Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Debo ser... por Gaib

[Reviews - 180]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Saludos a Todos. Esperando que esten disfrutando de mi mes favorito. Me gusta Diciembre porque las cosas son diferentes al resto del año, por lo menos a mi alrededor es asi.

Traigo ante ustedes el siguiente capitulo de la historia, les dije que retomaria la costumbre y lo he intentado hacer, seguir con el ideal de la historia y entretenerlos un poco con mis lineas. No digo que fue facil, ya que tengo varias de las cuales soy responsable, pero siempre es reconfortante publicar un nuevo capitulo. Ojala les guste.

Dirira que el capitulo es un tanto inquietante y diferente en algunos sentidos. Bastantes cosas para pensar, pero la tercera prueba esta a la vuelta de la esquina. Agradezco el tiempo que le dedican a leer estas palabras. Disfruten mucho!

-¿Entonces no puedo competir mañana? – Fue la ingrata conclusión que mencione, luego de que la enfermera dijera con total seriedad que aún no estaba del todo bien, que no debía sobre esforzar mi cuerpo y que debía reposar por unos días más.

-¿Acaso no me escuchaste? –Recrimino esa señora con mucha molestia – Las recomendaciones hacen parte de mi trabajo, ya si los aplicas o no, es tu problema – Estaba escribiendo algo en su tabla – Firma aquí y vete, ojala no vuelvas aquí mañana –  Puso la tabla en mis manos, note que era una orden de salida; Escribí mi nombre sin pensarlo mucho – Cuídate – Menciono mientras escribía algo en el papel y se marchaba.

-Mejor me voy – Dije para mí mismo. No tarde más de un minuto en ponerme mi ropa, que parecía que la habían lavado para salir de la enfermería. Por mórbida curiosidad mire quien estaba en la cama de al lado, pero no había nadie, solo estaba la cama sin arreglar.

Salí del lugar y tarde en darme cuenta de que estaba en el piso 3 del Bloque D. Busque las escaleras, baje los pisos y salí del edificio. ¿Dónde estarán mis hermanos? ¿En el Dormitorio? Esperen…

-Oye… ¿Qué hora es? – Le pregunte a un chico que pasaba frente a mí.

-Son las 5 pm- Dijo un poco indiferente mientras seguía caminando.

¿Las 5pm? ¿No será que están…? Sin pensarlo mucho comencé a correr hacia el campo de soccer. Si lo pienso bien, mis amigos deben estar jugando en este momento, así no este yo, creo que a todos les gusta hacer practicar. Cruce la plaza y me dirigí hacia el césped.

Debe ser mentira, me siento muy bien. Igual descanse mucho tiempo, dos días sin hacer nada más que estar acostado en una cama, de verdad no sé cómo hacen las personas que viven enfermas… debe ser muy aburrido estar siempre acostado. ¡Yo no soy así! Me siento con energías, puedo correr, no me duele nada. Lo que dice esa enfermera debe ser broma, puedo competir mañana. ¡Estoy bien!

Lo veo. Me detengo en aquel punto que permite la entrada al césped. Los veo allí. No sé si todos, pero veo a varios. Corriendo, riendo y gritando. Cuanto los extrañe, extrañe sus comentarios, peleas y abrazos… inclusos sus toqueteos y juegos en el baño. Me sonrojo de solo imaginarlo:

Vamos a hacerte una bienvenida hermano”. Dirá Rei jalándome la camisa.

“Si… Yo también voy”. Respondería Fuko mirándome apretando los labios.

“Yo les ayudare”. Koji siempre tan amable, y daji tan… ¿Daji me besaría? NOOOOOO ¡El me beso ayer! Pero… pero… ¿Qué rayos sucedió? Incluso lo había olvidado.

-¡HEYYY!! ¡Tomoky! –Un grito me hizo girarme a lo lejos. No pude distinguir quien me gritaba pero los siguientes si supe de quienes serian.

-¡Hermano! – La voz de Konu era inolvidable. El pequeño se encontraba en el extremo más cercano del césped. Al ver que le voleaba la mano para saludarlo, arranco a correr hacia mí.

-Hola Konu – Dije por fin mientras mi hermano me abrazaba fuertemente, muy fuerte para mi gusto.

-¡Hermano! ¡Te extrañe mucho! – No sé si estaba muy feliz o estaba llorando. Solo sentía un gran apretón que no aflojaba.

-¡HERMANOOO! – Apenas reaccione para sentir como Rei se unía al abrazo de forma brusca. Caímos de lleno al césped debido a la fuerza con la que nos impactó.

-Auucchh – Me queje con molestia pues había caído sobre todo el brazo izquierdo, además tenía el peso de los otros dos niños sobre mí.

-¡REIII!! ¡QUITATE!! – Grito Konamu furioso. Se le notaba en la voz. Además creo que también se había lastimado.

-¡Carga Montón!! –

-¿Es en serio? – Alce la voz – Acabo de salir de…-

PUMMMMMMM PUUMMMMMMM

Sentí como el peso sobre mi aumentaba considerablemente. ¿Cuántos se habían lazado encima? Luego otro golpe más y otro. El peso era demasiado para… JAJAJAJAJA ¿Qué es esto? Jajaja Es como si me hubieran golpeado en el hueso de la alegría. JAJAJAJA No podía parar de reírme jajaja.

-Ya levántense, déjenlo respirar – Creo que era la voz de Takuya.

-Jajajaja Todos… jajaja son unos tontos jajaj –Decía Konu mientras se recostaba a mi lado respirando con dificultad. Parecía que la furia que había provocado el empujón de Rei había desaparecido gracias a ese aplastamiento masivo que acabadabamos de vivir.

- Jajaj Aucchhh – Mencione mientras me sobaba mi brazo izquierdo – Ustedes y sus bienvenidas – Reí irónicamente.

-Ya ves, te extrañamos Timmy –  Dijo Fuko sonriendo. ¿Timmy? Sentí como me cayó una gota sobre el cuello. Este niño… dejémoslo así jaja. Nunca aprende.

-Bienvenido niño –fue un castaño aquel que me extendió su mano. Agarre la mano de Takuya y me puso de pie con energía. Casi al mismo tiempo vi como Fuko levantaba a Reisuke y Daji ayudaba a Konu. –Ya te habías demorado –Una sonrisa burlona se relejo en su rostro.

- Ya ves, esa enfermera no se quería despedir de mí – Respondí la broma.

-Sea lo que sea, bienvenido de nuevo Tommoky – Replico el castaño.

 

Debo Ser…

XXXIV. ¿Pelear es bueno?

 

-¿Qué es todo esto?- Pregunte anonadado por la cantidad de paquetes que había sobre mi cama. No eran muchos pero si contaba 20 o un poco más ¿Quién envía tantas chucherías?

-Son paquetes para ti de tus admiradores –Sonrió Konu mientras me alcanzaba una de aquellas pequeñas cajitas – Mira, este tiene golosinas… – Abrió la boca y se metió uno a la boca – mmm, este me gusta. Mira – Me ofreció una gomita en forma de sapo.

-Eh, gracias. Creo que primero cenare – Dije rechazando el ofrecimiento – Te las regalo-

-¿En serio? ¡Gracias Hermano! – Grito Konu abrazándome y metiéndose muchos sapitos a la boca – ¡Están ricos! –

-…Me alegro – Mencione un poco avergonzado. De verdad era muy rara la escena de mi hermano hastiándose de gomitas –

-Deberías haberlo visto ayer, no podía de la emoción con tantos dulces –Menciono Takuya desde lo alto de su cama – Todos ayer comimos muchas chucherías-

-Tienes mala suerte hermano, nosotros comiendo dulces y tu enfermo jajaja –El pequeño peli naranja se rio desde el tapete, luego siguió concentrado en escribir algo. ¿Tarea quizá?

- Recuerden que mañana competimos, no deberían comer tantos dulces – El tono de mi voz era tan serio, que todos los presentes se quedaron mirándome inquietos – Saben que tengo razón… no soy regañón –Me excuse sin cambiar el tono de mi voz.

-Tommoky tiene razón, se supone que mañana es importante – Menciono Koji, hablando por primera vez desde que había salido de la enfermería. No me había dirigido la palabra ni la mirada desde entonces, ni tampoco su hermano; ¿Qué raro? Que Daji no me… hable.

- No ven que todo esto es un distractor – Aludió Daji con frialdad. El gemelo se encontraba boca abajo en su cama – Nos están afectando – Afirmo alzado la cabeza y mirándonos a todos - ¿Alguien ha recibido alguna amenaza? – El tono de su voz no era característica -… porque yo si –

-¿En serio? ¿Quién fue? – Pregunte preocupado. ¿Por qué no me había dicho nada? Se supone que… esto no debería pasar. Esto… esto está mal.

- Un chico saliendo tropezó conmigo, al principio fue muy amable, pero luego sonrió y me dijo que no me recomendaba ganar el viernes – Contaba el rubio mientras tensaba los dientes – Según él, no era necesario que el equipo “estrella” llegara  más lejos –

- A mí, me encerraron en el baño del 2 piso – Dijo Konu rascándose la espalda –No me golpearon, pero me mojaron la camisa –

-¿Quién? ¿Cuándo? – Pregunte exaltado. Me hervía la sangre por lo que Konu me acababa de contar.

- No importa hermano estoy bien – Respondió Konu sonriendo.

- No… no lo estás- Comente irritado.

-A mí me tiraron los cuadernos al suelo y me patearon los lápices, luego se fueron corriendo – Dijo Reisuke mientras seguía escribiendo.

- JAJAJA a mí me iban a tirar a la piscina, pero un tipo me ayudo a que no lo hicieran- Hablo Koji entre risas- Hubieran visto la cara cuando se los llevaron donde el coordinador jajaja –

-¿Quién se los llevo? –Indague.

- Tu amigo, el vigilante – Respondió el rubio sonriendo – Sí que es genial que conozcas a esos tipos –

-Yoshy te ayudo… ¿Y le contaste que nos están acosando? –

-Claro que sí, él dijo que era la presión normal que sucede durante esta competencia – Respondió rápidamente – Pero que estaba prohibido atentar contra la integridad de los estudiantes –

-¿Pero cómo puede ser esto…? –

-No te quejes tanto, siempre ha sido así – Interrumpió Takuya de manera indiferente –Incluso puedes preguntarle a Taichi… Siempre suceden este tipo de cosas durante el reto anual – Tenia un tono de voz frio y resignado.

-¿Pero porque? Se supone que estas cosas no deberían pasar en una escuela… es terrible – Mencione mientras me sentaba en mi cama desilusionado.

-¡Despierta quieres! – Grito Koji saltando de su cama y dirigiéndose hacia mí con furia - ¡Tú sabes más que nadie sabes que el mundo no es justo! ¿Recuerdas como llegaste? ¡Eras un niño de mami!... – Me agarro de la camisa fuertemente.

-¡Koji! – Grito su hermano - ¡Déjalo! – El tono de la voz de Daji era diferente, parecía indecisa, incoherente… no parecía Daji.

- ¡¿No se supone que eres el señor optimista?! ¡EEHHHH!! ¡Acaso no lo eres! – Su mirada de rabia hacia que me temblaran las manos - ¡¿Dónde está el Tommoky que admiraba?! ¡Quien rayos eres! –

PPPUUUUUMMMMM

-¡Ya déjalo!-

-¡No lo golpees! –

- Tranquilo chico – Dijo Takuya mientras lo sujetaba fuertemente. Aunque Koji no forcejeaba, su hermano y el castaño le tenían agarrados ambos brazos. Rei se había puesto frente a él y Konu se encontraba junto a mí. Koji me había propinado un golpe en la cara tan fuerte que me había aventado contra el tapete.

-Koji prometimos que no volveríamos a ser violentos – Hablaba Daji desesperado. El tono de su voz y su forma en que agarraba a su hermano me inquietaba bastante a mientras los miraba a lo lejos.

- ¿Estas bien hermano? ¿Dónde te golpeo? – Pregunto el pequeño peli rojo mientras me miraba con preocupación, incapaz de saber qué hacer para ayudarme.

- Estoy bien, no me dolió nada – Dije poniéndome de pie al instante. Sentía una energía rara en mi cuerpo, una adrenalina fluía… era como si estuviera animado, vivo… como si ese golpe me pusiera en la tierra de nuevo – ¿Acaso es tu mejor golpe? – Pregunte amenazante – Creí que alguien como tu era más hombre – Dije provocándolo.

- JAJAJA Entonces encontraste pelea – Dijo Koji sonriendo con malicia. Recuerdo esa cara, la misma que hizo cuando nos conocimos… cuando no tenía la menor intención de agradar, simplemente infundir temor.

- ¡Koji! ¡Basta! – Grito Daji.

-¡Vamos! Veamos si puedes con un niño menor que tu – Mencione mientras me ponía en posición de pelea, empuñando mis manos frente a mi pecho tal y como había visto en las películas –

-¡Hermano no lo hagas! No es bueno pelear – Konu me agarro uno de los brazos e intentaba bajarlo para hacerme caer.

-¡Déjame Konamu!- Le grite apartándolo a un lado con firmeza – Debo hacer esto – Dirigí la mirada de nuevo al gemelo con quien quería reñir.

Entiendo que nunca hay buenas razones para pelear. Está bien que los golpes nunca serán la mejor solución para los problemas. ¡YA SE LO QUE TODOS DICEN! ¡Pelear es malo! ¡ES CIERTO!... Pero hay momentos en los que tienes que pelear. Hay momentos en los que tienes que desahogarte… hay momentos, donde tienes que sacar toda la furia e ira que tengas por dentro.

-¡YA…! ¡Suéltenme! – Rugió Koji mientras salía del agarre de sus captores. Al quedar libre estiro los brazos rápidamente – Hace mucho que no hacia esto – En dos pasos largos ya había chocado sus brazos con los míos y me había empujado directo al suelo.

PPAAMMMM

Mi espalda soporto todo el peso de la caída. ¡No hay dolor! Lance un puñetazo con todas las energías que pude, pero sin nada de puntería ya que no dio en el blanco. Al sentir dos golpes seguidos en mi estómago, incorpore mi espalda y junto con el impulso de mis rodillas patee el torso del gemelo con ambos pies. El rubio dejo de sofocarme con su peso, lo cual me dio la oportunidad de ponerme de pie y al verlo apenas incorporándose vi mi oportunidad.

Sin pensarlo una fracción de segundo me avente sobre él y justo cuando sentí que su espalda chocaba abruptamente con el tapete empecé a lanzar puños a diestra y siniestra, intentando golpear lo que fuera. Algunos le alcanzaban a chocar contra algo, otros no le daban a….

PPPUMMMMMMM

Recibí un certero golpe en la cabeza que me desconcertó un poco, luego sentí como unas manos agarraban fuertemente mi garganta y la apretaban con presión. Intente liberarme golpeando sus brazos pero su agarre no cedía. Mire sus ojos, sus pupilas azules completamente dilatadas irradiaban un rabia inmedible, su expresión estaba totalmente… descontrolada. Comenzaba a ver todo borroso, el aire no me llega. El desespero me hace aferrarme con las uñas a sus antebrazos, arañando su piel como si quisiera hacerla trizas.

-¡Ya basta! – Grito Daji dándole una patada a su hermano en el pecho. Apenas aflojo su agarre me empujo con tanta fuerza que fui a parar a 1 metro de distancia de donde me estaban ahorcando - ¡Quédate allá Tomoky! – Dijo desafiante. Intente incorporarme pero aún me faltaba el aire - ¡No ven que están siendo unos idiotas! –

- ¡No te metas en esto Daji! – Resoplo Koji mientras intentaba ponerse de pie – Esto es entre el principito y yo- Se traqueo los dedos mientras se preparaba para aventarse sobre mí de nuevo.

-Me parece bien – Respondí intentando ponerme de pie. Me tarde más de lo que esperaba, además note que algo chorreaba por mí cara. Algo caliente… es sangre. Lamí el pequeño hilo de sangre que salía por mi boca.

De pronto la puerta se abrió de golpe.

¡EEYYY EEYYY EEYYYYYY¡

-¡Hola a todos! – Taichi entro pateando la puerta con esa tonta sonrisa en la cara - ¿Cómo es…? –Se quedó sin habla al ver la escena de batalla que habíamos montado - ¿Por qué Konamu está llorando? ¿Y porque sangras? – Pregunto de manera torpe mientras dejaba caer una carta de su bolsillo.

__________________________________________________________________

-Así que estaban peleándose – Respondió al fin luego de que Konu le contara la historia entre sollozos.

Koji estaba en su litera mientras su hermano no le quitaba la vista de encima. Takuya estaba sentado junto a mí al borde de mi cama, más para evitar que iniciara otra pelea que por preocupación. Taichi intentaba confortar a Konu, quien no había parado de llorar. Rei estaba escribiendo, seguía escribiendo en su cuaderno ¿Que tanto escribirá?

-¿Y tu? ¿Estás bien? –Pregunto Taichi mirando a Rei.

-Sí, todavía no he terminado de escribir… – Menciono sin alzar la vista -… además no me gusta ver peleas –

-A nadie le gusta Rei – Dijo Daji con seriedad. Hubo un silencio incomodo en donde solo se escucharon los ruidos de la nariz de Konu.

-Bueno, al menos ya se calmaron – Comento por fin Taichi – No se preocupen, las peleas son comunes en los amigos. Eso es una gran muestra de amistad - ¿Pero que está diciendo? Acaso esta… -Yo peleaba mucho de joven con mis amigos. Muchos de ellos, ya ni se dónde están… pero gracias a eso, algunos se convirtieron en mis mejores amigos –

-En serio ¿Y dónde están ahora? – Pregunto irónicamente Koji - ¿En prisión? –

-No exactamente: uno es profesor en la universidad de Tokio, es un brillante científico. El otro tiene su propia banda de rock, es genial tocando la guitarra – Se sobo la cabeza mientras sonreía –El único que se quedó aquí fui yo jajaja – Rio tristemente.

-Ya veo… de verdad lo siento – Dijo el gemelo con tono de arrepentimiento.

-No importa – Respondió Taichi sin darle mucha importancia – Lo que me preocupa es que ustedes estén bien – Alego mientras se acercaba y se sentaba junto a mí – Ahora resulta que sales de la enfermería y ya estás buscando problema, se nota que no pierdes el tiempo –Rio mientras posaba su mano sobre mi espalda -

- Estoy bien ¿Si? –Afirme un poco molesto – Solo estoy frustrado de no poder hacer nada – Golpee mis muslos con mis manos empuñadas.

-¿Qué no haces nada? ¿Pero qué tontería? –Dijo Takuya con tono burlón – Tú eres el que más hace, y dices eso…-

-Sin ti yo no hubiera tenido un hermano –Recrimino Rei, quien había dejado tirado su cuaderno para sonreír abiertamente -… solo seriamos mis ajitos y yo –

-Jaja tu hiciste este equipo, uniste un montón de personas desconocidas y les diste algo por lo que mantenerse unidos – Alego Daji – Antes de que llegaras mi hermano y yo, apenas si saludábamos a las personas –

-Si tu no fueras tan problemático mi vida sería un poco más fácil y aburrida – Agrego Taichi mientras se rascaba la cabeza ¿Es una indirecta? ¿Por qué no habla con claridad?

-Deja de preocuparte tanto. No somos tan débiles para no soportar a los demás tontos de este lugar –Señalo Koji mirándome iracundo – ¡No me insultes otra vez de esa manera! ¡No puedo admirar a un cobarde! – El tono de su voz se agudizo bastante. Alcance a ver algo caer por su mejilla mientras salía corriendo de la habitación.

-¡Oye! ¡Espera! –Lo llamo el castaño más alto.

-Déjalo que se valla, le gusta más pensar a solas – Menciono Daji mientras se recostaba sobre su cama – Creo que perdí el apetito – Afirmo mientras se cobijaba-

- Yo igual – Dijo Konu mientras iba hacia su cama sin siquiera mirarme.

-Tienen que comer, se supone que… -

-Mañana tenemos que estar bien, para eso debemos comer sanamente – Mencione con firmerza poniéndome de pie – Luego de aguantar hambre con esa bruja enfermera, creo que me gustaría comer hasta reventar jaja –Reí para mí mismo- Vamos a comer–

Mencione alegremente mientras me dirigía a la puerta de salida. Rei no dudo en seguir tras de mí. Takuya se levantó con una sonrisa de satisfacción, Taichi simplemente lo imito. Mire a la cama de Konamu con intriga ¿De verdad no quería venir conmigo? Sé que me equivoque pero…

-Vamos Konu, tu hermano tiene razón –Fue Daji quien descobijo al pequeño de  pelo rojo y lo saco fuera de la cama. No tardamos en cerrar la puerta y en dirigirnos al comedor-

-Aún tenemos 15 minutos, podemos alcanzar la cena –Menciono Taichi intentado darnos ánimos.

-Me disculpo por mi aptitud, de verdad me arrepiento por haberlos asustado – Dije al instante, era mejor intentar arreglar las cosas, así sea con una pequeña disculpa -… Lo lamento mucho –

Baje la mirada mientras mi frente se ensombrecía. Bajamos las escaleras y dimos con el comedor… mientras todos seguían en silencio absoluto. Ni mucho menos durante la comida se escuchó un solo murmullo. Fue entonces que me di cuenta que no es tan fácil olvidarte de estas cosas.

_________________________________________________________________

 

-¿Qué haces aquí tan tarde? –Pregunto aquella persona que parecía sorprendida de verme en ese lugar – Se supone que debes estar reposando – Aviso, regañándome.

-Quería estar un tiempo solo – Dije mientras centraba mi mirada en el cielo nublado – Hoy, no me fue muy bien que digamos – Mencione decaído.

-Obvio no iba a ser bueno, se supone que todavía estas muy débil… –

Menciono mientras se sentaba junto a mi lado en el césped; Estábamos en el último piso del Bloque B, no pasaban muchas personas y tenía una parte donde te podías tirar a dormir sobre una especie de césped artificial, creo que era un criadero de un club o algo asi.

-…no puedes esperar sentirte muy bien si apenas saliste. ¿Estas escuchando? –Indago aquel chico rubio.

- Claro que no Ritsu, estoy aquí escuchando el viento hablarme – Respondí irónicamente. Mi amigo me respondió con una sonrisa - ¿Y tú que haces? ¿No estabas enojado conmigo? – Dije de manera fría.

-Nada, yo solo venía a revisar unas cosas al club y me sorprendí al notar la puerta de la terraza abierta –Decía sin mirarme, sus ojos se concentraban en algo a lo lejos, ni siquiera yo sabía que mirara – Y no estoy enojado contigo, estoy enojado con el “Clon” – Lo mire fijamente y vi que su rostro se postraba en la depresión – Si él no hubiera arruinado mi oportunidad, no hubiera quedado tan deseoso y no que hubiera tenido que hacer, lo que te hice en el baño –

-¿¿EEHH?? – No sé si era por su forma de hablar tan enredada, o eran las palabras que decía, o los términos o… ¡AAAAHHH! -¡No entendí nada! – Grite hacia el cielo agarrándome la cabeza.

-Oye, oye, tranquilízate jaja –Sentí su mano sobre mi espalda – No es para que te pongas así. El que debe pedirte disculpas soy yo – Al parecer lo decía en serio-

-Ritsu… no tienes que… -

-Perdona Tommoky, no era mi intención hacerte daño ni hacerte sentir incomodo – Agarro una de mis manos entre las suyas mientras esbozaba una cara suplicante – No quiero que nuestra amistad termine, ya que eres una gran persona…-

-Gracias Ritsu, que tú me digas eso significa...-

-Además de que me gustaría disfrutar de ti mucho más tiem… -

PPPUUMMMMMMM

-¡Sí que sabes cómo arruinar el momento! ¡Tonto!! – Alce la voz irritado mientras lo veía con asco.

-Pero si es la verdad ¿Por qué te molesta? – Recrimino en lo que se sobaba la cabeza, lugar donde le había dado su merecido golpe.

-¡Deja de ser tan pervertido! ¿Quieres? ¡Ya sé que quieres tener sexo conmigo, pero eso no significa que debas andar acosándome e incitándome todo el tiempo! – Le grite alterado. Había muchas palabras que querían salir por mi boca, demasiadas.

-Pero es que no puedo aguantarlo… Se supone que es normal – Dijo mientras se ponía de pie y hacia una posición de sabiondo – Es el orden natural de la vida, y no debes negarlo… – Me señalo grotescamente - …No puedes ir en contra de la humanidad, no puedes -¿Pero de que carajos está hablando? ¿Humanidad? – No puedes decir que no te gusta el… -

-¡Yo no he dicho eso! – PUUMMM Le golpee nuevamente solo que esta vez fue en el pecho – Lo que no entiendes es que… bueno… tu entiend… AARRHHH ¡Porque están difícil hablar sobre esto! – Corrí para pegarme al barandal que limitaba el espacio de la terraza, mientras gritaba a los cuatro vientos aquella oración –

-JAJAJA Actúas como un niño pequeño Tommoky –Menciono entre carcajadas el rubio.

-Al menos no soy pervertido acosador – Respondí refunfuñando.

-¿Qué dices? Pensé que te gustaba que te tocara -¿Qué dijo? ¡¿Qué me gusta?! – Como siempre dejas que todo el mundo, pensé que conmigo también era así –

PPAAAMMMMMM PUUMMMMMM

Le propine una patada directamente en la entre pierna  y otro golpazo en la cabeza. Era increíble la inmensa cantidad de golpes que había dado hoy. Creo que nunca había peleado tanto en mi vida.

-¡AAIII! – Chillo el rubio, quien estaba en el suelo acurrucándose sobre sí mismo - ¿Por qué ahí? ¿Por qué me pateaste? –

-Por todo lo que dijiste. ¡Retráctate! – Me corría mucha adrenalina por la sangre, tenía ganas de pelear otra vez… quería golpearlo hasta que se arrepintiera de lo que había dicho. ¡No soy un vendido! ¡Ni me gusta que me toquen! ¡No soy así! – Y bien… -Me prepare para lanzarle otra patada.

-¡Bien! ¡Bien! ¡Lo siento! – Abrí los ojos por el asombro que sentía. Ritsu se había postrado ante mí, como si me reverenciara – Solo bromeaba contigo. No quería afectar tu honor, nunca ha sido mi interés –Por algún motivo, sus palabras me tocaban - No te gusta que te toquen. Eres el chico más santo que conozco y con el único con quien de verdad me gusta hablar- Aun no había levantado la cabeza. Este no se parecía en nada al Ristu que yo conocía.

-Oye, ya levántate, no tienes que…-

-Me gusta molestarte porque somos amigos, no lo hago por hacerte la vida imposible –El rubio continuo con su discurso… algo emotivo – Me gusta estar contigo… y perdóname por decirlo pero me pareces atractivo y quiero… -

-¡Ya entendí! – Lo interrumpí intencionalmente -¡No tienes que decir más! ¡Entiendo!- Alce las manos para callar sus palabras, en realidad no necesitaba escuchar lo siguiente. Hubo un silencio incomodo por unos segundos – ¡Ya se! – Dije sonriendo – ¡Hagamos un trato! – Me gire hacia el borde del edificio estirando mis brazos hacia atrás.

-¿A qué te refieres? – Pregunto con los ojos ilusionados -¿Me dejaras…?-

-Cállate y déjame hablar – Con la velocidad de un rayo le tape la boca para ordenarle silencio – Creo que te gustara lo que te diré  -

-¿En serio? – Era increíble la emoción que reflejaba mi amigo. Parecía un niño pequeño esperando abrir un regalo.

-Si Ritsu…-Le señale - …deja de tocarme, insinuarse y no me mira con perversidad durante un mes, Tommoky… -Me señale a mí mismo -…promete que le dejara hacer lo que quiera en su habitación por una hora – Pronuncie no muy seguro de lo que decía.

-EEHHH, momento ¿En mi habitación o en la tuya?... ¡¿Solo una hora?! –Alzo la voz como si estuviera indignado de su pregunta.

- En tu habitación, y solo será una hora – Respondí con seriedad fingida. En el fondo estaba sonrojadisimo y tembloroso ¿Cómo había accedido a sus planes? NAAHH Solo lo hice para quitármelo de encima – Pero, solo será si cumples el trato ¿Entiendes?... ¡Un mes! –Señale directo a su cara –No tendrás más oportunidades –Mencione mientras me cruzaba de brazos, intentando hacerme el importante.

-¡Bieennnnn! ¡Ya verás Tommoky! – Grito con euforia - ¡Lograre que vallas a mi cuarto y lo disfrutaras! Jajaja – Una gran gota callo por mi cuello ¿Por qué celebra tanto? ¿Acaso es un niño de preescolar? Su euforia me parecía excesiva, es como un gran tonto.

-Emmm claroooo, lo que digas – Dije mientras sonreía forzadamente y me dirigía a la salida.

-Espera, ¿A dónde vas? – Pregunto inquieto.

- A mi cama, debo dormir para la prueba de mañana – Mencione sin girarme –Hasta mañana Ritsu, recuerda el trato –

- ¡Hasta mañana Tommy! ¡Te estaré animando! – Vocifero en lo que atravesaba el marco de la puerta. Ni me inmute a mirar, creo que le había dicho demasiado a Ritsu por un día. Aunque, mejor dicho, por un mes.

__________________________________________________________________

 

RRRRIIIINNNGGGGGGGGGGGGGGGGGG

Un aparatoso e incesante sonido retumbo por toda la habitación. Era parecido a una campana incesante cuyo sonido parecía no tener fin. Nunca había habido ningún  despertador en nuestro dormitorio ¿De dónde salió este?

-AAHHHH ¡Apaguen ese reloj! –Grito Takuya desde su cama.

Abrí los ojos buscando en incesante y molesto sonido. Salí de mi cama totalmente adormilado, tanto que caí al tapete de rodillas. Aún no había despertado del todo. ¿Dónde estás? ¿Dónde te escondes maldito? El ruido seguía inundando el ambiente. Un pequeño dolor de cabeza empezaba a reflejarse en mi mente.

-¡Apaga esa maldita cosa! - Escuche la voz de Koji retumbar. Justo un segundo después el gemelo cayo de la cama de arriba del Camarote. Al caer boca abajo, era imposible no notar la ropa interior que poseía en ese momento, si no estoy mal eran pokebolas.

-Jajaja –No pude evitar soltar una pequeña carajada por aquel espectáculo. Koji, el señor rebelde, usaba ese tipo de...- ¡Rei! ¿Qué haces? –

Ante la molestia por el ruido, vi como el pequeño Reisuke. Caminaba hacia el montón de paquetes que había arrumados al lado de mi cama. ¿Acaso uno de aquellos regalos era un reloj despertador? Justo cuando el niño iba a agarrar uno de los paquetes, se le cayó la sabana dejándolo totalmente descubierto.

En los 5 segundos que vi su cuerpo de perfil, note que toda su piel estaba del mismo color. Un marrón claro, no tan blanco como Konu pero… bueno, no era moreno. Se me hizo raro notar que no tenía más claro su trasero y la parte de sus piernas que limitaba a su alrededor. Es como si nunca se hubiera insolado, o hubiera tomado el sol. Hasta Konu tiene marcada la silueta de un traje de baño ahí atrás; Los gemelos, Fuko, hasta Ritsu tiene esa parte un poco más clara que las demás partes de la piel.

CCCRRAASSHHHHH

Mientras estaba pensando en esas tonterías, el pequeño de pelo naranja había tirado con dureza una de las cajitas que de regalo que me habían regalado contra la pared. El intenso sonido ceso por fin del ambiente. Suspire aliviado mientras me sentaba sobre el tapete abriendo los brazos, aún estaba lo bastante adormilado como para no estarme de pie.  Debo decir… que me encantaba el silencio y la tranquilidad

-Gracias Rei – Grito Takuya desde lo alto de su cama sin descobijarse.

-Sí, gracias pequeño – Menciono Daji sonriendo desde el borde de su cama para luego volverse a recostar.

-Te lo a gradez… -Mis palabras quedaron trabadas por la escena que acababa de presenciar. La mirada de Rei era… distinta, diferente. Conocía esa mirada. La había visto algunas veces: Cuando había apuñalado a aquel tipo, cuando peleamos al frente de mi casa… cuando. -¿Quién eres tú? – Hable incorporándome con temeridad.

-Acaso no me conoces… - No era la voz de Reisuke. ¡No podía ser el! Era una voz muy profunda, bastante perturbadora– Soy Reisuke Hojo. Tu verdadero hermanito – Estaba ligeramente encorvado y aun me miraba de perfil. Tenía un nudo en la garganta en ese momento. No podía terminar de incorporarme. Al ver esos ojos verdes brillantes, simplemente me había paralizado del miedo.

-Tú…tú no eres mi hermano- Respondí un poco asustado. Temía que me atacara, fuera quien fuera, era peligroso incluso hasta para mí –No te me acerques – Suplique cuando lo vi dar un paso hacia mí.

- Yo soy el verdadera Reisuke, hermano – Dijo reflejando una sonrisa poco alegre. Me miro de frente, y a pesar de estar completamente desnudo, no pude separar mi mirada de la suya. Esos ojos verde esmeralda no tenían pupila, o al menos yo no la veia – Algún día podremos charlar como se debería – Dio la vuelta y se recostó en su cama dándome la espalda – Si es que el pequeño  me deja – Susurro mientras se rascaba una de sus nalgas.

Luego todo quedo en silencio. No conté el tiempo que tarde en volver a la realidad. El encuentro cara a cara con la otra personalidad de Rei me dejo perplejo. Temiendo por mi vida cobije a Reisuke y volví a acostarme en mi cama. Aún no ha salido el sol. Quise intentar volver a dormir, cosa que logre en menos de lo que pensaba, aunque no tan bien como quería.

_________________________________________________________________

 

-¿Entonces tu pusiste el despertador? –Pregunto Koji preparando las manos para golpearlo de frente.

-Fuko le regalo un balón a Tommoky, fue ese el que dijo que había comprado un despertador – El peliblanco señalo a aquel tipo extravagante que se veía muy sonriente y animado –

-¿Entonces fuiste tú? –Gruño Koji a shyba, quien hablaba por celular e ignoraba completamente cualquier cosa que sucediera a su alrededor.

-WWAAAAAAA – Estire mis brazos mientras bostezaba –

-¿Estas bien? ¿Parece que no dormiste bien? –Pregunto Ritsu desde un sillón junto a la puerta.

-Estoy bien, solo que nos despertaron muy temprano y no pudimos descansar lo suficiente – Respondí estirando mis manos al frente.

- Por cierto ¿Qué hacemos aquí? – Dijo inquieto Takuya. Haciéndose notar en aquella habitación bastante concurrida.

-Pero que tonto, este es nuestro camerino para la prueba de hoy – Resoplo Koji cruzándose de brazos.

-Debemos esperar aquí a que nos llamen para la prueba – Agrego Daji bastante serio – De hecho, no podemos salir de aquí hasta nueva orden, no podemos ver nada de la competencia –

-Y se supone que tú eres el tutor – La voz de Koji se volvió a escuchar, esta vez un tanto sarcástica - ¿Cómo fue que caímos tan bajo? –

-Jajaja Que Gracioso – Rio de manera falsa el castaño – Lo menciona aquel que se ha peleado 3 veces en menos de dos días  jajaja –

-Serás… -

-¿Peleado? ¿Con quién más te pusiste a pelear? – Pregunte con preocupación.

-A ti no te importa, yo veré con quien me peleo – Respondió el gemelo casi que escupiendo– Además solo golpee a alguien hoy, la única pelea fue contigo ayer –En su mirada solo se reflejaba ira e inmenso malestar.

-¿Pero porque se pelearon? ¿No se supone que son como familia? – Si este chico no hace este comentario, no hubiera recordado que estaba en aquel lugar con nosotros. Kaseru, el chico gordo que me había ayudado en la enfermería estaba dentro de aquel cuarto pintoresco.

Varios de los salones de los clubes del bloque C habían sido adecuados para albergar a los equipos antes de la competencia. Ya alcanzaban las 6 de la tarde, llevábamos encerrados en aquel lugar casi 4 horas. El ambiente había sido incomodo puesto que no estábamos muy unidos y tampoco consideraba que estuviéramos preparados para ello, los pequeños habían estado ignorando la mayoría de los comentarios y Daji se le notaba muy diferente de su personalidad tranquila y segura. También estaba afectado de alguna forma ¿Ccuál será la razón?

-Hasta donde yo sé, Tommoky y uno de los gemelos se pelearon por los comentarios entre ellos – Menciono Ritsu sin darle mucha importancia al asunto – Déjalos, en todas las familias hay peleas. Me parece de lo más normal –

-Pero si se llevan tan bien, no te parece raro que estén de esta forma – Agrego Kaseru acercándose a Ritsu – Tan distantes todos –

El gordito tenía razón. Estábamos distantes, separados… lejos de ser un equipo. Nadie tomaba la palabra en estas instancias, parecía que todos temiéramos hablar y equivocarnos de palabras.

-Cuando Fuko pelea con sus hermanastros, siempre nos tomamos un refresco, nos reímos y volvemos a ser amigos – Por suerte, el niño de pelo blanco interrumpió aquel devastador silencio.

-Fuko, tú y tus hermanastros parecen ser muy unidos-Menciono Ritsu sonriendo.

-Sí, me gusta mucho lo que hacemos. Somos muy unidos. Al igual que con mis amigos – Menciono Fuko corriendo a abrazarme – Por eso estoy aquí, me gusta estar con ustedes. Ojala pudiéramos hacer todas las cosas que hago con mis hermanastros, seriamos más unidos – El abrazo se intensifico. Me imagine varias cosas pervertidas que fuko hacía con más personas y se me calentaron las mejillas.

-Me gusta tu aptitud pequeño –Chisto Kaseru tocándole la cabeza, luego de que dejara de abrazarme.

-Soy Fuko, no pequeño – Respondió molesto el peliblanco – Y no me toques, apenas si te conozco-

-Está bien, lo siento –Se excusó Kaseru dando dos pasos hacia atrás.

-¡BIEN CHICOS!!! – Grito Shyba de la nada - ¡ES HORA DE ANIMARSE!  ¡Hay más alegría en un cementerio!  Jajaj – Solté una pequeña risita. Aquel tipo excéntrico me había hecho reír en este momento de tensión – ¡Vamos! Acérquense todos –

De muy mala gana, todos los presentes en la habitación formamos un círculo en el centro de la habitación. Además de los miembros del equipo, estaban Ritsu, Kaseru, Fuko, uno de los amigos de Fuko que ni siquiera le conocía la voz pero siempre iba a jugar; un niño con quien Konu había estado hablado casi toda la tarde alejado de mí; Shyba y uno de los asistentes de Shyba, que lo reconocí por portar un traje medio elegante con una corbata horrible.

-Gracias a todos los acompañantes por estar aquí. En nombre del equipo les agradezco su apoyo, dentro de poco mi colaborador les traerá las camisas para que sean parte de la barra del “404” – Menciono Sonriendo.

-¡Si! Muchos de la clase apoyamos a Konamu –Dijo aquel niño entusiasmado - ¡Viva Konamu! – Vi como aquel chico abrazo a Konu con fuerza mientras este se sonrojaba y se reía.

Aquella escena nos hizo sonreír a casi todos los presentes, incluso Koji se había conmovido con aquella muestra de amistad.

-Entonces, ya sabes, tienen que gritar muy fuerte y con muchas ganas. Así ganaremos – Menciono Shyba empuñando las manos – Ya saben que tienen muchas personas que los apoyan y los quieren, no pueden perder – Hizo una pausa para mirar a Konu – Konamu, toda la compañía está pendiente de esta prueba, tienes todo nuestro apoyo y cariño, nunca lo olvides –

-¡Bien! – Alzo la voz el pequeño mirando para otro lado – Ganare para que se sientan orgullosos de mi – Dijo haciéndose el importante.

-Me gusta escucharte decir eso – Animo Shyba. Miro a los gemelos que estaban de brazos cruzados con la mirada caída, aún estaban tensos – Para ustedes tengo una sorpresa, alguien los está viendo esta noche. No les diré quién, pero creo que querrán que los vean ganar hoy –

-Pero la abuela esta… -Menciono Koji pensativo.

-¿No me diga que hay alguien de la familia principal aquí? –Pregunto Daji asombrado – Porque si es así, quiero golpearlo y decirle que lo odio-

- Yo igual, esa familia nos abandonó – Dijo Koji decepcionado.

-Entonces hagan que se arrepientan de olvidarlos, demuestren que a pesar de tener media sangre de otra cultura, son capaces de triunfar y conseguir ser grandes – Comento el mayor con tono motivante. Nunca lo había visto tan emotivo, tan firme, tan interesado por nosotros – Ustedes antes no los reconocían, ahora pueden hacer algo que ellos nunca lograran. Esfuércense, su destino es ser mejores que ellos  ¿Tengo razón o no? –Termino diciendo  expectante. Empuñando su mano derecho y estirándola frente a los rubios -¿Tengo razón o no Gemelos?-

-¡Si señor! –

-¡Tiene razón! –

-¡Vamos a hacerlo!-

-¡Ganaremos! –

-Así me gusta – Afirmo el adulto sonriendo – Reisuke, quiero ser parte de tu familia, quiero estar junto a ti y tus hermanos. Quiero que sepas que todos aquí te queremos mucho, y te apoyaremos en lo que hagas – Rei lo miraba sonriendo, sus mejillas nunca habían estado tan rojas. Se le veía feliz. Me alegro por eso – Eres parte importante de este equipo, y no te cambiaríamos por el más fuerte del mundo, tú eres el niño record del equipo azul cielo. Serás el más pequeño en ganar esta competencia y pasaras a la historia por ello. Da tu mejor esfuerzo –

-Claro que lo hare. Hare que todos ganemos – Menciono Reisuke sonriendo.

Shyba estaba logrando lo imposible. No sé de donde había sacado tantas palabras tan bonitas, pero había cambiado las caras de todos en la habitación. Incluso Takuya y yo estábamos con la moral por las nubes por la forma en que le habían hablado a nuestros compañeros.

-A ti te digo – Miro a Takuya con seriedad – Que tienes más futuro del que crees, y que si te esfuerzas un poco más, lograras lo que más deseas. Pienso que tu sueño se puede cumplir si empiezas a trabajarlo con este equipo, esta familia… tu familia – Nos señaló a todos los presentes – Te ayudara a lograr lo que quieras –

-Tiene razón –Respondió Takuya con confianza – Hare lo que pueda para ayudar a mi equipo –

-Ahora bien, Tomoky – Todas las miradas recayeron sobre mí. Incluso Shyba me miraba con entusiasmo – Eres todo…-

PPPPPAAAMMMM

La puerta se abrió de golpe. Todos volteamos para ver quien había interrumpido el aquel espectacular  momento. Un pequeño de pelo rojo tenía una sonrisa de oreja a oreja mientras exhalaba bocanadas de aire, se le veía cansadísimo y sudoroso. Lain se sentó sobre el piso mientras recuperaba el aliento. Nunca lo había visto con pantaloneta, sus piernas tenía unas ligeras muestras de pelos y sus rodillas estaban llenas de cicatrices.

-El jefe me… mando aquí… tengo… -Intentaba hablar entre su cansancio -… un mensaje para…. ti… tommoky - ¿Ehh? ¿El jefe?

-¿Y este niño quién es? – Pregunto Shyba dudoso – Y… ¿Quién es el jefe?-

-Él es Lain, es… un amigo mío –Respondí con presión. Forzando mis palabras. Estaba incomodo ya que todos me miraban con impresión. - ¿Qué miran? ¿No puedo tener amigos? – Jajaja varios se hecharon a reir.

-No es eso jajaja –Menciono Takuya. No podía de la risa – Es que este niño siempre dice que son pareja jajaja –

-¿Qué? ¿Qué? – Menciono dando un paso hacia atrás - ¿Cómo que pareja? ¡Lain! – Mire a pelirrojo con furia. Aunque por el momento sentía más vergüenza que furia.

-Jajaja Tommoky… jajaja – Shyba hablaba entre carcajadas -…no te… jajaja avergüences  de eso… jajaja… todos tenemos derecho… jajaja… a ser felices – Esas palabras solo hicieron que me enrojeciera más.

- Pero es la verdad– Menciono Lain bastante serio, sin interesarle la lluvia de risas – Somos pareja tommoky - Me miro abriendo los brazos. “No puedes evitarlo” leí en su postura.

-No es cierto – Recrimine negándolo con firmeza –Acaso no…-

-¿No somos compañeros de investigación entonces? –Dijo ladeando la cabeza. Varias de las risas se acallaron al escuchar aquello – El jefe y tu acordaron que seriamos compañeros en esta tarea ¿No lo recuerdas? –

Claro que lo recuerdo. Yoshitory me encargo vigilar los movimientos de esa tonta secta, y convencimos a Lain que nos ayudara, el cual se alegró mucho por la labor. Dijo que parecíamos detectives, con nombres clave y esas cosas. Yoshy era “el jefe”, ya que era vigilante y quien tenía más rango entre todos, mejor dicho, el único que tenía algún rango. Lain quería que llamarse “Time” o algo parecido.

-Si lo recuerdo Lain- Suspire fuertemente. Ya sabía porque decía lo de ser pareja – Y si… somos pareja de detectives – Mencione sonriendo, que inmediatamente sonrió y corrió a chocarme la mano.

-Entonces… Pareja de detectives ¿Ehh? –Menciono Shyba entrecerrando los ojos – ¿Y que se supone que investigan? ¿Combaten el crimen o algo parecido? – Dijo en tono sarcástico.

-Entonces era verdad que tenías más secretos – Hablo Koji entre dientes -¿Algo más que quieras decirnos? –

- Yo no tengo secretos – Respondí a la defensiva – Siempre hablo con la verdad – Le mire enojado, es como si me estuviera llamando mentiroso y no lo soy.

- ¿Así? – Menciono Koji retándome - ¿Cuántas veces te escapaste con el genio? Sin ofender – Señalo Ritsu sonriendo.

-No hay ofensa, más bien pienso que tienes envidia – Menciono el Rubio risueño, totalmente complacido por la mirada de piedra que ofrecía Koji.

-Siempre te reúnes con el enemigo. Con ese lunático y con el vigilante ese –

-¿Y qué pasa con eso? Si ellos nos ayudaran –Dije con ira - ¿Por qué no hacer amigos?-

- ¡No me agradan! – Chillo Konu muy molesto – Estas más tiempo con ellos que conmigo – Bajo la mirada angustiado.

-Pero Konu… -

-Oye, el jefe es buena onda – Interrumpió Lain cruzándose de brazos.

-¡Cállate! – Grito Konamu con ira – No sé qué haces aquí. ¡No eres de mi familia! –

- ¡Konamu! – Regaño Shyba molesto.

- Eres un doble cara, siempre le sonríes a todo el mundo pero luego hablas mal a sus espaldas – Arremetió Koji de nuevo – Dices que nos quieres pero luego, te iras con tus amigos populares y nos dejaras - ¿Pero que está diciendo?  ¡¿Yo popular?! – Y haces sufrir a mi hermano… ¡Como te atreves! – La última afirmación me dejo mudo totalmente ¿Hermano? ¿Daji?

-¡Koji! ¡Te dije que no dijeras nada sobre eso! –Grito exasperado el gemelo - ¡Tonto! ¡Te odio! –

-Espera, espera… ¿Cómo que hacerte sufrir? – Menciono Takuya con impaciencia - ¿Qué le hiciste al clon? –

El castaño se puso frente a mí con una mirada fulminante. Parecía a punto de golpearme por algo que ignoraba. ¡Por dios! ¿Qué hice?

-Pero no le hice nada… -

-¡Cállense todos! –Grito Lain aturdiéndonos a todos. Lo más extraño es que su grito no sanaba agudo, sino que era muy grave, tanto que no parecía un grito de un niño - ¡No ven que tengo noticias del jefe! –

-¡A nadie le importa eso niño! ¡Y a mí no me calles! – Koji lo señalo con la mirada mientras se colocaba justo al lado de Takuya - ¡Te volveré a golpear Tommoky! ¡Y esta vez no tendré compasión!- Amenazo con su puño.

¡Ya está bien! Si este tipo quiere pelea, pues se la daré. ¿Quién se cree que es? No he hecho nada que le afecte. ¡Maldito Rubio! Te golpeare hasta el infinito. Te mandare de vuelta a tu país. Me puse en guardia sin decir nada… si iba a haber pelea, entonces daría el primer golpe, no soy el mismo llorón de antes, te metiste con el Tommoky equivoca…

PPPPPAAAAMMMMM

Un golpe certero hizo que Koji callera de rodillas al piso para sorpresa de todos, más que todo para mí y para Takuya, quienes estábamos más cerca de él. Con una gran rapidez, Daji había golpeado a su hermano en uno de los muslos, haciendo que se desplomara sobre sí mismo.

-¡No golpearas a nadie más hoy! – Alzo su voz mientras agarraba a su hermano de un brazo y lo ponía sobre su propia espalda - ¡Y menos a Tommy!- Realizo una pequeña presión sobre el brazo de su hermano y este produjo una mueca de dolor.

-Ya… Suéltame – Balbuceo Koji mientras intentaba zafarse del agarre de su hermano.

- ¿Entendiste? No vas a golpear a nadie más – Gruño Daji con una cara bastante aterradora.

-¡Bien! ¡Bien! ¡No tocare a nadie! –Chillo Koji, quien luego suspiro aliviado cuando lo soltaron –

-Y Tommoky no me hizo nada ¿Bien? Es mi culpa por… eso –

-¿Tu culpa porque? – Repitió Takuya dudoso.

-¿Qué pasa? ¿Por qué tú hermano esta tan paranoico? – Hablo Shyba quien había estado como espectador la mayoría del tiempo. El ambiente había cambiado rotundamente, ya no había caras emocionadas, ahora solo reinaba la confusión y el miedo en la mayoría de las caras -¿Y tú? ¿Qué rayos hiciste para que se enojara? – Me observo, como si me estuviera echando la culpa.

-AAHH… Yo no hice nad… -

- ¡¿Quieres saber sobre la prueba o no?! –La voz de Lain volvió a escucharse de manera abrupta en la habitación.

Todos los pares de ojos se posaron sobre el niño que se veía a punto de estallar de rabia. Por unos segundos, nadie dijo nada. Todos estaban en la misma situación, de repente, las palabras de ese niño eran más importantes que cualquier pelea o regaño que surgieran. Parecía la voz de un ángel que intentaba guiarnos por la senda de la victoria.

 

Notas finales:

Espero no esten "zzzzzz" o algo asi jajaja. No me maten por dejarlos de esa manera, es que no queria hacerlo mas largo y creo que fuerons suficientes emociones por hoy.

¿Como vivieron las emociones ustedes? ¿muy oscuras? ¿Se sorprendieron de la propuesta a Ritsu? ¿CReen que el rubio lograra resistir y ganar su recompensa?

Estamos en la tercera prueba, por el momento durara dos capitulos, asi que imaginense muchas cosas ya que sufriremos muchos en el proximo capitulo.

En serio quiero saber... ¿Que les impacto mas de capitulo? Es como una encuesta de satisfaccion solo para saber... y de pronto ahondar en eso. De pronto la relacion con uno de los gemelos... o... esa personalidad de Rei... o... ¿quien sabe?

Agradezco sinceramente todos los reviews que he recibido, son un haz de motivacion para mi. Gracias a todos los que leen y espero verlos pronto. Saludos a todos y exitos.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).