Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Turandot por Dulce_Pena_Hime

[Reviews - 736]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Ohayoo!!

Siendo sincera tengo un ¡CHINGAMADRAL! de trabajo (Sorry x la palabra, pero tantas cosas que hacer a veces me pone de nervios)

De ahí que esta vez haya tardado tanto, y es probable que el prox cap también lo suba dentro de 15 días, depende de la carga, que no creo que disminuya en tan poco tiempo ¬¬....

Bueno, les dejo este y disfrútenlo ^^

Nota1: Si encuentras faltas ortograficas me disculpo... ya que lo escribi en tiempo record: tres horas y fraccion XD... (Necesitaba desestresarme) [Lo unico que me desestresa es leer y escribir <y leer me toma menos tiempo que escribir xD... pero ustedes no tienen la culpa de que se me haya juntado el trabajo ¿verdad? ^^...> ¡Juro que hice lo mejor que pude! >o<

Nota2: Sigo sin inspiración ¬¬....

SEGUNDO ACTO: ZAHARA

ESCENA 8: TORMENTA

 

Era una mesa muy parecida a la que usaban en Turandot: baja, haciendo que todos se sentaran sobre cómodos cojines en el suelo. La diferencia era que esta mea no era rectangular sino redonda, y que el material no era madera sino una especie de piedra blanca y lisa, que según Yuki era mármol.

La comida fue tranquila y amena... algo que Shuichi disfruto, pues aquello le hizo ver como era el grandioso palacio de Zahara normalmente: sin fiestas, acosos ni batallas.

Varios sirvientes iban y venían por la mesa, llenando copas y vasos, retirando platos y colocando otros. Se movían con una sincronía tal que hasta parecía que respiraban al mismo tiempo, Shuichi no podía dejar de maravillarse por aquellos movimientos tan precisos en cada uno de los asistentes.

 

  • - Será mejor que empieces a comer, Shuichi. - Dijo Yuki sentado a su lado mientras tomaba un poco de su copa.
  • - Eh... ahh... si. - Dijo tomando un tenedor para comenzar a comer.
  • - Príncipe de Asgard; acompáñeme con una copa - Pidió el sultán al rubio al mismo tiempo que le ordenaba, con una seña, a uno de los sirvientes para que le llenara la copa al rubio
  • - Será un honor para mí, Sultán.
  • - ¿Usted bebe? - Ahora le pregunto a Shuichi.
  • - Eh... yo... - Shuichi no supo que responder, ya que su hermano no le había permitido tomar licor ¿Sería prudente decirle eso al Sultán o no?
  • - Este es uno de los mejores licores de mi país, debería probarlo.
  • - Amm... - Musito mientras pensaba que un poco no le vendría mal, ya que solo lo probaría ¿no? - So...
  • - Shuichi no bebe. - Interrumpió Yuki antes de darle un trago a su copa.
  • - ... - Shuichi lo miro entre sorprendido y molesto ¿Desde cuándo decidía por él? Estaba a punto de decirle eso, pero Yuki lo miro fijamente a los ojos por unos momentos, diciéndole con la mirada que no se quejara de su decisión.
  • - Ya veo. En ese caso no insistiré. - Musito para darle otro trago a su copa.

 

Aquella platica quedo hasta ahí, llenando la mesa con temas triviales entre los que se encontraban ahí sentados: El Sultán, Ayaka, su prometido quien era un joven  de cabellos negros y ojos aceitunados; Yuki, Shuichi, Seguchi, K y Hiroshi.

Pero entre todas aquellas charlas, quien menos hablaba era la princesa de Zahara, quien solo se limitaba a comer, aunque de vez en vez lanzaba discretas miradas recelosas hacia Yuki o Shuichi; notando que el primero trataba de actuar como si todo fuera igual que siempre, algo que estaba logrando muy bien; mientras que Shuichi seguía tan ingenuo como al inicio, aunque Ayaka consideraba aquello como algo estúpido ¿Cómo podía no ver lo que tenía enfrente de la cara y era tan palpable?

 

  • - Y dígame ¿Es verdad lo que me dijo hace unos momentos? ¿No ha reconsiderado?
  • - Me temo, Sultán, que no hay nada que reconsiderar; la decisión está tomada. - Respondió el rubio.
  • - ... - Shuichi no pudo evitar voltear a ver a Yuki, con una mirada llena de curiosidad por saber.
  • - ¿Hasta pasado mañana por lo menos?
  • - Me temo Sultán, que nos queda el tiempo justo para arreglar todo.
  • - No tengo nada con que argumentar sus razones; pero me hubiera gustado disfrutar más tiempo de su compañía.
  • - ... - Eso le dio una pista a Shuichi, pero quería asegurarse. - ¿Yuki? - Musito en voz baja.
  • - ... - El rubio miro a su prometido, directo a los ojos y respondió aquella muda pregunta que hacía. - Mañana, a medio día, partiremos a Turandot - Respondió.
  • - ¡¡...!! - No sabía si debía alegrarse o no por aquella noticia; por un lado estaba deseoso por volver, ver a su hermano, vestir las ropas que acostumbraba usar y dejar ese clima tan áspero y caluroso...por el otro, aún quería conocer más de ese lugar y además aún no cumplía su misión. - Ahh... Yu......
  • - Hablamos en privado ¿De acuerdo? - Le dijo en voz baja para que nadie lo escuchara.
  • - ... - Shuichi solo pudo esquiva el rostro hacia un lado y continuar con sus alimentos, sin saber que más hacer, pues aquella noticia le había caído como un balde de agua.

 

Sin embargo, todas aquellas reacciones fueron vistas por la castaña, quien ya comenzaba a idear un plan para aclarar todo aquello; esperando que eso funcionará.

Le resultaba sorprendente y estúpido que esos dos príncipes no se dieran cuenta, o mejor dicho, que uno de ellos no se diera cuenta y que el otro hubiera tardado tanto en darse cuenta de sus sentimientos ¿Se podía ser tan estúpido?  Bueno, la misma pregunta era tonta, ya que ahora que lo había comprobado con sus propios ojos se daba cuenta de que, en efecto, eso era totalmente posible.

"Ver para creer" Sin duda alguna, esa era la frase que le venía como anillo al dedo a toda esa situación: Dos príncipes enamorados que no querían admitir sus sentimientos. Y El orgulloso príncipe de Asgard enamorado de un "mocoso" despistado. ¡Para sorpresas que tiene la vida!

Bien, eso era punto y aparte, ya que ahora no podía pensar en esas cosas, sino en que tenía un tiempo límite de menos de 24 horas para hacer lo que tenía que hacer; aunque en realidad no necesitaba mucho, con 5 minutos era más que suficiente, y luego, a ver qué sucedía.

 

+-+-+-

 

El sol comenzaba a ponerse, Shuichi miraba el ocaso desde su balcón cuando de repente escucho la puerta abrirse y cerrarse.

 

  • - Será mejor que te duermas de una vez; mañana será un día pesado y tienes que estar descansado. Espero ya tengas todo arreglado
  • - De eso quiero hablar
  • - ......
  • - ¿Por qué decidió que nos fuéramos tan pronto? ¿Con permiso de quien? ¿A quién le pidió opinión?
  • - Shuichi. - Musito frotándose la sien. - Creo que hace unos días te dije que no nos quedaríamos mucho tiempo; y si no mal recuerdo, era hoy el día que debíamos partir
  • - ¿Por qué tan pronto?
  • - Porque tenemos que viajar, por lo menos cinco días.
  • - Pero...
  • - ¿No quieres regresar?
  • - No es eso. - Musito bajando el rostro. - En verdad que quiero ver a mi hermano y volver a mi país, pero......... aún no he averiguado su nombre.
  • - ¿Qué no habías dicho que eso era cosa de cinco minutos? - Se cruzo de brazos
  • - ... - Hizo un puchero - Bueno... pues al parecer no lo fue.

 

Yuki pensó que debía burlarse de aquella reacción tan infantil, pero no pudo, algo dentro de él dolía y molestaba, algo que ahora sabía bien que era.

Haberse y saberse enamorado no era bueno para él, sobre todo porque Shuichi no lo veía como algo así ¿O sí? N idea, ese chico era... extraño. A veces parecía que lo quería como algo más que un amigo, pero el hecho de que siguiera necio al matrimonio......... ¿Por qué seguía obstinado con no quererse casar verdad?

Además... también estaba su temor a enamorarse y el hecho de que él hubiera comenzado ese cortejo por simple y puro juego......... Todo eso había tomado un rumbo que jamás espero, aunque a decir verdad, nunca supo como terminaría todo eso... comenzó un juego por vanidad pero jugo a ciegas. Y ahora había perdido el camino  encontrado un paraje que nunca vio.

¿Qué podía hacer en esa situación? Lo único que se le ocurría era huir, escapar de Shuichi y ese sentimiento que lo hacía sentir tan bien y tan mal al mismo tiempo...... porque sentía la necesidad de tomar ese menudo cuerpo entre sus brazos y estrecharlo con fuerza, algo que sabía no podía disfrutar por el rotundo rechazo del pelirrosa....

No había duda alguna, escapar era lo mejor, aunque con eso se mostrara como un cobarde... aunque esa decisión le doliera............ dejaría ir a Shuichi

 

  • - Shuichi. Dime una cosa
  • - ......
  • - ¿Ayaka no te ha dado mi nombre?
  • - No he vuelto a hablar con ella... pero dudo que haya cambiado de opinión.

 

Y ahí estaba el otro punto...... ¿En verdad la chica le haría caso y se lo daría? ¡Ni idea! Esa mujer era enigmática y jamás hacía algo que no creyera conveniente... aunque en este caso ¿Qué era conveniente? ¡A saber! Lo único que tenía claro era que ella haría algo, pero no sabía que haría......... tal vez lo mejor era...... terminar con todo ese show de una vez por todas......... si......... era lo mejor.

 

  • - ¿Qué harás cuando conozcas mi nombre?
  • - ¿Ehh?
  • - ¿Renunciaras al compromiso que tienes conmigo?
  • - ...Cla... claro que si... - Respondió dudoso esquivándole la mirada - Por eso estamos aquí ¿no? Por algo estoy haciendo esto. Porque no quiero casarme... por eso me he arriesgado tanto...
  • - ... - Yuki noto claramente esa evasiva, que se podía interpretar de muchas formas, pero decidió ignorarla, haría lo que pensaba era lo mejor. - Pídemelo
  • - ¿Qué?
  • - Si en verdad deseas saber mi nombre y si aún tienes esa idea... solo tienes que preguntarme mi nombre y te lo diré
  • - ¡...! ¿Por qué lo haría? ¿Qué gana con eso?
  • - ¿Qué gano? Es una pregunta tonta ¿No crees? - Se cruzo de brazos. - Lo que gano es que dejes de hacer idioteces por librarte de mí
  • - ¡......!
  • - Que regreses sano y salvo, eso es lo que gano. Que no te pase nada, porque en Turandot nadie es capaz ni de tocarte un cabello ¿Alguna duda de por qué lo haría?
  • - ¡......!
  • - Vamos... pregúntame mi nombre
  • - ...
  • - ¿No lo deseas saber? ¿No me lo vas a preguntar?
  • - .........
  • - Si lo haces te lo diré, y después, solo tendrás que pronunciarlo y fin del asunto.
  • - ......
  • - Pero no tienes que preocuparte; que te llevare de vuelta hasta el palacio de Turandot y de ahí partiré a Asgard

 

Silencio... silencio por varios minutos......

Shuichi no podía dejar de pensar en las palabras del rubio ¿Era cierto? ¿En verdad le iba a decir su nombre? ¡¿Por qué?! ¿Por qué se lo estaba poniendo tan fácil? ¿Por qué hasta ahora? ¿Por qué no lo hizo antes? ¿Por qué tuvo que esperar hasta que viajaran a Zahara? ¿Por qué a horas de volver a Turandot? ¿En que estaba pensando el rubio? ¿No sería una trampa? ¿Qué le había hecho cambiar de opinión? ¿Eran esos sus motivos? ¿Ya se había cansado de cuidarlo? ¿De sus niñerías? ¿Habría logrado fastidiarlo?

Sintió algo muy extraño en su interior; una sensación molesta y a la vez curiosa ¿Qué era lo que le molestaba? No lo sabía pero dolía... dolía y mucho ¿Era por saber que aquel juego terminaría? No... claro que no...... quizá era porque le estaba lastimando con esas palabras... porque le estaba demostrando, una vez más... que él ganaba cada reto que se anteponía y que ponía......... y que él había fallado por completo al no poder adivinar una simple pregunta............

Le dolía... porque estaba lastimando su orgullo ¡Eso era!

Pero también estaba su lado curioso, aquel que no podía quedarse con ni una sola duda, y ahora que tenía la alternativa de saber esa incógnita de forma tan sencilla, no la quería desaprovechar......... tenía la curiosidad de saber su nombre y la razón por la que no le gustaba... y el cómo le había hecho para que casi nadie lo supiera.

 

  • - ¿Me vas a preguntar?
  • - Yo......- Pero no supo que decir, no tenía palabras para acomodar todo eso en una oración sencilla y bien estructurada, era seguro que se enriaría con las palabras y no diría ni la mitad de lo que quería decir.
  • - ...... - Yuki noto claramente la confusión del chico, era obvio eso, pues estaba seguro que el pelirrosa no se esperaría semejante oportunidad. Bueno, solo quedaba una cosa más por hacer, se acerco al chico y acaricio su mejilla. - Piénsalo... se te acaba el tiempo - Se acercó un poco más y le dio un dulce y fraternal beso en la mejilla. - Mañana partiremos a medio día, no lo olvides - Dijo para soltarlo y alejarse de él, camino un poco y se recostó en la cama, cerró los ojos y se dispuso a dormir
  • - ¿¡.........!? - Shuichi lo veía confundido, no sabía que había sido eso. ¿Era cierto?

 

+-+-+-

 

El calor comenzaba a irradiar, aun cuando el sol apenas comenzaba a salir... sería otro día caluroso en aquella tierra tan acostumbrada a la intensa luz del sol y la escasa cantidad de agua.

 

Sobre aquel lecho se encontraba el príncipe de Turadot, recostado de lado y respirando de forma pausada; sin embargo, el aumento de temperatura y los rayos del sol comenzaron a despertarlo.

 

  • - Mmm... - Musito levemente parpadeando por unos momentos y serpenteando levemente su cuerpo, al tiempo que se enderezaba solo un poco y se tallaba los ojos - Que bien dormí... - Musito mientras terminaba de frotar sus orden ocultas tras los parpados.
  • - ¿Cómodo? - Pregunto una voz con algo de ironía
  • - ¿Ehh? - Pregunto al momento de abrir los ojos, y entonces puedo notar algo que estaba semi-apoyado en el pecho desnudo del rubio. - ¡¡......!! ¡PER-PERDÓN! - Dijo muy sonrojado por la vergüenza, sin saber dónde esconderse.
  • - Si te vas a disculpar; deberías moverte ¿No crees?
  • - ¡¡......!! - Al instante Shuichi se enderezo, quedando sentado en la cama y con la cara completamente roja, manteniéndola baja por el bochorno.
  • - ¿Dormiste bien? - Dijo con burla al mismo tiempo que se sentaba en la cama
  • - ¡No se burle! - Le reclamo sin perder el rubor. - No me di cuenta de que dur......... ¡UN MOMENTO!...Usted me estaba abrazando por la espalda. - Lo señalo con un dedo acusador al tiempo que hacía un adorable berrinche
  • - ¿Yo? - Se hizo el desentendido
  • - ¡Usted! Con una mano
  • - Si ¿Y qué? - Sonó tan cínico como pudo, ya que le era muy divertido hacerlo enojar, se veía......... adorable.
  • - ¡¿CÓMO QUE: Y QUÉ?! - Gruño molesto. - USTED ME ABRAZO MIENTRAS DORMÍA. ¡ESO FUE LO QUE PASO!
  • - ...
  • - Y AHORA, VIENE A MI A HECHARME EN CARA QUE FUI YO... ¡MENTIROSO!
  • - ......
  • - LO QUE PASO FUE QUE ME QUEDE DORMIDO Y USTED ME GIRO E HIZO QUE QUEDARA ACOMODADO EN SU PECHO PARA ABRAZARME Y AD......¡¡...!!... - Y ya no pudo seguir con su reclamo, pues Yuki le lanzo una enigmática mirada dorada, esa que era penetrante, y algo fría... aquella que lo hacía callar por temor, dominándolo por completo.
  • - ¿Y qué más? - Pregunto sujetando el mentón del menor con su mano, acercándose más al chico, quedando a solo 3 centímetros de su rostro
  • - ...y... yy... yyyyy...... - Tartamudeo mientras sentía el cálido aliento del rubio sobre su rostro.

 

Yuki no podía evitar perderse en aquellos océanos violeta, aquella mirada que expresaba claramente lo que sentía y pensaba... sin duda alguna, la frase de que "los ojos son los espejos del alma" encajaba perfectamente en el pelirrosa; quien en esos momentos se mostraba sorprendido, nervioso y hasta confundido.

Shuichi por su parte no sabía cómo reaccionar, se sentía en shock pero no tenía miedo por aquella cercanía ¿Por qué? Quizá era porque Yuki no lo lastimaría, o porque lo conocía de hace tiempo, o porque no era la primera vez que se le acercaba de esa manera......... la verdad es que no tenía ni la más remota idea, pero si sabía que tener a Yuki a así de cerca era muy diferente que tener a Taki Aizawa a esa distancia. Sintió su corazón latir con fuerza y sus mejillas arder, pero no era lo único, pues el sentir la acompasada respiración de Yuki a cada segundo le hacía estremecer levemente, lo que producía una extraña sensación de vacío y hormigueo en su estomago ¿Acaso tenía hambre? Tal vez si o quizá no, como fuera... no quería que Yuki notara esas reacciones en él, así que sin más, viro un poco el rostro y esquivo la mirada hacia un lado.

Aquella vista se le hizo muy tierna al rubio, quien no podía dejar de mirar intensamente a ese chico delante de él. Ahora que sabía lo que sentía, veía de forma diferente al chico: más dulce, más hermoso, más sensual; además, había aumentado considerablemente la sensación de sostenerlo entre sus brazos, de besarlo, de protegerlo............

¡Demonios! Todo eso lo estaba volviendo loco, sabía que soltarlo e irse era lo mejor...... pero ahora que lo tenía de esa forma tan...... sumisa, su ser le decía que aprovechara eso para tener, por lo menos, un pequeño acercamiento con él chico, al menos para tener un grato recuerdo de él.

¿Renunciaba a él? Sí, pero ¿Qué más daba? Si con eso todos estaban tranquilos y seguros... lo haría.

Como fuera... en esta ocasión, al menos, no se iba a quedar con las ganas. Se cerco un poco a él e inclino el rostro un poco, obteniendo un ángulo diferente y sin pensarlo mucho beso la mejilla del pelirrosa, un contacto dulce y sin maldad alguna, como si él menor fuera su hermano menor.

Shuichi no pudo evitar sorprenderse, virando levemente el rostro y mirando al rubio, quien después de unos segundos se alejo del menor.

 

  • - No te estoy culpando de nada, pero tampoco estoy diciendo que fui yo
  • - ......
  • - Y francamente, no sé cómo fue que terminados abrazados, pero yo no hice absolutamente nada, solo me dedique a dormir, y no digas cosas que no saben que pasaron si estabas profundamente dormido
  • - ......
  • - Y ya deja de discutir tonterías y tan alto... no olvides donde estamos, mocoso
  • - ......
  • - Anda, arréglate no olvides que nos vamos en unas horas - Término dando una pequeña caricia de su mejilla a su mentón y luego dando un juguetón golpecito bajo el mentón del pelirrosa.
  • - Ehh... ahh...... sih...si... - Trastabillaron las palabras antes de salir de su boca, estaba muy desconcertado, esa mirada, esas palabras, ese beso, esa "caricia" ¿Qué significaba Yuki es su vida? No lo sabía.

 

Tomo ropas limpias y se fue al baño, en dónde se quito el pantalón y la ropa interior solo para después meterse en el agua, sintiéndola fresca, justo lo que necesitaba... para aclarar su mente......... pues tantas cosas en la cabeza lo tenía fatigado, sin duda un baño le resultaría reparador para el largo viaje que tendría.

Tomo un poco de agua entre sus manos y se mojo la cara, subiendo sus manos para mojar un poco su cabello, mientras pensaba en lo ocurrido minutos atrás; le había dicho a Shuichi que no sabía cómo había terminado abrazados, pero eso era mentira, era un recuerdo que tenía y se quedaría grabado en su mente.

 

 

 

FLASH BACK

 

Estaba despierto, con insomnio, algo que lo ponía de malas ya que no le permitía descansar como era debido, pero sabía que todo eso se debía a la gran revelación que se llevara esa misma tarde al darse cuenta de que amaba al chico que dormía a su lado.

Abrió los ojos y desvió el, viendo el semblante del chico que estaba a su lado: aquellos grandes ojos cerrados, esa piel apiñonada, esos labios entreabiertos inhalando y exhalando aire......

No pudo resistirse a alargar el brazo y acariciar suave, lenta y sutilmente con el dorso de su mano y dedos la mejilla del chico, haciendo que este se moviera levemente y gimiera un tanto incomodo por la repentina caricia.

 

  • - Que idiota soy ¿Cómo pude enamorarme de ti? - Pensó sin retirar su mano y sin dejar de mirarlo.

 

Sabía que la pregunta estaba mal enfocada, pues sabía que, una vez que se conocía a Shuichi, a cualquiera le resultaría fácil encariñarse y hasta enamorarse de él; lo que en realidad había querido decir era: ¿Cómo no me di cuenta antes? ¿Cómo fue que caí en mi propio juego?

Pero de nada servía responder a esas preguntas, ya que aunque las respondiera, sus sentimientos hacia Shu no cambiarían.

Suspiro en silencio, retiro su mano y se quedo viendo hacia arriba, con ambas manos tras su nuca...... bueno, eso no importaba. Debía dormirse pues al día siguiente tendrían que viajar y debía estar descansado. Cerró los ojos e intento dormir......... pero solo entro en un ligero sopor que de poco le iba a servir.

De repente, sintió algo, un ligero peso y un agradable calor impregnado con una agradable y dulce aroma. ¿De dónde venía eso? No tenía la más mínima y remota idea. Abrió los ojos y su vista se ubico directo en aquel techo, pero aún sentía ese peso, calor y fragancia pegados a él, más debajo de su rostro. Enderezó un poco el cuello y no pudo evitar sorprenderse al encontrar al pelirrosa abrazándolo y descansando su cabeza sobre su pecho, la acompasada respiración del chico cosquilleaba sobre sus pectorales de forma agradable.

Sintió su corazón latir con fuerza y un exquisito regocijo recorrió su cuerpo por completo; era tan agradable sentir al chico, y era sorpréndete la forma en la que su cuerpo se amoldaba perfectamente al suyo, ya lo había notado en ocasiones anteriores; Shu cabía perfectamente entre sus brazos, acomodándose  y resguardándose de todo aquello que pudiese lastimarle......... eran como dos piezas de rompecabezas hechas para estar siempre juntas porque simplemente no podían embonar  con otras.

Pero por muy agradable que se sintiera, debía alejarse de esas sensaciones, porque de lo contrario el adiós sería más doloroso.

 

  • - Shu... - Llamo el rubio tratando de despertarlo.
  • - .........
  • - Vamos, despierta, Shuichi
  • - ......... - Nada
  • - Baka.
  • - ...... - El chico como muerto, bien pudo caer un meteorito a su lado y él como si nada.
  • - Ahh... muévete. - Le ordeno al mismo tiempo que lo empujaba un poco más lejos de él
  • - ...mmm... - Gimió el pelirrosa, moviéndose un poco y pegándose más a Yuki, abrazándolo con más fuerza, enterrando su cabeza en el pecho del rubio y pegando su cuerpo al grado de que una de sus piernas casi subió sobre una de las piernas del rubio

 

No pudo evitar sentir su corazón latir con más fuerza aún, pero sin duda alguna se sentía bastante bien; así que lo abrazo con una mano por su espalda, pegándolo un poco más a él, notando como el menor se acurrucaba más a él.

Cerró los ojos y, sin poder evitarlo se quedo dormido ¡Y vaya que durmió! No recordaba cuando había sido la última vez que durmió tan bien, se sentía tan tranquilo que descanso lo que no había descansado en días......... desde que salieran de Turandot.

 

FIN FLASH BACK

 

+-+-+-

 

Tras el baño que se diera Yuki, se vistiera y saliera; Shuichi hizo lo mismo, vistiéndose con un traje de color rosa con bordados en color dorado, de manga larga y con una cinta morada en su cintura [ http://1.bp.blogspot.com/_ca33WA7eiIA/StyM_zQzMwI/AAAAAAAABMU/yPbYkUdtvqM/s400/Vestimenta_Caftan_marroqui.jpg ]

 

  • - Vamos a desayunar ¿Estás listo? - Pregunto Yuki viendo al pelirrosa.

 

Yuki vestía un conjunto de pantalón blanco, camisa negra y chaleco violeta con bordados en dorado. [ http://fc05.deviantart.net/fs39/f/2008/353/2/8/_Kuroshitsuji__Prince_Soma_by_Morgen_von_Shiffer.jpg ]

 

  • - Si. - Musito en cuanto termino de atarse la cinturilla, justo cuando llamaron a la puerta. - ¡Pase! - Grito el pelirrosa.
  • - Buen día, príncipes. - Saludo Ayaka desde la puerta
  • - Ayaka, bue día. - Saludo Shuichi.
  • - ... - Yuki solo la miro, entrecerrando los ojos

 

 

Aquel día, la joven princesa llevaba un conjunto de color verde, elaborado con una falda a la cadera y un top de tira del mismo color y que tenía unas cintas  que se cruzaban sobre sus costillas y ataban atrás, sobre sus hombros portaba una delgada chalina que le servía para cubrirse un poco del radiante sol por si salía a los jardines [ http://www.isisexchange.com/images/CST017.jpg ]

 

 

  • - Quisiera hablar contigo un momento, Shuichi. - Dijo la joven
  • - Eh... ha...... sí, claro
  • - Los dejo solos. - Comento el rubio saliendo de la habitación y cerrando la puerta tras de sí
  • - ¿De qué quieres hablar conmigo?
  • - ... - La chica no dijo nada, solo se le acerco y le entrego una especie de sobre elaborado con pergamino y sellado con cera
  • - ¿Qué es esto? - Pregunto al verlo
  • - Lo que viniste a busca
  • - ¡¿Qué?!
  • - Ahí dentro esta el nombre verdadero del príncipe de Asgard ¿Es lo que quieres no?

 

Shuichi no pudo evitar mirar el sobre, desconcertado por eso.

 

  • - ¿Me...... me lo estas dando?
  • - ¿Ahora me vas a salir con que ya no lo quieres?
  • - Es...... es que.........

 

¿Qué le pasaba al mundo? ¿Se había vuelto loco? ¿Por qué al inicio se negaban a decirle su nombre y ahora querían hacerlo? ¿Qué juego era ese?

 

  • - Si, lo sé... no esperabas que de buenas a primeras te diera esto ¿o sí? No después de habértelo negado la primera y única vez que me lo pediste; pero ¿sabes? Me sorprendió que no me lo volvieras a pedir ¿Qué? ¿Tan fácil te diste por vencido?
  • - No... no fue eso
  • - ¿Entonces?
  • - Pasaron muchas cosas y......... deje ese tema para luego
  • - Un luego que, cabe mencionar, nunca llego
  • - .........
  • - En fin. - Dijo extendiéndole el brazo un poco más a modo de que el chico comprendiera el movimiento y tomara el sobre, cosa que hizo de forma recelosa. - Al entregarte eso, estoy haciendo que tu viaje no haya sido en vano.
  • - .........
  • - Pero ahora hare mi buena acción del día
  • - ¿Qué?
  • - Este sobre, te librarte de "Yuki"
  • - .........
  • - Pero si en verdad, lo único que ahora quieres saber su nombre, te recomiendo que se lo preguntes. Estoy segura que te lo dará.
  • - .........
  • - La elección es tuya; solo no olvides que esa decisión te cambiará la vida
  • - ......
  • - Así que déjate de caprichos y piensa bien ¿Qué es lo que en verdad quieres? Porque aquello que pierdes, jamás lo recuperas.
  • - ¿Qué estas insinuando?
  • - Que la verdad la tienes enfrente de ti, pero te niegas a verla
  • - .........
  • - Pero bueno, no hay peor ciego que él que no quiere ver. - Se giro sobre sus pies y camino hacia la salida
  • - ¡Espera! - La detuvo. - ¿Por qué me lo das? ¿Qué ganas? ¿De qué lado estas?
  • - Te lo doy porque quiero. No gano nada porque no siempre se debe ganar algo para uno mismo. Y estoy del lado de lo que sé, es lo correcto. - Y dicho eso salió de la habitación; dejando a un Shuichi confundido y desconcertado por esas palabras.

 

No pudo evitar mirar el sobre que tenía entre sus manos, sabía que abrirlo y leerlo le daría la clave al misterio que rodeaba a Yuki, o al menos a uno de sus tantos misterios......... pero, ahora que ya tenía dos formas de tener la respuesta ¿Cuál era la que quería? ¿La escrita que no le decía nada más que un nombre......... o la oral en la que quizá vendría una justificación de ello?

 

  • - ¡Shuichi!
  • - Ahh... - Dijo un respingo y viro el rostro, viendo que Yuki estaba parado delante de él.
  • - ¿En donde tienes la cabeza?
  • - ...Ah... en nada... yo... yo solo...
  • - ¿Qué es eso?
  • - Esto...... - Musito viendo el sobre entre sus manos. - No es nada... jajaja. - Dijo de forma nerviosa, ocultando el sobre tras su espalda

 

Yuki no le pregunto más, pero sabía que ese sobre era la respuesta que Shu había estado buscando, lo que le extrañaba era la reacción del menor, y sobre todo el porqué no lo había abierto aún.

Quizá era por la sorpresa; bueno, eso no era importante ahora; lo importante era ir con el sultán, desayunar con él, terminar de preparar todo y salir de ahí.

 

  • - Vamos, nos esperan
  • - Si... ya voy.

 

El desayuno fue tranquilo y sin ningún contratiempo, podría decirse que fue algo aburrido; pues las pocas conversaciones de sobremesa era cosas triviales y sin relevancia......... y así fue el resto de la mañana, al menos para Shuichi, quien se había paseado por todos los pasillos del palacio en lo que esperaba a que finalmente diera la hora de volver, ya que en ese momento los sirvientes se encontraban guardando sus pertenencias...... pero rápidamente se aburrió de estar ahí encerrado, así que sin pensarlo más camino hacia la salida del palacio.

 

  • - Un momento. - Detuvo la voz de un hombre
  • - ¿K? - Pregunto el chico.
  • - ¿A dónde va, joven príncipe?
  • - Al pueblo, a dar una vuelta en lo que nos vamos
  • - Me temo, joven príncipe, que eso no es posible
  • - ¿Qué? ¡¿Por qué no?!
  • - Porque nos vamos en menos de una hora... y porque usted tiene estrictamente prohibido salir sin escolta
  • - ¡No es justo! ¿Por qué?
  • - Porque es muy inquieto
  • - Pmmh... pues en ese caso, acompáñame
  • - Eso no es posible... debo terminar de ver que los caballos están en perfectas condiciones para el viaje.
  • - Mmmm......... pues que me acompañe alguien mas
  • - Todos están ocupados
  • - ¡No es justo!
  • - Quizá no, pero así son las cosas. Mejor vaya a dar una vuelta por el palacio en lo que terminados.
  • - Una vuelta en el palacio. - Refunfuño. - Si ya di como cuatro.

 

K se sonrió divertido al ver los berrinches del chico, con razón su príncipe se la pasaba molestándolo, si era muy gracioso verlo hacer esas caras.

 

+-+-+-

 

Shuichi termino dentro de la habitación viendo que todas sus cosas estuvieran guardadas y que no olvidará nada. De hecho no había revisado nada, pues los sirvientes del Sultán, guiados por Hiro, se habían encargado de guardar todo, llevarlo hasta su caballo y cargarlo......... así que solo fue a aburrirse, recostándose sobre la cama y mirando el cielo.

 

  • - Veamos. - Musito mientras tomaba nota mental de las cosas que llevaba a su reino. - El peluche de mi hermano lo tiene Hiro... Vaya ¿Qué hombre a su edad tiene peluches y duerme con ellos? - Pensó - En fin......... llevo los dulces, la capa, licor............mmm... no, no olvide nada... - Dijo cerrando los ojos y suspirando. - Vaya ¡que aburrido! Pensé que viajar sería mucho más divertido, no entiendo porque mi abuela lo encontraba tan genial......... - Dijo en voz baja.

 

De repente abrió los ojos con sorpresa, como si acaba de recordar algo que no había pasado por su mente.

 

  • - NO PUEDE SER, LO OLVIDE ¿CÓMO PUDE? ¿Qué hago? ¿Qué hago? No me puedo ir sin llevarle algo. ¿Voy a comprar uno? No, pero ya no me queda mucho tiempo ¿o sí? Además Yuki me va a decir que no vaya. Mejor me voy sin decirle... ¿Y si lo descubre? Seguro que se enoja ¿Pero si no tardo? ¡CLARO! Me salgo sin que me vean, corro a la ciudad, compro el primero que vea y me regreso. Si lo hago en menos de media hora no se da cuenta y si no se da cuenta no se puede enojar. ¡Eso haré! ¡¡Que brillante idea!! ¡SHUICHI, ERES UN GENIO!

 

+-+-+-

 

Una hora después.

La puerta de esa habitación era abierta, dejando entrar al príncipe de Asgard, pues como le había informado Hiro, el príncipe de Turandot se encontraba ahí dentro la última vez que lo vio.

 

  • - Shuichi es hora de... - Llama el rubio al entrar pero se queda callado al ver que el pelirrosa son estaba por ningún lado. - ¡Genial! ¿Dónde se metió ese mocoso? - Pregunto.
  • - ¿Ocurre algo? - Pregunto Seguchi al ver salir al rubio de la habitación.
  • - ¿Dónde está Shuichi?
  • - ¿Ehh? No sé; lo creí con usted
  • - Búscalo, dile que ya tenemos que irnos
  • - A la orden Príncipe

 

+-+-+-

 

Al mismo tiempo; en la ciudad y bastante alejado del palacio se encontraba Shuichi, quien no dejaba de ver brillantes accesorios en un puesto.

 

  • - Mmm... No; este tampoco me gusta mucho... - Musito. Viendo un gruesísimo brazalete dorado. - ¿No tiene algo más discreto?
  • - ¡Oh! Claro que si ¿Qué le parece este? Es de oro y tiene incrustaciones de rubí - Añadió mostrándole un extraño brazalete muy delgado en forma de una rama con hojas y con pequeños rubís en forma de flores.
  • - ¡Qué bonito!
  • - También tengo este, oro puro y zafiro - Añadió, esta vez le mostró uno delgado, en forma de una serpiente de cobra que se enroscaba ascendentemente y en los ojos 2 zafiros.
  • - ¡También está muy bonito!
  • - ¿Qué le parece este?
  • - ¡Genial!
  • - ¿Y este otro?
  • - ¡Waa...... tiene esmeraldas!

 

+-+-+-

 

Varios guardias se movían de un lugar a otro, recorriendo pasillos y jardines en busca del desaparecido Príncipe de Turandot.

Yuki empezaba a enojarse. ¿Cómo era posible que nadie lo hubiera visto en más de una hora? ¿En dónde demonios se había metido? Pero lo iba a escuchar en cuanto lo viera ¡Claro que sí! ¿Cómo se le ocurre "jugar al escondite" a minutos se partir?

Se encontraba en el salón principal, en compañía del Sultán, Ayaka y Seguchi.

Nakano estaba buscándolo junto con los demás sirvientes... y K seguía con los caballos, ajeno a lo que sucedía.

 

  • - ¿Por qué siempre hace esto? - Musito el rubio
  • - ¿No te recuerda a alguien? - Pregunto con ironía el de ojos esmeraldas.
  • - ... - Solo le dirigió una mirada asesina, demostrando que su broma no causaba ninguna gracia, y menos en ese momento.
  • - ¿Qué sucede? ¿Por qué todo el palacio esta vuelto un caos? - Pregunto K en cuanto entro a la habitación.
  • - ¿Has visto a Shuichi? - Pregunto Yuki.
  • - Mmm... no desde hace como una hora; lo vi caminando hacia el pueblo pero le dije que se regresará
  • - ¡¿Qué?! - Pregunto Yuki, sacando conjeturas.
  • - Se regreso, pero después de eso ya no lo vi
  • - Está en la ciudad. - Dijo más que seguro. - ¿QUÉ NO LE DIJE QUE NO SALIERA SIN DECIRME? - Pensó enojado ¡¿Por qué siempre desobedecía?! ¿Por qué siempre hacía su santa voluntad?
  • - Iré a busca...... - K no pudo terminar la frase
  • - ¡TORMENTA! - Grito Bill al entrar, siendo seguido de Hiro. - Se avecina una tormenta del extremo norte... viene directo a nosotros............
  • - ¡¿Qué?! - Pregunto el Sultán.
  • - Rage la vio desde el techo... no nos queda mucho tiempo. - Añadió
  • - ¿Cuánto tiempo? - Pregunto él sultán.
  • - Menos de 5 minutos, está muy cerca
  • - ¡Shuichi! - El nombre salió de sus labios casi sin darse cuenta.
  • - Toquen la alarma, cierren todas las puertas, que nadie salga, es la orden
  • - ¿Qué? ¡No! ¡¡Shuichi está allá afuera!! - Dijo Yuki furioso ante la orden.
  • - Usted no saldrá de aquí
  • - ¿Y QUE PASARA CON SHUICHI?
  • - Quizá esté dentro del palacio, aún falta lugares por ver.
  • - ESTA ALLÁ AFUERA
  • - No estamos seguros
  • - ¡LO SÉ! LO CONOZCO. ESE NIÑO SE ESCAPA CADA QUE PUEDE
  • - No podeos hacer nada... Es muy riesgoso salir en una tormenta de arena
  • - .......
  • - Lo siento, pero si el príncipe Shuichi está afuera... no hay nada que podamos hacer
  • - ¡...!

 

+-+-+-

 

Shuichi corría por entre las calles, buscando un lugar por el cual llegar al palacio......... sin embargo, cuando "encontró" un atajo para llegar más pronto, termino por perderse, llegando hasta un lugar que no conocía y en el que había pocas casas hechas con paja vieja, no había nada de gente y el desierto  delante de él.

 

  • - ¡Rayos! ¡Me perdí! - Se quejo molesto. - A buena hora me pierdo... ¿Qué hago? Por donde llegare al palacio... ¡¡Ahh!! Eso me pasa por tomar atajos. - Se recrimino a sí mismo, dando la vuelta para regresar por donde había llegado.

 

Pero en ese preciso momento sintió una brisa en su espalda que no era muy suave; curioso por aquello se giro y lo que vio lo dejo total y completamente asustado.

Una gran nube café se acercaba a gran velocidad, devorando todo a su paso. [ Algo como esto http://albertoxd.files.wordpress.com/2007/07/_40818423_foto10.jpg ]

 

  • - ¿Ehh? ¿qué es eso? - Musito aterrado, retrocediendo unos cuantos pasos hasta quedar pegado a uno de los muros de una casa.

 

La gran nube se acercaba más y más, Shuichi no sabía qué era eso......... solo sabía que le daba mucho miedo y que no tenía a dónde correr......... Entonces su mente reacciono en la pequeña choza que estaba a su espalda, corrió alrededor de ella en busca de la puerta, hasta que la encontró, hecha de madera vieja. Se metió, descubriéndola abandonada.........

Escucho un fuerte rugido en la parte de afuera y luego a casa de movió de forma vertiginosa, haciendo que granos de arena entraran por entre las ramitas de paja.........

Shuichi se arrincono contra una de las paredes, haciéndose un ovillo y cubriéndose los oídos con sus manos, mientras cerraba los ojos con fuerza para no ver nada

 

  • - Yuki... ayúdame - Pensó entre sollozos

 

CONTINUARÁ

Notas finales:

Mi correo es: g6_shinigami@hotmail.com (Fujiwara, sorry x no dejártelo en la respuesta del rev, pero es que soy muy despistada a veces y se me barren las cosas jeje)

Lo dejo aqui xq si alguien más lo quiere

Espero sus reviews.

Nos vemos, kuidense y besos

Matta nee!! ^o^


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).