Capítulo 20
-Vale... tengo que ir a hablar con ella. ¿Te has traído el coche?- miro a Kate con desesperación en busca de una respuesta.
-Me trajo Kyle. Aun así no estoy en condiciones de conducir- Agita la copa de martini de su mano.
-Pero yo podría. Apenas he bebido un sorbo de la mía...- Me quedo pensando como ir a su casa.
Se acerca Shage. Parece ser que Sophie ha decidido soltarla.
-¡Hola!- Me saluda muy animada.
-¿Tienes coche?- Ella me mira sin saber de que va el tema.
-Si...¿ya te quieres ir?.
-No es eso. Es que he tenido un pequeño problema con Liss y se ha marchado.
-Vaya...- No noto precisamente tristeza en su cara- ¿Y quieres ir a buscarla?.
-Si. Pero he venido en taxi y no puedo salir de aquí.- Estoy un poco histérica
-¿Es importante?.
-Bastante.- Me llevo las manos a la frente mientras busco algo para sentarme.
Shage se pone seria mientras rebusca en sus bolsillos.
-Ven.-Me coge de la mano y comenzamos a caminar. Kate nos sigue a fuera de la fiesta.
-¿Me vas a llevar?- No pensaba que Shage hiciera esto...
-No. Yo no estoy en condiciones.- Saca las llaves de su bolsillo y las pone en mi mano- Pero te acompaño.
No puedo evitar sentir golpecitos en mi pecho. Nos quedamos mirándonos y saco mi mejor sonrisa como agradecimiento. Ese momento no dura mucho porque aparece Sophie para estropearlo.
-¿A dónde vais?.- Sale por la puerta haciendo amagos de eses.
-Voy a acompañar a Jill un momento. Ahora volvemos.- Me fijo en como entrecierra los ojos con desconfiada.
-¿Por qué?.
-Porque no tiene coche y le voy a dejar el mío.- Ahora frunce el ceño.
-Pues yo también voy.
Todavía alucinando, nos metemos todas en el coche de Shage.
-Yo soy Kate- Le tiende la mano a Sophie para presentarse. Ella levanta una de las cejas y se queda mirándola.
-Ajá- Aparta la vista de ella - ¿Alguien me explica a donde leches vamos?.
-A por la novia de Jill.-Contesta Kate.
-¿Novia?-Pregunta con una sonrisilla.
-No es asunto tuyo- La contesto de manera muy borde. Estoy harta de ella, de su prepotencia, sus miradas altivas y su forma de degradar a todo el mundo.
-No, la verdad es que no me importa.- Veo por el retrovisor como se recuesta en el asiento.
Permanecemos en silencio un rato hasta que Soph vuelve a abrir esa bocaza.
-¿Y cuál es el plan?.
-¿A qué te refieres?- Pregunto extrañada.
-Sí. Tu vas, te reconcilias con la chica...¿ y qué hacemos los demás?
-Nos vamos- Se mete Shage en medio.
-Vale.
Parece que se ha quedado contenta.
Cuando llegamos al apartamento de Liss aparco en la puerta. Estoy algo nerviosa. No se que voy a decirle pero está claro que no puedo dejar así las cosas.
-¿Estás bien?- Me pregunta Shage poniendo su mano sobre la mía.
-Claro.
Abro la puerta del coche para bajarme. Shage me imita y sale. Supongo que para tomar el asiento de conductor.
-¿Puedo preguntar que ha pasado?.-No puedo responder a esta pregunta... sería demasiado lioso.
-Hemos tenido una discusión... espero que nada grave.
-Entiendo- Se toma un segundo para rascarse la cabeza. Suele hacerlo cuando se siente incómoda por algo.- Si te gusta de verdad, discúlpate.
-Ya...¿Podéis llevar a Kate a su casa?.- Me fijo como se ha quedado dormida en el asiento trasero. A su lado esta Soph con cara de pocos amigos vigilándonos como un halcón.
-Claro...¿Quieres que te esperemos?
-No hace falta...gracias por acompañarme y prestarme el coche.
-Para lo que necesites.
-¿Vas a poder conducir de vuelta?
-Ahora lo aparcaré y esperare a que se me pase. No preocupes.
Asiento con la cabeza y le doy un beso en la mejilla.
-¡Eh!- Grita la cantante bajando la ventanilla del atrás.
-Adiós Sophie. -Me despido y llamo al telefonillo de Liss.
Consigo que me abra y subo las escaleras hacia su casa. Me está esperando con la puerta abierta y cara de pena.
-Hola. -Me atrevo a saludar.
-¿Por qué has venido?- Su voz suena cansada.
-Tenía que hablar contigo. No podía dejar que te fueras así.
Se aparta de la puerta invitándome a entrar.
-Pasa. Hablemos dentro.
Nos sentamos en el salón . Ella mira la mesa del centro sin pronunciar palabra... casi me da miedo comenzar a hablar.
-Siento mucho haberte hecho sentir mal.
-No se trata de eso. No has hecho nada a propósito.
-¿Entonces?-Ando algo perdida. No entiendo que se enfadase tanto.
-Sigues queriendo a tu ex.-Se levanta del sofá y se pone andar- Yo sé que no es algo que puedas evitar...pero no sé donde me deja esto exactamente.
-A ver.-Me levanto yo también para agarrarla de los hombros y obligarla a que me mire directamente.-Claro que quiero a Shage. La quise mucho y esas cosas no desaparecen. Pero el sentimiento cambia. Y ahora estoy contigo y no con ella. Eso no te deja en ninguna parte. Me gusta estar contigo y no con otra persona. Olvídate de Shage.
-¿Volverías con ella?.
-¿A qué viene eso?.
-Es que.- Vuelve asentarse. Está nerviosa y se muerde la uña del pulgar. -¿Qué leches somos? Me rayo por lo que puedas tener o no con tu ex... y ni siquiera somos nada.
-¡Eh!. ¿Cómo que no somos nada?.
-Nada. No hemos tenido ni siquiera una conversación sobre que va a pasar con nosotras.¿Qué tenemos?.
Tomo asiento a su lado. Esto se vuelve más incómodo por momentos.
-Pues, somos dos personas que nos gustamos. Estamos muy a gusto juntas y estamos descubriendo que somos.
Liss se ríe y mira para otro lado.
-Ya...
-No te lo tomes a mal. Es bueno.-Tomo con mi mano su barbilla obligándola a mirarme de nuevo-Es bueno. Eso significa que me gusta todo lo que estoy viviendo contigo. Y espero que a ti también. Nos tomamos tiempo para conocernos, descubrirnos poco a poco y saber en que fase estamos.
-¿Y ese proceso lleva a una relación en algún momento? O es algo pasajero para cerrar heridas.- Me ha dolido el golpe.
-¡No! ¿Por qué piensas eso?
-Perdona... tengo la cabeza echa un lío...
-No deberías. Estoy aquí y no me voy a ir a ninguna parte. Y para nada eres un parche.
-Creo que deberías irte a casa... necesito aclarar un poco la cabeza , no ha sido buena idea que vinieras...aun que me alegra que pensaras en mi.- Me sonríe levemente.
-Pero...¿Estamos bien?.- Estoy algo asustada con este tema...no pinta nada bien.
-Espero que sí...pero no podemos seguir hablando porque quiero hacerte preguntas que no vas a contestarme como yo quiero... y no está bien... es mejor que hablemos mañana.
-¿Qué preguntas?.
-Hazme caso...es mejor que esperemos-Se levanta para abrir la puerta de la calle.- Por favor...
No puedo hacer otra cosa que obedecer... casi me voy pero de lo que he venido.
Cojo su cara con mis manos y la beso antes de salir.
-Mañana sin falta.- Ella agacha la cabeza y me responde con un sí.
Bajo las escaleras del portal con suma tristeza... no sé como se ha liado tanto en un momento...todo por una mirada estúpida.
Me doy cuenta de que el coche de Shage sigue aparcado en frente del apartamento. Además ella está apoyada mirando al suelo... pero está sola.
-¿Qué haces aquí?.- Levanta la vista para mirarme.
-¡Ah!. Vaya, no tenía muy claro si saldrías o no...Estaba esperándote, ya sabes por si la cosa no iba muy bien para que tuvieses algo de apoyo.
No tengo fuerzas para discutir. Simplemente camino y me pongo a su lado.
-¿Me llevas a casa?.
-Claro.
Shage aparca en mi puerta. Me he pasado el viaje mirando por la ventana sin decir palabra. Simplemente observando a la gente y las casas.
-¿Ha ido muy mal?- Me pregunta poniendo el freno de mano.
-No ha sido mi mejor noche.
-¿Tanto la has cagado?.
Miro a Shage antes de responder.
-Parece que bastante.
-¿Te acuerdas de la fiesta de halloween que dí en mi casa?
-¿Cómo olvidarme? Ese fue el día que... bueno ya sabes.-Me pongo roja un momento. Shage se ríe mirándome por el rabillo del ojo.
-Bueno, a parte de eso- Suelta otra risa.-El resto fue un poco desastre...no sé como conseguimos salvar la noche.
-Eso fue culpa de Sophie...nunca me ha tenido en muy alta estima.
-Esa así con casi todo el mundo. No te lo tomes muy a pecho.
-No , no. Es así con quien se siente amenazada. Lleva toda su vida enamorada de ti.-Shage se mantiene en silencio.- Aunque no es cosa mía.
-Lo que quería decirte con esto... es que por muy mal que se vea algo siempre tiene solución. Míranos, a mi me perdonaste.
-Puede que sí.- volvemos al silencio...es raro hablar de nuevo con ella
-Jill...
-¿Qué?
-Me lo puedes contar. Cuando te dije amigas, te lo dije de verdad. ¿Lo sabes,no?- Afirmo con la cabeza y suspiro.
-Es algo raro.
-¿El qué? ¿Tenerme como amiga o lo que te ha pasado?- Suelto una risa.
-Las dos cosas.
-Bueno, si lo piensas tampoco es tan diferente. Ahora podemos ir de compras, contarnos secretos y hacer fiestas de pijamas, solo que con la ropa puesta- Ambas reímos. Shage siempre ha tenido esa magia que te envuelve en una manta de confort.
-Dice que te sigo queriendo... Está dolida, no enfadada.
Veo como se le abren los ojos y aparta su vista para mirar al volante....creo que la he sorprendido.
-¿Y qué le has dicho?
-Que solo somos amigas y que ahora estoy con ella.
-Ya veo.- Baja la vista... no debería estar hablando de esto con ella... por muy amigas que intentemos ser.
-Pero tampoco puedo negarle que te quiera... mi problema es que no sé como.
Levanta de nuevo la vista para hincar sus ojos en los míos.
-No me malinterpretes-sigo hablando-La he dicho que no voy a dejar de quererte, es algo que supongo que siempre seguirá ahí. Pero siento algo por ella...no quiero carga.
-Si la quieres no la cagues... se lo que es y te juro que te arrepientes.
Nos miramos en silencio tras ese comentario...no debería estar en este coche teniendo esta conversación... es mejor que me marche.
-Creo que tengo que irme. Gracias por todo.- Me inclino hacia ella para besar de nuevo su mejilla.- De verdad... gracias.
Shage sonríe.
-Perdóname por esto.- La miro desconcertada...¿perdona?.
En ese momento me agarra y me da un beso. Un beso largo e intenso por el que unos minutos me dejo llevar. Siento unas cosquillitas por todo el cuerpo, el vello se me eriza y el corazón está a punto se salirseme del pecho . Es tan agradable... hacía mucho que no sentía esta sensación.
Nos separamos y permanecemos otros varios segundos aguantando la mirada. Cuando va a repetir la jugada me echo para atrás.
-Tengo que irme- Agito la cabeza de un lado a otro y salgo del coche como si no hubiera mañana.
Mierda, mierda, mierda, mierda. Me repito una y otra vez subiendo con velocidad las escaleras hacía mi casa.