¡No es mi culpa! ¡Esto es muy difícil!

- ¡Esto no es difícil, es solo que tú tienes dos pies izquierdos!

- ¡¿Me dices deforme?!

- Claro que no, que va. Solo te digo fenómeno

- Tú...

- ¡Shinobu, cuida...!

Muy tarde. Shinobu empujó a Hiro, quien al sentirse caer se sujeto de Shinobu pero aún así se fue hacia atrás, y en su caida se llevó a Misaki... y al final el pastel se fue con ellos tres.

Todos los invitados se quedaron mudos ante tal acontecimiento. Pasaron unos segundos antes de que los semes reaccionaran y preocupados fueran a ver que ocurrió, ya que solo se veía una enorme masa blanca inmóvil.

Sumi se había levantado preocupado, y miró a Haruhiko.

- ¿No crees que deberías ir a ayudarles?

Sin decir nada, Haruhiko se levantó de la mesa, se quitó el saco y se arremangó su camisa y camino hacia donde estaba su medio hermano.

Ciel reía ante la escena.

- Sebastian, creo que es mejor que vayas a ayudarles...

- Como ordene

Entre todos comenzaron a mover la enorme masa, y mientras lo hacían las piernas y brazos que salían se agitaban ferozmente. Al final Haruhiko alcanzó a ver una mano de Misaki, la tomó y tiró de ella, hasta que logró que Misaki sacara la cabeza. Lo mismo hizo Akihiko con Shinobu y Miyagi con Hiro.

Todos guardaron silencio unos momentos... antes de comenzar a reír a carcajadas. Inevitablemente, los demás también comenzaron a reir, menos Hiro, quien no solo odiaba el betún exageradamente dulce de los pasteles de bodas, sino que fue el más afectado por la caida y ahora tenía betún hasta en...

En lugares donde no alumbraba el sol.

- Vamos Hiro-san -dijo Nowaki riendo mientras le ayudaba a quitarse el betún de la cara- no tienes porque estar así, ¿ves? Todos están riendo

Hiro miró a su alrededor, y es que todos estaban riendo. Al final, no pudo evitar soltar una pequeña sonrisita de la que nadie se dio cuenta.

 

*****

 

El día transcurrió entre risas, felicitaciones, planes a futuro y cerveza. Hacia las 10 de la noche, los invitados comenzaron a irse, incluidos Sumi y Haruhiko, quienes prometieron llamarles después.

Ya que Minato, el padre de Nowaki había llevado su camioneta, se llevó a su hijo, su nuevo yerno, su esposa y sus nietos.

Ya con Shinobu en sus 5 sentidos, Miyagi se llevó en su auto a él y a sus hijos. Pero olvidaron una pañalera, así que Miyagi regresó por ella al departamento de Akihiko... y se encontró con Risako.

- Ah, ¿ya te vas? -dijo Miyagi al ver a Risako con una bolsa

- Sí. Tu mañana sales de viaje a tu nuevo trabajo, ¿verdad You?

- ¿Quién te lo dijo? ¿Tu padre?

- Algo así. Ayer escuché a mis padres hablar de eso. Por alguna razón no quisieron contarme eso a mi...

- Supongo que fue porque eso ya no te concierne a ti, ¿verdad?

- ... Tal vez. Aún así, creo que hubiera sido mejor que me lo hubieran dicho

- ¿Porqué? Después de todo, la única persona que tiene derecho a preguntar es tu hermano

- Bueno, después de todo, ahora eres... mi cuñado

- Eso es cierto. Bien, si me disculpas, Shinobu me está esperando en el auto con los niños. No me agrada la idea de dejarles solos...

- You... sabes que aún te amo, ¿verdad?

- ... Por favor, no comienzes con eso

- No te preocupes, yo mañana me iré a América, a Nueva York. Tal vez no regrese, así que... tal vez esta sea la última vez que hablemos

- Ya veo... bien, entonces, suerte en América... -dijo Miyagi dándose la vuelta

- ¡Espera, You!

- ¿Sí?

- Ya que esta la última vez... ¿podrías... darme... un último beso? -dijo Risako bajando la mirada

- ¿Un beso? ¡¿Acaso estás loca Risako?! Si ya estoy casado con tu hermano. No puedo hacer eso

- Pero... yo... te lo pido por favor. Nadie se dará cuenta, y juro que que no diré nada... es solo como... una pequeña caridad...

Miyagi guardó silencio. Oh bueno... algo así... podía hacerlo. Después de todo, ya se disculparía con Shinobu a "su manera".

Además... en su tiempo, amó bastante a Risako.

- De acuerdo -dijo Miyagi en un suspiro- pero, solo uno

- Está bien -dijo Risako cerrando los ojos

Miyagi también cerró los ojos. Se acercó a la cara de Risako...

 

*****

 

- Tardaste mucho -dijo Shinobu en cuanto Miyagi subió al auto

- Lo siento, me encontré con tu hermana

- ¿Te dijo algo?

- No, nada interesante. Ahora, será mejor que nos vayamos

- Muy bien

- Shinobu

- ¿Qué?

Cuando Shinobu encaró a Miyagi, este le tomó la cara y le dio un beso en la mejilla, para luego besarle los labios de manera suave.

- ¿Q-qué estás haciendo? -dijo Shinobu bastante rojo y volteando la cara

- Limpiándome

- ¿Limpiándote?

Antes de que Shinobu dijera alguna otra cosa, Miyagi arrancó el auto, dejando a Shinobu con la palabra en la boca.

*****

 

Risako manejaba por el túnel de la carretera que la llevaría al aeropuerto internacional de Japón. No podía dejar de recordar el beso de Miyagi y la desilución que se llevó.

Tocó su mejilla, exactamente en medio, el lugar donde Miyagi le había dado el beso.

Era obvio. Miyagi, no la amaba.

*****

- Ahh que cansado ha sido -dijo Hiro apenas llegaron al departamento

- Sí -dijo Nowaki sonriendo- creo que ya es hora de dormir, Hiro-san

- ¿Dormir?

- Tenemos que levantarnos temprano si vamos a despedir a los demás en el aeropuerto, ¿no lo crees?

- Ve tú si quieres. Yo no iré

- ¿No irás? Pero, Hiro-san...

- Esas son cosas innecesarias. Ellos saben muy bien que les deseo lo mejor, y que les vaya bien en el viaje. Sé muy bien que algún día volveremos a vernos...

Mientras hablaba, Hiro le daba la espalda.

- Pon a los bebés en sus cunas. Entraré al baño

Hiro entró rápidamente al baño, dejando a Nowaki un poco extrañado. Caminó hacia lo que sería la habitación de sus hijos y dejó a los bebés en su cuna, que para su fortuna, estaban dormidos.

Escuchó la llave de la regadera. Nowaki se quedó un poco confundido, pero bueno, era obvio. Todo el día de arriba a abajo, luego lo del pastel... Era obvio que Hiro-san tenía que relajarse.

Caminó hacia la habitación de ellos y comenzó a arreglar la cama. Tenía unas enormes ganas de hacerle a Hiro-san lo que él llamaba "chequeo de cuerpo completo", pero la verdad él también se sentía un poco cansado, además...

Quería ir a despedir a los demás al aeropuerto.

Una vez que terminó de hacer la cama, se quitó toda la ropa y se puso la bata de dormir. Estaba acomodando sus almohadas cuando Hiro-san entró a la habitación. Traía el cabello ya seco, y su bata puesta.

- Ah, Hiro-san -dijo Nowaki con una sonrisa- ¿disfrutó su baño?

Hiro hizo una clase de ruido que Nowaki interpretó como un "sí".

- ¿Qué es eso? -dijo Hiro señalando un pequeño aparato celeste que estaba en la mesita de noche

- Un intercomunicador -dijo Nowaki- un obsequio de Usami-san. Es para que si los bebés despiertan o lloran podamos escucharlos rápidamente

- Ya veo...

Hiro se sentó en la cama, preparándose para dormir, y fue cuando Nowaki notó que traía los ojos rojos.

- ¡Hiro-san, tus ojos...! ¿Estás bien...?

- Ah, sobre esto... sí, estoy bien. Solo... me cayó shampoo en los ojos

- Ya veo...

Aunque Nowaki se quedó un tanto extrañado. Si Hiro-san se había bañado, se había secado el cabello en el baño, se había vestido e incluso afeitado y lavado los dientes, ¿no era eso tiempo suficiente para que los ojos se le calmaran? Pero no solo los tenía rojos, sino también hinchados. ¿Pues cuánto shampoo se había tirado encima...?

Sin darle importancia, Nowaki apagó la luz y se acostó, y Hiro le imitó. Nowaki se acercó a Hiro y lo abrazó por detrás, y aunque el castaño replicó un poco, al final se dejó caer al sueño.

 

*****

 

Eran las 3:00 a. m. exactamente cuando Nowaki abrió los ojos. Sus bebés estaban llorando, y no quería que Hiro-san despertara.

Con mucho cuidado se levantó de la cama y fue hacia el cuarto de sus bebés. Cuando entró, encendió la pequeña lámpara que estaba entre las cunas, y levantó a los bebés por separado. No parecían tener hambre, ni un cambio de pañal. Tampoco lucía que quisieran jugar... tal vez simplemente se sentían solos.

- Ah, niños... -dijo Nowaki en un suspiro- espero que más adelante me paguen con creces lo que hago, ya que por cuidarlos pierdo tiempo valioso con Hiro-san...

Nowaki sonrió. Era obvio que esas palabras no eran ciertas. Bueno, sí lo de Hiro-san, pero... Era obvio que no le molestaba cuidar a sus bebés.

Se sentó en la mesedora que estaba ahí y comenzó a mover las cunas (que eran de esas que se balancean), pensando una manera de dormir a sus bebés.

- Tal vez una canción funcione... pero no sé ninguna... aunque había una que cantaba en el orfanato... pero no me parece que sea algo para cantarles...

Mientras, en la habitación, Hiro comenzaba a despertar debido al llanto de los bebés y el sonido de la voz de Nowaki.

- Ese tonto... ¿q ué rayos está haciendo?

Entonces, comenzó a escuhar la voz de Nowaki... ¿cantando?

 

"El mejor flautista de la ciudad

Tenía un hijo

Tom era el hijo del flautista

Y lo único que tocar sabía

Era "sobre las colinas y más allá".

Sobre las Colinas y más allá

El viento suave en mi cara soplará

El listón de mi sombrero se llevará

Pronto el Shinigami a por mi vendrá"

 

- "¿Qué clase de canción de cuna es esa?" -se dijo Hiro mientras sentía que sus ojos se volvían a cerrar

 

"Sobre las Colinas y más allá

El viento suave en mi cara soplará

Pronto el Shinigami a por mi vendrá

Pero llevarme no podrá

Mi alma ya vendida está..."

 

Hiro sentía que sus ojos se cerraban al compás de la voz de Nowaki.

Para cuando acordó, ya se había dormido.

 

*****

 

A la mañana siguiente, Hiro despertó. Era exageradamente temprano: solo las 7:00 a.m. Se levantó de la cama, y entró a la habitación de sus bebés: se extrañó demasiado cuando no los vio en sus cunas.

Caminó hacia el comedor, y vio una nota que era de Nowaki:

Hiro-san:

Me llevé a los bebés al aeropuerto. Fui a despedir a los demás. Te dejé el desayuno listo en la estufa. Espero volver pronto.

Sus aviones saldrán a las 7:30, y comenzarán a abordar a las 7:15, en el andén 7. Solo espero que no haya retrasos.

 

Nowaki.

 

Hiro miró el reloj: 7:05. Se quedó unos momentos en silencio. Luego, corrió a su cuarto, tomó su chaqueta, sus pantalones, sus llaves y salió corriendo del departamento.

 

*****

 

- Que les vaya bien en su viaje -dijo Nowaki sonriendo con las dos carreolas- espero que no tengan retrasos

- Gracias Nowaki -dijo Akihiko mientras acomodaba a su adorada hija- ¿y Hiroki?

- Se sentía un poco mal, así que no pudo venir, pero les manda sus mejores deseos

- ¿Se sentía mal? Mas bien yo creo que no quería decir adiós -dijo Miyagi con una risita

- Como sea, cualquier cosa me llamas Misaki, ¿de acuerdo? -dijo Sumi, que había ido junto con Haruhiko a despedirlos

- Sí, gracias Sempai

- Lo mismo va para ti Akihiko. Si necesitas cualquier cosa... ya sabes mi número

- No pareces el mismo Haruhiko de siempre -dijo Akihiko mirándolo- eres más... diferente

- Cierto mocoso me cambió -dijo Haruhiko

En eso, una voz femenina se escuchó por los altavoces, anunciando que los vuelos hacia Australia y Londres ya estaban abordando.

- Bien, creo que esto es todo -dijo Miyagi mirando a los demás y tomando a Shinobu por los hombros- fue un placer -dijo sonriendo y extendiendo su mano hacia Akihiko

- Lo mismo digo -dijo Akihiko estrechando la mano de Miyagi

- Bien Nowaki... algún día nos volveremos a ver -dijo Miyagi estrechando la mano de Nowaki

- Por supuesto Miyagi-san. Ya sabe donde encontrarnos

- Claro

- Yo también me despido -dijo Akihiko extendiendo su mano hacia Nowaki- fue un gusto. Después de todo, hemos pasado por mucho

- Por supuesto -dijo Nowaki con una risita- nos veremos algún día

- Tenlo por seguro

- Nowaki-san -dijo Misaki- gracias por todo

- De nada. Me encantó conocerte

- ... ¿Sabe? Mis hijos sabrán de usted. De todos. Les hablaré de ustedes

- Yo también -dijo Miyagi sonriendo- espero que cuando nos volvamos a encontrar, nuestros hijos sepan de nosotros

- Por supuesto, no lo duden -dijo Nowaki

Takahiro estaba ahí. Estaba casi llorando, pero sonreía. Manami sonreía con pena.

- Nii-chan, cuida bien a Mahiro, ¿de acuerdo?

- No te preocupes Misaki. Cuida bien a mis sobrinos

- Sí

Los 4 sonrieron, y tomaron las carreolas de sus bebés. Estaban caminando hacia sus respectivos andenes, cuando escucharon una voz.

- ¡AKIHIKO! ¡MIYAGI!

Los mencionados se pararon en seco, bastante extrañados. Cuando voltearon, vieron a Hiro correr hacia ellos.

- Hiro-san... -dijo Nowaki en un murmuro, pues Hiro iba despeinado, con los pantalones abiertos, los pantalones mal puestos y la camisa de la pijama

- ¿Hiroki? -dijo Akihiko entre extrañado y divertido- ¿qué te pasó?

- Solo... venía... a ... decirte... que... que... -decía Hiro entre jadeos

Todos se quedaron callados y expectantes, esperando lo que Hiro fuera a decir.

- Eh... bueno... yo...

Miyagi sonrió.

- Yo también te extrañaré, Kamijou

- Igual -dijo Akihiko

- ¡Idiotas! ¡No iba a decirles eso! -dijo Hiro

- ¿Entonces?

- ¡Iba a decirles que si valoran sus cabezas, me avisen apenas regresen a Japón!

- ... Claro -dijo Akihiko con una sonrisa

- Por supuesto -dijo Miyagi

Ambos caminaron hacia Hiroki y extendieron sus manos...

Y luego Hiro los sapeó, para luego abrazarlos por 5 segundos, dejando a todos bastante extrañados.

- En serio... más vale que... me llamen en cuanto regresen a Japón..

"Los pasajeros de los vuelos X1 y X2, última llamada. Esta es la última llamada de abordaje".

- Bien, nos tenemos que ir -dijo Miyagi tomando a Shinobu de los hombros y caminando a su andén- cuídense

- Nosotros también -dijo Akihiko comenzando a empujar de una carreola- adiós a ustedes

- No es un adiós Usami-san -dijo Nowaki- es un "hasta luego"

Akihiko se quedó unos segundos en silencio, y luego sonrió.

- Hasta luego -dijo Akihiko, para dar vuelta junto con Misaki y entrar a su andén.

 

*****

 

Hiro miraba por el enorme ventanal como los aviones despegaban.

Vaya, vaya. Los iba a extrañar. Los extrañaría demasiado...

Demasiado.

- Toma Hiro-san -dijo Nowaki con una sonrisa extendiéndole un pañuelo de papel-

- Idiota -dijo Hiro tomando el pañuelo y secando sus ojos.

 

*****

 

En sus aviones, Akihiko y Miyagi miraban hacia abajo, hacia el enorme ventanal.

Se verían luego. Tal vez en meses... años...

Pero se verían de nuevo.

Esos momentos serían inolvidables. Agradables. Porque al fin tenían amigos. Tenían ya una razón para regresar, pues había personas especiales esperando su regreso.

 

 

 

 

*****

7 años después

*****

 

Hiro abrió los ojos. Se levantó de su cama.

Todo estaba... igual. No había cambiado en nada.

Se paseó alrededor de su habitación. ¿Y sus hijos?

Salió al recibidor... y no vio ni escuchó nada.

Nada.

En la cocina vio a Nowaki.

- Nowaki... ¿y los niños?

- ¿Niños? -dijo Nowaki bastante extrañado- ¿qué quieres decir con "niños"?

- ¿Cómo que...? Espera... ¿acaso todo fue un sueño?

- Creo que sí Hiro-san -dijo Nowaki amablemente- Niños... je, no sé que quieres decir con eso...

Hiro sintió que el alma se le iba a los pies.

- ¿Y qué pasó con Akihiko y Miyagi?

Nowaki lo miró bastante extrañado.

- ¿Hiro-san, te sientes bien?

Hiro miró el suelo. ¿Acaso todo... todos esos meses... ese tiempo... fueron... fue... solo un sueño?

¡¿SOLO UN MALDITO SUEÑO?!

Hiro iba a hablar, pero cuando dio un paso hacia Nowaki pisó un juguete. Bastante extrañado miró, y era una figura de acción.

- ¡BANG, BANG! -se escuchó por toda la casa- ¡YA TE ATRAPE, NO PUEDES HUIR HIROTO!

- ¡ESTAS MINTIENDO TETSUYA! ¡ESO FUE TRAMPA!

- Hiro-san, nosotros no tenemos niños -dijo Nowaki con un suspiro- nosotros tenemos un par de diablillos

Dos niños entraron corriendo; uno traía una pistola de agua y el otro un oso. Al ver a Hiro corrieron hacia él.

- ¡Papi, papi, buenos días! -dijeron a la vez

- ¡Papá está haciendo desayuno! ¡Omelett de oso! -dijo el niño llamado Tetsuya, que era increíblemente parecido a Nowaki

- ¡Yo quiero zumo de manzana! -dijo Hiroto, que era bastante parecido a Hiro

- Está bien diablillos, siéntense en la mesa y dejen a papi desayunar en paz

Hiro se sentó en la mesa un tanto extrañado.

- Hiro-san, llegaron cartas de Usami-san y Miyagi-san -dijo Nowaki- al parecer, sus diablillos también están creciendo bastante. Dice Usami-san que su hija Sayumi es toda una Diva y eso que apenas tiene 7 años...

- Ya... ya veo...

Todos se sentaron en la mesa.

- Hiro-san, ¿estás bien? Te noto raro...

- Lo siento... a veces creo que todo lo que ocurrió y todo lo que ocurre es un sueño... Es solo que... soy tan feliz... que no creo que ocurra de verdad...

Nowaki sonrió.

- A veces yo también creo eso Hiro-san. Pero entonces despierto, y los veo...

Miró a los niños, quienes miraban a sus padres un poco confundidos.

- Son reales... y vaya que sí -dijo Nowaki riendo- somos ya una familia

"Familia".

Hiro sonrió, haciendo que sus dos hijos también sonrieran.

Eran una familia.

Una gran familia.

 

*****

 

 

A veces, uno está destinado a grandes cosas.
Muchas veces, estás destinado a una gran felicidad.

Pero tarda tanto en llegar, que a veces crees que nunca la tendrás.

 Solo recuerda;

 

Las mejores cosas de la vida te pasan cuando menos te lo esperas.

Y nadie mejor que la familia Kusama para afirmar esto.

 

 

 

*****

Notas finales:

¡Muchas gracias a tod@s!

Me han ayudado a seguir con este fic adelante. Queria terminar antes de año nuevo...

Gracias por siempre seguirlo y tenerme paciencia. Este capítulo me tomó mucho escribirlo, por lo cual en verdad, espero que les haya gustado.

Se que casi ni tuvo Lemon pero espero recompensárselos con creces en otros proyectos míos.

Muchísimas gracias por todo. Solo por ustedes salí adelante en ciertas situaciones difíciles en mi vida.

Ya, ya, ya me puse sentimental. Junjou Babys fue una gran etapa de mi vida, la cual disfruté, pero es hora del final.

En verdad, no sé como les pudo gustar tanto, pero se los agradesco.

No saben cuanto.

Hicieron de mi primer fic un éxito, y me animaron a seguir escribiendo otros.

En fin, aquí voy:

Este fic fue dedicado a:

L@s que siempre dejaron review.
L@s que dejaban review de vez en cuando.
L@s que solo dejaron review una vez.
L@s que nunca dejaron review, pero leían con ansias cada capítulo.

Muchas gracias!! Será todo de este fic, pero no de mi.

Muchas gracias por todo...

Pero, ¡vamos! No será todo lo que sabrán de mi. Estaré en otros proyectos, como en Nieve y Sangre o Baby Mistery, Denles una oportunidad, ¿sí?
Denme otra oportunidad de deleitarlos, ¿sí?

En fin. De nuevo: muchas gracias por todo.

¡Ja ne!

Son Yamuri.


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