Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

"El camino de lágrimas" por pri_sasukelove20

[Reviews - 1165]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

 

Hola lectores. Luego de años, al fin actualizo. Antes que nada, escribí el capítulo escuchando música triste, de esa forma fui desenvolviendo la historia. Les recomiendo leerlo con una tonada tranqui.

Otra cosa, sé que se sorprenderan por el tiempo transcurrido de golpe. No se alarmen no fue hecho porque estuviera apurada sino que así quería hacerlo, a medida que suba más capítulos se explicará más detalladamente a cada uno y hasta Deidara y Taiga que quedaron en la nada. Todo se explicara en las siguientes actualizaciones.

(Personajes de Masashi)

*Espero les guste.

*Y leanlo con música de drama XD

 

—No sé que hacer, no sé... no sé.

—Naruto, tienes que ser fuerte. Ser fuerte por ambos.

—No creo poder resistirlo más tiempo—lloró—Quiero morir... quiero... morir...

—¡¿Que estás...?!

Han pasado tantas cosas, problemas que llegan a asfixiarnos al punto que dejamos la lucha luego de tanto esfuerzo inútil. Entonces te pones de pie y observas afuera de una ventana que todo sigue igual excepto para ti. La vida de infierno que uno vivía para si mismo continuaba día a día.

Para Naruto estaba finalizando en medio de la locura. Cayendo en un pozo sin fondo.

Sasuke lleva dos años durmiendo. Parece un hermoso ángel que añora abrir sus ojos y reencontrarse con sus seres queridos. En dos años mucho cambia. La relación de padre e hijo esta al borde de quebrarse. Ryunosuke y Naruto se han distanciado enormemente, poco a poco la casa perdió su calidez. La calidez de una familia. Sin Sasuke, el blondo había perdido el rumbo y una barrera se interpuso entre él y Ryu. Esto pasó no mucho después de una discusión por el azabache.

—¡Naruto!-lo tomó bruscamente de los hombros.

—Nada volverá a ser igual, Sai... porque tengo que sufrir tanto. Ryu, regresó sano y salvo esa vez... pero... Sasuke...

—¡Naruto! ¡Naruto, reacciona! ¡Naruto!

Sai lo sacudió una y otra vez, pero él no despertaba. El blondo llevaba días sin comer apropiadamente y no dormía, entonces el pelinegró lo dejó acostado en su cama y miró su mano formada en un puño.

La curiocidad lo llevó a una respuesta firme.

—Pastillas... ¿cuantas... tomaste?—Sai lloró y tiró la tableta vacía al piso, sacó su teléfono y se comunicó con emergencias—¡Auxilio! ¡Mi amigo está...! ¡él está...!

—Señor, tranquilícese. Dígame con más calma.

—¡¿Como quiere que me calme?! ¡Ha tomado pastillas, tantas, no sé que hacer...!

 

Y pensar que todo ocurriría trás dos años de angustia.

 

El camino de lágrimas

 

—Mientras él sea feliz no importa lo que me pase.

Deidara admiró la tierna escena desde la parte tracera del vehículo, este comenzó a moverse pero no despegó la mirada del vidrio.

—Solo voy a interrogarte—suspiró.

—¿Ah?-le miró sorprendido.

—Por eso... no llores, porque yo lo estoy haciendo por ti...-Sai sollozó. Un mar de sentimientos lo bañó de pies a cabeza, su sobrino estaba con vida—Gaara... él está salvo.

—¿Señor, está bien?

—Calla, mocoso-sollozó.

...

...

—¿Ryu? ¿De vedad no estás herido?-tocó la puerta.

Lo primero que hizo al entrar fue llegar a su habitación y buscar una muda de ropa limpia para encerrarse en el baño.

—¡Estoy bien! ¡De verdad que lo estoy!-sollozó.

—¡Ryu!—abrió la puerta de golpe y contempló al menor abrazándose las rodillas sentado debajo de la regadera con la ropa empapada.—¡Oh, Ryu!—Naruto lo abrazó con fuerza y este no dudó en corresponderle, soltó su llanto en sus brazos.

—¡Tenía miedo! ¡Tenía miedo, Naruto!

—¡Lo sé, hijo! ¡Perdóname!

—Intentaron...—cerró los ojos—Intentaron violarme, ¿Dónde estabas Naruto? ¿Dónde estaba mi supuesto padre?—se apartó bruscamente del rubio poniéndose de pie con una mirada sombría.

—Ryu, yo... lo siento tanto.

—¡¡¿Dónde estaban los dos maldita sea?!!

—Ellos nos pidieron una suma de dinero. Sasuke y yo fuimos al banco, pero... pero aparecieron dos personas armadas. Tu padre me cubrió.

—¿Ah...?

—Sasuke está en coma, Ryu. Por eso... por eso no pudimos cumplirte—lloró—Él está... así por mi culpa.

—¿Co-coma?—susurró perturbado.

Ese fue el inicio del drama. El vació de Ryu que no supo identificar por un largo tiempo. Deidara fue soltado trás su declaración y Sai evitó que otros policías se involucraran en el interrogatorio. Sin embargo, mantiene comunicación. Itachi logró recuperarse, estar a cargo de la empresa y visita a Sasuke todos los días. Ryu volvió al colegio enterándose que tenían nuevo profesor en kendo, Naruto continuó batallando contra su trabajo apartando sus problemas personales para no caer en la oscuridad, pero el tiempo no fue bueno para nadie.

Y dos años despues, en casa todo estalló. Naruto no fue a trabajar y Ryu tampoco acudió al colegio.

—¡Tú! Has cambiado—¡Me hace mal verte así, Naruto!

El oji-azul se hallaba sentado sobre el sofá con un vaso de cerveza en las manos. Sobre la mesa habían más botellas y estaban vacías.

—Lo siento...

—Tú... ¿te importa más él que yo, verdad? Sasuke es más importante que yo... ¡Siempre es por Sasuke! ¡Sasuke esto! ¡Sasuke aquello! ¡Él seguira durmiendo así por años, deja de desperdiciar tu vida así!

—¡Calláte!—golpeó la mesa. Se paró con los ojos hinchados y enfrentó a su hijo—¡Podrás parecerte mucho a Sasuke, incluso ahora, eres exactamente igual a él, pero no eres SASUKE! ¡Jamás podré verte como a Sasuke, entiéndelo de una vez!

—¡Entonces... muérete con ese imbécil! ¡TE ODIO!—salió llorando por la puerta sin darle tiempo al blondo de responder.

Naruto observó las botellas en la mesa y las empujó con el brazo al piso haciéndose añicos. Solo pudo romper en llanto tirado junto a los vidrios esparcidos. La soledad lo llevaría a tomar medidas drásticas empastillándose.

...

...

Corrió sin detenerse. La vista se le nublaba y no podía detener las lágrimas.

Te amo, Naruto. Te amo tanto.

—¡¿Porqué?! ¡¿Porqué a Sasuke?!—a pesar de ser mayor de edad ahora, Naruto no lo miraba con otros ojos más que con los de un buen padre.

Ryu no podía olvidar a Naruto. No podía desechar su gran amor a él, el odio a su padre solo creció más en ese instante por arrebatarle al rubito aún estando con un pie en la tumba.

—Papá... ¿tú me amas?

—¿Cómo no amarte? Ryu, te quiero mucho hijo. Eres lo más importante que tengo en el mundo.

—¿De verdad?

—De verdad—sonrió—¿Quieres que te haga caballito?

—¡Sí, sí! ¡Papi!

—¡NIÑO, CUIDADO!

Ryu recordó las últimas palabras de cariño que Sasuke le había otorgado de muy pequeño, cuando él era muy dulce y se preocupaba. El quedó tiezo en medio de la ruta con esas cálidas palabras cuando el camión fue en dirrección a él.

...

...

—Muere, Sasuke. Ya nadie va a esperarte.

—¡Apártate de mí!

En lo más profundo de su conciencia, Sasuke luchaba con su otro yo que cargaba la culpa y solo quería morir. En el mundo de los vivos eran dos años que él dormía, pero allí parecían interminables horas donde solo la oscuridad lo rodeaba.

—¡Tienes que morir! ¡Lo merecemos! Gaara, murió por nuestra culpa, y dejaste a Naruto por él. ¡A pesar de haber obtenido un hijo como tanto lo deseabas, jamás fuiste feliz! ¿verdad?

—¡Basta!—cubrió sus oidos.—¡Por favor!

—¡Gaara, no merecía eso! ¡Cuando hacías el amor con él solo pensabas en Naruto! ¡Naruto fue nuestro gran amor! Y tú, lo dejaste ir por un capricho. Nosotros lo dejamos ir, por eso... debemos morir, Sasuke—el azabache derramaba lágrimas amargas. Tomó a su yo del cuello y comenzó a estrangularlo con fuerza—¡Tenemos que morir, Sasuke! ¡Deja de luchar! Ryu será más feliz sin nosotros, él estará con Naruto, por eso... nosotros...—sollozó.

—No... aah. No...—Sasuke peleaba por su vida. Intentaba quitar sus brazos de su cuello, su propio yo quería matarlo por la culpa. Era demaciado dolor. El dolor que llevaba desde que Gaara había muerto—¡N-no!—lloró—¡N-no, por... favor!

—Sssh. Todo pasará rápido. No llores, pronto todo acabará.

En la sala donde él estaba postrado. La maquina que le proporcionaba asistencia vital y marcaba los latidos de su corazón comenzó a fallar anunciando un ataque cardíaco.

El "Pi" que invadió la invitación fue escuchado por Itachi quien gritó histérico fuera de la habitación clamando ayuda.

—¡Quedese aquí! ¡No entre!

—¡Salven a mi hermano! ¡Se los suplico!—cayó al piso frente a la puerta, mientras los médicos entraban a auxiliarlo. Estaba solo y solo pudo pedir a Dios su ayuda.

—¡Un paro respiratorio!

—¡Doctor, su corazón se ha detenido!

—¡Preparen la carga!-puso dos pequeñas paletillas en su pecho—A mi señal.

—¡¡SASUKE!!-el grito de Itachi lo oyó todo el hospital.

Entonces volvemos al inicio, una cruel realidad. De un lado, Naruto, de otro Ryu y el último, Sasuke. Cada uno a un paso de la muerte.

—¡MUERE! ¡Muere, Sasuke! ¡Tenemos que morir!

Él luchaba. Sus últimas fuerzas, estaba perdiendo moriría asfixiado por él mismo. Que patético. Sus ojos se cerraban pero unas pantallas visuales se mostraban por arriba de su cabeza. Eran como películas, todo lo que pasaba en el mundo de los vivos.

—¡¡Sasuke, no me dejes, hermano!! ¡¡Hermano!!

En una, Itachi lloraba en el piso. Estaba muriendo, pensó. Jamás había visto a su hermano así.

—¡Tenemos que limpiarle el estómago cuanto antes!

—¡Por favor, salven a mi amigo!

Observó a Sai llorando y a Naruto postrado en una camilla pálido llevado a una sala de un hospital.

—¡¿Lo ves?! ¡Sasuke, tú y yo, somos los culpables! ¡Si morimos, ellos estaran bien!

—Aarg... no. No.

—¡Niño, cuidado!

Sasuke vio a su hijo a punto de ser embestido por un camión en plena ruta, y él no se movía.

—Padre... si solo me hubieras amado.

Reaccionó de golpe abriendo sus ojos y poniendo más fuerza para zafarse.

—¡Muere de una vez!

—¡NO! ¡Ryu! Gaara... ayudáme, por favor—sollozó.—¡¡GAARA!!

—Tú... ¿Que haces...?

—¡¡GAARA!!

Sasuke logró apartarse lo suficiente para ver a su otro yo siendo atravezado por atrás en su pecho. El cuerpo comenzó a desintegrarse en pequeñas partículas brillantes. Gaara sonrió.

—Gaara... Ryu está...

—Vete ya. Todavía hay tiempo, cuida a nuestro hijo, Sasuke. Él está bien, no llores. Dile que lo amo mucho y a Sai... dile a Sai, que sea feliz. Quiero verlo feliz, dile que sonría, por favor, Sasuke—lloraba.

—¡Gaara, lo siento! ¡Lo siento tanto!

—Ve ya, Sasuke. Haz feliz a Naruto esta vez—lo empujó por un hoyó que se abrió del piso oscuro.

—¡Gaara!

Solo pudo verlo una última vez mostrando una gran sonrisa entre lágrimas, siguió cayendo más y más y la oscuridad dejó ver la luz debajo de él. Sasuke cerró sus ojos y la luz se lo tragó.

...

...

—¡Lo estabilizamos, doctor!

—Comenzaba a perder las esperanzas...—quedó sin habla al ver el cuerpo moverse especialmente las manos, estrujaron la tela que lo cubría.

—Doctor...—su asistente miró al paciente abrir sus ojos y de ellos salieron incontables lágrimas.

—Llamen... llamen... ¡¡Llamen a mi hermano!! ¡¡Llamen a mi hermano!!—Sasuke comenzó a grirtar levantándose con los cables pegados a su cuerpo.

—¡Joven, tranquilo!-le detuvo del brazo para que no se levantara de la camilla—Kaoru, abre la puerta, llámalo.

La muchacha asintió sonriente y cuando abrió la puerta, Itachi se hallaba parado con los ojos rojos mirando hacia dentro.

—¡Itachi!

—¡Sasuke!

Ella se hizo a un lado y el doctor tambien se apartó. Los dos hermanos se abrazaron llorando, los médicos se emocionaron esto jamás había pasado.

—Oh, Sasuke, pensé... pensé que iba a perderte. Estúpido hermano menor...

—Yo... yo lo siento. Perdón... Perdón por todo.

—¿De... que hablas?

—Solo... escúchame....

...

...

Las segundas oportunidades existen.

—¡¿Estás bien...?

Ryu abrió los ojos y miró a su salvador que lo tenía entre sus brazos a un lado de la ruta. Los espectadores aplaudieron contentos de que no ocurriera una desgracia.

—Profesor...

—Uchiha, de verdad casi me da un paro al verte parado en medio de la calle. ¿Porqué lo has hecho?

Ryu comenzó a llorar siendo conciente de que podría haber muerto.

—O-oye.

—Lo siento...—Yo...—se aferró a Kiss tembloroso.

—Ya, ya, no llores. No llores-susurró cariñosamente correspondiendo su abrazo.

Nunca imaginó ver al hijo de Sasuke tan vulnerable como en ese momento, pero extrañamente le resultó tierno conocer ese lado de su pupilo.

...

...

—¡¿Como está?!—Sai vio salir a la doctora tras un tiempo largo esperando.

—Él esta mejor ahora, no se preocupe. Llegó a tiempo, joven, llegó a tiempo—posó una mano en su hombro con los ojos húmedos.

—Usted... ¿quién es usted?

—Soy... su abuela. Gracias por traer a mi nieto.

—¡¿Eeeh?!

—Naruto está mucho mejor ahora—sollózó—Es todo lo que importa.

Una nueva vida se abría camino para una familia que estaba destruyéndose. Sasuke era la nueva luz que traería amor a su familia, a su hijo y a su Naruto.

 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).