Estaba en la universidad de Hokkaido donde sabía que nadie le encontraría.
Su cabello había sido entintado de negro y ahora estudiaría en una pequeña universidad de ahí bajo una identidad falsa que le había conseguido su manager.
Le daba pena abandonar su verdadera identidad pero sabía que un día pasaría.
No se podía tapar el sol con un dedo.
Entro a estudiar arquitectura en esa pequeña universidad sabiendo que el pasado no le seguiría hacia allí.
Había estado esperando el receso de mediodía para estar solo en el parque de la universidad.
Estaba a la sombra de un arbol cuando se volteo mirando todo a su alrededor se quedo paralizado.
Seto Kaiba y Mokuba estaban parados a 100 metros de él pero no le habían visto así que de espaldas al arbol se puso y escucho atento la conversación de aquellos dos deseando que se fueran pronto.
¿Pero cómo había pasado tal garrafal error?
Seto Kaiba había arreglado todo para que su hermano estudiara en Inglaterra pero debido a lo ocurrido con el temía alejar a Moki de su área de influencia y decidió que una universidad pequeña para la seguridad de este era lo mejor.
Lo fue a dejar con sus custodios.Sabía que tal vez no fueran por el pero en cualquier caso…
Estaban por irse.
Pensó un poco mas aliviado el ex rubio cuando una chica aparecio gritando su nuevo nombre.
--Saitou por favor tienes que venir al salón para ayudarme con esa estructura en el plano—le dijo su nueva compañera antes de jalarlo del brazo y exponerlo a la gente de la que intentaba permanecer oculto.
Kaiba lo ovio y no le llamo especialmente la atención hasta que vio en su rostro el espanto y luego sus ojos.
Algo en su interior lo identifico de inmediato y mientras el otro seguia su camino se juro buscar la verdad.
Despidio a Mokuba y como todo buen cazador esperó agazapado.
Joseph salia de la biblioteca media hora después de terminar sus clases.
Estaba inseguro.Tal vez Seto le reconociera, tal vez no.
De pronto lo vio al doblar en un pasillo.
--Tengo que hablarte.Y no creo que quieras que sea aquí—dijo el castaño.
Juntos fueron al dormitorio del pelinegro que lo miro expectante.
--Los que pusieron precio a mi cabeza siguen intentandolo—dijo el ojos azules.
--¿Qué quieres de mi Kaiba?¿Que los mate?—pregunto el rey.
Seto denegó con la cabeza.—Cuando los descubra los llevaré a la justicia.Desearán nunca haberse metido en mi camino—dijo.
--¿Entonces?—pregunto molesto el otro.
--Quiero que te encargues de proteger a Mokuba.Le he puesto protección pero no estoy seguro de que funcione—respondió el CEO tomando por sorpresa a Wheeler.
--¿A tu hermano?—preguntó atónito.
--Esto no es cosa de él.No quiero que salga lastimado y me parece que usar un asesino para parar a otros es una opción aceptable—respondió el ojos azules.
--¿Y a ti?—pregunto aun sorprendido el ojos mieles.
El otro sonrió con petulancia.
--Yo cuidaré de mi mismo—exclamó.
--¿Y si me niego?—preguntó el asesino
--La policía te encontrará muy rápido, créeme—respondió Seto.
--Sería mas facil para mi librarme de ti—dijo el ex rubio frunciendo el ceño.
--Y menos lucrativo.Te ofrezco 6 millones de dolares americanos para que cuides de mi hermano.No tienes que esforzarte y no habrá peligro de que te descubran.Nisiquiera tendrás contacto con él—dijo el CEO con voz firme.
--¿Por qué a mi?—pregunto el otro.
--digamos que confío en tu pericia—respondió Seto.—Imagino que aceptas.Mañana te enviare el número de cuenta.Cuando todo termine tendrás el dinero ahí—añadió.
--¿Y si te matan?—preguntó Wheeler.
La mirada de Kaiba le taladró.
--Dije cuando todo termine—exclamo y se fue cerrando la puerta.