En una gran casa, enorme y bella por donde cualquiera la pudiera ver un centenar de habitaciones, en los primeros pisos se encontraba una sala especial para ejercicios y confort dentro de ella se situaba una enorme piscina, en esa misma se encontraba un apuesto moreno solo con un minúsculo traje de baño, nadando rápidamente, paso un rato y así seguía después de un buen rato, cansado de nadar tomo una refrescante ducha, sin dejar su egocentrismo se miro un momento en un enorme espejo, se puso un poco de perfume y se puso una de sus mejores trajes, relojes y zapatos, cuando termino se vio listo para salir de su mansión, subió a un taxi y se fue al restaurante de su madre y así fue como llego saludado por todos y todas en especial por las lindas y camareras
-buen día señor Mustang - decía muy avergonzada una jovencita con un enorme sonrojo en sus mejillas que asía que se viera mas adorable aun
-muy buen día- la volteo a ver con una carismática sonrisa, con ese tipo de sonrisas que desmayaría a cualquiera que no dejaban de suspiran cuando lo veían pasar
Entro a ese edificio como otro día cualquiera, saludando a todos, paso directamente hasta donde estaba la cocina pasando a todos los camareros, chefs y llegando hasta lo mas importante de aquel restaurante los pasteleros
-que tal muy buenos días – saludaban el moreno a un chef que se estaba preparando para su día de trabajo
-ni tan buenos –menciono con un poco de molestia uno de sus pasteleros que estaba parado junto con la ayudante del moreno con un elegante traje rojo y una falda negra con cabello largo castaño oscuro, recogido en una coleta alta
-valla…que humor-su vos sonaba con tanta ironía que no podría explicarse-¿que fue lo que sucedió?
-Ahnria… Se fue a parís esta mañana -su vos era de total monotonía, eso era demasiado malo para el restaurante, de por si tenían una muy mala racha, sin su pastelera oficial se las pasarían de mal en peor
-¿que? pero… porque ¿que fue lo que sucedió?
-su madre murió y tuvo que marcharse lo mas pronto posible-esta ves la que le toco el turno de hablar fue du madre que estaba hay junto a ellos
-y... ¿Cuando va a regresar?- hablo el moreno despegando la mirada del suelo
-ese no es el problema, ya no va a regresar….-menciono el chef con total indiferencia- ¿que va a ver para cenar?
Aparte del moreno, su asistente y su madre lo miraron con un enorme enojo como si con eso fuera suficiente para poder eliminarlo y convertirlo en una simple hormiguita para poderlo matar a pisotones
Mientras tanto…
En un enorme edificio se buscaba a alguien que pueda ocupar ese puesto, estaban ya trabajando en eso estaban asiendo las solicitudes para los nuevos ingresados, por un enorme pasillo con unas puertas de cristal, en un lugar de allí estaba un joven rubio su cabello atado en una trenza desde hace tiempo que estaba en diferentes oficinas para solicitar el empleo de pastelero
-disculpe señorita, buenos días- mencionaba el rubio asiendo una pequeña reverencia, siendo seguido por la secretaria que se encontraba allí delante, seguramente cuidando el lugar de la estancia
-hola como estas- menciono la bella joven que lo miraba con una tierna sonrisa
-disculpe mi nombre es Edward Elric, vengo aquí porque tengo una cita
-ha…, si claro, pasa por aquí nuestros gerentes lo están esperando- con sus manos señalando un pasillo que se encuentra en su lado izquierdo
-ho muchas gracias-izo otra pequeña reverencia y se dirigió por aquel pasillo que le señalo con anterioridad la joven secretaria
Camino por un montón de cubículos con gente trabajando, los paso de largo y fue directo con un señor que lo estaba esperando desde hace rato. Fue hasta donde se encontraba y se paro frente a ese señor de edad avanzada y muy canoso
-muy bien joven Elric, se que su padre los abandono, eres el hijo mayor, eres el dueño de tu casa- ese señor no inmutaba la mirada de aquella hoja, la miraba como si fuera la mas importante de todas ignorándolo completamente, lo que confundía un poco a Ed además de ponerlo muy nervioso- ¿es eso cierto?
-ah, ¡si!, bueno...esta al nombre de mi tía, ella por el momento esta en un pequeño viaje con mi prima
-¿con que de su madre? -tomo un bolígrafo que se encontraba en su escritorio y lo anoto- estudio en una escuela famosa y… ¿Escodonblugradúo? ¿Qué se supone que es eso?
-¡ha! Eso es una escuela de repostería, fue en la que me gradué se encuentra en parís, de hay se gradúan los mejores chefs que puede a ver y yo, soy uno de ellos -esto ultimo lo menciono con mucho orgullo al saber que eso, en parte, era verdad
-sus ingresos, ¿porque son tan bajos? -sonó un poco a preocupación mirándolo con desconfianza
-es que por el momento no estoy trabajando, pronto tendré un trabajo y…
-Edward Elric, ¿correcto?
-¡si!
-mm…bueno no creo que tengas la edad suficiente para poder trabajar aquí -mirándolo de arriba abajo- solo dime muchachito ¿cuentos años tienes?
-tengo 17 años-
-¿o enserió? Por tu estatura creía que tenias quince muchos años menos -esa palabra…. Demonios esa palabra de nuevo saco una enorme vena en la frente del rubio
-¡¡a quien le esta diciendo que esta tan pequeño que hasta un grano de arroz lo aplasta!!
Después de ese pequeño comportamiento de parte de Edward ya se encontraba en el autobús en camino a otro lugar de la ciudad para poder solicitar un nuevo trabajo, con una caja amarilla con un lazo blanco sobre esta misma que entre sus manos la sujetaba con mucho recelo
-¡ja! ¡Estúpido tipo como se le ocurre decirme algo así! ¡Como si el estuviera mas alto que yo! –pensó el menor tratando de distraerse un poco viendo por la ventana pero el asiento que esta frente a el tenia algo que llamo su atención, “buenos amigos” un anuncio con un viejito feliz extendiendo sus manos no podía ser… ¡ese era con el tipo que se avía entrevistado!
-¡maldito tipo espero que se ahogue con su propio ego! – enojado por completo intento distraerse viendo asía otro lado del autobús, asegurándose de que la caja amarilla que estaba en su regazo fuera asegurada esperando llegar pronto, mientras toda la gente del autobús sele quedaba viendo como si fuera una cosa extraña única en su especie
Mientras en el hotel Fundé (N/A: imagínense si le pongo Mustang dirán que es mejor de carros XD)
-¿no quieres servir postres hechos aquí?-decía una mujer de estatura promedia con cabello corto y negro un traje elegante conformado por un saco de diseñador Alemán llegaba hasta la cintura de color beige con detalles café y negro asiendo que se vea como un clásico, una falda negra hasta las rodillas con una pequeña abertura por detrás, medias negras y zapatillas al igual de negros
-es por que la madre de Ahnriá falleció, y la verdad no creo que regrese, serviré postres del hotel hasta que decida llegar- mencionaba un alto moreno, caminando seguido de una joven de su edad y estatura, esperando que funcione su idea
-nuestra pastelería es una de las mejores, y ya esta acreditada por muchas personas- su vos era de completa monotonía, como si ese no fuera el primer problema que tenga que arreglar para el menor de sus hijos
-lograremos salir bien con o sin ese crédito
-no es tan fácil como crees, solo hay un restaurante francés, necesitamos un chef francés o al menos especializado en Francia
-hay otro lugar en Osaka, es un pequeño bistró, pero el dueño y el chef son franceses
-piensa que un chef francés cuesta mucho dinero y ¿para que lo quieres? ¿Para que solo haga pasteles y postres?
-por esa razón se ríen de nosotros
-es por eso que quiero ser original, no quiero nada de imitaciones-doblaron en un pequeño pasillo, mientras Roy se adelantaba y oprimía el botón del ascensor
-no seas arrogante no sabes hacer negocios- se abrieron las grandes y platinadas puertas y entraron todos, cerrándose detrás de ellos, mientras la madre de Roy lo seguía regañando- y tendrás perdidas la hija del presidente Kim, se va a casar, con el dueño de la reconstructora – lo volteo a ver con mucha furia- es la que rechazaste hace un año ¿recuerdas?
-no tengo que ir a su boda -intentaba distraerse mirando su reflejo en la puerta
-¡¿y cuando piensas casarte?! Mayu, entrara al colegio dentro de un año y necesita que una dama la deje y la recoja
-no te preocupes, yo la llevare y are todo lo que una madre hace dentro y fuera de la escuela -volteo a verla- no me presiones, ni me hagas mas citas con chicas empalagosas
-debes sentar cabeza- esta fue la gota que derramo el baso, pero es que su madre siempre lo estaba molestando cuando se trataba de mayu, ¿es que no podía cuidarla el solo sin que ella necesitara una madre?
-solo dime si me vas a dar el pan o no- estaba demasiado harto, ya tratando de ignorarla fue directo a lo que mas le interesaba
-ya hable con Havoc y me dijo que no quiere saber nada de eso
-Havoc es mi amigo… solo llámalo y punto, se termino- eso izo enojar mucho a su madre, le dio un muy fuerte golpe en el hombro, eso izo dar un gemido de dolor por parte del menor de sus hijos
-¡estúpido! -¡¿hasta cuando vas hacer las cosas bien?! decídete y trabaja en el hotel, ¡el hotel es tuyo! ¡Trabajas en ese restaurante que no te llevara a ningún lado!
-tu vendes habitaciones, yo comida- el hombro le seguía doliendo mucho, pero ante tal comentario su madre lo golpeo mas fuerte
-¡eres un baboso! ¡¿Tú crees que serás joven toda la vida?!
-¡basta! ¡Deja de golpearme!- se paro firmemente para dar un aspecto mas fuerte
-¡¿que?! Tu no me vas a decir que hacer- y lo siguió golpeando mucho mas fuerte asiendo soltar unos leves gritos de dolor- ¡así que te comportas bien! ¡Oh te seguiré golpeando así!
Apenas sonó el timbre del a censor, las puertas se abrieron y todos se pusieron como si no hubiera sucedido nada, apenas se cerraron y el drama continuo- ¡recuerda que aun no he terminado contigo! Eres un tonto- y lo golpeo con mucha mas fuerza toda vía dando un puntapié en su rodilla
Apenas bajaron del ascensor caminaron directo a la oficina de la directora, siendo abierta la puerta por la ayudante principal de la presidenta, conforme apenas entraron siguió regañándolo pero esta ves con menos gritos
-como siempre he dicho, un mal matrimonio da malos hijos
-pero tuviste suerte con el dinero- se volteo muy enfadada viendo con fiereza, tratando de esa manera exterminarlo
-eres un estúpido ¡ya me tienes harta! estoy muy cansada… ¿como pude tener un hijo así de tonto como tu?
-algo malo debiste hacer… -esto ultimo lo dijo en forma de susurro para no enfadarla mas de lo que ya estaba
-cásate este año -esas palabras sonaban muy enserio siempre la asía enojar pero esta ves sonaba peor toda vía
-por favor llama a Havoc - harto de esa discusión tonta intento cambiar el tema
-me quejare con tu hermano- y sin decir mas se dio la vuelta y se marcho, entrando por la puerta de su despacho
-¡entonces salúdalo de mi parte!- mientras Roy iba y a platicar con la ayudante de su madre- ¿siempre tiene ese carácter?
-tal ves sea por su edad, y dime… ¿cuando dejaras de usar taxis? Si no quieres conducir contrata a un chofer
-mm….no lo creo pienso que el taxi es mejor
Mientras en otra parte del restaurante, para ser más exactos en las cocinas donde trabajaban los chefs y meseros para servir las ordenes de los clientes de día, pasando la cocina en unas puertas de atrás se encontraba una pequeña oficina donde se daba una entrevista para el empleo que fue perdido, hay dentro se encontraba un rubio, el mismo de esta mañana y uno de los mejores chef que de seguramente se encontraba un poco ocupado
-muy bien…trabajaste en el Dante hasta algunos años, pero ¿por que renunciaste si pagaban muy bien?-estaba sentado en la silla principal enfrente de una pequeña mesa no muy grande leyendo la solicitud del joven Elric
-ahhh….pues….Etto….eran muy rígidos no me dejaban usar mi creatividad… así que pensé que lo mejor que pudiera hacer era renunciar y buscar algo mejor
-¿tu creatividad?
-si etto… pues en esta parte del negocio de la comida es parte de tu vida- el chef se le quedaba viendo muy seria mente poniendo mas nervioso a Ed- ahhh…etto…es como decir si alguien hace un gran pastel significa que a tenido una gran vida, por eso trabajar en navidad me da mucho gusto porque hago feliz a muchas personas que en ese momento están juntas
-así que… ¿tu prefieres trabajar en navidad que estar con tu pareja? eso es muy difícil de creer
-si…solo digamos que el termino conmigo jeje...
-hahaha ¿Qué, es enserio? No me digas ¿no funciono?
-s-si…me engañaba… ¡ah! le traje uno de mis mejores pasteles de muestra, es mus de mango –la pequeña caja que traía con anterioridad la puso frente suyo para abrirla, enseñando su gran presentación parecía una enorme rosa amarillenta echa con largos cortes de la misma fruta acomodándola para darle dicha forma, rodeada de crema batida con relleno de una deliciosa galleta echa de mostacho y relleno de fruta, su entrevistador miro dicho platillo con mucho asombro… con solo verlo se le asía agua la boca imaginándose el delicioso sabor que tendría ese pastel
-lo siento… pero nosotros necesitamos un ayudante y tu eres un pastelero profesional, no creo poder pagarte lo que tu te mereces, eres demasiado para nosotros, lo siento mucho
-¿enserio? Esta bien…. No se preocupe…- ambos se levantaron para estrecharse las manos dejando ir a un muy triste Edward
Después de un rato de aquella entrevista y unos lugares donde podría conseguir empleo salió muy enojado de aquel lugar, estaba furioso…no, ¡estaba exaltado! Iracundo si, iracundo esa es la palabra que estaba buscando, ese era como el séptimo lugar donde no lo aceptaban, ¡por kami-sama! ¡¿Acaso le asían todo eso por su estatura o algo parecido?!
Cuando paso por un pasillo miro asía su derecha disimuladamente decidió dar un vistazo después de todo como seria el trabajo que el no logro conseguir, camino un poco tratando de no ser visto por nadie, alcanzo no creo que le digan nada solo seria menos de treinta segundos
En esa pequeña ventanilla se podía observar a todos esos reposteros y reposteras trabajando ardua mente, dejando muchos pasteles y galletas, otros decorándolos con mucha paciencia, en una mesa que estaba en una orilla había muchos pasteles sin terminar de preparar, en frente de ellos avía muchas charolas con galletas de muchas formas y tamaños
Tal ves había una pequeña ceremonia por que en otra mesa estaban preparando panques con muñequitos de bodas hechos con fundan vestido de azúcar con un traje de chocolate mirándose a los ojos como si de verdad estuvieran enamorados frente de los muñecos había una tarjeta de chocolate blanco con letras cursivas negras con el nombre de la pareja, varias de ellas ya estaban dentro de su caja, como si fuera una caja de muñecas cristalina por delante y por detrás cubierta con la fecha, y fotos de la pareja con una forma de invitación no muy común (N/A: así será en mi boda así k no sean mal@s y no lo copen XD), junto con un hermoso y gran pastel decorado con un montón de flores de azúcar de una gran variedad colores muy llamativos
Intento abrir la puerta, solo un poco para poder percibir ese delicioso olor a pan recién horneado que tanto le fascinaba, mientras el estaba distraído no se dio cuenta de que alguien lo estaba viendo y se dirigía donde el se situaba, estaba un poco agachado cuando esa persona se puso a su lado solo con un “¡acaso deseas entrar?” asustándolo de un infarto asiendo que se levantara rápidamente, con el saco que traía puesto Mustang el cabello de Edward se atoro en uno de sus botones
-¡hay no! ¡Me atore! -estaba alarmado con el echo de que lo fuera acusar o le haga algo a su apreciado cabello dorado
-descuida esto se puede arreglar, solo se enredo- intento jaloneándolo y estirándolo un poco para así poder zafarlo fácilmente siendo totalmente lo contrario
-¡auch! ¡Por favor ten más cuidado! ¡Inconsciente! –Para tratar de hacer que no se mueva tanto puso sus manos a cada lado de la cintura de mayor
-¡no te muevas! ¡solo aras que sea peor!
-¡¿que me quédate quieto?! ¡Tú eres el que no sabe deshacer el nudo!
-¡hey! ¡¿Por que me gritas?!
-cállate y quédate quieto- solo puso sus brazos a cada lado de su cuerpo
-¡¿Qué?! ¡¿No me estas viendo?! ¡No estoy moviéndome! ¡Y no me grites! -esta ves Ed fue quien levanto la vos, Roy ya no dijo nada solo se quedo callado un momento, sin importarle empezó a caminar dentro de la cocina siendo visto por todo su personal llevándose mas de una intriga
-¡o-oye! ¡Que te pasa!- todos en la cocina se les quedaba viendo, sin importarles su trabajo
-¡una tijeras! – todos se quedaron en silencio, hasta que una joven señorita con un poco de nerviosismo dejo estas mismas en sus manos, Ed solo se puso blanco sin saber que aria el mayor
-¡que! ¡Hey! ¡No te atrevas a tocarme un solo cabello!
Roy tomo las tijeras en su mano, con su otra libre tomo la cabeza de Edward alejando sus otros mechones de cabello
-¡q-que te pasa! ¡No te atrevas soy capas de demandarte! –esta ves Roy no le izo caso solo embozo una sonrisa macabra y le corto un mechón de sus rubios cabellos, todos estaban sorprendidos en especial Edward que miraba como caía su cabello en cámara lenta
-tu no trabajas aquí, eres un espía industrial así que puedo demandarte – y sin decir mas se dio media vuelta y se fue con uno de sus tantos trabajadores
-Maxwell ¿que es lo que esta sucediendo con los demás pasteles? me dijeron que las entregas se retrasaron y no pueden hacer nada para entregar los demás pedidos, aparte de eso no podemos recibir mas entregas
-señor es que nos falta un pastelero mas pero no lo podemos conseguir, con falta personal que nos pueda ayudar no podemos hacer nada para aumentar las entregas
Después de el gran momento de shock Ed se levanto recogió la caja con el pastel que había dejado en el suelo, con toda la tranquilidad del mundo, pero una enorme furia interna se acerco al moreno
-disculpa…-tocaron levemente el hombro de Roy, cuando se volteo recibió un gran pastelazo en la cara, el mus de mango que avía echo desde un principio para las entrevistas ahora estaba regado completamente en toda su cara
-¡no soporto a la gente idiota como tu! Aparte… ¡eso fue por cortarme el cabello! -sin decir mas se marcho con la misma tranquilidad en que se lo había lanzado dejando a todo un personal de trabajadores confundido al igual que a un Roy manchado de pastel