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Lord Roderick por Deilita

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Notas del capitulo:

Ya estoy aquí con la segunda parte, espero que os guste, y te la dedico Damián XD tqm ninioo moxxo.

Disculpen los errores de ortografía.

¿Qué quieres?-preguntó Andrei entrando en la oficina de su marido.
Siéntate-pidió omitiendo lo grosero de su consorte, cosa que comenzaba a hacer amenudo.
    El chico decidió que era mejor no desobedecer al Lord y se sentó impaciente mirandole firmar documentos como siempre, remojar la pluma en la tinta una y otra vez escribiendo y respondiendo cartas que la verdad poco le interesaban.
Vas a airte a casa de Lord Benjamin-informó sellando una carta con cera derretida.
¿Qué, con Lord Benjamin?¿Por qué?-estaba un poco exaltado por la noticia y se rectificó un poco.
Me voy un mes a Francia, tengo asuntos allá-respondió con simplesa el Lord-Prefiero que te cuide él a que estés solo.
P-pero no puedes dejarme-dijo trabado por el coraje.
-No te estoy preguntando, volveré no te preocupes.
Llévame contigo-se levantó al mismo tiempo que su marido.
No-dijo pasando a un lado del chico.
Por favor-pidió siguiendolo.
-Ya dije que no.
¡Llévame contigo, Roderick!-gritó una vez en su cuarto.
    El Lord se enfureció ante la actitud descarada de su consorte, podía permitir algunas cosas, no era muy exigente, pero que le gritara ya era otra cosa, le cruzó la cara con una fuerte bofetada tirándole a la cama y respiró profundamente, no quería herir al chico.
No quiero que me dejes-musitó el chico sin mover un músculo siquiera para retirarse el cabello de la cara.
No te llevo porque estoy harto, no quiero verte ni oir tus quejas y tu voz chillona, me fastidias-respiró profundamente-Iré por una sirvienta para que haga las maletas, me voy esta tarde.
    Lord Roderick salió del cuarto y cerró, no podía creer que le había dicho todo eso al chico, era verdad que se había casado sin amor alguno por el, pero era un ser humano con sentimientos.
Te tientas demasiado el corazón, Roderick-se reprendió mentalmente.
    Andrei siguió recostado en la cama sin moverse, le ardía la mejilla lo suficiente como para arrepentirse de haberle gritado al Lord, se levantó lentamente ahogando el llanto, ya no le sorprendían las fuertes bofetadas, había recibido muchas de parte de su marido desde que se había casado, fue al baño y se aplicó un poco de agua fría en la mejila, estaba enrojecida y afiebrada, se arregló para irse sin decir una palabra más y pensó gustoso que no vería a ese hombre durante todo un mes y medio.
    El carruaje se alejó dejando al chico en brazos del otro Lord que le miró con algo de lástima, estaba con la cabeza gacha, pero en realidad ocultaba una enorme sonrisa, se sentía feliz de que por todo un mes y medio no recibiría maltratos ni mucho menos, estaría como huesped en una casa donde sería tratado con respeto, aunque se lo debía a la posicion de su marido.
Vamos adentro, no quiero que te resfries-dijo llevandole al interior y gritó hacia las escaleras-¡Andrei está aquí, cariño!
    Un estrépito se escuchó en las escaleras haciendo sonreir al mayor,y por ellas apareció ni mas ni menos que George, el amigo de Andrei, se miraron y luego se abrazaron largamente, sus vidas estarían mucho mejor si tenían a su mejor amigo al lado.
Que se fuera fue lo mejor que me pudo haber pasado-sonrió Andrei comentando con su amigo a solas.
¿Tanto lo odias, Andrei?-preguntó George antes de reparar en su mejilla-Te golpeó.
Sí-musitó revolvienose en su lugar incómodo.
Ven aquí, cariño-dijo levantandose para barzarlo-no te lo mereces.
Yo le grité hoy-confesó con lágrimas entre los brazos de su amigo.
Sabes que no importa lo que pase yo te apoyo a ti-dijo consolandolo.
¿Sucedió algo con mi hermano?-preguntó Lord Benjamin a su consorte a la hora de dormir.
Le golpeó-comentó severamente.
Eso es extraño en Roderick-comentó Benjamin-Probablemente sean los nervios del viaje.
     George se molestó un poco al ver como su marido le quitaba importancia a eso, él mismo había sufrido algunos de esos golpes y le enfurecía que se lo hicieran a Andrei, era un chico tan sensible... pero testarudo, eso le impediría llegar muy lejos o bien, le llevarían demasiado lejos. Se durmieron sin decir ni una palabra más.


     Al tercer día Roderick se despertó algo dolorido de la espalda, todavía recordaba la sonria de riunfo en los labios del chico al ver el carruaje alejandose, de verdad le odiaba, ¿O era resentimiento por el golpe? No importaba ya, estaría lejos de ese molesto chico un mes y medio, todo el tiempo para el solo y lo que quisiera hacer en parís, ¡Bendito trabajo!
Permitame llevar sus maletas-pidió un joven y subio las escaleras tras el.
    Podía ver el palacio desde su habitación, los jardines, la vista, todo en ese lugar era hermoso, todo calma y amor, calro, estaba en una ciudad de ensueño para los enamorados... Algo en su mente le llevó a pensar en el chico ¿Qué estaría haciendo? Se despejó y bebió un poco de vino para refrescarse, no podía pensar en el chico estresandose más en lo que consideraba sus vacaciones de Andrei.
Le decía, señor que la reunion tendrá comienzo en unos minutos-dijo el desesperado consejero al Lord.
Claro-dijo con aire ausente, no era divertido estar solo allí, buscaría compañía para la noche.
    Una semana despues Roderick ya estaba cansado de paris, pensó que sería mucho más divertido, para su mala suerte todos habían sido informados de su recien contraido matrimonio y no le convenía en absoluto hacer un escandalo en una tierra agena, estaba mirando a las estrellas algo enfadado, deseaba volver pronto, tener cualquier pretexto para estar en su casa y no con los molestos viejos que se reunían a diario para tomar una decición ¿Se llevaría el mes y medio así? no lo soportaría. Las lluvias ya habían comenzado enfriando el ambiente en su habitación, tenía que salir con su sombrilla a donde fuese, no quería pescar un resfriado por mojarse.
Despues de todo el clima no es tan diferente-pensó caminando por la calle.
Disculpe, señor-dijo un señor ya viejo acercandose cojeando-¿Es usted Lord Roderick?
Sí, soy yo-respondió con paciencia.
¡Qué gusto!-dijo estrechandole la mano sin soltar el baston de la otra-Soy Sir Wallace.
Un placer, Sir-saludó con una agradable sonrisa, un compañero inglés.
Ya ve, con tanto francés pensaba que me volvería loco hasta que me informaron su llegada-comentó sonriente-Sí señor, no hay nada más agradable que un compatriota en el extranjero ¿No cree?
Estoy totalmente de acuerdo-sonrió complacido, al parecer era famoso.
A proposito de eso...-dijo el señor acercandose en tono confidencial-He encontrado unas mujeres...
¡¿Mujeres?!-preguntó alzando apenas la voz.
Lo siento, si a my Lord le molesta...-comenzó el señor.
No, todo lo contrario-dijo sonriente, justo lo que buscaba.



     Andrei estaba más que molesto, había dicho ya varias palabras altisonantes y de las peores, entre su amigo y su cuñado intentaban calmarlo aunque en vano, ¿Cómo iba a calmarse? acababa de recivir una carta del anzuelo que había enviado, Roderick había pasado la noche con la chica que el señor le había presentado, y no solo eso, si no se daba el lujo de andarla paseando por todo paris con alajas y joyas que debería comprarle a él, su consorte.
¡Me las va a pagar ese maldito!-gruñó golpeando la mesa con el puño.
Andrei, debes calmarte-Dijo George preocupado.
¡¿Cómo puedo calmarme?!-gritó al aire y se dejó caer al sillón-nunca lo perdonaré.
Andrei...-dijo su amigo sin palabras y se sentó a su lado.
Yo... estaba preocupado por el-musitó el chico de pronto.
     George se quedó de piedra antes de abrazarlo, ¿Había oido bien? El Andrei que había estado todo un mes rebosante de alegria porque Roderick no estaba, ese mismo chico que había parecido feliz sólo ese mes, ¿Estaba preocupado por el Lord?
Si bien era cierto que se había comportado extraño cada vez que llegaba una carta de su "espía" de paris informando cada paso que daba Roderick con Silva,la joven que habían contratado, nunca se había puesto celoso o siquiera había dado muestras de que le interesara.
Es sólo una mujer pasajera-intentó tranquilisarle
¿Y si no lo es?-alzó el rostro de las manos-¿Y si la impone en nuestro matrimonio?
No pensé que eso te interesara-Dijo benjamin entrando.
Lord...-dijo enderezandose y sorbiendo la nariz.
Había mucho ruido así que pensé que algo había sucedido-comentó sonriente.
Benjamin... Lord Roderick traicionó a Andrei-dijo serio el consorte.
Oh...-fue todo lo que dijo.
Di algo, es tu hermano-resongó George cruzándose de brazos.
¿Qué tienes bajo el vestido?-preguntó notando un pequeño bultito en su cuñado.
¿Q-qué?-preguntó el chico hipando aún.
¿Cómo te atreves a decirle gordo?-bramó el consorte y se cubrió la boca.
-¿Es-estoy gordo?
No, cariño-dijo George nerviosamente.
Pues si no tienes una pelota ahí oculta-bromeó el Lord.
Ya basta-pidió George ante la mirada incrédula de su amigo-No estás gordo, cariño debe ser... una inflamacion.
No te entiendo-dijo el chico extrañado.
Sí, las coles agrias te inflamaron el estomago-le sonrió y levantó al chico de la mano.
   Le llevó a su habitación y le recostó despues de hacer que bebiera un té de "remedios" según George, sí había notado con extrañesa como comía y que dormía demasiado, y porsupuesto que no podía apretarle el corsé sin que el chico llorara, pero no había dicho ni una sola palabra, no deseaba ofender a su amigo e invitado, probablemente era por algún tipo de depresión.
¿De verdad estoy gordo?-preguntó mortificado.
Tonterias, mi marido necesita anteojos-le sonrió arropandolo-duerme ya, cielito.



     Lord Roderick abrió los ojos y sonrió al ver a la pelirroja a su lado, había sido una noche increible, sonrió tristemente al darse cuenta de que no la quiería más que a cualquiera, podría ser su amiga, pero le hacía falta algo...¿Qué era eso que le faltaba? unos ojos castaños inconfundibles llegaron a su mente y sacudió la cabeza, no era posible que pensara en el chico, en ese momento tuvo la sensación de que algo se le había estado olvidando, había algo muy importante.
¿Estás bien, mon amour?-preguntó la chica.
Vuelve a dormir, Silva-pidió sonriendole.
Hay algo de lo que quiero hablar-dijo sentandose mostrando sus hermosos y redondeados pechos.
Dime-dijo sin apartar la mirada de sus ojos
Yo... siento que no te soy suficiente-comentó extrañando al Lord.
¿De qué hablas?-preguntó extrañado.
-Ayer dijiste el nombre de tu consorte mientras dormías y mientras lo hacíamos...¿Por qué lo engañas?
Él no me quiere, ni yo a el-suspiró recargandose en las almohadas.
Eso es una mentira, tú lo quieres-dijo serena.
Claro que no, sólo me es útil porque el...-se interrumpió y sus mejillas palideieron en el acto.
-¿Qué pasa? Parces leche de lo pálido.
él...-la cosa que había olvidado allí estaba, dando vueltas en su mente por primera vez en casi dos meses, debía volver a Inglaterra cuanto antes-El va a tener a mi bebé.
Mira, yo solo fui contratada-dijo la chica comenzando a vestirse.
¿Qué?-preguntó incrédulo.
Eres un buen tipo, vete con él, se nota que lo quieres-le sonrió antes de salir dejando una carta en su regazo.
     Abrió la carta con indesición y la chica se fue, era una carta de su tio el Rey, había podido volver a casa desde hacía dos semanas, que era lo que duraba el viaje, la arrugó con fuerza y se dejó caer derrotado en la cama, quienquiera que le hubiese puesto a la chica enfrente lo había planeado bien, se había olvidado por completo de un bebé, de SU bebé, recapasitó un poco, no había recivido ninguna carta de su hermano ni de su consorte, ¿Y si algo iba mal? Era muy probable que el chico no estuviese en cinta todavia, despues de todo no tenían manera de asegurarlo.



Cada día comes más, ¿No crees?-preguntó George con cuidado por el humor de su amigo esos ultimos días.
Sí, estoy grodo y fofo ¿Y qué?-preguntó llevándose otra patata a la boca.
No lo tomes tan a pecho, es solo una observación-estaba realmente preocupado por el chico.
Me voy a dormir, está bien si no me soportas-dijo levantandose de la mesa con lágrimas.
¡Andrei, por Dios!-dijo levantándose molesto ya, era demasiado-Vamos por un doctor, no estas bien.
¡¿Crees que estoy loco?!-gruñó soltándose.
Benjamin-llamó George y entre ambos obligaron al chico a que lo revisara un medico.
No sé por qué no me han llamado antes-dijo levantando su gafas para limpiarlas-Éste chico está obviamente en estado, ¿Y el padre?, debería estar aquí.
-Su padre-dijo con rencor-está de vieje.
      George se recostó al lado de su amigo con un tremendo dolor de cabeza, ante la sola mensión de Roderick se había colocado a gritar furioso contra todo y todos los que estaban a su alcanze, ni una flor había quedado a salvo de el enojo del chico, depues de eso habían venido gritos, pero de llanto, y por fin se había quedado dormido.
Dios,ya quiero que se lo lleven-dijo George agotado-Esto está de terror.
Y pensar que lo tendré que soportar contigo-dijo Benjamin en el marco de la puerta.
      El chico se quedó repentinamente callado, volteo a ver a su marido con expresion de dolor y se levanto para irse de aquel cuarto, llevaban un año casados y no habían podido tener familia, eso, por supuesto, era bastante malo,siguió su camino hasta su habitacion y cerró la puerta con un portazo bastante molesto, ya era suficiente con la humillacion de no tener hijos como para que su marido le reprochara en cara su infertilidad.
Sal de aquí-dijo recargado en su comoda.
No se me da la gana-dijo el Lord asercandose.
No me toques-dijo pegandole en la mano-No lo hagas.
Eres mi consorte ¿Se te olvida?-preguntó acariciandole la cara provocandole un estremecimiento.
Déjame ya, Benjamin-gruñó quitando el rostro, cosa que molestó al otro.
¿No te he esperado más de seis meses?-interrogó sosteniendole por la cintura.
Suéltame-dijo intentando zafarse.
¡Tengo que volverte a educar!-rugió jalándole el cabello hacia atrás-¿Quieres eso?
N-no -dijo apenas tragandose el miedo, no había olvidado las golpisas.
Muy bien, comensemos de nuevo ¿Quieres, cariño?-preguntó soltandolo.
Sí, mi amor-aceptó con voz tremula.
¿Ves? así es mucho mejor-dijo devorando el cuello.
Sí-se dejó llevar hasta la cama con los ojos inundados en lágrimas, sabía que su marido quería un hijo, le había dejado "descansar" seis meses por si el chico estaba muy débil-No me lastimes.
Haré lo necesario-dijo subiendo la falda del chico hasta quitár el vestido por la cabeza.
Me portaré bien-dijo desesperado.
Ya lo veremos-dijo con una voz más ronca de lo habitual.
      Lord Benjamin conocía bien a su consorte, al principio juraba portarse bien y hacerlo todo, pero siempre, invariablemente intentaba huir desesperadamente de su destino, pero el necesitaba un hijo, y tras seis meses de abstinencia no estaba dispuesto a esperar mucho más, no le daría tregüa hasta que quedara encinta, y esta vez lo obligaría si era necesario, las otras veces lo había dejado huir.
Por favor, por favor-suplicaba en voz baja mientras le quitaba el corsé.
Relajado-le ordenó acariciando la espalda desnuda hasta el límite y el chico se tensó de nuevo-Lo haré con más cuidado esta vez.
No puedo-gimió tembloroso en los brazos de su marido.
Sólo relajate-dijo recostandolo.
     Las veces pasadas había intentado desde forzarlo a dejarlo hacer solo, ninguna había funcionado, esta vez, tal vez si lo hacía con cariño y delicadesa...  se colocó entre las piernas del chico y le miró cerrar los ojos fuertemente suplicando mientras lloraba aterrado, no lo culpaba, debía doler mucho.
Confia en mi-pidió llevando dos de sus dedos a la boca del chico.
-¿Que...
Lamelos-ordenó introduciendolos en su boca.
    El chico obedeció confundido, no tenía ni idea de qué intentaría su marido esta vez, pero por lo visto no lo dejaría ir pero tampoco lo forzaría, fue tranquilisandose poco a poco lamiendo los dedos hasta dejarlos totalmente empapados en saliva, cuando los sintió acariciarle las piernas y los muslos se estremesió, era una sensasion nueva.
¿Vas bien?-interrogó el lord acariciando.
Sí-dijo sonrojado por como lo miraba
Perfecto-dijo llegando a la entrada e introdujo un dedo y el chico soltó un grito.
Espera-pidió asustado intentando sacarlo.
No-advirtió con los ojos y el otro se estuvo quieto-dije que no te lastimaría ¿Verdad?
    George se preguntó si debía confiar en ese hombre y al final asintió, cuando lo sintió moverse en circulos un gemido de placer se le escapó de los labios haciendo sonreir al Lord que introdujo el segundo, el chico se quejó un poco pero comenzaba a acostumbrarse, jamás pensó que tener algo así sería placentero.
Ben...jamin-se quejó cuando retiró los dedos.
Sigue así de tranquilo-ordenó posicionandose.
     El lord besó a su consorte para distraerlo un poco mientras entraba en el, el chico se quejó un poco pero al cabo de unos segundos hiso unos sonidos que sólo podían ser de placer, lo había logrado, había conseguido que el chico se tranquilisara para hacerlo menos doloroso. Comenzó a moverse despues de un par de minutos dentro, eran estocadas lentas, ritmicas, que hacían gemir a su consorte de placer, aumentó el ritmo poco a poco hasta llegar a ser uno frenetico que hacía sonar los choques de ambas pieles.
Ben... Ben...-llamó el chico retorciendose de placer-me voy a...
Hazlo-sonrió, por fin había logrado que el chico sintiera placer y no repulsion y dolor.
     George llegó con un grito de placer y manchó ambos abdomenes, se quedó demasiado cansado como para moverse, el Lord terminó algunos momentos despues e inundó las entrañas de su niño, se dejó caer empapado a un lado y abrazó al chico contra su pecho besando la larga cabellera.
Mi niño dorado-dijo con cariño.
¿Por...por qué me tratas con cariño?preguntó apenas con aire.
Roderick me hizo aprender lo valioso que eres para mí, no soportaría perderte-dijo con calma.
-¿Roderick te enseñó eso?
Yo no podría dejarte dos meses enteros con mi hijo dentro-sonrió casi dormido-Te necesito.
     Ambos se rindieron al sueño con sonrisas, nunca, en su tiempo juntos se habían querido como en ese momento,o siquiera querido. Se quedaron dormidos ifnorando que el menor se había quedado trabado en la puerta tras escuchar las dulces palabras. Andrei volvió a su cuarto llorando,se tiró en su cama y miró su vientre con algo de coraje, tomó una hoja y una pluma y comenzó a escribir rápidamente, ya no soportaría más eso, era horrible, ser forzado y encima maltratado, pero por otra parte se alegraba por su amigo, le había confesado que Lord Benjamin le agradaba cuando no era violento con él, tal vez podrían llegar a quererse aunque fuese un poco, y lo había logrado.
Andrei-llamó Lord Bnejamin entrando al cuarto en silnecio, su niño estaba demasiado cansado como para levantarse aún.
¡Lord!-pegó un brinco y ocultó la carta en su espalda.
Dame la carta-pidió, la había visto.
Por favor-pidió mordiendo su labio inferior.
Roderick no te dió permiso de enviar cartas-dijo avanzando decididamente.
¡Por favor!-suplicó cayendo de rodillas-No la lea.
     Benjamin hizo caso omiso y le arrebató la carta al chico que se tiró en la cama a llorar, le enfureció lo que decía la carta sin embargo se controló y la guardo en uno de sus bolsillos, la quemaría más adelante, se sentó en un borde de la cama y miró a su cuñado como si se tratase de un niño con un berrinche, esperó a que dejara de llorar y le habló:
-No atentarás contra tu vida mientras tengas a tu hijo en tu vientre.
No quiero matarlo-sollozó-no podría.
¡Deja de llorar!-gruñó callándo al otro al instante.
Lo... lo siento-se disculpó secándo sus lágrimas.
Ahora, vas a escribir lo que yo te dicte, mi estúpido hermano debe apreciar lo que tiene-dijo sentando al chico a la fuerza en el escritorio.

Notas finales:

Gracias por leer y espero RR pliss!!!! nos vemos


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