Roy queda maravillado al ver el cuerpo del joven alquimista que solo había quedado en bóxers, Ed se sonroja a más no poder mientras es llevado al sofá por el Coronel, que lo tira de espaldas y se posiciona sobre él.
-no…no es justo Coronel-dice Ed enojado-¡usted está completamente vestido!
-te ves tan tierno sonrojado-dice Roy observando al pelirrubio-¡me encanta!
-¡Hey! ¡No me igno…ahh!!-Ed es callado debido a los besos y caricias de Roy.
Roy empezó a saborear el cuello de Ed dejando pequeñas marcas rojas en su camino y empezó a bajar dejándole marcas por todo el pecho.
-aahh…-Ed se sentía extasiado al sentir las caricias y cuidados de Roy-*siento el miedo en mi cuerpo…pero esto es diferente, es agradable….realmente te amo tonto coronel*
-eres hermoso Ed-Roy estaba maravillado con la imagen de SU Ed así de débil.
-ba..baka…-Ed rompió los limites de cuánto podía estar sonrojada una persona.
Roy se izo de nuevo con los labios de Ed en un beso apasionado.
-te voy a hacer mío Edward, quiero que te quede claro que eres mío y de nadie más-dice Roy fijando su mirada en esos profundos ojos dorados.
-Co...Coronel-Ed baja la mirada entristecido.
El cambio de estado de ánimo de Ed no pasa desapercibido por su seme, lo que provoca que se empiece a preocupar.
-¿Ed?-pregunta algo preocupado.
-…..
-dime, ¿Qué pasa?-Roy se empieza a preocupar más y Ed baja más la vista-¡¿Ed?!
-…..
-¡vamos por favor! ¿Dije algo malo? ¿Hice algo mal?-se empieza a desesperar-¡Por favor Ed! ¡Di algo!
-y…yo…
-¿sí?-dice atento para saber que le atormenta al rubio.
-yo… ¡lo siento mucho Coronel!-eso fue todo, Ed rompe en lágrimas, cosa que confunde y agobia mucho a Roy.
-¿Qué sientes? Si no has hecho nada malo…
-no…no…¡no tiene idea! Es horrible…yo…quería que usted fuera el primero!!-logra soltar Ed aun ahogado en lagrimas.
-que….-Roy tarda en procesar la información-*¿el primero?...el primero de que…no será qué?...pero no, no es posible, ¡no! No entiendo nada!!*
Ed al ver la cara de desconcierto de Roy, decide tomar el valor para explicárselo.
-es que…en realidad, yo…no soy virgen….
Roy abre los ojos a más no poder, lo sabía, el lo sabía, pero escucharlo de sus labios…de su voz, confirma lo irremediable, Ed ya fue probado.
El pelinegro baja la mirada tratando de ocultar su mezcla de emociones, tratando de esconder su rabia infinita, su tristeza, y sobre todo, sus intenciones asesinas.
-Quien…-es lo que logra pronunciar.
-…..-Ed soltó un escalofrió, nunca había oído al coronel así, esa voz cargaba tanta ira y frialdad que no lo reconocía.
-¿¡Quien?!-esta vez Roy levanto la vista y a Ed se le cayó el alma al suelo, su mirada era escalofriante, no…más que eso…los ojos del coronel penetraban tan duramente en los del rubio que incluso les llegaba a doler.
-St…Stevius y su amigo…-dice Ed cerrando los ojos fuertemente tratando de no recordar ese momento.
Roy se queda sin habla paralizado frente al chico, observando como Ed no dejaba de temblar, se le hacía insoportable ver a Ed en ese estado.
-Ed….-Roy no sabía que decir-*¡¡Voy a hacer pagar a esos malditos!! ¿¡COMO SE LES OCURRE TOCAR A MI PRECIADO ED!?...¿¡Como se les ocurre hacerlo sufrir de esa forma!?*
Ed seguía temblando no pudiendo apartar esos horribles recuerdos de su cabeza, Roy no dice mas, su semblante se relaja un poco y abraza a Ed con todo el cariño que es capaz de reunir.
-ya….tranquilo-trata de calmarlo-lo lamento Ed…no debí permitir que eso pasara….
Ed no aguanta más y sus lágrimas empiezan a rodar por sus mejillas, y Roy lo abraza más fuerte.
-lo…lo que menos necesito…es que…se eche la culpa -logra gesticular Ed entre sollozos.
-está bien Ed…-accede el Coronel tratando de calmar a su pequeño-*¡Stevius! ¡Esto te va a doler! ¡Y MUCHO!*-piensa Roy con toda su rabia acumulada, tratando de no soltarla sobre Ed, el no merece sentir el peso de su mirada, menos ahora.