POV JIYONG
-quiero hacerlo. Empecemos cuanto antes, por favor. – dije con la mayor seguridad que alguna vez mostré. El doctor sonrió amablemente.
-me alegra escuchar tu determinación, ese es un buen punto de partida, pero no apresuremos los hechos. Para mí es importante que te sientas cómodo hablando conmigo, el primer día lo tomo como uno de presentación. ¿De acuerdo?
-está bien.
Propuso que nos reuniéramos 2 veces a la semana, miércoles por la tarde y sábados por la mañana. Seung estuvo de acuerdo, ya que él me acompañará en la sesiones según lo acordado, así que luego de decidir algunos detalles menores, nos despedimos. La señora Choi quien nos acompañó en todo momento, se quedó en la clínica ya que saludaría a algunos colegas y amigos. Por eso, Seung y yo estábamos camino a mi casa. Él se ofreció a traerme, como siempre tan atento conmigo.
-¿En qué piensas tanto? – escuché que preguntó. Volví mi rostro y le sonreí. Parecía un poco preocupado.
-el doctor es alguien muy agradable, pensé que sería diferente.
-mi mamá sabe a quién escogió, sé que no nos decepcionará.
-puedo preguntarte algo.- tenía una pequeña curiosidad que no me había atrevido a decir.
-¿Cuál es?
-¿Por qué… tu madre no me trata?
-¿Quisieras que así fuera?
-no lo sé, pero como ella sabe todo lo que me ha pasado, pues sería más fácil, ¿no?
-ella me dijo que no podía tratarte. – lo miré sorprendido por esa respuesta – según sé, no se debe tener lazos con los pacientes y mi madre tiene un lazo fuerte contigo, ella te quiere muchísimo y esos sentimientos podrían ser contraproducentes en el tratamiento.
-era por eso.
-¿Yongie quieres que busquemos a otro doctor?
-no – me apresuré en responder. – sólo era curiosidad, no me malinterpretes.
-confiaré en ti – sonrió.
Llegamos a mi casa y la señora Heo nos recibió alegre. Nos invitó algunos piqueos mientras veíamos televisión en la sala, aunque en realidad estábamos hablando de otras cosas. Las horas pasaron rápido y lo notamos cuando el teléfono de Seung comenzó a sonar.
-aló – respondió la llamada. Acomodé mi cabeza en su hombro y él afirmó nuestras manos. – sí, todo está bien. Al final fuiste con Yun Ho. –lo miré con curiosidad, pero no me hizo caso. – No iré, diviértanse ustedes. Saludos. – colgó.
-¿Quién era?-pregunté.
-se7en- contestó guardando su móvil.
-¿él está con Yun Ho hyung?
-sí – suspiró y volvió su vista a la pantalla.
-¿A dónde fueron?
-están en una fiesta.
-¿te llamó para que fueras?
-ya le había dicho que no iría, voy a quedarme contigo.- sonrió y besó mi frente.
-no tienes que faltar por mí, puedes ir si quieres.
-¿me estás dando permiso para ir? – preguntó en broma.
-no necesitas permiso para salir. Solamente no quiero que dejes tus amistades por quedarte.
-no lo hago.
-uhm… - él siguió viendo tele, pero yo no estaba conforme. Hoy es sábado y hemos estado toda la tarde sentados viendo la tv. En otro tiempo seguramente él estaría divirtiéndose, pero ahora solo está aquí. -¿salgamos? –digo sin verdaderamente pensarlo.
-¿Cómo? –pregunta.
-estoy… ¿aburrido? – Frunce el ceño ante mi rara respuesta.-salgamos un rato a caminar. -Me mira con sospecha. Sabe que no me gusta salir y continúa sin gustarme, pero quiero hacerlo por él. -¿vayamos si?- me pongo de pie aun con nuestras manos tomadas y le insisto. Me sonríe y con el control apaga la tv.
-está bien, per o antes sube y ponte un abrigo.
-sí. – asiento varias veces con una sonrisa en mi cara y voy por un abrigo a mi habitación. Mi plan funcionó.
FIN POV JIYONG
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-¿vendrá? – preguntó esperanzada y junto a ella los demás jóvenes.
-lo sienta Dara, pero Seung no vendrá. – respondió Dong Wook guardando su teléfono en el bolsillo de su pantalón. En todo el local se escucharon jadeos desanimados.
-si sigue así, voy a creer que nos odia.
-no es así, solo que hoy tenía otra cosa que hacer. – se adelantó en responder Yun Ho. La rubia miró a ambos con los ojos entrecerrados.
-¿ustedes saben porque no vino cierto? – Cuestionó pero ellos guardaron silencio.- no sé ni porque les preguntó si no me dirán nada. Todo esto lo organizamos para reencontrarnos como amigos, pero ni él ni Ji Yong vinieron. – suspiró resignada.
Secretamente los alumnos del tercer ciclo habían planificado esa fiesta para disculparse, pero ahora que ninguno de los dos había venido pues el propósito no se iba a cumplir. Las luces, los globos, la música, las sorpresas; todo había sido en vano.
-chicos no se desanimen. Tengan un poco de paciencia. – agregó Dong Wook, viendo a sus compañeros de clase realmente apenados.
-chicos escuchémoslo –dijo Bom –Seung es nuestro amigo y estoy segura que pronto se volverá a juntar con nosotros. Además, cuando arreglemos las cosas con Ji Yong, seremos el salón más unido. Así que a levantar esos ánimos, que la noche aun es joven.
-¡¡¡YEEEAAAAHHHH!!! – exclamaron todos y la música volvió a resonar en el local. Todos con sus energías de vuelta.
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Por las calles de Seúl, la joven pareja de enamorados caminaba tomados de la mano. Como lo había dicho el menor, desde que partieron de la casa no usaron ningún vehículo solo su pies. Ahora estaban paseándose por los centros comerciales que por ser sábado estaban repletos de gente y llenos de vida. Por fuera los paneles de publicidad iluminaban las calles de esa noche.
-fue una buena idea salir. – comentó Ji Yong con una sonrisa hermosa en su rostro.
-lo fue, pero ¿sabes que es lo mejor? – cuestionó Seung Hyun.
-¿Qué cosa?
-salir contigo-esa respuesta sonrojó al pelirrosa.- ¿Por qué siempre que te digo cosas bonitas te apenas?
-l-lo siento – se disculpó con la mirada gacha.
-no es para que te disculpes. – detuvo sus pasos para mirarlo de frente. – es que es curioso, de verdad no había conocido a alguien tan tímido como tú. Todos los que conozco son bastante atrevidos y “alegres”.
-¿quieres que cambie? – preguntó con un poco de tristeza.
-claro que no. Me gusta cómo eres, y amo cada uno de tus gestos. – Colocó sus manos en las sonrojadas mejillas – te amo a ti – le sonrió y Ji correspondió con una pequeña sonrisa llena de agradecimiento. – sigamos caminando, aún tenemos un largo recorrido.
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-que tranquilo y silencioso es aquí – murmuró Ji Yong cerrando los ojos.
-comparto tu opinión. Realmente dormiría como un bebe en un lugar como este.- dijo Seung Hyun.
-a ti te gusta tu cama, dudo que quisieras dormir en el césped. –sonrió con un poco de burla.
-es un decir, ¿acaso tú dormirías en un parque al aire libre? –volvió su cabeza y abrió los ojos para ver a Ji Yong. Ambos estaban acostados, debajo de un frondoso árbol, en el parque que se encontraba frente a la mansión del menor. El pelirrosa sonrió nostálgicamente ante la pregunta del mayor.
-dormiría agradecido en donde pudiera hallar la paz.- sus parpados se levantaron lentamente tras hablar. Sus ojos cafés estaban acuosos, y un pequeño nudo se formó en su garganta, haciendo difícil la tarea de respirar.
-bebé – pronunció con voz queda. Sintió impotencia de ver aquella pizca del dolor de su amado. Ji Yong veía el cielo con melancolía, y una traviesa lágrima escapó rodando por su rostro. – Yongie – Seung se apresuró en atrapar al menor en sus brazos y dejó besos sobre su mejilla.
-Hyunnie no te asustes – pidió con tranquilidad- a veces… mi corazón duele mucho – mordió su labio conteniendo el llanto y miró con ojos lagrimosos el rostro afligido de Seung -, pero está bien. Me he acostumbrado a sentirlo. No es algo… que el doctor Seo, ni nadie pueda reparar.
-¿es… por tus padres? – preguntó con cuidado, y acertó. Ji Yong no pudo contenerse más y se quebró. –sé que no puedo traerlos de regreso, pero permite ser tu soporte. - lo abrazó con todo su amor, queriendo transmitirle ese sentimiento lleno de cariño y sinceridad para poder sanar un poco el corazón de su amor, aunque como el mismo pelirrosa dijo nunca podría sanar solo apaciguarlo y asimilarlo.
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MIÉRCOLES
-¿estás listo para entrar? – preguntó Seung Hyun.
-supongo que sí. –contestó nervioso.
-¿si no quieres responder algo?
-guardo silencio.
-¿si ya no quieres seguir?
-te lo digo.
-ok, ya sabes que hacer. Entremos – tocó la puerta dos veces y la abrió.
-chicos buenas tardes. – Dijo el doctor Seo, levantándose de su asiento y caminando hacia ellos.- ¿Cómo están?
-estamos bien, llegamos un poco temprano al parecer – comenta Seung adentrándose con el menor a su costado.
-descuiden, tomen asiento. Termino de ordenar unos documentos y empezamos.
Cuando el doctor volvió a su consultorio luego de entregar unos documentos, él se sentó frente a ellos. Les sonrió amablemente e inicio la conversación.
-chicos disculpen la demora, ahora podemos empezar – dijo tomando su carpeta con el expediente de Ji Yong. Dio una brevísima ojeada y levantó la mirada hacia el menor.- los tres sabemos porque estamos reunidos, ¿cierto? -ellos asintieron despacio, un poco incomodos. -¿Por qué has decidido iniciar este tratamiento? –cuestionó directamente.
-yo… quiero estar bien – murmuró cohibido ante la pregunta.
-entonces ¿por qué dejaste correr el tiempo? ¿Antes no deseabas estar bien?-aquella pregunta dejó callado a Ji Yong, no sabía que responder.
-él lo ha intentado – intervino Seung Hyun al ver a su novio cabizbajo. Estaba en silencio, no quería responder, tal como acordaron antes de entrar al consultorio –lo ha intentado, pero han sucedido muchas cosas. Además no creo que lo importante sea cuanto ha pasado, sino que ahora está aquí.
-sé que cometo una infidencia, pero sé que no es por decisión propia el que estés aquí. –Ji Yong se encogió de hombros, evitando su mirada y también el responder.
-fue idea de mi madre, y Ji Yong está de acuerdo. Queremos ayudarlo. – volvió a intervenir el pelinegro, captando la atención del adulto.
-reconozco el aprecio que le tienen tu madre y tú –dijo cordialmente sin ningún reproche.- pero como sabrán no se puede obligar a nadie a empezar una terapia, debe ser consentida, pero sé que en este caso es así. Además, es algo muy bueno tener personas que nos quieran cerca de nosotros.
-es excelente – comentó Ji Yong con más entusiasmo. – me gusta que ahora haiga personas a las que les importo.
-¿antes no te sentías importante para nadie?
-uhm… - pensó un poco y rápidamente un nombre apareció en su mente – si hubo alguien, pero no lo noté.- suspiró con nostalgia – no pude ver más allá de mí mismo – dijo con reproche hacia su persona.
-en ocasiones nos volvemos ciegos de quienes nos rodean, ya sea para no lastimarlos o para auto-flagelarnos. El ser un humano es tan egoísta que solo puede ver su sufrimiento.
-Aun así, particularmente, aparte de él no existía nadie a quien le importara mi existencia.- dijo con dolor. El medico advirtió como el pelirrosa estaba cayendo en recuerdos agudos de su pasado, y eso no era bueno para una primera sesión, no debían tocar terrenos tan inestables sin siquiera haber fortalecido el autoestima del joven.
-puede que tengas razón y yo esté equivocado – interrumpió los pensamientos de Ji y captó su atención. – pero si tú no decides tomar las riendas de tu vida, el resto tampoco tendrá porque hacerlo, cada quien tiene una vida y su propio mundo. Depende de uno decidir cómo vivirlo. Si tú ahora estás aquí es porque las personas que te quieren han optado por tomarte en brazos y caminar el primer tramo, pero el camino restante vas a tener que andarlo tú, ya sea con ellos al lado o no. - los ojos cafés lo miraron con temor por dichas palabras, así que le sonrió para calmarlo –tranquilo, con esto no quiero decir que estarás solo. Si no que está será tu lucha.
-soy consciente de ellos, yo quiero un futuro feliz.
-te equivocas – recibió una mirada confundida –lo que debes anhelar es que tu día a día, tu presente, hoy empiece a cambiar. Te digo esto porque lo que decidas hacer, así sea la decisión más irrelevante a tu parecer, va a forjar el camino al futuro que tendrás.
-no lo había visto de esa manera.
-a veces es difícil ver las oportunidades que tenemos en nuestras narices, pero trabajaremos juntos en ello.
-muchas gracias – inclinó su cabeza con agradecimiento – pensé que sólo me daría palabras de consuelo, pero me doy cuenta que no será así.- sonrió levemente.
-ten en claro que no necesitas que el resto muestre lastima por ti. Sentir lástima es ponerte por encima de una persona creyéndote mejor que ella, infantilizándola de alguna manera porque te da pena y te parece pobre y débil.
-lo entiendo, pero lo que dijo me recuerda a mí. – comentó con algo de tristeza. Esa era la imagen que tenía de su persona.
-entonces cambiaremos la percepción de ti mismo.- sonrió con entusiasmo siendo correspondido por Ji Yong. – miren que el tiempo ha corrido en nuestra primera sesión, dejaremos todo hasta aquí y lo continuaremos el miércoles.
-vendremos puntuales. – anunció Seung poniéndose en pie.
-sí, estaremos a la hora acordada. – agregó Ji Yong levantándose del cómodo mueble.
-nos vemos dentro de un par de días. Cuídense.
-igualmente – se despidieron del terapeuta.
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-¿Cómo te sientes? – preguntó Seung cuando ingresaron a su auto.
-no voy a mentirte, al inicio me atemoricé y acobardé, pero… - pausó unos segundos para luego mostrar una brillante sonrisa –siento que finalmente voy a cambiar mi vida. Hyunnie… -llamó a su novio, quien lo miró maravillado por el dulzor en su tono de voz al nombrarlo –Hyunnie seré tan feliz como todos.
-vas a ser mucho más feliz que todos porque estaremos juntos y tendremos el doble de felicidad para darnos.
-sí, seremos más felices – sonrió hasta con los ojos y se abalanzó sobre el mayor para darle un gran abrazo que contenía todas sus esperanzas.-muchas gracias Seung Hyun.
CONTINÚA…