Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

-Diamond Virgin- [Todakanu tegami] por aiko shiroyama

[Reviews - 78]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Bueno, hace dos días subí el primer capi y hay dos reviews para esta atípica pareja wiii *0*  -aplausos-

Y bueno, ayer estaba actualizando y se cayó la página e_________e

así que, vengo hoy, algo tarde, pero ya vine!! *0*

Gracias a Hiroki y a Mise por sus reviews <3

Este capítulo es para uds y para la señorita saltamontes y la chica que me agregó al face, muy amable por cierto :)

Bueno, a partir del otro capi se acaba la fase conquista y cosas romanticonas y avanza más rápido la historia. Espero no pasemos de los 6 o 7 capítulos  XD

Eso, nos vemos abajo :) <3

Enjoy!!

 

 

 

Le vio esporádicamente un par de veces más, aquella noche en el club. Parecía haberse adaptado mejor al ambiente y charlaba animadamente con el casanova de Kazuki, sólo esperaba que no fuera lo suficientemente ingenuo para caer con él, como cada novato que asistía a aquellas celebraciones sin ningún motivo, por primera vez.

 

Para la segunda vez que lo vio, estaba con…¿Reita?. Pensó que debía de ser una broma. Esta vez el indeseable de Yo-ka no se veía ni a medio kilómetro de distancia.  Los observaba atentamente, cuando sintió dos pares de brazos rodeándolo y un húmedo beso plantándose en su mejilla.

 

- Aooooi ¿Qué tanto miras?...- Mizuki, como siempre tan efusivo se había colgado de su cuello, mientras lo miraba interrogativo. Estaba casi semidesnudo y para variar; muy borracho. Así que giró su cabeza sólo por si acaso encontrándose con Mao y su típica sonrisa amable, olía  a alcohol, pero no parecía tan ebrio como el guitarrista a su izquierda.

-¿Qué tal? ¿Ya los viste?...- Aoi supo de inmediato a quienes se refería.

- ¿Los Diaura? Sí, ya hable con un par de ellos…

- ¿ Y qué tal? Están muy buenos, ¿No?- Mao le codeó con un gesto pícaro, Aoi lo miró con reproche, pero aun así sonrío. ¿Es que todos pensaban sólo en eso, en ése lugar?

-uhm…uno que otro salvan…- Dijo, mirando a Shoya, quien bebía mientras escuchaba a Reita hablar, sonriendo de vez en cuando.

-¿Uno que otro? Jooo, había olvidado que tus gustos son refinados...- Le molestó Mao, bebiendo.

-…yo…yo me los tiraría a todos…- Soltó Mizuki de la nada. Sonriendo pervertidamente cuando Aoi le miró.

- Tú te tiras a cualquier cosa que se mueva, Mizuki…- Le reprochó el pelinegro, el vocal a su derecha rio sonoramente, mientras el guitarrista hacía un puchero infantil.

 

Aún conversaban cuando de pronto vio pasar justo frente a él, a una breve distancia a Yo-ka. Ignorando a Mizuki y su balbuceos de borracho, le llamó. Se dio cuenta de lo lento que era aquel sujeto, pues miraba para todas partes sin dar con él. Pensando que no había más remedio caminó un par de pasos hasta él, jalándole del brazo, para acercarlo al lugar donde estaban los dos integrantes de Sadie.

 

El vocalista se veía algo confundido, hasta que nuevamente pareció darse cuenta tardíamente que era Aoi quien le había llevado hasta allí.

 

- Oh ¡Aoi! Discúlpame hace un rato por no saludarte adecuadamente…– Aoi fingió una sonrisa amable, mientras los otros dos los observaban, curiosos –…¡Oh! ¡Sempais! – Les miró e inclinó su cabeza ante ambos, sucesivamente, como forma de saludo –… Lo siento, no los había visto, soy Yo-ka – Se inclinó una tercera vez.  “¡Es tan adoraaaable!” Cuchicheó Mizuki a Mao, quien asintió, riendo. Sin embargo, Yo-ka pudo oírlo y se sonrojó.

 

Y antes de que empezaran a comerse con la mirada Mizuki y Yo-ka , Aoi decidió intervenir.

 

-Yo-ka…- Le nombró, obteniendo de inmediato su atención–… Mira…– Le señaló el lugar donde estaban Reita y Shoya. Esta vez el bajista gazetto parecía haber ganado terreno y tenía su brazo sobre los hombros del otro bajista, quien reía, mientras el otro le hablaba al oído.

–…bueno, lo que voy a decir puede ser algo inadecuado, pero lo diré de todas formas…- Mao le miró entrecerrando los ojos; algo se traía Aoi entre manos. El guitarrista de Sadie en tanto, no tenía ojos más que para el vocalista, quien ni cuenta se daba de tal detalle – …Reita es un tanto…como decirlo…peligroso ¿ Me entiendes? – Lo miró con gravedad. Yo-ka abrió más sus de por sí grandes ojos y dejó de mirar a Aoi para dirigir su mirada hacia los aludidos.

- Tú crees que…Reita…– Los miró de nuevo y volvió a hablar–… Reita ¿Quiere….”eso” con Shoya?- Marcó las comillas con sus dedos, parecía bastante inocente como para decirlo.

–…¿Tirarse a tu amigo? Oh sí, lo creo…

-Yo también quiero…- Interrumpió Mao en voz alta, ambos lo miraron –…está realmente bueno ese Shoya…– Se relamió los labios inconscientemente y Yo- ka palideció de un momento a otro.

- ¡Mao! – Le reprendió Aoi, al notar el abrupto gesto de espanto que tenía el vocalista de Diaura en el rostro.

- O…okei…– Sólo dijo el vocal menor, mientras desaparecía entre la gente otra vez. Aoi observó atento a los otros dos. El antes alegre bajista parecía algo aproblemado ahora, teniendo a Reita casi acorralándolo en la pared. “Akira, no eres nada sutil” pensó Aoi; evidentemente, estaba intimidando al chico.

 

Esperó impaciente la aparición de Yo-ka, más cuando notó como  Reita tomaba de la barbilla a Shoya y se acercaba a él, mientras el otro hacía esfuerzos sobrehumanos por quitárselo de encima. Ya empezaba a caminar para detener aquello él mismo, cuando de pronto apareció el vocalista en la escena. Y sutileza parecía ser lo que más hacía falta esa noche, pues sin ningún disimulo tomó de un brazo a Shoya y lo jaló lejos de allí, poniéndolo fuera del alcance del bajista.

 

Suspiró aliviado y satisfecho, se había vengado de Reita. Desafortunadamente justo este dirigió la vista hacia él, parecía molesto. Aoi no pudo contener la risa y entonces Reita pudo pillarlo todo; así que había sido plan de él sabotearle el asunto con el chico, ya se vengaría más tarde pensó, dejándolo pasar. Después de todo la venganza era un plato que se disfrutaba más, frío.

 

 

*-*-*

 

Una vez estuvieron lo suficientemente lejos de cualquier curioso, se detuvo. Soltando al fin el brazo de Shoya, quien venía quejándose hace bastante ya.

–¿Qué se supone que haces? – Shoya lo miró temeroso. Todo atisbo de torpeza y alegría había desaparecido del rostro de Yo-ka; estaba ante él, su verdadera personalidad.

–…lo- lo siento…yo…

– Ese tipo por poco y no acaba violándote ¿Eres ciego o te haces el tonto?

– Yo-ka, en serio que…pero ¡oye!  ¡Tú me dijiste que fuera amable con ellos!...

-¡Sí! ¡Pero nunca dije que podías ni debías irte a la cama con alguno!...- Carraspeó al notar algunas miradas curiosas sobre ellos, intentando disimular después de perder el control por unos segundos.

 

Se quedó en silencio meditando y suspiró. Shoya miraba el suelo, algo afligido.

 

Ascender como banda era su máxima prioridad en ese momento y el hacerse de buenos contactos y amistades en el ambiente era primordial, por eso esa ocasión había que aprovecharla  al máximo, no sabía cuándo tendría la oportunidad de codearse con todos aquellos artistas más adelante. Así que, había que “tener una buena actitud, ser amables y amistosos” les repitió a todos antes de hacer ingreso al lugar. Los demás miembros deseaban lo mismo, por ende se prometieron unos a otros esforzarse al máximo en ello.

 

Reita era un pez gordo, un peso pesado, reflexionó Yo-ka. Sin embargo…

 

Recorrió a Shoya con la mirada de pies a cabeza; no estaba dispuesto a compartir a su atractivo bajista con nadie. Notándolo aún cabizbajo, se acercó a él y lo abrazó, el otro le abrazó por igual, suspirando.

- Lo siento…- Susurró Shoya, suavemente en su oído.

- Está bien, lo lamento también…pero sabes lo celoso que soy…– El bajista asintió – Y tú eres mío, Shoya…- Continuó, mirándolo intensamente. El nombrado sintió como su corazón se aceleraba deliberadamente.

- ¡Yo-ka! – Escucharon ambos, Byo , otro de los Screw lo llamaba en ese instante. Yo -ka le hizo un gesto y sonrío, indicándole que ya iba.

-Ten cuidado….sobre todo con ese Reita y Mao, el vocal de Sadie…¿Entiendes? Casi le partí la cara cuando dijo que quería acostarse contigo – No pudo evitar sonrojarse con el comentario, por muy imprudente que esa reacción fuera. El vocal en un rápido y disimulado movimiento se acercó y le plantó un corto beso en los labios, para luego dirigirse hasta donde lo llamaban.

Y así fue como se quedó sólo de nuevo, viendo esta vez con atención y detenimiento a todos los asistentes que su mirada pudiera abarcar.

 

 

+*

Cuando dieron las cuatro de la mañana, entraron unos guardias a sacarlos de ahí de manera poco amable, alegando que había acabado el tiempo por el que habían pagado para estar ahí y que cerrarían. O algo así pudo captar Shoya, desde el lugar en que estaba sentado con Kei.

 

Una vez afuera, el frío se hacía sentir. Mao cargaba a Mizuki, absolutamente “muerto” según el mismo decía a quién se lo preguntaba; el guitarrista había sucumbido a los altos niveles de alcohol en su sangre.

 

En tanto los demás se dispersaban en pequeños grupos, mientras discutían en casa de quien seguir la fiesta. Muchos optaron por simplemente retirarse y otros se dedicaban a intentar que no se fueran y así. Junto con Kei y Yuu, buscaron a Yo-ka con la mirada hasta dar con él, muy abrazado a Manabu de Screw, quien parecía en mal estado y era ignorado por los otros miembros de su propia banda, a causa de ello. Ambos chicos rieron, pero a Shoya no le causó nada de gracia. El tal Manabu parecía muy entusiasmado con Yo-ka y se le colgaba al cuello, mientras el otro sólo se reía, abrazándolo. Fastidiado decidió mirar a otra parte y divisó a Aoi a algo de distancia, encendiendo un cigarro, junto con Reita. Justo cuando el otro reparó en su mirada a lo lejos, alguien entre el gentío de j-rockers alzó la voz.

 

-Ya… ¡Hemos decidido donde iremos!- Anunció casi solemne Kaoru de Dir en Grey. Todos guardaron silencio; era una figura más que respetable en aquel ámbito. –…la casa de Reita.

–¿Qué? ¡¿Mi casa?!-Visualizó en menos de cinco segundos lo que ello podría significar para su tranquilo, lujoso y nuevo hogar.

– …sí, te has mudado recientemente y es el único lugar donde no hemos ido aún…– Le espetó sin inmutarse el líder de Dir en Grey.

– Aoi…– Lo miró rogándole con los ojos.

– ¡Ni los sueñes! ¿Sabes cuánto dinero gasté reparando los vidrios y la cañería del baño? Sin contar los vómitos que tuve que trapear, los condones que debí recoger y …¡¡Todos los vasos que rompieron!!—Gritó, escandalizándose sólo con recordar la última vez que tuvo a esas casi cincuenta o sesenta bestias en su “mansión normal” como solía llamarle él con modestia.

 – ¿En serio no hay más opciones? – Intentó Reita.

–….¡Y mi televisor! Mi amplificador NUEVO Akira….¡Nuevo! y…– Lo zamarreaba, en una especie de trauma.

–Ya, ya Aoi, ¡Ya entendí! – Le dijo harto. – Está bien…si no hay más remedio– Suspiró, derrotado.

Mientras los demás sonrieron, victoriosos.

Todos se apretaron como pudieron en los pocos autos disponibles, para dirigirse hacia la casa del bajista de The Gazette. Al cabo de unos cuarenta minutos, ya estaban ingresando al exclusivo barrio donde se había mudado recientemente el bajista.

- Wooow…– Observó asombrado Aoi –…así que te has comprado esta tremenda casa ¿Sólo para ti?... – Reita lo miró molesto ¿Qué había de su casa? Aún con lo lujosa que fuera la suya, la de Aoi seguía siendo mucho más grande y de seguro más costosa.

– No, Aoi…es sólo una “mansión normal”…– Le dijo, recalcando con los dedos, recibiendo una mirada asesina del guitarrista–…es que sólo tú puedes ser tan descarado…– Soltó, antes de abrirles –con todo su pesar– la puerta a los demás a su nueva casa. Le pidió disculpas al dintel de la puerta, asumiendo la destrucción que aquella vivista cimentaría en el interior.

 

Tal como predijo y con desazón, observó en menos de una hora la transformación de su casa en un antro cualquiera. No sabía de dónde diablos habían salido, pero ahora colgaban de sus  paredes, luces intermitentes y de colores. No se creía que los otros fueran tan vandálicos como para habérselas robado del lugar de donde venían. Agotado mentalmente con demasiada anticipación, se sirvió algo para beber, esperando hacer el trago menos amargo.

 

También como por arte de magia, empezó a llegar más gente hasta el lugar con bolsas y hasta cajas de alcohol. Suspiró, eran las seis y más de la mañana, amanecía y los muy aún tenían energías y él seguía sin disfrutar de la “cálida compañía” de nadie. Por un momento observó a Aoi a su lado, quien parecía algo aburrido, lo recorrió con la mirada y el otro enarcó una ceja, extrañado.

 

“uhm...” Meditó Reita, Aoi no estaba nada mal… ¿Pero que estaba pensando? ¡Era su maldito mejor amigo! Sacudió la cabeza harto de sí mismo. Mejor se iba por otra parte, pensó. La última vez que por obra y gracia del trago se le había ido encima a Aoi  había acabado con múltiples contusiones en especial en el rostro y….en otras partes del cuerpo muy  sensibles. Ese pelinegro era de temer, de amable tenía la pura apariencia, pensó, mirándolo con reproche. Nada le costaba regalarle un inocente beso sin ninguna intención secundaria, con aquellos labios tan…

“¡Basta!” Se detuvo a sí mismo. –…pero que te pasa Akira….—Le escuchó decir a Aoi, quien estaba divertido mirando la de gestos extraños que hacía el otro de hace varios momentos.

– nada Yuu…– Desvió la vista. “Está mintiendo” dedujo Aoi de inmediato. Se acercó a él intentando mirar su rostro que se esforzaba en esconder  ¿Pero que demonios le sucedía? Se le hacía de lo más gracioso. De la nada el otro giró y por poco no estrella su cabeza en la nariz del curioso.

- Por dios…¡Aoi! ¡Aléjate! – Chilló espantado.

- enserio, que mier…

- Aoi ¡NOHETENIDOSEXO!- Gritó sin que casi se le pudiera entender. A causa del ruido poco le escuchó su pelinegro amigo.

- ¿Qué dices? – le pregunto cerca del oído. Reita pensó que el destino era muy cruel con él, mientras sentía el aire del otro rozar su muy sensible oreja. Acabó desesperándose.

- mira…- Le tomó del cuello de la camisa agresivamente y le habló de muy cerca–…digo que estás como para partirte con esa camisa tan ajustada y que yo no he tenido sexo aún... ¿Lo captas?

No era para nada lento, así que le empujó tan bruscamente como el otro le había agarrado.

- Lo capto…mantén tu distancia…- Vio como el otro se sonreía burlonamente–…o ¡Ya sabes lo que te espera!…- Le gritó alzando el puño, cuando su amigo hizo ademán de acercarse.

 

Y dicho lo último se fue lo más rápido que pudo, mirando hacia atrás de tanto en tanto asegurándose que Akira y sus necesidades sexuales no lo siguieran. Poco se veía entre las luces parpadeantes y el humo de cigarrillos y otras sustancias poco sanas que fumaban la mayoría de los asistentes. Y la contaminación no era sólo una ofensa a sus pulmones que apenas si pasaban un cigarro mentolado, sino también sus oídos y su cabeza se sentían muy abombados; la música no era para nada suave y entre ella y los gritos, más las risotadas de toda  la masa de gente que había en ese lugar le tenían casi desorientado.

 

Se giró una última vez para extinguir su paranoia y sintió como chocaba con algo. Volteó inmediatamente para ver a quien había terminado por dejar en el suelo. Vio una mano pálida ascender desde abajo y la cogió, alzándole.

 

– ¡Lo siento!...- Gritó para que el chico le escuchara. Sonrío espontáneamente al ver que se trataba de Shoya. Al fin podría siquiera dirigirle la palabra. El bajista sonrío de vuelta y al cabo de unos segundos de estar sólo fijándose en la sonrisa que le devolvía el otro, notó como Aoi tiraba de su mano para liberarse, le soltó inmediatamente avergonzado “Soy un estúpido” se dijo mentalmente, no sabía porqué, pero se volvía más torpe de lo común con la sola presencia del mayor de los gazettos. Bueno, debía de ser natural si se trataba de la estrella de rock que siempre admiró, intentó excusarse todavía conversando mentalmente consigo mismo. Después de todo, pensó, mirando sus facciones hasta dar con sus ojos; Aoi resultaba ser más impresionante en persona que en televisión.

Nuevamente le estaba investigando con la mirada, pero frontalmente. Se estaba haciendo un silencio algo incómodo así que intervino para “romper el hielo”.

- Oye…¿Shoya?- Fingió no estar seguro de su nombre; pero sí que lo estaba. El otro salió se su leve trance, prestando atención. –…y ¿Te has divertido?—Sí, no era el tema más interesante del mundo pero no le podía pedir más a su agotada cabeza.

–…bueno, eso creo, estábamos con Yuu…– Se volteó para señalar a Yuu quien hacía pocos segundos estaba a su lado. – ¿Yuu?... – Miró en todas direcciones “El muy bastardo me ha dejado sólo” maldijo en su mente, de seguro se había ido a perseguir a Kei. Aoi miró en la misma dirección que se había quedado mirando el bajista y luego lo miró.

– al parecer se ha ido..¿No? – El otro asintió cabizbajo y ultra avergonzado ¿Qué clase de amigos tenía?. Aoi notó el desánimo repentino del chico.

- Oh vamos… no te deprimas, tómate un trago conmigo…- Y cogiéndole suavemente del brazo lo dirigió hasta la cocina; la nueva barra improvisada en casa del bajista gazetto. El más joven sólo lo siguió, mirando su cabello, parecía muy sano para haber sido teñido, peinado, maltratado por las manos de más de algún estilista. Se preguntó si lo habría peinado él o iría a alguna peluquería. De pronto Aoi volteó para comprobar que aún el otro le siguiera y Shoya le sonrío dulcemente. Volvió la vista al frente e inconscientemente suspiró; aquel hombre era un encanto.

–…Aoi…- Lo llamó con voz baja, pero con  todo el nombrado lo escuchó. Después de todo en la cocina no había tanto ruido como en el resto de la casa.

–¿Sí?...- Preparaba un par de tragos.

–¿ Qué es lo que me querías decir, cuando estábamos en el local? – Aoi se detuvo, pensando ¿Qué es lo que realmente quería? Le había estado mirando de hace rato y en cuanto le vio con los cigarros había ido hacia él.

-…Sólo quería un cigarro, ya sabes, los míos se habían terminado…– Estaba mintiendo, pero había sido como un engaño inconsciente. Después, bastante después que perdiera a Shoya y Yo-ka de vista, se había dado cuenta que en el bolsillo de su pantalón tenía una cajetilla aún sin abrir. Tenía la sensación al pensarlo nuevamente, de que había tenido la necesidad de inventarse cualquier excusa, sólo para poder acercarse.

- ¿Todavía… lo quieres?  – Salió de sus pensamientos, encontrándose de nuevo con esa timidez y esa dulzura innata en Shoya. Mientras lo veía sacar la cajetilla , todavía sin escuchar su respuesta. Golpeó la cajetilla un par de veces para que un cigarro asomara y extendió la caja hacia él. No eran los que él fumaba; eran ultra lights, muy de chica. Sin embargo lo recibió y dejó  incluso que el bajista lo encediera , con su mechero.

-¡Oh! ¿Es parte de los productos de la banda? – Mencionó al ver el logo de  Diaura impreso en el mechero.

- sí...- Contestó repentinamente entusiasmado–…¡Son realmente buenos! Mejores de los que suelo comprar al menos…– Empezó a jugar con él bajando la tapa que activaba el mecanismo, una y otra vez. Sonreía y sólo podía observarlo, esa sonrisa como de un niño que se divierte con algo tan simple como eso le inspiraba querer sonreír también. Esa clase de inocencia era algo que no se hallaba generalmente en gente que pertenecía a esa clase de ambiente. Echó una rápida mirada a algunos ebrios chicos que iban y venían en busca de más trago y se apenó por un instante, pensando que probablemente esa inocencia se vería corrompida por ese sucio ambiente tarde o temprano.

– Así que te gustan los mecheros…– Sólo se atrevió a decir, en medio de sus oscuros pensamientos.

- Sí, eso creo…– Se sentía bien, aunque no hablaban mucho se sentía muy cómodo a su lado. Era una extraña calidez, una sensación cercana a un agradable sueño ¿Cuándo despertaría?

Aburriéndose al fin de observar la llama de fuego del mechero y temiendo gastar todo el combustible de este, fijó la mirada en el vaso que Aoi le había servido. Era un licor de dos colores, rosa oscuro en el fondo y hacia arriba se hacía translúcido.

-¿Qué es?—Preguntó, tomando el vaso al tiempo que observaba al guitarrista, quien ya iba por la mitad del vaso.

- Vodka Cherry…–Respondió Aoi, volviendo a beber. Observó el vaso antes de llevárselo a la boca, le agradaba el color. Bebió un pequeño sorbo intentando percibir el sabor, pero cuando llegó a su garganta sintió como le quemaba el alcohol y carraspeó intentando aclarar su garganta; estaba algo fuerte. Fuerte para alguien que no bebe más que cervezas.

 

Aoi se rio al ver su ceño fruncido mientras miraba al vaso, como desafiándolo. Al parecer no bebía tragos fuertes. Aun así lo vio tomar el vaso y volver a beber otro sorbo corto, se le dio mejor y habiendo ganado confianza se bebió todo el vaso de una vez.

 

- Oye… ¿No vas un poco rápido? Si no estás acostumbrado el alcohol se te puede subir rápido a…

– ¡Shoya!...- Yuu, el desaparecido baterista regresó, parecía algo apurado. –…Yo-ka te está buscando…está muy…- Miró a Aoi y pareció arrepentirse de lo que iba a decir –…quiere que estemos juntos un rato, nos hemos dispersado y al parecer está aburrido entre tanto desconocido…– Remató. Aoi no le creyó nada, había sonado como una excusa forzada. Además parecía transmitirle alguna especie de señal con la mirada a Shoya, quien había palidecido sutilmente.

-…ya veo…– Dirigió su vista hacia el guitarrista, lamentaba mucho el tener que irse –…Bueno…me voy, gracias por el trago…– Sonrío.

–…a ti , por el cigarro y la buena compañía…– Se sonrojó ante lo último; siempre se le iba la sangre al rostro por todo, pero con Aoi le sucedía más de lo común.

Con un leve gesto con su cabeza y una sonrisa imborrable siguió a Yuu. Sin embargo de la nada se detuvo y volvió sobre sus pasos, dejando junto a la mesa, al lado de un sorprendido Aoi su mechero.

– Cuídalo bien, es mi favorito…– Y volvió por donde venía, sin dejar al guitarrista ni reaccionar, con la vista fija todavía sobre el objeto negro metálico que el bajista le había obsequiado, gentilmente.

Para cuando quiso agradecer, Shoya ya había desaparecido. Lo tomó, estaba tibio.

 

 “El calor de Shoya”

 

Lo apretó entre sus manos, para luego volver a mirarlo y depositarlo finalmente en el bolsillo izquierdo de su chaqueta.

“Cuidaré de él, lo prometo” Pensó. Sonriéndole al recuerdo de su dulce sonrisa en su mente.

 

 

Notas finales:

tadáaaaa!! *0* Ya, si no estuvo taaaan bueno o si? 

¿ Cómo saber? Abajo a la derecha existe la opción reviews! *0* para que me manifieste sus opiniones, apreciaciones, insultos y para que deposite sus corazones, flores o tomates , si me odia demasiado por no avanzar tanto :(

Pero ya, si son buenitas , en el capi subsiguiente (es decir, no en el que viene, sino en el otro) les pongo el lemon wiiiii *0*

Ahm, ¿Ya se nota por quien el fic se llama diamond virgin? ¿No se nota quien es el "inocente" de la historia? XDD

Ya en serio, perdón por abusar del "inocente" , la palabrita, sólo era para que se hicieran la súper idea ajajaj okei okie no, no hay excusas, pero ya que conocen a Shoya ya, no la usaré tanto.

Aquí Shoya como aparece en esta historia

http://images5.fanpop.com/image/photos/31300000/Shoya-diaura-31322644-1067-1600.jpg

y eso :)

Nos leemos y no olvide el cuadrito en la esquina inferior derecha de su pantalla, le baila y le seduce para que escriba su review sobre él *0* (?) 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).