Cap. 4 ...calma
Una bola rosada se encontraba en el hospital, mas específicamente en la sala de espera del hospital, estaba esperando a que Ryuichi volviera de la recepción, ya que había ido a preguntar por la habitación del escritor
R-es la habitación 365, Shu, ¿vas tu solo?
S-si, estaré bien… -decía mientras e alejaba de ahí… caminaba por uno de los pasillos y su mente empezó a traicionarlo mostrándole visiones de la ultima vez que estuvo ahí… de la ultima vez… que vi a Hiro… con mucho esfuerzo llego hasta la habitación y toco… nadie respondió así que abrió la puerta y entro sin hacer ruido
Y-pensé que llegarías hasta mañana… baka…-dijo al ver al pelirrosa que entrara suavemente
S-es que… me entere del accidente… y… tenia que… tenia que venir…-decía el pelirrosa mientras amargas lagrimas caían por sus mejillas… recordaba aquella tarde, ese momento… recordaba lo doloroso que fue ver a su amigo así… y ahora Yuki… sin poderlo soportar se tiro de rodillas y se puso a llorar sobre las sabanas de la cama donde estaba Eiri
Al rubio realmente le lastimaba ver a su uke en tal estado, era triste y desgarrador, acaricio esos desordenados cabellos rosados para tratar de calmarlo
Y-tranquilo Shuichi… tranquilo…
S-es que…Hiro y… y ahora… tu y… no quiero… perderte…-decía entre sollozos el pequeño
Y- pero yo estoy bien Shu, y quiero que tu estés bien… por que sin ti… yo no podría seguir…
S-yu…ki… -decía algo sorprendido por las palabras del rubio
Y-sabes… preferiría que empezaras a llamarme… Eiri… sabes que todos mis conocidos me llaman así, ¿por que tu no?-decía con su tono serio de siempre
S-esta bien… Eiri…-decía mientras una leve sonrisa aparecía en su rostro
Llevaban dos días en el hospital, Shu no se atrevía a irse de ahí, esa mañana Touma y Mika lo habían obligar a irse a descansar… se fue al apartamento, se ducho y después de vestirse se durmió un rato despertó ya en la tarde y sin mas se dirigió al hospital, al llegar ahí estaban Touma y Mika hablando alegremente con el rubio escritor
S-ya llegue…-decía desde la puerta de la habitación
M-hay pero que necio eres te dijimos que podías venir mas tarde-decía la castaña reprochando al pelirrosado
S-es que yo, bueno, no quería…-trataba de explicarse
T-bien, lo entendemos, bueno es hora de irnos Mika-decía mientras se levantaba de donde estaba
M-si, bueno con su permiso, que te mejores pronto Eiri-decía al momento que salía de la habitación junto con Touma
Y- ¿no prenderas la televisión?-decía calmadamente
S-¿eh? ¿Para que?-decía algo confundido
Y-hoy será el concierto de Grasper-decía sin el menor interés aparente
S-¿¿EH?? Lo había olvidado, ¿puedo encenderla?-decía algo entusiasmado
Y-haz lo que quieras-decía neutro
S-¿pero que no te caía mal Ryuichi?-pregunto algo intrigado
Y-enciéndela y ya, prefiero eso a estarte escuchando a ti-decía con el tono tan serio propio de él
S-buuu que malo eres yu…Eiri- decía mientas encendía la televisión
Paso aproximadamente una hora antes de que empezara a comenzar el concierto de Grasper, el entusiasmado pelirrosa se encontraba muy atento a este, y el concierto comenzó con sleeping beaty y shining colection tres, cinco, diez y muchas mas canciones se escucharon, el oji-amatista se encontraba muy feliz, siempre había adorado ver a su ídolo cantar y esta vez no era la excepción, aquel rubio también se alegraba pero por ver sonreír al pelirrosa, viéndolo tan emocionado por el pasar de las canciones del castaño, de momento se empezó a sentir un poco nervioso, el fin del concierto estaba cerca y el rubio sabia perfectamente que era lo que eso significaba…
S-Eiri, ¿te sientes bien? –pregunto el pelirrosa al ver salir un suspiro del rubio
Y-¿eh? Ah, si, estoy bien, ya casi termina ¿no es así?-dijo algo perdido en sus pensamientos y refiriéndose al concierto
S-sip, falta poco –menciono felizmente volviendo su rostro a la TV, ante esto el rubio abrió uno de los cajones que se encontraban en el buro del lado contrario a donde estaba el pelirrosa, contemplo lo que había adentro y lo volvió a cerrar –Eiri, ¿Qué tienes ahí?-pregunto el pelirrosa quien ya estaba casi encima del escritor
Y-nada que deba importarte, baka, ¿Qué no estabas viendo el concierto? –dijo algo nervioso pero controlándose perfectamente
S-ammm si pero tomaran un descanso de 5 minutos… dijeron que ya son las ultimas 5 canciones-dijo volviendo a su asiento pero con un poco de curiosidad, de cualquier manera se sentía feliz y no quería arruinar eso con alguna tontería de su parte
Y-muy bien, tráeme un vaso de café…-dijo seriamente y buscando sus cigarrillos
S-no seria tan malo que dijeras por favor de vez en cuando-dijo fingiendo estar molesto y quitando la cajetilla que acaba de encontrar el escritor –no se puede fumar aquí, aparte te hará daño
Y-… ¿por que debería decirle por favor a un baka como tu?-dijo mientras resignado se tiraba por completo a la cama viendo el techo – mejor apúrate o comenzara antes de que vuelvas
S-suspiro de resignación-bien, ya vuelvo –dijo antes de irse, camino por el pasillo hasta llegar al despachador, como el rubio se lo había pedido lleno un vaso de café y también uno de chocolate para el, apenas acababa de regresar el concierto se reanudo… las ultimas 4 canciones pasaron tranquilamente…. Esa ya era la ultima, las luces se apagaron y solo quedo una alumbrando al castaño, su lado serio cambio al infantil y alegremente comenzó a hablar
R-¡¡¡¡¡SHUICHI!!!!! ¡¡Yuju!!! Esta última canción no la escribí yo -¿are? ¿A que se refería el castaño? ¿Qué no era su canción? – La escribió Yuki Eiri, y esta dedicada única y exclusivamente a ti; espero que la disfrutes- ¡¿¡¿QUE?!?! Eiri… ¿se la había escrito a el?… eso era algo que no se lo habría esperado… con duda volteo su mirada al rubio encontrando una sonrisa en su rostro…
S-¿ei…ri?-dijo con duda en sus palabras
Y-será mejor que escuches atentamente, no pienso repetírtela –dijo sonriendo levemente, pero con una inmensa felicidad detrás de esa sonrisa… el pelirrosa tan solo asintió y volteo su mirada a la pantalla…la canción comenzó:
…
…
…
Nunca pensé que podría vivir, con alguien tan especial,
Siempre creí que sería mejor, vivir en la soledad,
De pronto llegaste a mi vida, y todo logras cambiar,
Me diste alas para volar, por ti en este mundo infiel, baby
Sin palabras, el pelirrosa se había quedado sin palabras ante aquella primera estrofa, escuchaba atentamente la letra de la canción…
Sé que todo es mejor, mi mundo es azul y tú lo iluminas,
Sé que siempre estaré, pidiendo el amor que tú me das,
Y siempre diré mil gracias amor,
Cuando creí que todo acabo, en eso llegaste tu,
Y sin pensar me hiciste luchar, por una nueva ilusión,
Ahora sé que todo esto es bello, por el amor que me das,
Y solo quiero decirte que por ti, ahora puedo vivir, baby
…unas cuantas lagrimas habían escapado por esos hermosos amatistas y es que miles de recuerdos había empezado a pasar en su mente, recordaba los momentos buenos y los malos que había pasado al lado del escritor…sus lagrimas caían, pero su sonrisa solo se hacía más grande
Sé que todo es mejor, mi mundo es azul y tu lo iluminas,
Sé que siempre estaré, pidiendo el amor que tú me das, baby
Sé que gracias a ti, mi mundo cambio y puedo vivir,
Gracias a lo que tú me das, viviendo juntos por este amor
Haciendo la vida mejor,
Guardando esos momentos que tú me das baby
Las lagrimas no dejaban de caer por sus mejillas, realmente esto… esto era algo que nunca se lo hubiera imaginado, aquella canción era muy bella… y en ella, sentía dulzura, agradecimiento y sobre todo amor… se sentía inmensamente feliz…realmente no sabía qué hacer… es que parecía como si después de tanta tristeza, las nubes por fin se alejaran y le dejaran ver la luz del sol…
Sé que todo es mejor, mi mundo es azul y tú lo iluminas
Sé que siempre estaré, pidiendo el amor que tú me das, baby
Sé que gracias a ti, mi mundo cambio y puedo vivir,
Gracias a lo que tú me das y siempre diré,
Mil gracias amor, mil gracias amor
…
…
…
La canción había terminado pero antes de irse el castaño volvió a sonreír plenamente antes de decir:
R-Shuichi… se muy feliz, y nunca dejes de sonreír; estoy seguro que Yuki quiere decirte algo, así que nos veremos otro día- y con esas palabras el concierto se dio por terminado…
S-el pelirrosa no podía salir de su asombro… aun con lagrimas en los ojos volteo a ver al rubio escritor-¿Eiri?
Y-Shuichi yo….-dijo algo apenado y notablemente nervioso, volteo un momento y del mismo cajón que antes saco una pequeña cajita-… ¿te-te casarías conmigo?-dijo al momento que abría la cajita y en ella se mostraba un bello anillo de plata con una gema violeta
S-….sin palabras, se había quedado en blanco ante aquella declaración, después de unos escasos segundos sonrió plenamente y mas lagrimas de felicidad comenzaron a rodar por sus mejillas, sin pensarlo un momento abrazo al rubio fuertemente –si, si, si, si, si, si, si!! Claro que acepto casarme contigo, Eiri, soy tan feliz…-dijo sin poder contener la alegría que eso le había causado…-¡¡te amo!!
Después de que el pelirrosa se calmara un poco el escritor término por ponerle el anillo al oji-violeta, sumergidos estaban en su plática hasta que varias personas comenzaron a llegar, primero fueron Touma y Mika, en segundo entraron K y Suguru, seguido de Sakano, Noriko, Tatsuha y Ryuichi.
Ta-nunca pensé ver a mi hermanito en esta situación, ¿Quién lo diría?-como compensación a ello recibió un golpe cortesía de Mika
M-estoy muy feliz por ustedes dos-dijo con una gran sonrisa, algo que ciertamente sorprendió un poco al pelirrosa, pues sabía que él no era exactamente una persona a la que Mika quisiera
K-yes, is fabulous –dijo aquel rubio manager del cantante sentado tranquilamente
T-bueno, y ¿ya le dijiste a Shindou?-dijo mientras daba un sorbo al café que tenía en las manos; lo más probable es que lo hubiera comprado fuera; el también tenía una sonrisa, muy leve pero más sincera que las que usualmente usaba con las personas
S-¿decirme que?-dijo algo confundido
M-que se casan en una semana-dijo sin poder contenerse y mostrando una gran alegría no solo en su voz sino también en sus ojos…
S-¡¿Qué?! Pero si hay muchas cosas que ver y…-trataba de decir el nervioso pelirrosa, aun shokeado por la noticia
T-no es necesario, Eiri arreglo todo en tu ausencia-dijo terminando su café y entrelazando los dedos
S-¿de-de verdad?-pregunto impactado pero muy feliz… así que… esta era la sorpresa a la que se refería aquella vez…
M-si, se esmero mucho en cada cosa que elegía, decía que esto debía de ser perfecto –dijo con cierta aura de flores asustando un poco a los presentes y es que bueno, Mika siempre había soñado con poder ayudar a organizar la boda de su “hermanito”.
S-¿cómo fue que te aprendiste la canción, Ryuichi?-dijo recordando que el apenas había llegado dos días antes de irse los dos una semana de paseo
R-digamos que ensaye a escondidas tuyas, Shu-chan-dijo con un tono infantil y sacando divertidamente la lengua
Platicas divertidas, algunas seria, sonrisas, bromas, reclamos, muchas cosas pasaron esa noche… los médicos les habían permitido quedarse un par de horas más de la hora de visitas, eran las 12:00 y tenían que irse a casa, después de despedirse todos, poco a poco fueron saliendo quedando en un par de minutos aquellos dos amantes, el pelirrosa froto sus ojos con algo de cansancio, acción que no paso desapercibida por el rubio…
Y-¿tienes sueño?
S-¿eh? A… no… no es nada… estoy bien –dijo tratando de sonreír, pero el cansancio en sus ojos era demasiado evidente
Y-no mientas, duérmete si quieres
S-pero…
Y-mira, preferible que descanses ahora, porque tendremos una semana agitada –dijo volteando su mirada a la ventana para evitar que el pequeño viera un leve sonrojo que había aparecido…
S-…-sin decir nada una ligera sonrisa apareció en su rostro- está bien…-dijo calmadamente, se levanto un poco de la silla y después de darle un beso a l escritor se acurruco de nuevo ahí…
Y-te vas a lastimar si te quedas ahí…puedes acostarte aquí –dijo algo serio
S-pero…-trato de decir, es que no es que no quisiera pero... sería algo incomodo para ambos…
Y-¿acaso piensas poner peros a todo lo que diga? –dijo fingiendo molestia
S-no es eso; es que…-dijo algo contrariado…no quería hacer enojar a su rubio amante
Y-haz lo que quieras…-dijo “terminando” así con aquella conversación para acostarse dándole la espalda
S-sabia que eso había sido solo un berrinche del rubio lo cual le resulto algo gracioso no por algo llevaban varios años juntos, reacciones que antes le molestaban, ahora le resultaban graciosas, porque había comprendido que a pesar de ser un hombre de 27 años, Eiri Uesugi era tan solo un niño; sin hacer ruido apago la luz y se acomodo a lado del rubio, quien al sentir la cálida presencia del pelirrosa no pudo evitar voltearse y abrazarlo contra su pecho… esa noche durmieron abrazados, compartiendo su alegría…
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