Cap 7: El deseo nos invade
Me abrazo por los hombros acercando mas mi rostro al suyo, una mano de el estaba en mi nuca y la otra en mi hombro. Yo lo tome de la cintura y lo apegue mas a mi, poco a poco el calor empezó a notarse en nuestra respiración.
Sentía pequeños jadeos escapar de su boca, mientras se aferraba a mi. ¿Esta bien lo que estamos haciendo?....
¡Al diablo con eso! Disfrutare esto… Lo disfrutare mucho.
Comencé a bajar por el cuelo de el mientras el me despeinaba, empecé a dar pequeños pasitos encaminándonos hasta la mesa. Allí lo senté y seguí besándolo, devore sus labios con mucha desesperación. L me saco la chaqueta que traía y me dejo con una polera, yo empecé a subir mis manos por debajo de su playera. Sentí su piel en mis dedos, empecé a acariciar su abdomen, sus hombros y me detuve en sus pezones. El solo comenzó a subir el volumen de los gemidos, me quito la polera y se ruborizo me acerco a el y me acaricio mis hombros y empecé a sentir sus uñas en mi espalda.
Lo recosté en la mesa y me subí arriba, le quite la playera, y baje mi boca a donde estaban mis manos antes, en sus pezones. Mientras mis manos seguían bajando, comenzando a acariciar su miembro por encima de la ropa. Sus jadeos empezaron a ser notablemente más audibles, empezó a moverse inquieto.
Subí la mirada mientras seguía acariciándolo en su ya erecto miembro. Lo mire a los ojos mientras veía como el trataba de controlar la respiración, la vista era para enloquecerme, L con los ojos entrecerrados de placer, su boca semi abierta donde se escuchaban gemidos, sus mejillas ruborizadas… Eso hizo que me excitara más y empezara a doler.
Volví a besarlo, pero tuve que cortarlo por que el necesitaba respirar, así que empecé a descender mis besos... Hasta que llegue al filo del pantalón, con lentitud lo desabroche y le baje el cierre, empecé a bajarlo mientras lo miraba a los ojos, el notaba claramente avergonzado. Cuando retire por completo la prenda, pude notar el bulto que se hacia en los bóxer, lo lamí por encima de la finísima tela de los bóxer. El dio un pequeño saltito cuando lo hice. Lo mire, aun en mi posición y le sonreí pícaramente haciéndole entender que es lo que quería hacer.
El se sonrojo mucho cuando le baje los bóxer, quedando todo su miembro a mi vista, se notaba que el estaba extremadamente nervioso, no sabia si pedir mas o salir corriendo por la vergüenza.
Tome su miembro y le sople la punta, el soltó un gemido mas audible, luego le acaricie con la lengua toda la extensión de su pene. Para luego metérmelo de lleno a la boca, mientras simulaba embestidas, el se retorcía de placer. Aferro una mano en mi cabeza, queriendo que entre mas en el.
-ahh… mmmm…. L-Light-Me dijo en un momento- Ya…. M-me vengo Ahhh
El trato de apartarme de ahí, claro sin éxito. Le tome las manos prohibiendo. El solo protesto y volví a su miembro y seguí simulando embestidas con mi boca y lamiéndolo con mi lengua. Hasta que por fin… sentí el liquido de L en mi boca, lo y trague sintiendo así el dulce sabor de mi L.
-Perdón…-Me dijo todo sudado y tratando de controlar su respiración.
-Eres adictivamente delicioso-Dije mientras me desnudaba. Sentí su mirada clavada en mí, y vi que volvía a excitarse.
-¿Quieres seguir?-Dije mirándolo con ternura
El solo asintió y me sonrió dulcemente, me senté en la mesa y lo ubique encima de mí, alinee mi pene con la entrada de L y poco a poco hice que L empezara a descender. Vi que arrugaba la expresión de rostro y después vi una lagrima caer por sus mejillas, quise sacarlo, pero el siguió bajando. Hasta que llego hasta el tope y se quedo allí tratando de acostumbrarse, mientras yo trataba de distraerlo, lo masturbaba y lo besaba.
L hizo un pequeño movimiento y lo mire y vi que podía proseguir, le tome las caderas y lo subía y lo bajaba de mi pene, el suave roce me volvía loco, así que no tardo en que se volviera mas rápidos las embestidas, el gemía ahora sin que nada lo detuviera. El me tenía abrazado por los hombros y gemía a mi oído.
-Ahhh L-Light Ahhh mmmm T-Te amo!-Dijo con dificultad.
En eso el llega a su orgasmo y yo llegue unos minutos después. Lo mire a los ojos y mientras le apartaba los mechones de la cara le susurre…
-Yo también Te amo…
“Al fin podía sonreír, lo que siempre quise que fuese mío… Ahora lo era.”
Fin cap. 7