TEMPESTAD
Hem llego ante su creador al menos unos veinte minutos desde que se internara entre la sombra que proporcionaban las plantas de la plantación, ante el estaba sentado el gran Vlad. Tenia el cabello gris y recogido en una coleta, y su característica capa negra con broches de plata.
_ Es un placer verte, mi creación- dijo Vlad- ¿Dónde esta mi otra creación?
_ En la plantación Eldewayne- respondió Hem.
_ Veo que me hacen caso-dijo Vlad- Quiero saber porque saliste de aquella plantación.
_ Averiguaba cosas.- dijo Hem.
_ ¿Qué clase de cosas?- pregunto Vlad. Para luego añadir- ¿Sabias Hem que en esa zona hay un vampiro muy poderoso?
_ Lo ignoraba por completo mi señor- dijo Hem.
_ No me extraña, ustedes nunca están conscientes del peligro, siempre debo ser yo quien os salve de el- dijo Vlad- Lo que quiero es que se mantengan alejados de los alrededores de aquella plantación, un ser muy poderoso esta rondando por allí, y ya he investigado, el castillo de vampiros mas cercano es el Diethel y esta a una buena distancia de allí, el mismo Lord Diethel me garantizo que el no tenia anda que ver con aquel despliegue de energía. Imagino que Hao lo limpio todo.
Hem asintió, estaba bullendo de preguntas en su interior, pero no era conveniente ponerse a interrogar a Vlad, no al menos si querías conservar todos los miembros de tu cuerpo en el lugar donde debían estar.
Hao estaba sentado en la silla que había en la habitación de Lyzerg, no iba a dejarlo solo después de lo que paso, no quería tener que limpiar la memoria de los humanos otra vez, mas de una vez no tenia la misma efectividad.
Hao cierra los ojos, se siente demasiado incomodo, la fragancia de Lyzerg embriaga la habitación como una especie de droga, y esta necesitando de toda su voluntad para no echársele encima a Lyzerg como un perfecto bastardo.
Al mismo tiempo que se pregunta donde demonios estará Hem, esta demasiado ansioso porque regrese, necesita contarle todo lo que esta pasando en la plantación.
Los Eldewayne van a regresar pronto.
Lyzerg se revuelve ligeramente en la cama, la camisa se abre un poco y Hao tiene que desviar la mirada, toda esa piel expuesta, parecía tan perfecta, y era tan malditamente tentadora.
Hao es interrumpido de su sesión de tortura cuando la puerta se abre, el doctor había llegado escoltado de una de sus mucamas los dos se percataron de su presencia y se sintieron nerviosos por si lo habían ofendido, Hao se limito a negar con la cabeza, no deseaba tener que perder el tiempo con ellos.
El doctor se acerco a Lyzerg y lo examino.
_ Esta un poco mas tranquilo.- dijo- Y parece haber recuperado algo de salud y control.
Hao se sintió algo tranquilo al escuchar eso.
Hem estaba con un encargo de su maestro, tenia que cumplirlo al pie de la letra, y por la pinta que tenia el tío al otro lado de la puerta, aquello iba a tardar realmente para muchísimo rato, quería ponerse a sacudirlo contra las paredes y romperle el cráneo.
Pero no tenia la menor alternativa, rogando que Hao pueda mantenerse tranquilo y alejado de los problemas, Hem se dispone a esperar el tiempo que sea necesario para que ese idiota pueda conseguirle lo que esta buscando, Vlad y su gusto por las cosas extravagantes, costosas y puñeteramente difíciles de conseguir. La mejor comparación era el buscar una puta aguja en un maldito pajar de mierda.
Hem esta perdiendo la paciencia, sus colmillos arden por la cólera que esta sintiendo en su interior.
Cierra los ojos, ahora mismo si no se controla podría crear un baño de sangre, cuando el tío le dice que tendrá que esperarse dos días, Hem pierde las formas por completo, pero se limita a asentir rígidamente, no puede hacer nada, y no tiene el poder suficiente para convocar a la gente a través de la mente, para eso le faltan al menos tres siglos de preparación, sin embargo Hao si es capaz de convocar a las personas a través de la mente, cuando Hao contacte, Hem le informara el motivo se su tardanza.
Hem busco posada, mientras pensaba en todo el asunto de los Diethel, y el frenesí
Aquella situación era el completo descontrol de un vampiro, cuando este se encontraba ante una criatura, ya fuese un humano, ya fuese un vampiro, y esta criatura lo enloquecía. La sola fragancia y la excesiva cercanía descontrolan al vampiro más experto. A eso los sabios le llaman frenesí.
Lord Marco Diethel esta en su castillo, su cabello rubio resplandece a la luz del sol, mientras observa la larga extensión de tierras, rememorando a su adorada Elena. ¿Podría ser que Lyzerg hubiese escapado a la muerte y estuviese seguro en algún lugar?
Marco quería creer que si, porque quería que su hijo regresara a casa y ocupara el lugar que le correspondía, como heredero del castillo Diethel, un enorme castillo protegido por altos muros y con los mejores guardias extensas tierras que son muy cotizadas, las tierras de los Diethel están llenas de uvas, las mejores uvas, para elaborar el mejor vino, además de elaborar vino, que era como se conseguía el dinero, también podían servir de distribuidores de sangre embotellada, el vino y la sangre embotellada, le proporcionaban a Lord Diethel una importante suma de dinero, y ese dinero lo utilizaba para fortalecer la protección de su fortaleza y también para buscar algún rastro de Elena.
Y de su hijo, al cual nunca llego a ver, llamado Lyzerg.
Marco no quería imaginar en que condiciones había tenido que vivir Lyzerg si es que aun seguía con vida, y si llegaba a encontrarlo, le brindaría todas las comodidades que se merecía, todo lo que pudiese darle.
Porque era su culpa la desgracia se su propio hijo, cuando fue incapaz de llegar a tiempo para ayudar a Elena.
Marco fue interrumpido de sus cavilaciones por uno de sus sirvientes humanos.
_ Señor, ha llegado para usted una carta- le dice, dejándola en el escritorio antes de salir de la habitación
A Marco no le interesan las formalidades, era muy especifico respeto a que le gustaba permanecer a solas, y que si entraban, solo debía ser para avisarle de cosas importantes y después debían irse inmediatamente.
Mientras rompía el sobre, Marco se pregunto quien estaría escribiéndole, aunque estaba acostumbrado a recibir correspondencia en abundancia.
Lyzerg despierta ese día, sintiéndose bastante recuperado, ese día cuando le traen el desayuno. Lyzerg se lo termina con buen apetito, cuando ya casi termina la puerta de la habitación se abre y allí esta Hao.
_ Buenos días- le dice.
_ Buenos días Hao- dice Lyzerg.
Hao se siente satisfecho cuando lo escucha llamarlo por su nombre, le parece tan natural y tan placentero escucharlo.
Hao se sienta en la silla que esta cerca de la ventana, no quiere descontrolarse, y era difícil, al verlo con ese aspecto tan atrayente, como aquel día en que estaba parado bajo el sol tocando el violín.
_ Te ves mejor- dijo Hao.
_ Si de hecho estaba pensando en que ya podía levantarme- dijo Lyzerg.
_ El medico dijo que no había problema en que recorrieras la casa y en que fueras a la casa de música- dijo Hao.
_ Gracias por haberme cuidado todo este tiempo- dice Lyzerg.
Si supieras lo que realmente soy, me querrías muy lejos de ti, te lo aseguro, y mas si supieras lo que me muero por hacerte.
_ ¿Quieres salir de la habitación? Podría acompañarte a la sala de música- dijo Hao.
_ Realmente me encantaría- dice Lyzerg.
Hao lo ayuda a levantarse, y los dos caminan hacia la sala de música, Lyzerg no se marea ni una sola vez.
Cuando llegan a la sala de música, el rostro de Lyzerg se ilumina y comienza a tocar el piano apenas se sienta ante el.
Hao se sienta junto a él, viéndolo tocar, y sintiéndose satisfecho, Lyzerg tiene mucho talento, y aquella música era un regalo, conseguía calmarlo, se dio cuenta de que la música para Lyzerg, era su manera de expresión. Expresión de sus sentimientos y expresión de su alma.
Lyzerg toco el piano al menos una media hora, durante la cual, Hao no dijo nada, porque estaba muy ocupado escuchando con atención cada una de las notas que Lyzerg creaba.
Fue cuando Lyzerg tropezó cayendo sobre Hao, quien estaba sentado a su lado en el banco que estaba ante el piano. Sus rostros quedaron muy cerca. Que casi se tocaban. Hao no pudo resistirlo más. Tomo a Lyzerg en sus brazos besándolo con una pasión que rayaba en la desesperación. Lyzerg se encontraba sorprendido, y muy confuso, intento que Hao se apartara, pero sus brazos eran ineludibles, Hao era tan fuerte. Lyzerg no pudo liberarse. Y poco a poco su resistencia mermaba. Estaba confuso, aquello no estaba bien, no seria bien visto, y esas sensaciones tan nuevas que lo invadían, su cuerpo estaba caliente, muy caliente.
Y tembloroso, Hao beso sus labios hasta que la resistencia fue casi nula. Bajo por su cuello, besando la suave y delicada piel que se desplegaba ante él, quitándole la estorbosa camisa. No quería hacerla jirones.
Lyzerg se estremecía entre sus brazos.
_ Ahhhhh…. Déjeme por favor… ahhhh… esto no esta bien- decía. ¿dejarte? Pero esto apenas esta comenzando- pensó Hao. Quien no hizo el mas mínimo caso a la petición de Lyzerg.
Cuando la camisa estuvo desabotonada. Hao la hizo pasar por sus brazos. Le maravillo aquella visión, el cuerpo de Lyzerg estaba muy bien formado, su piel era tan tersa y suave. Y su olor resultaba embriagante para Hao.
Aquella mirada puso nervioso a Lyzerg, era una mirada que no había visto jamás. Su rostro estaba sonrojado, Hao volvió a besarlo en los labios posesiva y salvajemente, ante la intensidad de aquel beso Lyzerg se vio disminuido. Intentaba resistirse, aquello no estaba bien, no era bien visto por la sociedad, era pecaminoso… pero se sentía tan bien. Quería que parara y a la vez no sabia que haría si Hao llegase a detenerse. Cuando Hao dejo de besarlo bajo por su cuello, luego rozo su esternón con los labios, y llego a su pecho, sin dejar de rozar toda aquella piel maravillosa, reclamo primero su tetilla derecha, acosando aquel pezón hasta que estuvo erecto, mientras Lyzerg gemía y se estremecía bajo el.
Los gemidos de Lyzerg solo conseguían excitarlo mas. Luego repitió la acción con la tetilla izquierda y vio sorprendido como aquella erección ya estaba allí, siguió bajando por su piel, besando, lamiendo y chupando. Hasta que se topo con una molesta barrera de ropa. Mientras que con un brazo sostenía a Lyzerg con el otro bajo aquellos pantalones, junto a la ropa interior, cuando lo dejo completamente desnudo, Hao no pudo evitar quedar mudo ante tanta belleza, ante el estaba la mas hermosa criatura que jamás existiera, completamente desnuda.
Lyzerg esta sonrojado y respira con jadeos entrecortados, le resulta adorable a Hao, la piel de Lyzerg es suave y tersa, Lyzerg cubre su entrepierna con las manos. Mientras lo mira.
_ ¿Para que esconder lo mas hermoso que haya visto?- le pregunta.
Verlo completamente desnudo hace que el miembro de Hao empiece a palpitar.
Hao se desviste ante la mirada de un apenado y confuso Lyzerg.
Lyzerg observa como va emergiendo el cuerpo de Hao de todas aquellas ropas. Lo marcado de aquellos pectorales, Lyzerg siente una gran curiosidad, un deseo de recorrer ese pecho con sus manos, Hao vuelve a tomarlo posesivamente, mientras lo besa recorre cada centímetro de su cuerpo, acariciando su espalda, las manos bajan hasta donde la espalda pierde su nombre y esta su trasero, el cual acaricia descaradamente para luego apretar sus glúteos, esto no le resulta desagradable a Lyzerg que siente como su cuerpo se estremece en respuesta. Cuando sus dos erecciones se rozan los dos sueltan un gemido al unisonó.
Hao tiende a Lyzerg en el suelo, y mientras lo besa y acaricia, le abre las piernas, y una de sus manos se hace con la erección de Lyzerg.
_ Ahhhhhhh…- gimió Lyzerg mientras Hao siente su dureza.
_ Vaya, estas tan duro- dijo mientras acariciaba el miembro de Lyzerg. Luego una idea paso por su mente, si su sangre sabia tan bien, como seria su semen.
Lyzerg estaba sintiendo tantas cosas nuevas, todas aquellas sensaciones eran tan intensas, no podía creer que un noble le estaba haciendo esas cosas… a él. Su cuerpo se estremecía por completo Lyzerg no era capaz de controlarlo. Fue cuando sintió aquella calidez envolviendo su miembro.
_ Aghhhhhhhhhhhhhh- gimió Lyzerg, cuando Hao envolvió su miembro con la boca. Mientras sus manos estaban en sus nalgas.- Hao…. Ahhhhhhhhhh.
Las embestidas involuntarias de Lyzerg le indican a Hao que pronto se correrá.
Hao lleva dos dedos a la boca de Lyzerg, mientras continua bombeando su miembro.
Lyzerg en medio del placer no lo pensó ni un segundo, lamio aquellos dedos, humedeciéndolos con su saliva.
Hao introduce uno de sus dedos, dando vueltas suavemente, para no lastimarlo, es tan estrecho, su miembro palpita una vez mas. Mientras Hao cierra los ojos. Ya comienza a saborear la esencia de Lyzerg.
Lyzerg se siente en el cielo, en medio del placer siente una sensación extraña y ligeramente dolorosa, un dedo intruso en su interior, haciendo círculos, en ese momento. Lyzerg comienza a sentir como su cuerpo se estremece aun mas si eso era posible. Y ese fue su primer orgasmo.
_ Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhh- Lyzerg se corre en la boca de Hao. Y este traga su semen.
Lyzerg puede escuchar como Hao traga su semen. Su cuerpo entero tiembla, esta ligeramente cansado. Siente su cuerpo entumecido, pero con una sensación de satisfacción. Hao besa el cuerpo de Lyzerg, cada mínimo pedazo de su piel. Lyzerg comienza a excitarse de nuevo.
_ Ahhhh… Hao…- murmura.
Hao introduce un segundo dedo en el interior de Lyzerg, aquello es tan doloroso, se siente invadido.
_ Ahhhh… Hao… duele- gime Lyzerg.
_ Esto te dolerá- le murmura Hao, mientras aparta unos mechones verdes de su rostro.
Hao lo hace lo mas lentamente posible, pero tiene sus necesidades, esta a punto de estallar… su erección duele como una hija de perra.
Lyzerg se siente adolorido, aquellos dedos en su interior lo lastiman. Y se aferra a Hao, confundido, tembloroso y adolorido. Cuando saca los dedos, Lyzerg siente un alivio momentáneo, Y luego el dolor se intensifica, muy lentamente, Hao lo esta penetrando.
_ Ahhhhh…. Hao…. Detente… duele…- gime Lyzerg.
Hao siente como su cuerpo comienza a temblar de manera incontrolable. Lyzerg es tan estrecho, lo apreta tanto. Su cuerpo se estremece por el placer que esta sintiendo, y no puede resistirlo. Termina de entrar de una sola vez.
_ Ahhhhhhhhhhh… Hao…. Sácalo…. Ahhhhh- Lyzerg se siente al limite, duele, como si fuera a partirse en dos, no puede acostumbrarse, el dolor es absoluto ahora, como hace unos momentos lo era el placer.
Lyzerg sentía sus ojos llenos de lagrimas, que rodaron lentamente por sus mejillas.
A pesar del dolor se aferra a Hao.
Hao permanece tranquilo, para no lastimarlo, aquella estrechez, era realmente tan estrecho que pensaba que quizá podría desgarrarlo si procedía con demasiado descontrol. Con Lyzerg debía ser muy cuidadoso.
Lyzerg siente que el dolor va disminuyendo. Hao comienza con embestidas lentas,
_ Ahhhhh… Eres tan estrecho Lyzerg- dice Hao. Su cuerpo comienza a temblar, esto que esta sintiendo no se compara con lo que sintió en el pasado.
Las embestidas comienzan a ser mas rápidas, y Lyzerg las disfruta, su miembro esta erecto de nuevo.
_ Ahhhhhh… Hao… mas a prisa- gimió Lyzerg.
_ Ahhhhhh…- Hao esta a punto de correrse.
Un par de embestidas mas, y los dos se liberaron, Lyzerg entre su vientre y el de Hao. Y Hao en el interior de Lyzerg, quien cierra los ojos. Los dos están jadeantes y sudorosos.
El agotamiento vence a Lyzerg, quien cerrando los ojos se queda dormido, en brazos de Hao.
Hao mira su rostro, algunos mechones verdes pegados a su rostro, que esta sudoroso.
Los resabios de su virginidad quedan sobre el suelo de madera, la sangre no llega a manchar la alfombra.
Hao sale lentamente de Lyzerg. Los sirvientes están a mucha distancia, y no escucharon nada, por lo que no tiene necesidad de modificar sus recuerdos, cerrando los ojos y concentrándose, hace que la sangre de Lyzerg desaparezca del suelo de madera. Pero antes prueba al menos una gota, tan dulce y suave como la ultima vez que la había probado.
Las ropas de ambos están desperdigadas por la sala de música. Con un chasquido de sus dedos, las ropas de Lyzerg regresan a su cuerpo, y el se viste después de recostarlo en el sofá.
Cuando termina de vestirse levanta a Lyzerg y hace que ambos aparezcan en su habitación, lo recuesta sobre la cama, necesita hablar con Hem, se supone que debía estar de regreso hoy.
Cierra los ojos y se va a su habitación. Intentando contactar con Hem.
_ Hem- lo llama con la mente- Hem ¿Dónde carajo estas?
_ Me alegra que al fin contactes. Una palabra, Vlad. Me encargo que consiguiera algo. Y el tío que lo esta consiguiendo se tardara dos días. ¿Cómo van las cosas? Dime que no mataste al músico.
_ No, te dije que no lastimaría a Lyzerg- le contesto Hao.
_ Eso me alegra.- dijo Hem.
_ Pero…- dijo Hao.
_ No me gusta ese pero- dijo Hem- ¿Pero que?
_ No pude resistirlo mas, lo tome- dijo Hao.
_ Maldición- dijo Hem.- Regresare pasado mañana.
_ Te espero.- dijo Hao.
_ Hay un montón de cosas que tienes que saber sobre Lyzerg, créeme Lyzerg Diethel es muy conocido por los vampiros.- dijo Hem
_ Necesito que intentes regresar lo mas rápido posible.- dijo Hao- Tengo que irme.
_ Lo intentare- dijo Hem
Hao corto la comunicación, la curiosidad estaba carcomiéndole.
Lyzerg era muy conocido por los vampiros. ¿Qué demonios quería decir Hem? Hao deseaba saber que demonios era lo que estaba pasando, quería saber mas sobre Lyzerg, y quería saber quien había intentado sacarlo de la plantación. Y como lo habían localizado, parecía que su llegada solamente le había traído problemas a Lyzerg. Y ese pensamiento no le gustaba nada.
Si su presencia le estaba causando problemas a Lyzerg, Hao no dudaría en marcharse.
Tenia la sensación de que las cosas apenas comenzaban a mostrarse tal y como eran.
Y debía esperar al regreso de Hem para saber que tan complicadas estaban las cosas.
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