Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

En busca del Heredero por lightness

[Reviews - 34]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo: holi, jajaja, una nueva actualización ^-^, disfruten el new capi y nos leeremos pronto, xD
Capítulo IV El canto del amanecer…


Con cada caricia no podía dejar de desearle todavía más.


Era exquisito, suave… era suyo.


Con sus brazos entrelazados en su cuello, volvían a besarse.


Sí, daría lo que fuera para ser humano esta noche… aunque sólo fuese una noche.


Tezuka se separó de ese cuerpo febril. Ardía debajo de él… era tan cálido… lo que él nunca podrá ser…


Con sus dedos, recorrió el torso de Ryoma. Aquello no hizo más que excitar más a su invitado. Suaves gemidos abandonaban esa boca entreabierta que de tantos besos, ya estaba algo hinchada.


Para Tezuka era lo más difícil… no sabía si continuar hasta el final… o buscar otra forma de tener un heredero.


Podría ser a través de una inseminación artificial. Sin embargo; estando sobre aquel cuerpo lleno de vida, lleno de deseo, la razón se alejaba de su mente a toda prisa.


Alguna vez fue un ser humano. Y como tal, tienen necesidades y sentimientos.


-Capitán- dice Ryoma, levantándose hasta quedar a su altura. Podía notar la confusión en sus ojos.


No podía decir que no tenía miedo. Miedo de no saber qué clase de ser era él. No obstante, por sobre todas las cosas, algo les unió en esa noche… y la noche aún no terminaba.


Si no era él quien tomaba la decisión… sería otra persona.


Dejando de lado todos sus temores, volvió a posar sus labios sobre los de Tezuka. Un nuevo beso que poco a poco fue demandando algo más…


Tezuka acarició toda la piel visible. Fue quitando de a poco la ropa de Ryoma y ésta quedaba en el suelo.


Lo mismo hizo Ryoma. Desnudó a su Capitán y se sintió maravillado por tan buen cuerpo… era tan duro y fuerte… tan frío… como el hielo.


-Ryoma…- susurraba Tezuka en su oído- dame un heredero.


Para Ryoma esa era la petición más absurda del planeta.


Todo quedó olvidado cuando se volvió más intenso y salvaje.


Aquellas manos expertas recorrían cada rincón de su cuerpo, como si le conociese más que el mismo. Algunos gemidos no podía reprimirlos… era tan extasiante…


Siguieron el juego del autodescubrimiento. Primero las manos, luego los labios…


Para ese entonces, Ryoma estaba muy excitado. Al igual que Tezuka. Algo de rudeza le caracterizaba. Tanto que en muchas ocasiones le hirió sin querer, quedando algunos hematomas en sus brazos.


El placer, fue el principal actor… y vivirlo cada segundo, era la tarea para ambos.


Tezuka con mucha habilidad, se encargó de la intimidad de su amante. Ryoma sólo se dejaba querer, pero también participaba del juego, besando cada centímetro de piel que pudiese.


Cuando llegó el momento de prepararlo para el siguiente paso, Tezuka se detuvo un segundo. Le costaba medir su fuerza y en el paso ya había evidencias de su paso. No quería herirle.


-Hazlo- aquella palabra que dejó esos labios, fue lo que necesitaba.


Algo torpe al principio, preparó la entrada, sacando nuevos gemidos por parte de Ryoma.


Una mirada y ambos ya se conectaban. Sí, sólo él podría llevar a su heredero.


Poco a poco se fue abriendo paso hasta quedar dentro de él. Fue doloroso y unas lágrimas corrían por las mejillas del pelinegro, confundiéndose con el sudor.


Era exquisito, tan estrecho, tan cálido. Apenas podía soportar aquella presión y ya era muy erótico. Hasta el punto de enloquecer.


Suavemente se fue moviendo, alzando un poco las caderas… un vaivén que no se detenía y que ambos comenzaban a disfrutar.


Movimientos erráticos, torpes y certeros. Sí, tocar el punto sensible donde todos perdemos la cordura, sólo podía tocarlo una y otra vez.


Descargas eléctricas recorrían su espina dorsal. Las pupilas se dilataron hasta convertirse en pequeños ojos negros.


El brillo de sus cuerpos perlados por el sudor. El calor de la chimenea y el sonido de ambos, inundaron todos sus sentidos y traspasaron el umbral del placer, la lujuria a una satisfacción única.


Sólo tú puedes hacerlo…


En la mente de Tezuka, era el único pensamiento que se mantenía fijo. Ryoma era el indicado. Cuidaría de él con su vida. De Dane, de los neófitos, de los cazadores, incluso de él mismo.


El amanecer llegó y los rayos del sol se filtraron por la ventana.


Habían hecho el amor durante toda la noche. El orgasmo fue el más intenso y memorable para los dos.


Ahora que mantenía aferrado a Ryoma, no le dejaría ir por nada del mundo.


Contemplándole mientras dormía, todavía podía oír los latidos frenéticos de su corazón. No era necesario acercarse hasta su pecho, pero lo hizo.


Posó su mano sobre aquel blanquecino vientre y lo besó.


Allí crecería su heredero.


Nada ni nadie podría impedírselo. Ni siquiera Dane, quien ya le había amenazado.


-Te protegeré de todos… no importa quién sea- dijo y le abrazó como a nadie antes en su vida.


Continuará…
Notas finales: nos leeremos pronto, de verdad, ahora que tengo vacaciones, aprovecharé de actualizar más seguido ^-^

Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).