Cap 7
Después de que Eiri se calmara, ambos chicos se encontraban sentados en el pasto del enorme patio. Ninguno había dicho nada, solo guardaron silencio, y ni siquiera se miraban.
- Creo que te debo una explicación de lo que paso ahí dentro - se animo Eiri a hablar
- Si no quieres, no tienes porque hacerlo
- Si quiero – suspiro – solo que es difícil - se quedo callado un momento y después continuo – hace dos años yo fui muy rebelde, consumí drogas, alcohol, de hecho me llevaba muy bien con mi mamá, le contaba todos mis problemas, y si te preguntas porque hice todo eso, pues fue porque tuve una novia, que ya era adicta, y me metí a eso por ella, fue mi primer amor, muy destructivo, pero al final era amor. Como dos veces fui a parar al hospital por culpa de sobredosis o cosas así, y mis padres la pasaron realmente mal cuando se enteraron, mi papa me ayudo hasta el final, pero mi mamá se alejo de mi. Pusieron seguridad en toda la casa para que no pudiera verla, pero aun así, encontraba la forma de irme. Un día me escape a una fiesta con ella, me pase de todo, tanto que no recuerdo nada, pero al siguiente día me desperté en una cama junto a ella, habíamos tenido relaciones, fue mi primera vez y no la recuerdo – sonrió con tristeza – mi hermana como tiene una puerta que conecta su cuarto con el mío, muchas veces me vio drogarme estando solo – una lagrima se le escapo – cambie Shuichi, le hice daño a muchas personas, pero cambie
- ¿Cómo se llama?
- Anna
No encontró que decirle, sabía que lo que su novio había hecho antes no estaba bien, pero ¿Quién era el para juzgarlo? Simplemente podía ayudarlo a olvidar, solo podía amarlo.
- Eiri, yo no soy nadie para juzgarte, sabes que yo consumo esas cosas – le tomo la mano – pero te amo, y esto no cambia nada entre nosotros
- También te amo – sonrió y agradeció mentalmente las palabras del chico – ayer estuve pensando en que vamos a comenzar un año nuevo juntos
- Es verdad – sonrió
- ¿Cuáles son tus propósitos de año nuevo?
- Creo que si te los digo no se cumplirán – pensó un segundo – pero te los diré… primero esta dejar de fumar
- Imposible – se rio de buena gana – pero sigue
- Dejar de morderme las uñas
- Mi amor, son propósitos, no sueños imposibles – se gano un golpe por su comentario
- Tatuarme y hacer ejercicio
- No los cumplirás – se rio – es mejor que comas dos uvas por cada uno, tal vez así se cumplan
- Lo sé – rio de la misma forma que su novio – pero hay uno que olvido
- ¿Cuál?
- Amarte mas
- Ese si espero que lo cumplas, porque yo desde que te conocí cada día te amo mas y mas – ambos se fundieron en un dulce beso, un beso lleno de promesas de amor que se encargarían en cumplir el tiempo que durara su relación
-------------------------------------------------------------------
Los días pasaban volando, ya era 27 de diciembre, hacia el mismo frio que hacia todos los días. Pero no importaba, le gustaba, mas cuando su novio se quedaba a su lado abrazando. Se encontraba sumido en esos pensamientos cuando su móvil sonó, cosa que le extraño porque Shuichi y el se verían hasta el día siguiente. Miro la pantalla y se dio cuenta de que no era nada de su novio, era un mensaje de texto de su amiga Noriko que lo único que decía era:
Te necesito
No se podía negar a ayudarla, era su amiga de infancia. Se levanto rápidamente de su cama donde se encontraba acostado, cogió las llaves de su camioneta y se encamino a casa de su amiga. ¿Qué hora era? ¿11:40 pm?
Llego, toco la puerta, y salió ella llorando como nunca la había visto llorar. Sin pensarlo dos veces la abrazo fuertemente.
----------------------------------------------------------------------
5:00 am y su móvil sonando? Quien estaría tan loco como para hacer eso? Con los ojos medio abiertos y con toda su fuerza de voluntad contesto.
- Diga – su voz se escuchaba cansada
- ¿Shuichi? – pregunto una voz de mujer de una forma un tanto desesperada
- Sí, soy yo – se tallaba los ojos para ver si así despertaba
- Soy mika – suspiro – dime por favor que Eiri está contigo
- No, no está aquí, ¿Qué haría en mi casa a las 5:00 de la mañana? – pregunto como si fuera lo más lógico
- No llego a dormir
Sintió como si un balde de agua fría le cayera encima al escuchar eso. ¿Y si le había pasado algo? ¿Y si estaba…? No, eso no podía ser, el no podía ser infiel, era una real tontería, porque Eiri lo quería, no, no y no
- Ya hablaste con Hiro? – pregunto mas despierto
- No sabe nada
- ¿Marcaste a su móvil?
- Supongo que está apagado
- En dado caso solo nos queda esperar – suspiro – me vuelves a llamar si sabes algo
-----------------------------------------------------------------------
- ¿Porque a mí no?
- Noriko ya te dije, entre tú y yo no iba a funcionar, sabes que lo intente – Eiri ya estaba un poco desesperado de repetir lo mismo
- Tu intento no fue suficiente porque yo te pude haber hecho muy feliz – ella seguía llorando
- Soy feliz Noriko, te quiero como amiga – miro su reloj y marcaba las 7:00 am… había estado todo el tiempo intentando explicarle a su amiga que no podían llegar a mas que una simple amistad
Se despidió de su amiga para ir rápidamente a su casa, y después de un largo regaño por parte de su padre, su hermana le dijo que Shuichi sabía que no había pasado la noche en casa, le asusto la idea de que pudiera pensar lo peor de él, así que después de poner a cargar su móvil, le hizo una llamada a su novio.
- ¿Dónde estabas? – pregunto al contestar el teléfono, sin esperar mas
- Estuve con Noriko – hubo un largo silencio – no paso nada – se animo a decir – solo hablamos todo el tiempo, sé que es difícil de creer, pero así fue, es más, si quieres te llevo con ella para que te lo diga
- ¿Y que tanto hablaron durante tanto tiempo? – pregunto extrañamente tranquilo
- De que no puedo estar con ella, porque te amo solamente a ti
- Y yo te amo mas a ti – respondió riendo – confío en ti, pero me preocupaste, no lo vuelvas a hacer, y si lo vas a hacer, avísame, ¿de acuerdo?
- De acuerdo
Ese día se dieron cuenta de que lo que había entre ellos era realmente especial…