Si fuera una persona que pudiera reír con facilidad, en este momento Trowa Barton estaría riéndose a carcajadas y es que ver a Heero confundido y sin saber que hacer es realmente divertido- Sigo sin entender cual es el problema con ese tal Duo Maxwell- Trowa dijo observándole desde un cómodo sillón; después de años de amistad con Heero Yuy aun no podía comprender muchas de las cosas que hacía, pero ya estaba acostumbrado a ese misterio que rodeaba la vida de su amigo
Heero que esta sentado en la cama del cuarto del hotel en donde están hospedados desde anoche, enarca una ceja- No hay nada que entender Trowa: mi tío estaba casado con un chico que fácilmente podría ser su hijo y Duo Maxwell su esposo tiene un amante que incluso estuvo a su lado durante el funeral, así de simple- Heero apretó los puños de forma inconsciente, no sabe porque estar mas enojado, porque su tío haya omitido el “pequeño” detalle de su matrimonio o el hecho de que el chico de trenza tuviera a alguien, esa indecisión lo hizo enojar todavía mas- El esposo de mi tío no es mas que un arribista- Murmuro entre dientes, todo el día se había dedicado a averiguar en el pueblo y cada uno de los habitantes a los que les pregunto le dieron la misma versión de Duo; un chico sin ninguna clase de moral que se había aprovechado del noble corazón de Odín Low
Trowa le dirigió una mirada intrigada, ayer cuando Heero le dijo que iría a la hacienda de su tío ya que este había fallecido, lomas natural para Trowa fue acompañarle, aunque en este momento no sabía si había sido buena idea o no; le responde ni una sola palabra ya que no hace falta, ellos siempre ha sabido comunicarse así sin palabras, Heero puede sentir los reproches de Trowa y este la resistencia a darle un voto de confianza al desconocido y tras un suspiro Trowa decide salir de aquella habitación, tal vez recorrer el pueblo y dejar que Heero estuviera un rato con sus pensamientos sería mas productivo que terminar pelando con su mejor amigo…
Heero se queda observándola puerta por donde ha salido Trowa, no puede comprender porque le interesa tanto el chico, siendo honesto con el mismo nunca ha hecho caso a los rumores, pero esta vez parecía completamente diferente, quiso golpearse por la sarta de tonterías que estaba pensando, tras algunos minutos se puso de pie y salió también de la habitación, necesitaba despejar un poco su caótica mente.
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Quatre estiro lentamente la cuerda del arco, enfocándose solamente en el blanco que esta a varios metros frente a él, pero lo suficientemente cerca para ser un tiro relativamente fácil, cuando esta seguro del tiro deja escapar la cuerda y la flecha sale disparada en medio de un suave silbido, el rubio sonríe cuando la flecha cae exactamente en el centro sintiéndose considerablemente mas relajado, siempre tiene ese efecto en el tirar con el arco…
Quatre sabe que esta siendo malditamente egoísta, que no debería estar aquí “jugando” que su lugar es a lado de su hermano, ahora que apenas han pasado algunas horas de que enterró a su esposo, pero ya no puede soportar las miradas llenas de odio hacia su persona y hacia Duo, si tan solo supieran la verdad que son hermanos, que solo intenta consolar a su hermano… Niega con la cabeza tomando una nueva flecha; sabe que eso es imposible por ahora que su vida y la del propio Duo estarían en peligro, si tan solo su madre no se hubiera fijado en ese infeliz cuando padre fallecio, ahora podría tener una vida normal La flecha sale disparada pero esta vez se queda en la orilla del blanco, ahora solo puede ocultarse
-Solo otros seis meses- Quatre murmura frunciendo levemente el ceño al ver su mal tiro
-Eres realmente bueno- Una voz tras él le asustó haciéndole dar un pequeño salto, bastante gracioso a decir verdad. Voltea su rostro encontrándose con el hombre más atractivo que jamás hubiera visto…
Trowa había caminado durante casi una hora, estaba decidido de ver a ese tal Duo, por lo menos a la distancia, quería conocer a la persona causante de la desesperación de su amigo; pero no imaginó que al entrar por la parte de atrás de la hacienda descubriría a un ángel, porque esa es la primera impresión que tiene del hermoso rubio que esta frente a él haciendo una increíble demostración de su habilidad con el arco, sonríe por la reacción del chico- Disculpa, no quise asustarte- Dice Trowa con voz tranquila, pero en su mirada se nota que no esta para nada arrepentido.
Quatre se pierde por un segundo en el color verde de los ojos del desconocido, son tan bellos pero con un toque de misterio, como si vieran mas allá de la superficie, niega con la cabeza regresando a la realidad no puede pensar en tonterías como esa cuando sus prioridades están claras: su hermano y mantenerse alejado del mundo- No me asuste solo estaba distraído- Murmura recogiendo sus cosas y evitando tener contacto visual con él, por alguna extraña razón el desconocido le pone muy nervioso- Tengo que irme- Y sin esperar respuesta comenzó su camino de regreso a casa, sin embargo su corazón late con tal fuerza que incluso puede sentirlo en sus oídos.
Trowa le mira partir, se siente algo decepcionado , ni siquiera tiempo de preguntar su nombre, pero tampoco puede seguirlo a la casa principal de la hacienda ¿Cómo justificar su presencia?-Parece un pequeño conejo asustado- Piensa esbozando una diminuta sonrisa, apenas perceptible- O tal una ardilla- Inmediatamente después, de ese pensamiento, quiso golpearse por las tonterías que estaba pensando, tras un suspiro emprendió el camino de regreso pero solo cuando la figura del rubio se perdió entre la barda que custodia la casa principal…
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Duo recorre la pequeña plaza, ya ni siquiera le importa las miradas de las personas, algunas curiosas y otras llenas de reproche incluso odio hacia su persona, no podría importarle menos, Duo solo quiere alejarse un poco de la hacienda, respirar aire fresco antes de sentirse ahogado, no importa si solo han pasado algunas horas de que enterró a Odin, que todavía traiga puesta las ropas de hace dos días, y que su cabeza duele como el infierno; solo quiere estar lejos de todos los problemas por un rato.
Si tan solo tuviera un lugar seguro adonde ir con Quatre, en este momento estaría juntando sus pocas pertenencias para largarse del pueblo; Odin fue demasiado bueno con él y le protegió como nadie lo había hecho, pero afora volvían a estar solos.
Pero sus pensamientos fueron interrumpidos cuando choca con la espalda de alguien –Lo lamento…- Ni siquiera pudo continuar ya que sus palabras se negaron a salir cuando reconoció al hombre era el mismo que había visto en el funeral, trato de sonreírle pero le fue imposible pues los ojos feroces del hombre estaban clavándose sobre Duo como si fueran dagas; el trenzado sintió un escalofrío recorrer su cuerpo retrocediendo un paso sin poder evitarlo- Yo… disculpe no quería molestarlo, no choqué con usted a propósito- Duo cerró su boca para tratar de no decir mas tonterías- Que tenga un buen día- Murmuró sonrojado dispuesto a alejarse lo mas rápido que pueda, pero el fuerte agarre sobre su brazo le impide huir
-Te lo advierto Duo Maxwell no voy a permitir que te aproveches de la situación- Al ver a Duo, volvió a sentir lo mismo que la primera vez yeso le molesta demasiado ¿Porqué diablos sigue pensando que es hermoso si sabe que es un vil arribista? Cuando lo sujeta siente como si una descarga eléctrica recorriera su cuerpo haciéndolo enojar todavía más y soltándolo casi de inmediato.
Duo retrocede desconcertado, pero sobre todo asustado- ¡No te atrevas a tocarme de nuevo!- Duo grita, para irse lo mas rápido que sus pies le permite, ni siquiera entiende la maldita razón de las palabras del tipo mucho menos porque le están afectando tanto, no es como si nunca lo hubieran insultado, es mas en este pueblo parecía que molestar a Duo es un deporte y lo mas divertido que existe-¡Maldición!-Grita frustrado cuando estalo suficientemente lejos del pueblo y obviamente del desconocido; molesto porque sus ojos comienzan a escocer, no puede permitirse llorar nunca ha sido débil y no piensa empezar a serlo ahora que su vida esta al borde le abismo….
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-Señor Duo, el abogado de la familia lo esta esperando en el despacho el señor Odin- La empleada levantó un poco la voz y mueve con suavidad el hombro de Duo, era su última opción para despertarlo, después de golpear la puerta por mas de diez minutos, sino fuera su patrón, esta segura que ya hubiera tomado un balde de agua y selo hubiera arrojado encima.
Después de dos semanas por fin el trenzado tiene horas de sueño medianamente decentes -¿Por qué tienen que molestarme tan temprano?-Piensa cubriéndose con la manta en forma de protesta, algo hace click en su cerebro-¡Milliardo!- Grita levantándose de golpe y en menos de cinco minutos ya esta bañado, cambiado y listo para su encuentro con Milliardo.
Heero Yuy lleva mas de 20 minutos en lo que parece ser el despacho de sitio, se supone que hoy se dará lectura al testamento y por fin podría lanzar a la calle a Duo Maxwell y a su amante; Heero pudo haberlo hecho desde el mismo momento que llegó al pueblo; pero prefirió ser paciente y esperar hasta este día.
-No se preocupe señor Yuy, Duo nunca llega a tiempo pero no debe tardar- El abogado sonrió divertido al notar como Heero no deja de mirar hacia la puerta
-¡Milliardo!- Heero ni siquiera alcanzó a pronunciar palabra ya que el grito entusiasmado de Duo Maxwell irrumpe en la habitación corre hasta Milliardo abrazándolo con fuerza y envolviendo la cintura del mayor con sus piernas
-Gusto en verte de nuevo- Milliardo le sonríe con ternura, el es la única persona que conoce cuales fueron las circunstancias en las que Duo y Odin contrajeron nupcias y casi sin querer se encariño con el trenzado.
Heero apretó los puños con tal fuerza que sus nudillos se pusieron blancos. ¿Por qué el abogado y Duo Maxwell son tan cercanos? -¿Podemos empezar con esto o todavía voy a tener que soportar la poco profesional muestra de afecto abogado?- Heero siseo, molesto no permitiría que ningún sujeto se acercara a su Du… y ahí detuvo la línea de su pensamiento ya que es una verdadera estupidez, es inimaginable ese tipo de posesividad sobre alguien como Duo…
El trenzado se bajó de inmediato de Milliardo reconocería esa voz a donde sea- ¿Qué hace él aquí, Milli?-Duo, casi de forma inconsciente toma el brazo del rubio, no puede negar que esa mirada fría le causa escalofrío
Heero frunce el ceño aun mas molesto pero se niega a dejar ver esa molestia, ¿Qué ganaría con eso? No piensa darle una sola oportunidad para dejarle ver el efecto que tiene sobre su persona.
-Duo, quiero presentarte a Heero Yuy, sobrino de Odin, Heero este es Duo Maxwell, esposo de tu difunto tío- Milliardo hizo las presentaciones convenientes, sonríe divertido cuando ninguno delos dos hace algún gesto de querer darse la mano y se miran como si se odiaran-Como unos niños- Piensa antes de entrar a modo profesional-Como saben los cite para llevar a cabo la lectura del testamento del señor Odin Low- Por primera vez le dirige una mirada a un hombre que ha permanecido sentado en uno de los sillones- Señor notario, por favor
El hombre asiente con la cabeza antes de ponerse de pie y dirigirse al escritorio de su portafolio saca los documentos pertinentes y tras una breve explicación y de que siguió el protocolo adecuado, dio lectura a la última voluntad de Odin
-En pleno uso de mis facultades yo, Odin Low dejo todas mis posesiones a Heero Yuy a excepción del lugar conocido como el Solario que lo dejo a mi esposo Duo Maxwell junto con una pensión vitalicia que logre satisfacer cada una de sus necesidades; esto se llevara a cabo bajo una exclusiva condición: Heero Yuy y Duo Maxwell deberán contraer matrimonio y permanecer casados durante un año, si alguno de los dos se niega el otro se quedará con todo y si ambos se niegan mis posesiones serán otorgadas a alguna institución de beneficencia dela lista anexa- El notario levanta la vista- Eso es todo- Extiende un sobre a Heero y uno a Duo- Por orden del señor Low no podrán darme su respuesta hasta dentro de una semana para que tengan la oportunidad de asimilar su situación- Mientras habla recoge cada uno de los documentos- Los veo dentro de una semana señores- El notario sale del despacho dejando un pesado silencio, la tensión se puede cortar con cuchillo
-¡No voy a permitir que te salgas con la tuya! ¡Te aseguro que voy a quitarte hasta el ultimo centavo que intentas robarte!- Heero es el primero en explotar para un segundo después se va dando un fuerte portazo.
Duo no se ha movido de su lugar, ni siquiera escuchado la amenaza de Heero, en su cabeza solo cabe una sola pregunta ¿Qué diablos es lo que ha hecho Odin?