Un amor especial
Los personajes de Loveless no me pertenecen
Un encuentro inesperado
Aquel rubio se encontró con esos ojos violáceos, parecían dos hermosas joyas, pero notó que expresaban tristeza. El nombre de ese rubio era Agatsuma Soubi, él era un estudiante prodigio en las materias de ciencias y arte, ya que además de entenderlas con facilidad, le gustaban mucho; él aún conservaba sus orejas y cola.
Ritsuka al ser descubierto salió corriendo rápidamente, Soubi quiso hablarle pero fue demasiado tarde ya que aquel niño de pelo azabache se había ido; el rubio se sintió mal ya que pensó que por su causa él se había ido corriendo, pero ahora que lo pensaba él no había ni hablado, entonces se preguntaba por qué había huido.
Ritsuka siguió corriendo hasta la escuela, la verdad que no se esperaba que el rubio se percatara de su presencia, pero le llamó la atención lo que estaba dibujando, y era una hermosa…
- Buenos días Ritsuka – Saludó una chica alta, muy proporcionada para su edad, con pelo rosado y ojos color esmeralda. Su nombre era Hawatari Yuiko; en realidad era la mejor amiga de Ritsuka ya que ella siempre estaba ahí cuando algo malo sucedía
- ¿Por qué caminas raro? ¿te encuentras bien? – Preguntó preocupada Yuiko
- Es que me caí de la bicicleta, no fue nada grave – Respondió serio tratando de sonar convincente
- Ritsuka ¿fueron tus padres quienes te hicieron esto? – Yuiko sabia que Ritsuka y sus padres no se llevaban bien, ya que ellos nunca lo recogían, él solo se hacia su almuerzo y nunca asistían a las juntas de padres y eso le preocupaba mucho
- Estoy bien, no te preocupes – Dijo Ritsuka con una falsa sonrisa que fue percatada por su amiga, pero ya no quiso seguir insistiendo.
Ambos empezaron a hacer el aseo del aula y terminaron justo cuando empezaban a llegar sus compañeros. Las clases siguieron con su curso, lo cual era equivalente a aburrido.
MIENTRAS EN NANATSU NO TSUKI
Soubi habia entrado a clases ya que su receso había terminado, a esa hora le tocaba clase de literatura, en el camino se encontró con su amigo inseparable pero a la vez latoso, su nombre era Kyo
- ¿Qué hay Soubi? ¿listo para literatura? – Preguntó alegre abrazando al rubio
- Si - contestó secamente Soubi
- ¿Hiciste la tarea? – Preguntó preocupado Kyo
- Si – Volvio a responder el rubio
- ¿Me la pasas? – Pidió con unos ojos de cachorrito
- Si – Respondió igual
- ¿Me estás escuchando? – Dijo enojado Kyo
- Si – Respondió distraído Soubi
- Reacciona, ni siquiera me escuchas, tú nunca me pasarías la tarea, ¿qué rayos te sucede? – Grito desesperado su amigo llamando la atención de varios estudiantes que pasaban por ahí
- Lo lamento Kyo, pero sigo pensando en lo que le pudo haber sucedido a ese niño – Respondió pensativo Soubi
- ¡¿Un niño? Eres un pervertido – Gritó de nuevo el peliverde
- Kyo, yo no soy ningún pervertido, lo que pasa es que cuando estaba haciendo la tarea de arte, un niño que al parecer iba de camino a la escuela se detuvo a ver lo que dibujaba y cuando voltee salió corriendo – Dijo Soubi sintiéndose mal
- Pues claro, a qué niño no le da miedo que lo voltees a ver, eres un pedófilo – Dijo riéndose Kyo
- Claro que no, vi que sus ojos demostraban frialdad, pero en el fondo mucha tristeza, pero se ve que tiene como 11 o 12 años, a esa edad no se puede sufrir tanto – Respondió Soubi preocupado
- Mejor entremos a la clase, después pensarás en ese mocoso – Dijo empujando a Soubi hacia el salón
En otra parte, los niños de la escuela estaban saliendo, muchos tenían planes como reunirse en una casa para un trabajo, otros a divertirse en los parques o en las maquinitas, y Ritsuka sólo podía ir a casa, eso en realidad que era deprimente.
- Aoyagi, ¿no te gustaría venir con nosotros? Iremos a la casa de Kazuki a jugar – Dijo uno de sus compañeros
- Lo lamento, pero mi madre no me deja, además tengo toque de queda – Dijo con una media sonrisa para evitar que se preocuparan
- Oh ya veo, bueno será en otra ocasión, nos vemos – Se despidió su amigo yéndose con otro grupo de amigos, eso en realidad entristecía a Ritsuka ya que se sentía prisionero, pero faltaba poco para terminar la primaria, solo un poco mas y seria libre.
Decidió tomar el mismo camino de regreso, y de nuevo pasaría por el campus. En esa misma hora, era descanso de 10 minutos para los de Nanatsu no Tsuki; Soubi salió normal y una chica de su salón se le acercó.
- Disculpa Agatsuma, he oído que dibujas muy bien, tanto cosas como personas, ¿podría posar para ti? – Preguntó aquella chica acercándose mucho a Soubi para provocar otra reacción, pero no tuvo ningún efecto en él.
- Lo siento pero yo no dibujo a cualquiera, además no tengo tiempo, con permiso – Contestó rodeando a aquella chica y siguiendo con su camino
Se dirigió de nuevo al patio, ese era el único lugar donde podía estar a solas sin que nadie lo molestara y también donde se inspiraba en sus dibujos, fue llegando al alambrado donde estaba el árbol en el que se había sentado anteriormente y en eso vio pasar al mismo niño de la mañana.
Ritsuka iba perdido en sus pensamientos, pero vio de reojo que alguien del campus se acercaba a toda velocidad al alambrado que dividía la calle con el instituto, él se asustó e intentó correr, pero una voz lo detuvo.
- Oye no te vayas porfavor, lamento si te asuté en la mañana – Gritó Soubi acercándose
Ritsuka se detuvo al oir eso y volteo para ver de nuevo a aquel estudiante que estaba dibujando.
- En serio lo lamento, no era mi intención – Dijo disculpándose el rubio
- No, el que debe disculparse soy yo, ya que no tenía derecho a ver lo que estabas dibujando, yo lo siento mucho – Dijo Ritsuka inclinándose educadamente
- Bueno estamos a mano, ambos ya nos disculpamos – Dijo Soubi con una gran sonrisa, Ritsuka sólo agachó la cabeza algo triste – No es por entrometerme, pero cuando esta mañana te vi, noté que estabas triste y ahora lo compruebo ¿te sucedió algo malo? – Preguntó Soubi preocupado
Ritsuka se sorprendió por lo que aquel estudiante había dicho, ya que había dado al blanco.
- No es nada – Respondió secamente Ritsuka
- ¿Por qué mientes? No sabes que puedes también hacer daño a las personas mas queridas a tu alrededor – Dijo seriamente Soubi sorprendiendo de nuevo a Ritsuka
- ¿Por qué los lastimaría? Ellos no están sintiendo lo que yo siento – Dijo algo enojado el niño
- Te equivocas, aquellas personas a tu alrededor pueden hasta dejar de dormir por preocuparse en lo que te está pasando, ¿no has pensado en eso?
Al oir eso, Ritsuka reflexionó lo que aquel rubio le había dicho y cayó en la cuenta de que era cierto, jamás lo había visto desde ese punto
- Mi nombre es Agatsuma Soubi, mucho gusto – Dijo sacando entre el alambrado su mano
- Soy Aoyagi Ritsuka – Dijo estrechando su mano con la de él, pero en eso recordó que ya se le había hecho tarde, su toque de queda había expirado – Disculpa pero tengo que irme – Dijo Ritsuka quitando su mano mientras salía corriendo hacia su casa rápidamente
Soubi se quedó con las palabras en la boca, ya que de nuevo había corrido, pero se sintió contento al tener un nuevo amigo a quien podría ayudar en sus problemas ya que no le gustaba ver a alguien en ese estado.
CONTINUARÁ…