Avalanch – Delirios de Grandeza
Aquel día Kaoru vio que Minoru llevaba algo marcadas las ojeras, lo mismo que él. No tuvo el suficiente valor para acercarse hasta él y preguntarle, así que solo pudo contemplarle desde la lejanía.
Comienza a anochecer y vuelvo a estar triste
Un día más se va y tú no estás
Kaoru tampoco iba a poder dormir aquella noche, la pena volvía a pesarle sobre los hombros. Ya llevaba varios días así…apenas dormía, no tenía hambre…los días pasaban en un abrir y cerrar de ojos, y Kaoru se sentía terriblemente solo, a pesar de estar rodeado por toda su familia y sus amigos…si Minoru no estaba…se sentía muy deprimido.
Quisiera escapar, huir de esta soledad…
Pero algo me impide dejar todo atrás.
Minoru solo quería que no le dejasen solo. No quería sentirse más así…y tampoco deseaba que nadie sintiera lo mismo que él. Solamente había una razón por la que Minoru no había intentado desaparecer de este mundo…y esa razón era él, Kaoru.
Sin ti, nada es igual.
Cada vez que alguno de los dos chicos faltaba a clase, el otro muchacho era el que peor lo pasaba, pues las cosas nunca eran lo mismo si estaba con sino estaba el otro…aunque siempre se hiciesen las mismas cosas, sino estaba el otro, la cosa perdía su encanto.
Quizás haya una razón por la que luchar.
La razón que ambos chicos poseen es la misma, y sin que ellos la sepan, la están utilizando como espada en esta batalla interior que están liberando…
Cuentan que un ser provocó
La ira de un Dios por su perfección
Su envidia acabó con el don, en dos le separó
Y el Dios descansó.
Sin saberlo, Kaoru y Minoru eran las dos partes de ese ser que Dios había separado al principio de los tiempos y que tarde o temprano, el Destino volvería a unir.
Intento no pensar, no quiero estar triste
Mi vida ya no es igual si tú no estás.
Cada vez que Kaoru pensaba en Minoru su rostro se entristecía casi automáticamente, no podía evitarlo, era una pena demasiado grande como para poder contenerla, y las lágrimas eran su única manera de exteriorizarla. Si Minoru no se encontraba a su lado, sino hubiese estado a su lado en los momentos en los que no era capaz de contarle sus verdaderos sentimientos, sabía perfectamente que ya habría intentado suicidarse.
No entiendo la razón, pero algo que me dice
Que un día tú y yo
Haremos temblar a ese Dios, ya lo verás.
Minoru tenía un pequeño presentimiento que le decía que todo saldría bien, pero a pesar de eso no era capaz de decirle nada a Kaoru…pero…si pudiera mostrarle todo su afecto sin palabras…si solo pudiera besarle…
Y un día, tal vez, se vuelvan a ver
Sintiendo una atracción.
Esa atracción que sentía ya llevaba varios días torturándoles no era capaz de dejarles descansar en paz un solo minuto.
No entienden por qué, pero han de saber
Que han roto esa maldición.
Esa maldición que les unes y a la vez les distancia podría ser rota por dejar fluir dos simples palabras, esas palabras que tantas ganas tienen de decir.
Cuentan que un ser provocó
La ira de un Dios por su perfección
Por nombre le puso Amor
Tú eres la mitad, la otra soy yo.
Cuando ambas partes se juntasen, formarían a ese ser que Dios tanto odia, i le harían frente con todas sus fuerzas, pues su amor sería su más poderosa arma, y por él serían capaces de hacer cualquier cosa.
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Notas de LasNi: …ante todo pronóstico…akí sta el segundo capítulo…^^u etto…weno…solo me dejaron un review en el capitulo anterior…cosa q me alegra ^^ pero aunq…haya poca gente [o nadie] q lea mi fic…seguiré subiendolo…pq es una pequeña forma de desahogarme…^^
Yulia --> muchas gracias por lo q dijiste wapisima, tienes toda la razón del mundo :**
Jyaane!
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