El coronel Roy Mustang al fin había llegado a ser el fhurer
Ling era el rey de Xing
May regresaba a casa con la piedra filosofal
Todo estaba relativamente en paz y orden
Incluso Edward que había perdido su alquimia, no podría estar más feliz porque con el paso de los días su hermanito Alphonse se veía mucho mejor
Tomo un par de camisas que considero de la talla correcta un par de pantalones y unos zapatos deportivos tipo convers
Camino tranquilamente hacia el hospital, porque tenía ganas de sentir el calor del sol, porque todo era bueno, porque todo era paz
En el camino recordó todo, recordó el viaje, recordó las batallas y los amigos y sobre todo el latente anhelo de regresarle el cuerpo a su hermano
Quizá podría decirse que esa capitulo se había cerrado que era tiempo de empezar una nueva historias, una, como decía Alphonse, en la que él era fuera a buscar a winry
Porque ya hacía varios días que su hermano le insinuaba muchas cosas
El chico parecía querer verse des complicado y pícaro pero a leguas se le notaba el sonrojo y el titubeo que delataba que estaba incomodo con decirlo y que a duras penas y sabia de que estaba hablando, Edward entendía que su hermano decía todas esas cosas y se esmeraba por entusiasmarlo porque creía que él deseaba de todo el corazón ir por la chica
Y no es que no quisiera verla, era que no quería perderse ni un segundo de la nueva vida de Alphonse, ni un segundo de su calor
Estaba fascinado
Sus ojos, sus labios, sus expresiones, sus sonrojos y su sueño
Era su hermanito, estaba hay junto a él, tan humano y tan sensible
Ciertamente Alphonse siempre fue más alto y mas corpulento que Edward pero las cosas habían dado un gran giro y ahora se veían tal y como debían
Edward el hermano mayor y Alphonse el hermano menor
Y siempre han dicho que los hermanitos menores son adorables
Pues es verdad
Abrió la puerta y lo encontró sentado en la cama mirando por la ventana y con las manos apoyadas sobre sus piernas
-hermano
Dijo con una sonrisa
-que bien te vez, Al
Esa sonrisa tan característica suya se dibujo en su cara mientras colocaba la ropa a un lado y se sentaba en la cama
Lo que había dicho, lo había dicho con toda sinceridad, sus mejillas ya no estaban chupadas sino redonditas como su cara y su cuerpo lógicamente se veía en óptimas condiciones
Alphonse le sonrió sonrojado pero muy contento
-por cierto, ¿no has ido a...a... buscar a winry?
Edward soltó aire pesadamente mientras sonreía enternecido por el increíble entusiasmo con que el chico había intentado decirle y la traición de sus nervios, característicos de quien trata de hablar de lo que no sabe
Decidido a seguirle el juego puso su mejor cara de póker
-así me extraña mas, esa es mi estrategia ¿Qué tal, Al?
Dijo poniéndose de pie y en posición de batalla
Alphonse rio enseñando todos sus dientes pero luego se detuvo
-vas a hacer que se enoje, hermano, recuerda la increíble fuerza que tiene cuando se enoja
-no me da miedo
Edward no podría decir que Alphonse había puesto una de esa caras que tanto conocía porque sería una gran mentira, a penas estaba empezando a conocerlo, sus gustos y sus resabios todas esas cosas, apenas y volvían a ser los niños de aquel entonces, se conocían pero faltaban muchas cosas aun les faltaba crecer y ser capaces de leer sus gestos, quizá Alphonse tenía una gran ventaja sobre eso
La cara de Alphonse fue una de inseguridad, con las cejas hacia abajo y los labios torcidos en una mueca mientras analizaba a Edward
-bueno, tal vez un poco, pero le llevare unos aretes
Alphonse lo miro tranquilamente con una sonrisa
-¿hasta cuando crees que eso te seguirá funcionando?
-no lo sé, pero no quiero pensar en eso ahora, es una verdadera molestia y ciertamente ya tiene demasiados agujeros
Alphonse gruño suavemente desviando la mirada de nuevo hacia la ventana
Edward al notarlo dejo de sonreír y con expresión serie hablo
-¿pasa algo, Al?
Alphonse negó con la cabeza y sonrió delicadamente
-nada, es solo que ya quiero salir
-pues vístete
El chico no dudo en ponerse en pie con un poco de dificultad por la falta de costumbre de usar sus propias piernas pero esmerándose por empezar a acostumbrarse se desvistió de la ropa de hospital para ponerse lo que Edward le había traído, no pudo evitar pensar que la ropa era un poco incomoda y le hacía cosquillas en toso el cuerpo, pero al menos le quedaba bastante holgada y no le tallaba para nada, eso era otra cosa más a la cual acostumbrarse
El cabello se lo habían cortado, solo hasta el cuello y se le veía un poco redondeado, era un poco más oscuro que el de su hermano, era bastante diferente
Ambos salieron del lugar, parecía que fuera a llover, el cielo se veía gris pero el panorama no podía ser gris para ninguno de los dos
Edward rio mirando hacia las nubes
-¿de qué te ríes, hermano?
-esta es casi la primera vez que estas afuera, ahora resulta que va a llover, debe molestarte
-¿no lo recuerdas, Ed.?
-¿Qué cosa?
-siempre me ha gustado la lluvia, era tal vez una del as cosas que mas extrañaba, el agua
Los chicos sintieron las gotas que tímidas empezaban a caer del cielo y mientras se miraban el uno al otro sonrieron
Entre muchas sonrisas los chicos al fin llegaron a casa de tía pinako, y ningún viaje fue tan dulce, nada nunca se sintió tan bien como caminar juntos hacia la casa, nunca sonrieron tanto mientras caminaban a ese lugar
La sonrisa de winry fue una de extrema dulzura al ver a Alphonse, el cambio que más se podía notar era el del chico y ella no pudo evitar sentirse conmovida ante la tierna cara del chico, aquella que se mostraba tan dulce en la pared de su habitación, en las fotografías
Lacena esa noche fue especial, fue animada y Edward no hacía más que reír nerviosamente ante la insistencia de winry porque se quedaran para siempre, que no tenían porque irse, que esa era su casa, Alphonse miraba a su hermano con una sonrisa, como siempre estaba tratando de indicarle el momento correcto para que Edward al fin confesara los sentimientos que según Al, este sentía por ella
-hermano, contigo no se puede, pierdes las oportunidades
Le dijo Alphonse cuando se cambiaba de ropa para acostarse a dormir aunque ha decir verdad había dormido tanto en el hospital que prefería quedarse sintiendo la noche
-¿ah sí?, y según tu, sabes aprovechar las oportunidades ¿Al?
Alphonse rio nerviosamente sacando la lengua
-bueno, nunca lo he necesitado
Edward se quedo mirándolo, Alphonse ya se había terminado de vestir y estaba parado frente a la ventana
-Al...
Lo llamo suavemente, el chico se dio la vuelta con una sonrisa encontrándose con la mano de Edward que lo tomaba de la muñeca y lo jalaba fuertemente
No tuvo tiempo de decir nada, sintió el calor en un abrazo, ninguno de los dos lo había echo pero seguramente ambos lo habían pensando y lo tenían planeado desde hace mucho tiempo
Edward rodeo el pequeño cuerpo de su hermano, sintiendo su calidez y su suavizada así como Alphonse se dejo llevar por el embriagante aroma y el calor del cuerpo de Edward, ese que le hacía sentir tan tranquilo, tan en casa
Después de ello ninguno de los dos dijo nada, solo durmieron, dándose por satisfechos y sintiéndose muy felices, pero Edward no podía estar tranquilo, no era una persona que esperara una rutina, no es que pensara que sería bueno seguir en el viaje con su hermano encerrado en esa armadura, pero si pensaba que tendría que buscar algo que hacer, algo porque vivir y por que viajar
En la mañana Alphonse se levanto, lo primero que escucho fueron los gritos de winry y los resabios de Edward
-pero ¿para dónde vas? Ed. Ya basta de esto, quédate ya
Alphonse se vistió rápidamente, su hermano se iba quien sabe a dónde, a buscar problemas con quien sabe quien, conociéndolo algo raro traía en mente
Bajo las escaleras y encontró a Edward con las manos delante de su cuerpo, frente a winry tratando de explicarle
-hermano, hazle caso, ya se acabo
Se acerco a su hermano el cual sonrió al verlo y Alphonse confundido vio dos maletas en el suelo
-Vámonos Al
El chico sonrió al ver la mirada de Edward, que le decía que no se arrepentiría de ir con él y tomo la maleta del suelo mirando a winry que se veía muy irritada
-eres lo peor Edward Elric, también te llevas al pequeño Alphonse, ven acá
La chica había sacado quien sabe de dónde un enorme desatornillador y empezaba a atacar a Edward el cual simplemente empezó a correr esperando que Alphonse le siguiera
-te llamaremos
Le grito Edward mientras se alejaba
Alphonse reía aun preguntándose de que iba todo aquello
Ya estaban en el tren, Edward miraba por la ventana directamente al sol
-hermano, ¿A dónde vamos?
Edward hecho su cabeza hacia atrás apoyándola en el respaldo del asiento con una gran sonrisa
-vamos a, buscar
-¿buscar qué?
-una nueva ciencia, algo que nos permita manipular los componentes que nos ofrece la tierra, vamos a intentar crear algo
Alphonse entendió perfectamente y sonriendo miro a su hermano
-vale, lo haremos
Edward se quedo mirándolo, ciertamente se veía tan pequeño tan dulce y tan indefenso pero él no podía verlo de esa manera porque ese chico delante suyo, que tanta ternura le causaba era su hermano y su compañero, su mano derecha y era tan fuerte como él, valiente, inteligente y tenaz
Ellos eran los hermanos del Elric, de ninguna manera podrían quedarse encerrados en un pueblito