- “… Por favor no me temas…”
Esas singulares palabras se quedaron grabadas en su mente, porque él nunca le temió por lo que era, un hombre lobo.
Por una sencilla razón, le amaba
Quizás no era tan maduro como lo era Ted, pero sabía lo que era querer y tener a alguien importante en la vida, y esa persona era él.
Albus Severus Potter Weasley, a su corta edad conoció el amor, no sabía en qué instante de su vida Ted Lunpin Tonks paso a ser la persona por la que daría su vida, y se sometería a una guerra por verlo feliz aun con otra persona. Sería un niño pero jamás un egoísta, ¿porque eso significaba querer, no?
Se sentía tan feliz al hablarle, afortunado al tenerlo a su lado y el ser más bendecido del mundo al ser tomado entre sus brazos.
Pero existían dos problemas, Ted era un hombre lobo y el más importante su hermano James.
James jamás toleraría que alguien se acercara a su hermano y mas alguien tan cercano, lo tomaría como una traición, pero Al, le restaba importancia porque aquella guerra la tenia perdida.
Ted no era por completo un hombre lobo, pero había heredado muchas de sus habilidades por parte de su padre, y la que más le preocupaba, era que solo podía tener una pareja en su vida, solo se enamoraría y amaría una vez, seria fiel a esa persona y Ted parecía haberla encontrado.
Pero no por ello dejaría de luchar.
Aun cuando su corazón sangrara de tan profundo dolor.
Lucharía.
Cuando entro a Howarsts, tenía demasiadas esperanzas, podría estar más tiempo junto a él, pero al entrar por aquellas puertas, cada una de ellas murieron, Slytherin esa era su caja.
Quizás aun tenía fe de ser alguien importante para su Teddy, pero ¿cuánto más duraría?
Le extrañaba
Tanto, tanto
Acaso tenía que ser él, el que le llamara, le buscara y el único en estar enamorado.
Con quien hablar, gritar y dejar salir esa frustración
Scorpius tenía sus propios sentimientos en conflicto por su ahora estúpido hermano mayor, James era el primero en estar descartado, su padre el gran Harry Potter moriría al saber que su hijo menor se enamoro de su casi hermano Ted, y Ted por obvias razones. Fue cuando se dio cuenta que no tenía amigos, ni amigas, nadie se la acercaba y si lo hacían parecían incómodos, solo tenía a Scorp a su lado y no estaba muy lejano de su condición. – de ser un niño solitario-
Salió de su habitación y se marcho con el único propósito de encontrar a alguien con quien hablar, seguro el profesor Neville le entendería, en qué diablos estaba pensando, como decir “estoy enamorado de Ted Lupin…., si aquel chico de quinto, ya sabes aquel castaño tan apuesto… si el que casi es mi hermano… ¿sabes que puedo hacer para que lobo interior me elija como su pareja definitiva?”.
Sacudió su cabeza, mejor solo caminaría un poco.
Cuando abandono las mazmorras estos fueron los pensamientos de moreno:
- Merlín no le quería
- Alguien seguro le practico magia oscura y
- ¿Era el karma el que le traicionaba?
Porque de todas las personas que estudiaban en Howarsts, tenía que verle a ellos, ¡¿cómo ser posible?!, eran cuatro malditas casas y siete endemoniados cursos, y ahí frente a él se encontraba el chico el cual no podía sacar de sus pensamientos y su hermano a punto de hacer llorar a Malfoy, de nuevo.
- James- llamo a su hermano- deja a Scorp- en lo que llevaban de su primer año, se había vuelto su mejor amigo, único amigo, el único que no se alejaba de el, y su hermano, no lo alejaría.
- Jajaja- estaba tan divertido y concentrado en levitar los libros y plumas del rubio que no se percato de hermano- vamos Malfoy, solo tienes que brincar y tomarlos- seguía con su juego
- Por favor…- era la suplica del rubio
Se acerco más y saco su varita, no su hermano no lo separaría de la única persona que le tomaba en cuenta en todo el colegio, apenas abrió la boca, cuando Ted hizo lo inimaginable.
Él le lanzo el hechizo a su hermano, que solo fue a acabar al suelo, las cosas de la asustada serpiente se esparcieron por el suelo, y se limito a recogerlas sin uso de magia, como gesto de arrepentimiento, cuando hubo tomado todas las ordeno y se las extendió hasta el ahora inmóvil Malfoy.
-siento lo de mi amigo…-las mejillas del pequeño se encendieron y observando como James se ponía de pie- y el también lo siente, verdad James…
- tsk…- se quejo, colocando una de sus manos tras su nuca, en gesto de fastidio- eso dolió Ted – fue su única respuesta
- discúlpate con Malfoy- le arremato serio
-…- observo el claro enojo de su primo, eso le sorprendió- lo siento Scorp- dijo al final y brindándole una coqueta sonrisa- pero no puedo evitar querer ver tu rostro lleno de preocupación eres tan lindo- se reía ahora por el sonrojo del menor- contento Lupin- le habló con fingido resentimiento
- no…
- …- esa respuesta por parte del lobo le sorprendido, que mas esperaba que hiciera
- aun no te disculpas con Al por molestar a su amigo- menciono al fin soltando un bufido de molestia. Tan concentrado esta el otro que no notó la presencia de su hermano.
Vio el rostro más relajado del menor, y supo que era el momento idóneo para acercarse.
- Lo siento cachorro debió ser duro- refiriéndose al acto de su primo.
- Al – fue el grito que soltó el pelirrojo para correr al lado de su hermano- no te lastímate, estas bien, estúpido lobo que hubiera pasado si tu hechizo lastimaba a Albus…-
- Jamás lastimaría a AL, James, el es tan importante para mí, como lo es para ti, ahora ve con Malfoy y cerciórate que él esté bien.- esas palabras sonaban tan bien.
El rubio hasta ahora se limito a contemplar aquella escena, aquel castaño había armado todo aquello por su amigo, y sus mejillas se sonrojaron más al darse cuanta que no había agradecido a su salvador.
- Yo…- dio unos cuantos pasos para acercarse a ellos y oprimió sus libros sobre su pecho.- yo… GRACIAS…- Soltó de pronto
Provocando una risa en el castaño, ahora la pobre serpiente tenia roja hasta las orejas, era un lindo gesto, pensó el mayor.
- Te verías mejor con una sonrisa – dijo como si nada, para abandonar el lugar.
A los dos Potter no les gusto aquello.
*********
En definitiva todo estaba en su contra, ni si quiera había podido decirle dos palabras, o un “hola”, “gracias”. No fue lo suficientemente idiota y solo se paralizo, no, no lloraría, pero había sido tan tonto.
Ted nunca había sido tan amable con otros como lo era con su familia, pero ahí de la nada aparece Scorp.
Igual a cuando era un niño - ¬.¬ bueno a un lo es- se oculto en su habitación, ahora odiaba que fueran compartidas.
Solo, simple y sencillamente se recostó.
-Albus…- fue un cálido susurro- Albus….- le llamaba de nuevo, es que acaso no entendía que no quería hablar con el.- Perdóname Albus – esa suplica le regreso a la realidad.
-…- se giro para ver a su compañero de cuarto a su lado, había estado llorando, como un Malfoy lloraba, bueno seguro James era el culpable- no tengo que…- pero fue interrumpido
- no quiero estar peleado contigo, eres mi único amigo Al- se vio reflejado en aquellos tristes ojos plata, no lo había notado, Scorp era muy bello.
-Yo…- no se había percatado de su comportamiento- tú no tienes la culpa- le tomo del brazo y le acostó junto a él- yo tampoco quiero alguna vez perderte….
No sabría que hacer sin Scorpius, pero tenía celos, en qué momento olvido que el rubio frente a él solo tenía ojos para su hermano, y el idiota de su hermano no lo veía. Le dañaba, no dejaría de nuevo que nadie dañara a Scorp.
- Yo te protegeré…- le susurro a su amigo.
Era algo singular ya que el otro era el mayor, pero no dejaría que sufriera como él.
Porque no dejaría solo a alguien verdaderamente enamorado.
Porque el mismo estaba solo.
+++…El AMOR adolecente no tiene Razones…+++
Continuara.....