Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Cada error se paga en esta vida ( Adaptación) por yaoiana

[Reviews - 27]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola a tod@s, disculpen la tardanza jijij he tenido dificultades de tiempo pero aqui esta¡¡¡.

Muchas gracias por leer y a:

- Black

- Chidori Agatsuma

por comentar¡¡

 

**************  oooooooooo ***********************

 

 

Se encontraba ansioso, en pocas horas Inuyasha y su sobrina llegarían a casa.  Toda la mañana se paso arreglando la casa en compañía de su esposo… sabía que de igual modo Byakuya se encontraba nervioso, pero quien no, al saber con lo que llegaría su hermano.

 

El atardecer había procedido ya y con este sus ansias incrementaban; escucho el sonido del timbre y antes de razonar ya se encontraba abriendo la puerta de su casa.

 

 

-       Inu… herma… Naraku?... que haces aquí?   *sorprendido*

 

-       Puedo pasar?

 

-       Ehh… si claro, toma asiento

 

-       Gracias

 

Miroku vio como su cuñado se sentaba en el sillón.  Subió entre aturdido y molesto hasta la habitación que compartía con su esposo y ahí lo vio recostado con semblante sereno.

 

 

-       Porque esta el aquí? *pregunto molesto*

 

-       Porque Naraku es mi hermano y esta es mi casa

 

-       Sabes muy bien que no me refiero a eso… el es bienvenido todos los días excepto este.

 

-       Miroku… se que te prometí no decirle lo de Inuyasha, pero es lo mejor

 

-       Lo mejor?... crees que si se encuentran será lo mejor para ellos?

 

-       Al igual que tu velas por la felicidad de tu hermano, yo lo hago por el mío.  Esto es lo mejor para nuestra sobrina y hermanos.  Quiero que Naraku se haga a la idea que ya perdió a Inuyasha… que el tiene una vida nueva y que por eso mismo el debe buscar su felicidad… Entiéndeme cariño.

 

-       Te entiendo amor… es solo que no quiero que Izayoi sufra las consecuencias

 

-       Tenemos que confiar en la madurez que han adquirido con los años y esperar que hagan lo mejor

 

-       Tienes razón

 

 

Bajaron hasta donde estaba Naraku y con su ayuda terminaron de decorar la casa para el cumpleaños de Izayoi.  Todos se encontraban ansiosos, más que todo el mayor de los azabaches que desvivía por ver a su hija y por ver como se encontraba su ex esposo.  Contó exactamente cuatro horas… no dejaba de mirar el reloj. ¿Acaso le habría pasado algo?  ¿Se arrepintió de venir?...  Un sinfín de preguntas surcaban por su mente y solo el timbre de la puerta  lo saco de sus vacilaciones.

 

 

-       Inuyasha… por dios me tenias tan preocupado * decía Miroku para abrazarlo*

 

-       Lo siento, pero antes de pasar aquí estuvimos donde los hermanos de Sessho… no querían dejarnos ir

 

-       Y donde esta Izayoi?

 

-       Viene atrás con Sesshoumaru

 

 

El peli-plata ingreso a la casa bajo la atenta mirada ónice de Naraku.  Su cuerpo se había moldeado maravillosamente con los años, sus hebras plata habían crecido significativamente, tanto, que lo tenia trenzado cayéndole por uno de sus hombros; sus ojos parecían brillar mas… los años le habían sentado gloriosamente.  Al entrar    saludo a Byakuya fervorosamente y al ver a Naraku tan solo sonrió… demostrándole así, que no le guardaba ningún rencor. Seguido de éste, entro Izayoi, quien saludo efusivamente a sus adorados tíos y por ultimo entro Sesshoumaru con un pequeño niño en brazos.

 

 

-       Miro… Byaku, ya conocen a mi esposo Sesshoumaru, pero no conocían a nuestro pequeño tesorito… Inutaisho.

 

Sus ojos no podían denotar más sorpresa al ver al pequeño peliplata de unos aproximados 16 meses, tez blanca, ojos turquesa y marcas extrañas en sus mejillas.  Sintió su pecho estrujarse fuertemente e hizo de todo su autocontrol para no llorar; pero toda su tristeza se esfumo y se convirtió en molestia cuando escucho aquel hombre hablar.

 

-       Buenas noches, espero no incomodar

 

-       Claro que no es molestia, ponte cómodo  Sesshoumaru

 

-       Muchas gracias Miroku

 

-       Mi sobrino es hermoso, es una perfecta mezcla entre los dos… quien le puso el nombre?

 

-       Inu me mostro una foto de su padre, y al ver que el niño era tan parecido, entre los dos decidimos ponerle Inutaisho.

 

-       Si que salieron parecidos mis sobrinos a los abuelos… cierto Inu?

 

-       Casi idénticos diría yo *sonriendo*

 

-       Bueno,  quiero que todos pasemos al comedor, en especial tu Izayoi.

 

-       Si tío Miroku

 

 

 

 

Todos siguieron hasta el comedor, el cual estaba decorado con globos, serpentinas, un gran letrero de “FELIZ CUMPLEAÑOS IZAYOI” y un enorme pastel.   El rostro de la niña se ilumino, saltando y abrazando con amor a sus tíos.

Izayoi al entrar pensaba saludar a su padre, pero el miedo la invadió al ver como su fría mirada se posaba en su papi Sesshoumaru… eso la cohibía de sobremanera haciendo que no le dirigiera palabra alguna a su padre.

 

Inuyasha lo había notado también, se sentía un tanto incomodo y sabia que su esposo igual, pero sabían de antemano que esta escena pasaría tarde o temprano.  Ambos se tomaron de la mano, entrelazando sus dedos y brindándose así la fuerza y paciencia necesaria para esta situación.

 

Byakuya y Miroku notaron el tenso ambiente;  Naraku no dejaba de fruncir el seño y mirar desafiantemente al peli gris y este sin miedo, de igual forma lo retaba con la mirada.  Ambos anfitriones decidieron intervenir, tomando riendas en el asunto.

 

-       Naraku, Inuyasha… podrían ayudarme con los platos?

 

Los mencionados se miraron fugazmente y luego se pararon de los sillones.  Sesshoumaru tan solo miro preocupadamente a su esposo y este le sonrió cálidamente, intentando tranquilizarlo.  

Byakuya se sentó al lado de Sesshoumaru, no siendo descortés  y dejándolo solo en la estadía.

 

 

-       Es hermoso tu hijo  *tomándole una de las manitos*

 

-       Muchas gracias

 

-       Tuve el placer de conocer a Inutaisho antes de que pasara el accidente y créeme que tu hijo será su viva imagen.

 

-       Se que Inuyasha amaba a sus padres, al ponerle los nombres a nuestros hijos lo confirma… pero aun noto nostalgia cuando los menciona.

 

-       Creo que Miroku igual los extraña

 

 

Mientras Miroku y su sobrina destapaban los regalos, Inuyasha ponía los platos en la gran mesa mientras que Naraku los bajaba de la alacena.  En ningún momento se habían mencionado palabra y es que el peli-plata sentía como esa penetrante y atenta mirada ónice lo desnudaba… lo devoraba.  Ahora las cosas eran tan distintas… no le repudiaban esas miradas, pero tampoco le agradaban.

 

 

-       Podrías dejar de mirarme así?... no soy ningún bicho raro.

 

-       No puedo mirarte de otra forma

 

-       Pues es mejor que vayas ablandando tu semblante, mi hija tiene miedo de saludarte.

 

-       Así que también le tienes reemplazo a Izayoi.  Ese niño no es nada comparado a nuestra hija.

 

-       Cállate¡¡¡  No te permito que hables así de mis hijos; además aquí nadie esta reemplazando a nadie… Izayoi es Izayoi e Inutaisho es Inutaisho… ambos son únicos y ambos los adoro con mi vida… pero que has de saber tu si ni siquiera cumples con tu obligación.  * hablando molesto*

 

-       Entonces los trajiste para restregarme en cara lo que yo no he sido?

 

-       Sabes Naraku, yo no tengo porque darte explicaciones de lo que hago o dejo de hacer… eso no te concierne, además, es el cumpleaños de mi hija y no quiero arruinarlo… así que te pido encarecidamente, que tampoco lo hagas.

 

-       Inuyasha  *sujetándolo del brazo*

 

-       Suéltame Naraku¡¡

 

*************************  ºººººººººººººººººººº ************************************

 

Sus ojos miel  estaban posados en la dirección donde estaba su esposo; a pesar de conocer a Miroku y Byakuya, se sentía incomodo de estar ahí… y todo por aquel sujeto.  Inuyasha le había prometido que su ex esposo no estaría y por eso había aceptado;  no es que tuviera miedo de este… solo que él se conocía bastante bien y sabia como reaccionaria si ese hombre le hacia daño a su peli-plata.

 

 

-       Estas preocupado por él?

 

-       Si, no le puedo negar que la situación es realmente incomoda

 

-       Inuyasha no sabia que mi hermano estaría aquí… yo lo invite

 

-       Ya veo

 

-       No estoy de parte de nadie… es Inuyasha quien elige al final, yo solo ayude a que esta situación quede clara de una vez.

 

-       Aunque el no elija a tu hermano?

 

-       Como te dije, es Inuyasha quien elije y yo respetare su elección.

 

 

Inuyasha se soltó bruscamente del agarre encarando a su ex esposo; sabía a que llevaría todo esto y seria mejor resolverlo y dejar claras las cosas… por su esposo, por sus hijos y por él mismo.

 

-       Naraku, sabia que nuestro encuentro tendría que pasar tarde o temprano pero  creo que es mejor aclarar ya las cosas.  Yo no te amo y quiero que lo entiendas… entre los dos no hay nada así que deja esa rivalidad… puedo ser tu amigo si así lo quieres.

 

-       Yo aun te amo… nunca he dejado de hacerlo.

 

-       Entonces ese amor refléjalo en tu hija… ámala Naraku pero a mi no me lo profeses… no sigas gastando tu vida en una causa ya perdida.

 

-       Te recuperare Inuyasha… y sabes que un Onigumo siempre logra su cometido

 

-       Naraku, tan solo eres un humano con limitaciones…recuérdalo…  hay cosas que jamás se podrán hacer y recuperarme es una de ellas.  

 

-       No sabes el vacio que se siente al despertar solo

 

-       Lo entiendo perfectamente, porque esa misma sensación es la que yo sentía cuando poco a poco me fuiste abandonando.

 

-       Inuyasha… vuelve conmigo… se que aunque sea muy en el fondo sigues sintiendo algo por mí; entrégate a mi y te demostrare cuanto te amo…

 

Notas finales:

Espero sus mensajes... hasta la proxima


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).