Un nuevo día había llegado al Hospital Siquiátrico, donde cierto rubio se encontraba en una de sus tantas terapias con su siquiatra, el Doctor Sabaku no Gaara, quien además de ser su doctor era su mejor amigo y confidente desde que había llegado allí.
En ese momento se encontraba el rubio sentado cómodamente en uno de los sillones de la oficina del pelirrojo, mientras este estaba serio detrás de su escritorio escuchado todo lo que le decía el rubio.
No solo se hablaban en plano profesional de Doctor-Paciente, si no siempre que el rubio necesitaba algo el pelirrojo estaba allí para atenderlo y darle su apoyo, muchas personas en el centro de tratamiento decían que la relación de ellos iban más allá de la profesional y no se equivocaban ya que al pasar el tiempo el ojiverde comenzó a sentir algo más que una simple amistad y deber profesional hacia el rubio llevándolo casi hacia la obsesión.
-No crees que debes olvidar a tu ‘’esposo’’- dijo haciendo énfasis a la palabra esposo mientras miraba al rubio mas serio de lo normal.
-¿Por qué dices eso?- pregunto el rubio al ver por dónde iba la conversación de su doctor que no le gustaba para nada.
-has pasado años aquí y él nunca ha venido a verte-
-¡eso es porque no sabe que estoy aquí!- grito el rubio fuera de si
-tranquilo Naruto… ¿Estás seguro que es así?- pregunto creándole duda al rubio y poniéndolo nervioso.
-estoy seguro…Sasuke no sabe que estoy aquí porque si lo supiera hubiera venido por mi desde hace tiempo…de eso estoy seguro- dijo firme sorprendiendo al pelirrojo.
-Yo solo decía Naruto para que no te creas faltas esperanzas-
-¡No!-grito el rubio-¡eso no es verdad! Sasuke me ama y estoy seguro de eso
Mientras tanto afuera del manicomio se encontraba una persona que había visto al rubio la última vez que visito el lugar, esta persona se había pasado los últimos días pensando si realmente había visto al rubio o solo había sido una alucinación, aunque esta última no podía ser verdad porque no había pensado en el rubio tanto como lo habían hecho las personas que estaba a su alrededor.
Entro al lugar con la excusa de que se le había olvidado hablar algo con el director del plantel, algo completamente falso ya que sabía que si decía que buscaba a uno de los residentes de allí no lo dejarían estar y menos si sus sospechas eran verdad.
Así que no le quedo de otra que entrar sigilosamente y andar por los pasillos con cuidado sin que muchas personas lo notaran. Aprovecho que era hora de almuerzo de los empleados para colarse en la estación de enfermerías y chequear todos los expedientes médicos de todos los pacientes que había en el lugar.
Estuvo buscando aproximadamente quince minutos y no encontraba nada, sus esperanzas estaban decayendo a lo mejor después de todo si había sido una alucinación o alguien parecido aunque todavía en ninguno de los expedientes había visto a alguien rubio y estos llevaban la foto de cada paciente en la esquina superior del portafolio.
Sentía como alguien caminaba hacia donde se encontraba y no le quedo de otra que agilizar sus movimientos y buscar más rápido, cuando se estaba dando por vencido y estaba por irse uno de los expedientes que estaba escondido en lo último del escritorio, cayó al piso haciendo que este se fijara en él.
Lo cogió en sus manos y lo abrió inmediatamente sorprendiéndose con el contenido que había adentro, cuando miro la foto no sabía si salir de ahí corriendo o que hacer.
//Imposible// pensó
-Naruto-murmuro mientras veía la foto del rubio en la esquina superior.
Cada vez los pasos se escuchaban más cerca y este lo único que pudo hacer fue mirar el número de su habitación para salir de allí sin ser visto por nadie. Camino por todos los pasillos buscando el número de la habitación, cuando llego sin más entro encontrando está completamente vacía.
-Lo más probable es que este almorzando como todos los demas- dijo para sentir pasos cerca de donde estaba- es que no puedo estar tranquilo- murmuro mientras encontraba un lugar para esconderse.-Mierda- dijo antes de esconderse en el único lugar disponible que era debajo de la cama.
No paso ni un minuto cuando un rubio y un pelirrojo hicieron aparición al cuarto del primero
-¿Seguro estarás bien?- pregunto Gaara al ver al rubio en el estado en que se encontraba, todo nervioso y no era para menos luego de la conversación de minutos atrás.
-Si- solo pudo decir el rubio sentándose en su cama haciendo presión en esta y molestando a la persona que estaba debajo de ella.
-Huele a perfume de Hombre- dijo el pelirrojo asustando a la persona que estaba escondida mientras este olía sus ropa dándose cuenta que era de el de donde provenía el olor
-Debió ser de uno de los enfermeros- dijo el rubio con voz monótona mirando cierto punto de la habitación.
-estoy seguro que es una colonia de las caras- murmuro el pelirrojo-¿Seguro vas a estar bien?- dijo con un tono ¿Seductor? Que el rubio no se dio cuenta pero quien estaba debajo de la cama si
//Acaso está coqueteándole// pensó este mientras se enojaba
-¿Seguro?-volvió a preguntar mientras abría la puerta para salir por ella ya que esta vez solo recibió un asentimiento de parte del rubio.
Una vez el pelirrojo salió la persona que estaba escondida espero varios minutos para asegurarse de que nadie volviera a la habitación, cuando estuvo seguro salió casi arrastrándose de ella, llenándose todo de polvo y sucio el traje con el que iba pero eso era lo de menos en esos momentos.
El rubio que estaba en su cama sentado pensando en todo lo que había hablado con su doctor sintió como alguien salía de debajo de su cama, estuvo a punto de gritar cuando esta le tapó la boca para que no gritara.
-No grites- dijo por lo bajo mientras el rubio abría los ojos hasta mas no poder al darse cuenta de quien estaba al frente de él.
Luego de tanto tiempo y de tantas veces pedir un milagro, ahí lo tenía, frente a él estaba ese milagro que tantas veces pidió, esa personas que lo sacaría de allí, y quien más que su querido cuñado
-Itachi- dijo cuándo el moreno soltó su mano de la boca del rubio-¿Eres tu? O ¿Es una alucinación?- pregunto con los ojos a punto de lagrimas
-Hola Naruto- dijo el moreno emocionado de tener a su cuñado allí afrente suyo, ese por el cual su pequeño hermano ha sufrido tanto. Le toco la cara y le revolcó los ojos para que se diera cuenta que no era una alucinación.
El rubio solo pudo tirarse a los brazos del moreno mientras lloraba, este solo pudo abrazarlo y dejar que se desahogara, no sabía que hacia el rubio allí pero lo averiguaría.
-Naruto ¿Estas bien?- pregunto este al ver como este se había calmado un poco
-¿Qué haces aquí Itachi?- dijo ya más calmado y con esperanzas que el hermano mayor de su esposo estuviera allí para ayudarlo.
-Te vi la última vez que vine con Sasuke…pero no sabía si había sido una alucinación o era verdad, así que vine para salir de esa duda y ya vi que no se trataba de ninguna alucinación si no una gran verdad- dijo mirando al rubio- pero no te preocupes estoy aquí para sacarte- dijo con una sonrisa