En una soleada mañana, se hallaba una chica en un enorme cuarto, lleno de juegos, decoraciones en las paredes bañadas en oro puro, plasmas por doquier, un ventanal gigantesco el cual lo cubría una cortina de tela fina color azul, el suelo De mármol, forrado con una alfombra extensa de tela de alta calidad y muy cara, y en el techo no había si no más que un gigantesco emblema (el de la Familia Yamato) forrado en Rubíes, oro, plata, y zafiros… y una cama enorme, tamaño + matrimonial, con tela de seda que caía como cascada desde arriba de la cama hasta el piso, tapando a una chica que dormía cómodamente pero a la vez desordenadamente (Sora: XD) cuando los rayos del sol atravesaron las cortinas y la seda de la cama; La chica despertó con mucha pereza, desperezándose… Era una chica de cabellos castaño claro casi rubia, de hermosos ojos verdes, grandes y brillosos, piel blanca, alta, delgada, su cabello le llegaba hasta la cintura y era lacio y sedoso, con flequillo al costado, y un cuerpo muy bello, una chica realmente dotada.
Ésta se levanta de su cama, con cara de pocos amigos, se viste, se pone su traje de escuela, uno rojo, mini falda roja a cuadritos, medias rojas, largas, que le llegan hasta las rodillas, una camisa media desacomodada color blanco, con el emblema de su colegio y una corbata larga mal puesta de color bordó, y su cabello completamente suelto, y mas o menos peinado.
Después de arreglarse, sale de su cuarto, evadiendo y sin saludar a todos sus sirvientes y criados que la saludaban con respeto, mirándolos con asqueo.
Ésta chica, Yamato Haruna… una chica rica, con padres sumamente millonarios, hija única, siempre mimada, y heredera a una gigantesca fortuna… pero, por el hecho de que sus padres casi nunca están, se crio con niñeras, y reservando odio y resentimiento, ya que a pesar de tener mucho no tiene nada… Estudia en la Escuela secundaria más prestigiosa de la ciudad y los alrededores… The pritty School… y tiene 17 años.
Esa mañana, luego de putear a varios/as sirvientes/as, por cualquier cosa, para desquitarse, se dirige al gran comedor, donde sus criados le sirven su desayuno, el que ella elige en su menú, mientras que del otro lado de la gran mesa, se encontraba su padre:
-Haruna, al medio día, luego de que tu regreses de tus clases, te presentaré a una nueva sirvienta, espero y la recibas y trates bien-Dijo el padre, un señor alto, ojos celestes, y cabello rubios cortos, además de blanco.
-ajá-Dijo la chica sin darle mucha importancia, disfrutando de su desayuno, se levanto a medio comer y ya…- Papá, ya me voy, que tengas un buen día, adiós.
-Adiós, Haruna, Luego ve y habla con tu madre-Dijo el hombre despidiéndose de su única hija.
-ajá… Chau papá-Dijo la chica, corriendo hacia la salida, y dirigiéndose, a su limosina, la cual tiene el escudo de la familia como símbolo.
Ya en su Escuela, baja y todos la ven con mucho respeto, y la saludan:
-Buenos días Haruna-sama… Que Linda luce el día de hoy Haruna-sama… sabe, ¿le han dicho que el uniforme resalta el color de su cabello Haruna-sama?... ¡sus ojos lucen mas bellos y brillosos que lo normal Haruna-sama!... Todos en ese colegio la ``amaban´´, claro está no era si no por mas que su dinero, y su limosina… así que estaba rodeada de amistades falsas…
Ese día escolar, transcurría lento, Haru, no era muy buena que digamos en sus materias, siempre dormía en las clases, volaba en su mundo, y contestaba mal a sus profesores…
Por ende a esto, la castaña decidió, pararse en medio de el salón de clases, decirle a su profesor, tranquilamente que su clase le aburría, y que se marcharía; y así lo hizo, evadiendo sus profesores y preceptores, corrió lejos de su colegio, y cuando ya estaba a varias cuadras de allí, llamó a unos de las 50 limosinas que tenía en esa ciudad, llamó a la más cercana, y se largo para su mansión.
Al llegar a su mansión, se encontró con su madre, una mujer de cabellos castaños claros, al igual que su hija (Haruna), que le llegaban hasta sus hombros, de ojos verdes, y buen cuerpo, una mujer dotada y su color de piel era blanco. Ésta regaño bastante a su hija, a lo que Haru, ni bolillas que le daba… Su madre, ya hartada del comportamiento de su rebelde hija, frustrada, abandona la habitación de la misma…
El Padre de la oji-verde, entra a su cuarto, y le dice que ya es hora de recibir a su nueva sirvienta, esta con algo de pereza se levanta de su PC… Mientras ambos bajan las escaleras… ven a una chica alta, delgada, de cabellos largos que le llegan hasta la cola, sedoso, y negro azabache, de hermosos ojos azules, y una piel tan pálida que no parecía real, si no de porcelana, tal cual una muñeca… ``hermosa´´, pensó la castaña, y ante tal pensamiento se sonrojo ella misma…
Al bajar las extensas escaleras… se encuentran con la chica y el Padre de Haru, le dice:
-Hija, ésta es nuestra nueva sirvienta, Su nombre es Nakamura Mitsuki, tiene 19 años, ella ya ha terminado la preparatoria, y por diversos problemas ella se quedara a vivir aquí… espero y logren entenderse chicas… -Dijo el Gringo hombre, dedicándole a ambas una sonrisa.
-Sí, eso es algo que yo también, espero amo-Dijo la chica haciendo una reverencia al hombre-Es un gran honor y un gusto el conocerla Señorita Haruna-Sama-Dijo la chica haciendo una reverencia a la chica y luego acercándose un poco para darle la mano, a lo que ésta solo la mira de arriba hacia abajo, frunciendo el ceño, y diciendo un - ¡jum!- mirando para otro lado.
-Lo lamento, Mitsuki, mi hija es una personita un tanto difícil de tratar, bastante gruñona si me lo permiten decir-Dijo el hombre agachado la cabeza y mirando hacia el suelo.
-¡¡¡¡¡¡PAPÁ!!!!!!-Dijo la chica sumamente enojada y roja.
-Tranquilo Amo, yo sabré como llevármela a mi joven ama-Dijo la chica poniendo una sonrisa un tanto pícara, que ruborizo a la castaña… Luego de eso, Haru, dio media vuelta y se largo de allí maldiciendo a medio mundo.
Luego de lo ocurrido, comenzaron a transcurrir los días, y la azabache y la castaña no hacían si no más que pelearse cada día más… Cuando Haru le pedía que haga su tarea, Mitsu le respondía ``El día de mañana, Ama, usted no será si no mas que una pobre bruta, si no aprende a hacer SUS tareas usted misma´´… Cuando la castaña le pedía que lustre sus zapatos, la azabache le respondía ``Haru-sama, usted no es ninguna mujer manca, usted puede hacer eso por si misma´´… Cuando haruna le pedía que vaya a hacerle algunos mandados, Mitsuki le respondía ``Haru-sama, usted no es ninguna discapacitada, y sus piernas no están chuecas ni quebradas, así que eso es algo que usted puede hacerlo por sí misma´´… y así sucesivamente… Haruna pidió a su padre y madre que echaran a Mitsuki, por el simple hecho de que ella la sacaba de quicio, pero estos ni caso que le hacían, ya que a ellos, sí les caía bien Mitsuki.
Un día… Haruna, estaba tomando un baño y no encontraba el jabón, así que llamó a gritos a Mitsuki:
-Ya voy, ya voy-Dijo entrando al baño, de donde provenían los gritos de su joven ama-¿Qué sucede Haru-sama?-Dijo con algo de pereza, sonrojándose al ver a la castaña, en la tina, desnuda…
-¿pe… ro… que… de… moni… os…?-Dijo tartamudeando roja la azabache enfrente de la tina, donde se hallaba la oji-verde.
-No mal entiendas, es que no…-No pudo terminar, ya que la oji-azul, trató de escapar, a lo que la otra, la agarro fuerte del brazo diciéndole:
-¡Ni que lo pienses!, o me ayudas o me ayudas a encontrar el jabón… ¡Boba!, amabas somos mujeres ¿qué tanta vergüenza?, ¿qué tengo yo que no tengas tu?-cuestionaba Haru, mientras forcejeaba con el brazo de la otra…
-¡P…e…r…o!.... ¡No quiero, no sea tonta, ya suéltame!-Decía la chica, al momento que resbalo con el tan buscado jabón, y calló en la tina con la castaña… Ambas quedaron… juntas… pegadas… la azabache encima de la oji-verde, con una de sus rodillas entre la entrepierna de la otra, rozándola prácticamente, y la otra sumergida en el agua caliente de aquella lujosa tina, y ambos brazos, uno a cada lado del cuello de la castaña…
-Ah… yo… yo…-Tartamudeaba la chica mientras movía… las rodillas para poder levantarse, sin darse cuenta, solo provoco un rose mas íntimo entre su rodilla y la entrepierna de su ama, a lo que la castaña dio un pequeño gemido de placer…-mm… aah…-Fue lo que llego a pronunciar la castaña roja a más no poder-Ante éste gemido, la azabache, ya hipnotizada, se acerco instintivamente a la oji-verde, con afán de ver… o ¿tocar quizás?... eso labios tan bien definidos y rojos que la embobaban… cuando estaba a punto de hacerlo… cuando estaba a punto de besarla… la hizo reaccionar:
-M… i… t… s… …u… k… i… para-Fue lo que dijo débilmente la castaña ya ha centímetro de tocar los labios de la azabache…
Ésta reaccionó de inmediato, y se alejo Rápidamente de su joven ama -Lo… lo siento muchísimo… Haruna-Sama…-Dijo la chica muy sonrojada y avergonzada…
-No, Lo siento yo…-Dijo Haru, antes de que Mitsu, se levantara como pudo, y chorreando agua, aun así, se paró, salió de la tina, y se marcho de aquel baño tan lujoso…
*******En un pasillo, ya Sola la azabache*******
-Mierda… ¿Qué coños me paso?... ¿Por Qué hice algo como eso?... Soy una gran idiota… ella es mi ama… y mucho más… ¡¡¡ES UNA MUJER!!!.... yo no soy… no soy lesbiana… ¿o si?... aish… esa castaña… me está cambiando… esa… hermosa castaña… ¡MIERDA!... mejor ya me dejo de babosadas y me voy a secar y poner ropa nueva… ups… mi… entrepierna… esta… ¡KUSO! (Sora: mierda en japonés XD) –Así se fue a cambiar de ropa, y calmar su excitación la azabache.
*************Mientras tanto en el baño***********
-Diablos… ¿Qué me sucede?... es mi SIRVIENTA… está en la clase baja… no tiene mucho dinero ni nada… vivimos peleando… e saca de quicio… y por sobre todo… es una… ¡¡¡¡¡MUJER!!!!... por Dios, esa maldita peli-negra me está volviendo una rarita… ¡¡¡YO NO SOY LESBIANA!!!.... ¡¡¡¡No, No y NO!!!!…-Decía la chica mientras… daba fuertes golpes contra en agua caliente de la tina salpicando agua por todos lados… mirando hacia el techo, bajando su mano hacia su entrepierna… estaba completamente húmeda… por esos simples actos… ya se había calentado… maldiciendo a todo el mundo… y puteando masajeo su vagina para poder quitarse esa calentura que la estaba atormentando…
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**Luego de ese incidente… los primeros días, se miraban con pena, y trataban de casi ni cruzarse ni hablarse, las dominaba la vergüenza… Luego ya de una o dos semanas… ``olvidaron´´ eso que sucedió… y ya se hablaban… más bien… se peleaban… tal cual niñas pequeñas… pero Mitsuki, trataba de no rozarla, ni tocarla… ni un mínimo contacto físico, Por esto… La oji-verde, no demostraba tristeza Por su orgullo de niña rica… pero en el fondo, le dolía, ya que a la castaña, en verdad, le gustaba que ella la rozara o tocara…**
…Hasta que Un día, Mitsuki, no quiso hacer una encomienda que Haruna le había mandado para hacer, Por ende a esto, Haru, completamente enojada le Grita …:
-¡¡¡¡¡SI NO ME SERÁS ÚTIL, PUES ENTONCES LÁRGATE, YO NO NCESITO A UNA BUENA PARA NADA COMO TÚ!!!!-dijo la castaña completamente roja, y enfadadísima con la azabache… A lo que ésta, con toda la tranquilidad del mundo, y sin alzar el tono de voz le respondió, secamente:
-La única inútil, y buena para nada aquí es usted Haruna-sama, No puede lustrar por sí misma sus zapatos, ni lavar sus ropas, ni preparare un desayuno, apenas si sabe vestirse por sí misma, así que no juzgue a alguien que hace mucho más que usted, habla como si fuera una experta en la vida…Aun que en realidad es, si no más que una inexperta de lo que es el sacrificio, una niña rica y orgullosa que no sabe ni tiene idea de que es ser humilde… Es más cualquiera de sus ``s-i-r-v-i-e-n-t-e-s´´, vale y es mil veces mas útil que usted… H…a…r…u…n…a…s…a…m…a –Esto último lo dijo, tan fríamente que daba terror.
La castaña, al oír todo esto… eso que ni sus padres le habían dicho jamás… que ni siquiera su ``falsas amistades´´ habían tenido el valor para comentárselo… la derrumbo… por que TODO lo que esa chica… esa chica que había entrado tan fácil en su vida le decía… era nada más que su cruda realidad…
-¿En… ver-dad… No valgo… n-a… da?-Preguntó a penas, en un hilo de voz la oji-verde, con ya sus ojos un tanto transparentes , y con un nudo horrible en su garganta.
-Comportándose de la forma que lo hace actualmente… NO… no vale nada Haruna-sama.-Lo dijo tranquila pero firmemente mirando fijamente a los orbes verdes de la otra joven.
Ante ésta afirmación, Haru, cae de rodillas al piso, abrazándose así misma, en forma de auto-protección, rompiendo el llanto, tal cual niña pequeña de 5 años, cerrando los ojos, y avergonzada de todo lo que ella misma era.
Ante esto, Mitsuki, se sorprende ya que jamás había visto llorar a su joven ama… la mira y analiza un momento… allí botada en el frío piso, sin parar ni un segundo de llorar… dejando derramar lágrimas… que caían como cascadas por sus blancas mejillas y se rompían… aquellos bellos cristales en aquel suelo de mármol…
Luego de analizarla, da un suspiro… da pasos hacia la castaña… se agacha hasta quedar a su altura… le retira las manos… y ve aquel hermoso rostro opacado por esas horribles lágrimas… se acerca un poco a aquel rostro… apoya, su mano derecha en la blanca mejilla de la oji-verde, y le sonríe dulcemente al momento que le dice casi en un susurro:
-Niña tonta, ya veo que contigo no puedo ser directa ni fría… ¿verdad?...- Termina la frase y posteriormente se acerca peligrosamente al rostro de la Chica, cuyo rostro estaba bañado en lágrimas…
………………….Continuará…………………….