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Un romance escalofriante por VeinMrsTop

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Notas del capitulo:

Aquí el segundo capítulo ^^~ 

Me alegra el que haya cumplido mis espectativas, ya que logré los 5 reviews y las más de 100 lecturas. 

Disfruten ^^~

La mañana era fría, lluviosa,  y Jiyong se encontraba parado en la banqueta sosteniendo su paraguas mirando fijamente a la calle, más bien a lo que era el dibujo de dos cuerpos, ese que hacen con aquella tiza blanca mientras hacen el peritaje cuando ocurre un accidente de tráfico y hay cuerpos en tirados en el pavimento.


Quiero reportar un accidente de tráfico y una fuga. –Ji estaba en la caseta telefónica reportando el accidente en el que las niñas que habían aparecido la noche anterior en su casa habían muerto.- No, no lo vi personalmente… Sólo me enteré de ello… Sí… -Le informaba a la operadora, no era la gran información puesto que él no había presenciado el accidente. No podía decirle a la persona al otro lado de la línea que se había enterado de ello por que las dos niñas que aparecieron en su casa se lo dijeron. Se iba a ganar un pase al psiquiátrico. Eso estaba más que claro.


***


Practiquen más por su cuenta. Practiquen en casa. –Decía Dae a los chicos del staff que trabajaban en el show de Seung.- Oye, su personalidad no es demasiado normal. –Habló a Dong Wook que estaba parado a su lado mirando que los del staff hicieran bien las cosas.- Si quisiera podría comer con todos nosotros, pero se esconde llenando su rostro con comida. –Hablaba mientras miraba a Ji sentado comiendo una torta, como si no hubiera un mañana. Hasta que este se dio cuenta de que lo miraban, se asustó sonrojándose rápidamente y se agacho ahí mismo donde estaba sentado, intentando esconderse.- ¿Y ahora qué? –Dijo Dae y Dong Wook no podía parar de reírse ante el tímido comportamiento que Ji demostraba. Lo vio como agarraba la correa de su mochila colgándosela en su hombro para levantarse y salir huyendo a hurtadillas como siempre lo hacía.


Pero ¡Oh sorpresa! Las cosas cambiarían y el no saldría huyendo como siempre lo hacía.


¿A dónde va? –Pregunto Seung quien estaba sentado, cruzado de piernas y de brazos a tan sólo 2 filas atrás de donde estaba sentado Ji, mirándolo expectante y serio. Ji al mirarlo ahí se asustó y sus ojos se abrieron como platos, quedándose ahí parado y mirándolo fijamente.


A casa. –Respondió con seguridad el menor, desviando su mirada después de unos segundos por que su timidez lo invadió de pronto.


Parece que no tiene planes para hoy. –Seung se levanto de su lugar y dio un par de pasos hasta quedar frente al más bajo, cruzado de brazos y su mirada penetrante a la espera de la típica excusa del menor.


Así es. –Jiyong respondió mientras asentía con la cabeza, y miraba a todos lados pensando como librarse de esta.


Entonces saldremos a beber algo. –El pelinegro lo miró con una gran sonrisa.


Tengo cosas que hacer en casa… Lo siento –Eso  fue lo primero que se le vino a su mente y es que vaya, él no era bueno diciendo mentiras. Hizo una reverencia y comenzó a andar hacia la salida del teatro.


No hay excusas esta vez. –Seung rápidamente bloqueó el paso al castaño y Ji sólo le miro nervioso, sintiéndose atrapado y sin oportunidad alguna para poder escapar.


Eso fue duro. –Exclamó Dae, que estaba en el escenario con Dong Wook y ambos miraban expectantes aquella escena. ¡Hoy sería el día en que por fin sacarían a Ji a beber con ellos!


Tengo que lavar la ropa y alimentar a mi perro. –Sí, otra vez las ingeniosas excusas de Ji salieron a la defensa. Claramente se notaba su nerviosismo.


Lave la ropa mañana y alimente a su perro después. -Contesto Seung tranquilamente, y es que él no le veía lo importante a esos asuntos que tenía el menor.


Mi perro… -Ji lo miró, las excusas se le estaban acabando y sentía las de perder por que el mayor estaba empeñado en llevarlo a beber con los demás. No tanto por que fueran a beber. Sólo quería que conviviera y pasara un rato agradable con ellos.- Enloquece si no lo alimentan a tiempo. –Ji soltó una sonrisa nerviosa


Los perros pueden enloquecer, eso no es ningún problema. –Replicó el mayor.


Sé que sus intenciones son buenas, pero lo siento. –Su mirada denotaba una clara tristeza, en voz baja respondió apenas un audible lo siento e hizo una reverencia para retirarse.


-El mayor se dio la vuelta y miró a Ji.- No sólo son buenas intenciones, sería bueno que pudiera participar. –Ji se detuvo por un segundo y luego siguió su caminar a la salida ignorando al mayor.- No es como si su padre acabara de fallecer. -¡Oh, gran error por parte del mayor el haber dicho aquello! Ji se detuvo y su rostro denotaba una expresión entre confusión y enojo a la vez.


Definitivamente no vendrá. –El rubio le dijo a Dong, ya que ellos aun seguían en el escenario mirando esa escena un tanto cómica por que Ji quería huir y Seung le impedía hacerlo.- Creo que vendrá –Contesto Dong Wook sonriendo, sin perder detalle de nada.


¿Apostamos 100,00 wons? –El rubio contesto con demasiada confianza a lo que Dong sólo contesto con un “claro” también lleno de mucha confianza.


-Jiyong se dio la vuelta para mirar al mayor.- Es usted un fascista.


¿Fascista? –El pelinegro sólo atino a responder aquello un tanto dubitativo.- ¿YO? –Se señalo así mismo ya un tanto ofendido a lo que Ji sólo le miraba indiferente.- Sólo quiero que participe esta vez ¿Y usted me llama fascista? Eso no tiene sentido ¿Qué quiere decir con eso? –Notablemente ya se había ofendido por que nadie le hablaba de esa manera.


¡No quiero salir con ustedes! –Ji salió a la defensiva.


Aunque no quiera, debe ir. –Seung resopló. Oh, vaya que esta vez ese enano no se salvaría.


¡No quiero! –Y por supuesto el menor seguía de necio llevando la contraria.


¿Porqué? –El pelinegro ya se estaba impacientando ante tanta terquedad del chico.


Hay personas a las que no les gusta beber alcohol. –Respondió fastidiado ante tanta insistencia por parte del alto.


Entonces no beba alcohol, beba agua. –Contestó como si fuera lo más simple en todo el mundo.


¿¡Cómo puedo beber agua si hay alcohol frente a mis ojos!? –El menor gritó frustrado y justamente todo estaba en silencio haciendo que su voz resonara más en el lugar. Seung lo miró sorprendido por que nunca lo había visto alterarse y los demás tenían la misma expresión del pelinegro. No se pasaban a creer que el tímido Ji tuviera tan semejante carácter y valor de gritarle a Seung.


Él tiene carácter –Dae sólo miraba atónito la reacción del menor y Dong soltó una leve risilla y asentía con la cabeza. Ese niño los había sorprendido.


-Ji miraba a todos en el lugar y es que no se había dado cuenta de lo que había hecho hasta unos segundos después. “¡Mierda!” fue lo primero que cruzó por su mente, casi quería correr y darse contra la pared por tremenda tontería que había hecho.- De acuerdo. Iré. –Lo miró con esos aires de diva que tenía.- Pero debe saber que tengo problemas para beber. –Advirtió apenado.


Yo también los tengo. –Sonrió y ahí iba el cinismo del mayor por delante.


Puedo beber unas 7 botellas de soju. –Respondió sinceramente. No era fuerte a la hora de tomar.


No me importa si bebe 70 botellas. –Seung se inclino levemente hacía el menor sin apartar su mirada.- Hasta luego entonces. –Recobró su postura y se dio la vuelta para caminar rumbo al escenario, con una sonrisa victoriosa dibujada en su rostro. ¡Al fin lo había logrado! Después de un año, pero lo había logrado.


No tiene principios ¿Dónde quedó su sentido de la consistencia? –El rubio reprochaba ya que había perdido la apuesta de hacía sólo minutos atrás. Saco su cartera para pagarle el dinero a Dong, quién no podía parar de reír y a la vez ansioso esperaba su pago.- Sólo te daré 80,000 wons por los impuestos. –Le dio el dinero al alto.- Ah, y tú me debías 10, 000 won. –Dae le quito un billete y se fue dejando a Dong perplejo. Y Ji por otro lado se había quedado de pie en el mismo lugar mientras resignado terminaba de comer su torta.


***


Anoche en mis sueños vi a mi abuela fallecida. Ella estaba de pie mirándome y luego comenzó a golpearme, diciendo “¿Por qué nunca fuiste a visitarme cuando estaba viva, mocoso?” “¡Eres peor que un cerdo, mocoso!” “¿Cómo puedes dormir de noche?” “¡¿Cómo puedes dormir?!” –Dae contaba a todos los presentes el extraño sueño que había tenido mientras imitaba como en su sueño lo golpeaba su abuela.- Ese sueño fue muy real. –Seguía riéndose y los demás lo hacían ya que era gracioso cómo el rubio contaba aquello detalladamente.


Al otro extremo de la mesa, Ji estaba recargado sobre esta ya completamente alcoholizado, comenzó a reírse cuando Dae terminó de contar el raro sueño que había tenido la noche anterior y los demás lo voltearon a ver extrañados.


Esa reacción es bastante única –El rubio habló y miraba curioso al menor que aún seguía riéndose. Ji levanto su mirada y volteo a ver al chico.


¿Fue doloroso cuando lo golpeaba? –Pregunto Ji, para estar tan ebrio aún podía hablar claramente.


Se sintió doloroso –El rubio contesto sin despegar su mirada del castaño. Los demás miraban expectantes la situación.


Eso no fue un sueño~ -Ji comenzó a reírse y más aún al ver la cara de espanto que puso Dae (Imagínensela como la que hizo en la casa embrujada).- Cuando todos estamos durmiendo ¿Sabían que los muertos vienen a visitarnos? –Recargo sus codos en la mesa y hacía señas con las manos, a lo que Seung sólo solto una simple carcajada.- Vienen cuando estamos dormidos y de esta forma, ellos te observan dormir –Ji irguió completamente su espalda y abrió mas sus ojos y esbozaba una pequeña sonrisa que más bien era siniestra.- Algunas veces también se acuestan a tu lado o también pueden estrangularte. –Con sus manos simulaba el estrangular a alguien.- Pero todos piensan que es una pesadilla. ¿Es similar a una pesadilla, no? –Comenzó a reírse nuevamente de manera escalofriante y dejaba caer su barbilla en las palmas de su mano, volviendo su expresión como la de un niño bueno e inocente.- No me creen ¿verdad? –Volvió a recargar sus brazos sobre la mesa y volteaba a ver a todos.- La vida es como un sueño… -Bufó por último.


¿Esto es como una enfermedad profesional? –Seung dejo escapar una leve sonrisa burlona.


Uh… Gran error. Ji que estaba apunto de empinarse la botella de soju, le lanzó una mirada fulminante y volvió a poner la botella en la mesa haciendo que sonara un poco fuerte. Y a Seung se le borró esa sonrisa de su rostro al ver cómo Ji se ponía en pie  y comenzaba a caminar hacía él, pero en el trayecto, el menor con la palma de su mano iba dando de zapes a todos los que estaban sentados. Se quedo parado al lado de Dong y con su mano jaló la manga del chaleco de este, haciéndole señas para que se quitara de ahí y este lo miraba asustado, ese pequeño de temer.


Deja que se siente ahí. –El rubio le habló a Dong y este inmediatamente se puso en pie dejándole el lugar al menor y este se fue a sentar donde Ji estaba anteriormente. Entre más lejos más seguro estaba. Ji se sentó de golpe en la silla pero sin apartar esa mirada penetrante hacía el mayor e hizo un puchero. A lo que Seung y Dae sólo le miraban con miedo y avergonzados.


Está totalmente ebrio… -Habló Seung, avergonzado por que todos en el bar los estaban mirando e intento agachar la cabeza y Dae solo asentía.


Usted… ¿Piensa que su vida es dura? –Ji metió su dedo índice en su oído, rascándose mientras le hablaba al mayor.- ¿Sabe cuán dura puede ser?. –Seung solo se pasaba su dedo medio sobre su frente intentando no morir en la vergüenza.- Parece que tiene unos buenos padres y fue a una escuela en Kangnam y debe haberse graduado de una buena universidad. Aprendió magia sólo para conseguir chicas y realmente acertó. –Reprochaba Ji al mayor quién solo le miraba perplejo.- Se convirtió en una estrella, tiene dinero y es exitoso. Y es el presidente de la compañía y su novia es una supermodelo ¡Wuuu! –Comenzó a aplaudir mientras se reía. Seung no daba crédito a lo que estaba escuchando y sólo podía reírse.- Sin embargo… -Ji recargo su rostro sobre el dorso de su mano.- Carece de corazón –Seung lo miró sorprendido y el menor apuntaba a su pecho, señalando donde tenía el corazón.- No tiene corazón…  No tiene nada allí adentro… -Negaba con ambas manos.- Es como la piel de cerdo. –Todos estaban sorprendidos por las palabras del menor y el carácter que demostraba, el pelinegro sólo se recargo en el respaldo de la silla sin creerse aún que ese mocoso hubiera tenido el valor de decirle todo aquello en su cara.


Puede que tenga un poco de razón… -El rubio soltó nerviosamente acompañado de una sonrisa.


Oye… -Le replico el mayor, haciéndolo callar nuevamente.


¿¡No se lo advertí!? –Reprocho el menor inflando sus mejillas y dando pataletas en su lugar. “Oh se ve tan adorable”, pensó Seung.


No he dicho nada. –Exclamó rápidamente para defenderse.


Cuando bebo me pongo así, por eso no quería venir. ¿Por qué tuvo que decirme que viniera? –El menor hacía un gran berrinche y se señalaba así mismo.- Me gusta estar solo… -Su voz era triste y agacho la mirada mientras se abrazaba así mismo.- ¡¿Por qué lo hizo?! –Volvió a hacer otro puchero, rayos si seguía haciéndolos el mayor iba a terminar derretido ahí.


No, es sólo que… hemos trabajado juntos desde hace un tiempo. Además forma parte de la razón por la que soy exitoso. Aun así era un poco extraño… -el pelinegro se vio interrumpido cuando de pronto el menor lo tomo de la camisa. Específicamente del pecho donde se localizan los pezones y la sujeto fuerte. Seung se asustó y miró con los ojos bien abiertos al menor.


¿Por qué me forzó a venir? –El castaño lo miraba fijamente.


Es lo que estoy explicando en este momento. –Seung estaba nervioso y no esperaba que sucediera algo bueno. Ese niño era una caja de sorpresas.


¿Por qué? –Seguía preguntando el menor de manera paranoica.


No… -El mayor ya no sabía que hacer para que el otro le soltara el agarre de su camisa.


¿Usted cree que me conoce? ¿Me conoce? –Ok. Ji, ya estaba un poco alterado el mayor estaba de trágame tierra implorando por que la vergüenza pasara.- ¿Conoce cómo es mi estado? ¿Cuánto dolor siento? –Ji comenzó a tironear de la camisa del menor mientras reprochaba un poco alterado al pelinegro quién solo suplicaba por que lo soltara.- ¿Lo sabe? –Ji estaba armando tremenda escena en el bar y aun seguía tirando de la camisa del mayor.


Bueno, ¡no lo sé! –Seung buscaba la manera de soltarse del menor pero este tenía una fuerza tremenda.


¡¿LO SABE?! –Forcejeó con el mayor hasta que de pronto jaló la camisa, se escuchó el ruido de como la tela era rasgada y en sus manos quedaron unos trozos de tela color azul. Oh sí… Y estos pertenecían a la camisa del mayor. Todos, completamente todos, miraban con sorpresa unos cubrían su boca son el dorso de la mano y otros con la bocota abierta ante la sorpresa y Ji sólo se levanto de la silla, hizo una reverencia y antes de retirarse escuchó a Dae decirle que no llegará tarde al día siguiente, y se retiró del establecimiento.


Seung miraba a los demás que ponían todo de sí para no reírse de él, hasta que cayo en cuenta y miró hacía abajo y es que sus pezones estaban al aire libre y avergonzado se cubrió con ambas manos.- Dae, tu chaqueta..


Pero tengo frío, hombre –Dae se ajustó más su chaqueta ignorando al mayor.


¡Pero yo la necesito más! –Replicó y es que estaba que se moría de la pena y todos comenzaron a reírse en su cara. Realmente vergonzoso.


***


Ya era de mañana y Ji aún seguía durmiendo con las mismas ropas que había traído puestas la noche anterior y en sus manos aun sujetaba los trozos de tela de la camisa del mayor. Despertó y fue al baño a cepillarse los dientes, parecía mapache con tremendas ojeras y sus pensamientos andaban tan perdidos.


¡Aish! –Sí, los recuerdos de lo que había hecho la noche anterior atacaban a su conciencia y la vergüenza se hacía presente. Se dio la vuelta y se estamó contra la puerta de baño y comenzó a darse de topes contra esta.


***


Decir que soy como la piel de cerdo, en serio –Seung reprochaba mientras conducía su auto. Aun no se creía que ese niño hubiera tenido el valor de decirle todo aquello- Tsk… ¿Soy como la piel de cerdo?... Él piensa que me conoce. Es antisocial y siempre come solo; ¿él piensa que es un fantasma? Eso es lo más molesto. Definitivamente luce como un fantasma. Además ¿cómo puede un chico beber 30 botellas de soju? ¿Y romper mi camisa de ese modo? –Soltó un gran suspiro, parecía que hablaba sólo pero no era así.


¿Por qué estás tan enojado? –Pregunto Bom, su novia


No lo estoy, pero… -Titubeó un poco antes de seguir con su respuesta. – Él es como un tornado ante mis ojos. –A  lo que Bom sólo le miro fijamente, sin decir nada más.


-Llegaron al aeropuerto y Seung le dio su maleta a Bom.- Llámame todos los días –La chica le regaló una sonrisa al moreno, quién sólo le miro con una expresión bingu.


Pero no me gusta hablar por teléfono. –Respondió el pelinegro


Entonces dejaré de dormir contigo. –Atacó la chica sonriendo ante la broma


De acuerdo, lo haré –Seung comenzó a reírse


Me voy. –Aviso la chica.


Ten un buen viaje. –Se despidió de ella mientras la veía adentrarse al aeropuerto.- ¡Te llamaré luego! –Dijo por último, mientras contestaba una llamada en su móvil  y sonreía a la vez.


¿Sí?- Contesto.


Habla Kwon Ji Yong… -Notablemente nervioso


¿Llegó a casa a salvo? –soltó una risita y caminaba hacia su auto.


Sí..-


Pude ver que su resistencia al alcohol es hasta 30 botellas. –Dijo el mayor


Ahg…  Parece que ayer olvidé mis modales… Pero no puedo recordar nada. –Estaba tan avergonzado que no sabía como era que tenía el valor de hablarle al mayor.


Bueno, sólo rompió mi camisa, eso es todo. –Sonrió el pelinegro, mientras abría la puerta de su auto y entraba en él sentándose en el asiento del conductor.


Lo siento mucho. –Ji no hallaba donde meter la cara de la vergüenza.- ¿podría decirme su talla de camisa, por favor?


Solo uso ropa a medida, no se compra en las tiendas. –Contesto Seung.


A medida… -Balbuceó Jiyong, pensando de qué otra manera enmendar su error, hasta que se le ocurrió algo.- Entonces, quizá sólo pueda deducirla de mi salario.


Por supuesto. –Respondió tranquilamente el mayor.- ¿Pero recuerda lo que dijo ayer? No soy ese tipo de persona. Bueno… No me gusta hablar sobre lo que hacen las demás personas cuando están ebrias.


El moreno seguía hablando con Ji, mientras este se iba hacía la sala andando tranquilamente hasta que un viento sopló al menor y paró en seco.


Tampoco sé, si tiene algún tipo del mal entendido conmigo. No estoy pidiendo ninguna explicación. –El mayor seguía hablando, pensando que Ji atendía la línea. Pero este aparto el móvil de su oído y lentamente giró y volteó a ver un cuadro que tenía colgado en la pared. La pintura era de un bosque muy tétrico. Comenzó a escucharse ruidos a través de la línea y el moreno seguía hablando sin darse cuenta.-  Sólo quería decirle que… ¿Hola?, ¿Hola?, ¿Ji?, ¿Hola? –Seung preguntaba notablemente preocupado ya que Ji no contestaba. El menor sólo caminaba mirando fijamente al cuadro, que de pronto se había vuelto tan interesante, tan ensimismado estaba que se asusto de pronto a escuchar como se rompía un cristal, volteó a ver de donde proveía el ruido y vio que en el suelo estaba un portarretrato y la foto parecía ser de la época en la que Ji estudiaba el instituto y con él habían más personas en la foto. Suspiro de alivio al ver sólo aquello y volteo a mirar nuevamente hacia el cuadro llevándose un gran susto.  Una chica apareció de pronto, su piel blanca, su cabello largo que cubría su rostro casi como la niña del aro. Y miraba fijamente al castaño que estaba aterrado completamente.- Chae Rin… 

Notas finales:

No me maten por hacer sufrir a Ji así de esa manera y por ponerle a Seung novia ;;~ Se aplacan por que así va la historia pues >:c

No sé por qué termina así :c dejandolos más intrigados(?) y se me ocurrió poner a CL de fantasma LOL(??)

 

¿Sabías que... Si me dejas un Review tu Bang favorito te bailará tubo y sin mucha ropa 8D?

*Lanza polvos flu y desaparece en llamas verdes(?)*


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