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El deber de un líder por ShinyOdaya

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Notas del capitulo:

Hola :D

Aqui les dejo el cap 27 ^^

Muchas gracias por taaantos reviews y sus dulces palabras ;)

Espero que disfruten del cap 

Las fans se arremolinaban a nuestro alrededor, buscando explicaciones al numerito que acababa de montar el pequeño del grupo. Yo empujaba y tiraba de Taemin mientras los flashes me dañaban los ojos y me hacían lagrimear. El pequeño castaño no ponía de su parte, se asemejaba a un peso muerto, solo sollozaba, preocupándonos a mí y a las fans.

Jonghyun caminaba detrás de nosotros, intentando protegernos con su cuerpo y abriéndonos camino.

Una vez estuve frente a la puerta del rellano de nuestro piso la abrí de un golpe y empuje a Taemin dentro. Espere por Jonghyun pero él se quedó fuera, moviendo las manos en un intento de apaciguar a la gente, en vano, obviamente. Me acerqué por su espalda, sus anchos hombros bloqueaban toda la anchura de la puerta, tiré de su camiseta.

-¿Qué haces?- Le pregunté, alzando mi voz por encima del griterío- Vamos, entra…

-No, lleva a Taemin a casa- Me hablaba de espaldas, por lo que tuve que pegarme más a él- Yo intentaré hablar con ellos

Me quedé un rato atónito, intentando que sus palabras llegaran rápidas a mi cabeza. No quería quedarme a solas con Taemin, el pequeño estaba demasiado inestable, y yo en ese momento estaba demasiado espantado y bloqueado para decirle algo bonito.

Le toqué la espalda, pero no se giró, mantuvo su posición de guardaespaldas orador, retrocedí hasta que mis piernas chocaron con algo, mi vista voló a ese algo y encontré a Taemin sentado en el suelo, hecho una pequeña bolita.

Después de dirigirle una última mirada a Jonghyun agarré a Taemin del brazo y le obligué a levantarse. Le empujé hasta el ascensor y presione el botón violentamente, casi llegué a escuchar el crujir de mi dedo. El tiempo que duro el trayecto de ascensión me dediqué a observar a Taemin, sus ojos vacios de mirada con expresión inexistente estaban untados en la peor de las tristezas, tocándome las cuerdas más sensibles de mi corazón. Ya no lloraba, se habría cansado de soltar lágrimas, pero aun se podían ver diminutas gotitas residiendo en sus pestañas.

El “ding” del ascensor me sacó de mi ensoñación, empujé el cuerpo extrañamente pesado de Taemin y lo conduje hasta casa.

Ninguno de los dos dijo nada. Cerré la puerta tras mi espalda, las luces se habían quedado encendidas tras nuestra repentina marcha. Me quité las zapatillas todo lo rápido que pude. Taemin había entrado al salón, descalzo, con los pies sucios de correr por la calle, sus hombros estaban decaídos y su cabeza hundida en sus hombros.

Me acerqué lentamente, con ganas de acariciarle la cabeza y decirle que todo iría bien. Coloqué una mano en su nuca, suave, sin apretar, pero él, aun así se tensó.

-No sé si la culpa es tuya o mía… Tan solo sé que Minho lo ha hecho por tu bien- Chasqueó la lengua y bajo más la cabeza- Si necesitas desahogarte con alguien, estoy aquí, puedes golpearme si lo necesitas, seré el cajón donde guardas tus penas, tan solo déjame ayudarte.

Mi vista se nubló, solté un jadeo cuando de pronto, Taemin me rodeó con sus brazos. Un abrazo estrecho, con su rostro enterrado en mi pecho y sus manos agarradas fuertemente a mi espalda. Bajé la mano que estaba en su nuca y acaricie su espalda en movimientos lentos de arriba abajo.

Me pregunté si sería así como abrazaba un hermano mayor a su hermano pequeño.

 

Le tendí el vaso de agua, el lo cogió y lo apoyó suavemente en la mesa. Él ya sabía que le buscaría una solución a todo eso, pero primero tendría que hacerme caso y dejar que le cuidara.

Jonghyun aun no había vuelto, me asustaba pensar que tal vez estaba en problemas, pero me daba miedo dejar a Taemin solo para ir a buscarle. Así que me encontraba mirando a la puerta, un tanto ido mientras Taemin le daba vueltas al vaso, sin beber. Me sorprendió el hecho de que ni siquiera se había levantado para ir a por su teléfono móvil e  intentar localizar desesperadamente al moreno fugitivo. Tal vez porque ambos sabíamos que Minho llevaba razón y el pequeño maknae se estaba auto castigando.

-Tomate las pastillas- Le ordené, él emitió un gemidito de desaprobación

-Es que…- Me giré a mirarle y guardó silencio, sacó las pastillas del envoltorio- No he comido…

-Trágatelas- Le corté, me miró sorprendido unos segundos antes de llevarse las pastillas a la boca y tragárselas sin un ápice de agua.

Después se bebió el vaso entero. Observé pacientemente como se vaciaba el objeto de cristal, el líquido se colaba entre los labios entreabiertos de Taemin y algunas gotas escapaban y se escurrieran por su piel hasta caer a la mesa.

Le tendí la mano cuando terminó y él me entregó el vaso, lo lavé y lo dejé dentro de la pila. Escuché el sonido de las patas de la silla rozando contra el suelo de madera y me giré justo a tiempo de pillar al pequeño huyendo.

-¿A dónde vas?- Le pregunté con la voz un poco alzada.

-A lavarme los dientes… Y supongo que a acostarme

-Taemin…

-Tengo ganas de dormir y no despertar…- Tragué mis palabras, pensamientos y sentimientos lentamente- Porque si me despierto mañana… ¡El no estará! ¡Joder!

Sus hombros empezaron a temblar violentamente, e intentaba ahogar sollozos que se le escapaban en pequeños gemidos. Llegué a su espalda, y le conduje lentamente hacia su habitación, Taemin lloraba en silencio, la idea de lavarse los dientes había desaparecido de su cabeza y se tumbó en su cama de un salto, agarró la almohada y enterró su rostro en ella, mojando la tela blanca con lágrimas de cocodrilo.

¿Qué podía hacer yo? Además de estar con él no se me ocurría nada ¿Qué podía hacer yo para que dejara de llorar? No tardaría en quedarse dormido por el efecto de las pastillas pero el tiempo que trascurría mientras se estaba haciendo demasiado tortuoso

Me senté en la cama de Minho, esperando a que se relajara o quedase dormido. Recordé, cuando era pequeño, una escena similar, cuando murió mi abuela me encerré en mi cuarto y lloré como el niño que era. También recordé la canción que mi madre me cantaba, se fue construyendo en mi cabeza, la melodía, la letra.

-Una estrellita corrió por el cielo y enganchó a una nube panzona
le propuso: juguemos, juguemos, que la luna ya asoma.

Empecé a subir la voz, Taemin separó su cara de la almohada y me miró entre interesado y extrañado.


-La estrellita y la nube corrieron, entre luces y tules jugaron
y fue tanto el bochinche en el cielo, que enojado despertó el lucero.
Se asomó a la noche estrellada, se quejó a Doña Luna muy clara,
rezongando se volvió a su espacio, a soñar con las luces del alba.

Taemin dejo de llorar


-Mamá Luna llamó a la estrellita, y también a la nube panzona,
y les dio en penitencia a sus bromas, consolar a los niños que lloran.

La habitación se quedó en silencio, por un momento pensé que Taemin se había quedado dormido, pero habló con un hilo de voz casi imperceptible.

-Hyung, tu eres la nube panzona…

Sonreí, entonces si que pude oír pequeños ronquidos

-Vale- Le conteste al aire.

Me levanté intentando hacer el menor ruido posible. Cogí las sabanas y le arropé como lo había hecho mi madre aquella vez. Le dejé bien acomodado, tapado con la sabana hasta los hombros. Respiraba tranquilamente, tenía las mejillas húmedas y acartonadas por el recuerdo de las lágrimas y los labios entreabiertos, dejando escapar un caliente aroma.

Apagué la luz antes de salir, pero no cerré la puerta.

Caminé tan solo unos pasos y me detuve en algún lugar del salón, suspiré y de pronto me entró el dolor de cabeza que debí haber sufrido hace ya unas horas, quería gritar un poco, dejar de lado mi frustración, quedarme vacio para poder aguantar todos los problemas y cargármelos de golpe.

Mi móvil empezó a vibrar en mi bolsillo y lo saqué de allí antes de que se pusiera a cantar. Me quedé completamente petrificado con el nombre que salía en la pequeña pantalla. Claro que quería explicaciones, pero no las esperaba tan pronto. Descolgué la llamada cuando mis dedos se dignaron a moverse.

-Minho- Susurré porque me daba pánico que Taemin me escuchara.

-Hyung…

-¿Dónde estás? ¿Y a donde piensas ir estúpido?- Salté

-Onew hyung no me insultes- Deje que un suspiro lastimero saliera de mis pulmones y me deje caer en el sofá

- Lo siento…

-Llamé al manager hyung y me trajo a su casa, pasaré la noche aquí, mañana me pasaré por el hospital a ver a Kibum y a la fisioterapeuta…- Respiré hondo- Y si veo que esta situación se alarga mucho, llamare a mis padres y me iré a casa.

-Pero Minho, los ensayos y clases…

-Las tomaré aparte- Hizo un corto silencio, le escuche respirar hondo un par de veces antes de preguntar aquello que sabía que había querido preguntarme desde el principio de nuestra conversación- ¿Está bien? Me fui muy mal… estaba llorando mucho.

-Y lo ha hecho hasta que se ha quedado dormido- Ahogo una exclamación

-¿Se ha dormido?

-Si…- Oí el susurro de las llaves del departamento y la puerta abrirse lentamente, como si la persona que entraba no quisiera despertar a la gente que habita dentro.

Jonghyun apareció, dejando las llaves sobre la mesada, me vio y dibujo una sonrisa, pero yo le indiqué que estaba hablando por teléfono.

-¿Sabes hyung?- Espera ¿Lloraba?- Amo a ese chico, y saber que sufre me está matando, además, pensar que lo único que puedo hacer es salir de su vida me destroza aun más…

-Por favor no pienses que es culpa tuya…- Le corté de golpe, como el filo de una espada

-Sí lo es, Key tenía razón…

-Key no dijo en ningún momento que tú fueras el causante de sus desvelos- Minho quiso decir algo más, pero sus palabras no salían-Dime por qué te has ido

-Porque Taemin se refugiaba en mi, tal vez ahora te diga algo, lo que sea, para poder ayudarle… ahora no tiene donde esconderse.

Entonces lo entendí, hile poco a poco las palabras de Key con las acciones de Minho.

Kibum dijo en su día que lo mejor para el pequeño era que lo dejáramos en paz, o, dejarlo solo y eso era lo que había hecho Minho, dejarle desprotegido y con la opción de hablar conmigo cuando su cabecita se aclarara.

Chasqueé los dedos al darme cuenta de que ya tenía la mitad de un puzle, y que además, la había entendido.

-Prométeme que le ayudaras

-Te lo prometo

-Y que no le oiga llorar hyung, porque si pasa, correré a su lado para consolarle y no buscamos eso- Era una amenaza muy sutil.

-Entendido, buenas noches

-Buenas noches hyung, cuidaros- Colgué y dejé caer mi mano a mi regazo, observé la pantalla encendida de mi móvil y las vueltas que daba la cabeza de una persona.

Me levante estirando mi camiseta y busqué a Jonghyun por el salón, pero no estaba por ninguna parte. Apagué las luces de todos los rincones y me encamine hacia el pasillo. Allí sí que pude ver a Jonghyun, apoyado en el umbral de la puerta de la habitación de Taemin.

Me acerqué y compartió una tierna mirada conmigo, después la regresó hacia el interior de aquella habitación oscura, de la que salían pequeños ronquidos de un cachorro abandonado. Me apoyé en su espalda y descanse la cabeza en su hombro. Acompasamos las respiraciones una vez que se volvieron lentas, a gusto una con la otra.

-¿Te sientes bien?- Me preguntó

-Sí, me duele la cabeza un poco pero ya esta…

-Mmm- Se dio la vuelta y besó mi frente- ¿Era Minho?- Habló contra mi piel

-Si- Conteste un poco aturdido- Quería saber cómo estaba Taemin

-No te agobies mucho

-¿Cómo quieres que no me agobie?- Me abrazó- Solo quiero lo mejor para todos…

Le correspondí al abrazo, pero no dejé de hablar.

-Pero aun así no sé si Minho ha hecho bien del todo, si Taemin va a colaborar…

-Cuando intentabas hablar con él, se ponía nervioso, y huía, después era Minho el que iba a consolarle- Se separó de mi volvió la vista a la habitación del pequeño maknae- ¿Por qué le iba a contar sus cosas a un psicólogo si ya estaba Minho para escucharle? Yo creo que el señor Choi ha hecho bien.

-Si…

-¿Te acuerdas de cómo se puso ese día que Minho no estaba?*

-Se llamó monstruo… - Me acarició la cabeza

-Anda pequeño Sherlock vamos a dormir…

Le seguí y antes de meterme en mi habitación, apague la luz del pasillo, era la primera vez en mucho tiempo que la casa se quedaba completamente a oscuras

Notas finales:

Siento el cacao mental jaja, pero yo creo que es facil de entender, de todas maneras si no esta claro, en los siguientes caps se aclarara.

*Jonghyun se refiere al cap 22

Yo creo que este cap es importante jeje

La nana que le  canta Onew a Taemin me la cantaba mi madre cuando era pequeña, pero nunca consegui oir el final jajaja 

Dejen sus reviews con sus opiniones, haganme saer que piensan

Chuu~ 

https://www.facebook.com/DosVidasUnAdios

 

 


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