La mañana se presentaba tranquila y apacible en Konoha, lucía un sol espléndido y una suave brisa primaveral llenaba los pulmones de sus habitantes, los pájaros cantaban, las hojas se mecían con el viento y Kiba despertaba de su letargo.
-...- el castaño se frotó los ojos soñoliento y buscando con la miarada a su koi y futuro padre de...-¡!- ¡Kami-sama! ¡La revisión! Ya casi se le habia olvidado.
De un brinco el chico perro se levanto de la cama para dirigirse al cuarto de baño hasta que unos fuertes brazos lo sujetaron impidiendo su avance.
-¿A donde vas tan corriendo?
-¡Shino!¡Sueltame!Que hora es?Vamos a llegar tarde a la revision!
Kiba se mostraba bastante alterado mientras que Shino estaba la mar de tranquilo, como siempre. Estaba hecho un manojo de nervios e intentaba sin mucho éxito liberarse del agarre del chico insecto que lo sujetaba como quien sujeta a un niño para evitar que se abalance sobre otro para pelear.
Y Shino sabia que solo tenia un método para calmar a Kiba.
-¡Sueltame ya, maldito insecto retorcido!¡Sueltame o traere el insecticida!
-Kiba.
-¿¡Que!- las palabras murieron en los labios del castaño cuando el ''retorcido insecto'' le besó sin más, al principio de manera sutil para luego profundizar el beso metiendo la lengua en la cavidad bucal del contrario, para explorar, jugar y batallar con la lengua del chico perro.
-¿Ya estás más tranquilo?-preguntó Shino una vez hubo finalizado el beso.
-...- Kiba no decia ni mu pero el sonrojo de sus mejillas lo decia todo. - Baka...
-La revision es dentro de una hora, aun queda tiempo, si quieres date una ducha y luego ven a desayunar.
-Hai...
Sin más mediaciones Kiba hizo caso de su pareja, se duchó sin prisa y acariciando con suavidad su vientre ahora algo más notorio y enjabonandolo con espuma mientras en su cabeza seguia pensando en los resultados de las pruebas que se llevarian hoy a cabo.
Una vez limpio, aseado y vestido Kiba se dirigió al comedor para desayunar con Shino, que aunque no lo pareciera era bastante bueno cocinando. Al chico perro se le hizo la boca agua al ver los dulces, tostadas, bollos, etc que su koi habia sacado para desayunar, pero...
-¡Aarrghh!Shino!¡Que asco por dios!
-¿...?
Lo que le habia dado tanto asco a Kiba era el café recién hecho que Shino se estaba tomando en ese momento, y es que esa bebida era una de las manías del castaño, tanto en olor como en sabor.
-¡Te dije que no soporto el café!
-No.. me dijiste que no soportabas el curry, el cerdo con champloo , el sake, al vecino, el brocoli y el pescado.
-¡Pues añade el café!
Bueno temas aparte...Una vez que salieron de casa ambos ninjas pusieron rumbo al hospital acompañados de Akamaru, pues el enorme perro vivia con ellos , eso si con su caseta fuera, pues dentro palabras textuales de Shino: "Ni de coña".
Curiosamente el camino pareció hacerse eterno, Kiba estaba que le daba algo y Shino aunque no lo aparentase tambien estaba nervioso, pues ¡por Dios bendito! ¡Iban a conocer a sus hijos!
Al llegar a la puerta del hospital Kiba se sintió de repente como si el mundo hubiese crecido 10 veces y entrar a la revisión fuese todo un mundo. Shino al notar este comportamiento en su pareja acarició su mejilla y tomó su mano.
Todo muy bonito hasta que...
-¡Kawaiii! =^w^=
-¿¡Naruto?- gritó Kiba sorprendido- ¿¡Que haces tú aquí?
-¿No es evidente? Sabia que hoy era tu revisión asi que he venido a conocer a los cachorritos!
-Espero que muestres tanto interes cuando seas tu al que le toque ir a revisión dobe.
Acto seguido al lado de Naruto apareció Sasuke Uchiha ex-vengador y pareja del rubio.
-¡O/O ¡Sasuke-teme! ¡Pues claro que mostrare interes!
-Si ya...Kiba... Shino...-dijo el moreno saludando a la pareja respectivamente
-Sasuke...-devolvió el saludo Shino
-¡No me jodais que venis los dos a cotillear!-gruño Kiba
-En principio iba a venir solo yo, pero Sasuke al final tambien quiso venir. Pero venga ¡vamos que obaa-chan espera!
Y dicho esto el rubio se adentró en el hospital junto a Sasuke y dejando a Kiba con unas ganas terribles de darle una paliza.
-Muy bien Kiba ¿preparado?
-Si... eso creo.
-Tranquilo lo único que notarás será chakra fluyendo desde tu vientre, no te dolerá.
Kiba se encontraba recostado en una camilla con Tsunade a su lado explicandole como realizaría la ''ecografía''.
Al otro lado se encontraban Naruto, Sasuke y Shino, este último tenía agarrada la mano de Kiba como si temiera que fuese a salir volando.
-Bien, allá vamos. No te muevas y respira hondo...
Kiba obedeció y sintió las manos cálidas de la mujer posarse sobre su vientre descubierto y aplicar chakra sobre él para después sentir como el suyo propio emanaba de su cuerpo para encontrarse con el de la mano de la Hokage. Era una sensación indescriptible Kiba sentía, lo sentía, sentía palpitaciones dentro suyo, los latidos del corazón de su ''cría''.
-Bueno bueno bueno. - dijo la rubia mirando a Kiba y después a Shino con una sonrisa de oreja a oreja.- Mis felicitaciones Aburame, estás hecho todo un semental.
-¿Semental? ¡Tsunade-sama!- el que replicó fue el castaño tumbado sobre la camilla y colorado por el comentario de la mujer. -¿Que significa eso?¡¿Que ha notado?
-Pues si no me he equivocado, y no lo he he hecho. No son ni uno ni dos corazones los que se sienten, ¡si no tres! ¡Kiba estás esperando trillizos!
-...
-...
-...
-¡Ole! Que machote que es nuestro Shino!
Lo único que se escuchó fue la voz del rubio más feliz que unas pascuas, Kiba no decía ni una palabra de la cara que tenía, Shino estaba estático como una piedra y Sasuke miraba con cierto aire de desdén al chico insecto.
Ni uno, ni dos. Trillizos.
Definitivamente a Kiba Inuzuka hoy le daba algo.