Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Fugitivos I: Buscando Una Razón Para Vivir. por diidi1897

[Reviews - 208]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

 

Narra Sean

-Todavía no entiendo cómo conseguiste a alguien que nos va a llevar hacia el aeropuerto de Tallinn-subí mi mochila en la parte trasera del automóvil mientras Maxim revisaba unas cuantas cosas en la suya

-Un amigo que me debía un favor tiene un contacto y ese contacto tiene un conocido-me explicó y estuve a nada de reírme

-¿Es una cadena de favores?-Maxim elevó ambos hombros

-Para él fue algo sencillo conseguirnos transporte a comparación de en lo que yo lo ayudé-

-¿En qué lo ayudaste?-

-Es un secreto-abrió en demasía sus ojos para aumentar la tensión-No es cierto-sonrió-A ese amigo le conseguí una cita con la chica de sus sueños-

-¿Qué? ¿Y por algo como eso te deben un favor de esta magnitud?-¿Eso debía de ser catalogado como algo normal?

Ahora sabía que debía de intentar no deberle favores a Maxim. Al parecer, él era quien sacaba mucho provecho de las situaciones… y de las personas

-Ahora están casados, yo creo que si lo ayudé bastante-sonrió y cerró por completo su mochila para después acomodarla a un lado de la mía-Pero no fue solo por eso-suspiró-Es… un buen amigo-asintió varias veces mientras volteaba a verme-Ciertamente, me dio más ayuda de la que esperaba-

Y así, de la forma en que Maxim se expresaba de ese amigo, me di cuenta de que yo también estaba dispuesto a devolverle en creces toda la ayuda que él me estaba dando.

Él no había pedido nada a cambio, pero estaba seguro de que iba a devolvérselo

-¡Lucy!-dejé de prestar atención a Maxim y mi mirada se centró en la entrada de la fábrica. Me encontré con Lucy caminando apresuradamente rumbo a una de las camionetas que habíamos preparado para movernos hacia el aeropuerto Pulkovo.

Ese lugar era nuestra primera parada en el plan

-Quiero ayudar-Lucy le respondió a una Ana y a un James que iban, literalmente, persiguiéndola. Ambos buscaban detenerla y nadie más movió un dedo para resolver ese asunto

-No-James se posicionó frente a Lucy y ella no tuvo otra alternativa más que detenerse-Tú te quedas-Lucy entreabrió la boca, pero James la detuvo-Estás enferma y esto va a ser peligro, no quiero que te pase algo-James la tomó de los hombros-Por favor, quédate aquí-Lucy observó en silencio a James, pero no dio una respuesta-Por favor, por favor, no quiero que te pase algo, sabes que vamos a un lugar muy peligroso y tú no estás en condiciones de nada-Maxim suspiró a mi lado y lo vi negar levemente mientras James intentaba convencer a Lucy de algo, que no necesitaba ser discutido.

Maxim no mencionó nada con la escena que había frente a nosotros, simplemente cerró la puerta trasera del automóvil y pasó a mi lado

-Yo conduzco-tomó las llaves de entre mis manos y caminó hacia la parte delantera del automóvil

-Bien, me quedo- Lucy por fin respondió

-Gracias, cariño-James sonrió mientras besaba la frente de Lucy-Cuídate, por favor-le dio otro beso en la frente y aparté mi mirada de ambos para observar a Ana mientras se acercaba a mí

-¿Todo listo?-asentí-Bien, yo voy con ustedes-no respondí nada más y ella subió en los asientos traseros del automóvil que Maxim iba a conducir

-Andando-James se acercó a mí y lo noté un poco más calmado a como había estado momentos antes

-¿Todo bien?-lo pregunté porque lo noté más cansado y con ojeras. Había sido una noche complicada para él

-Ya la convencí, eso es lo importante-elevó ambos hombros y evitó verme a los ojos. Relamió sus labios varias veces y con nerviosismo-Vayan con cuidado, mantén tu radio encendido-asentí y él subió al automóvil de August.

James iba a viajar junto a August, Heinz, Sergei y Tomás mientras que Maxim, Ana, Claudio y yo nos íbamos en el otro automóvil.

Esos no eran los equipos que habíamos armado para cuando arribáramos al laboratorio, simplemente era para afinar detalles y para que todo mundo estuviera en la misma sincronía con lo que estábamos a punto de realizar.

Las cosas habían quedado de la siguiente manera:

Nuestro primer destino era el aeropuerto de San Pertersburgo, Pulkovo. Estando ahí, tomaríamos el único vuelo que se iba a dar ese día rumbo a Tallinn, Estonia.

Los vuelos entre ambos lugares no eran tan recurrentes por lo que ese único vuelo del día debía de ser tomado sí o sí. No íbamos a tener otra oportunidad hasta dentro de 2 días, que era cuando otro vuelo salía.

Por eso es que estábamos viajando con 3 horas de anticipación, para no tener ningún imprevisto.

Por supuesto que había intentado entrar al sistema de ambos aeropuertos para intentar abrir más vuelos, pero fue imposible. Ni siquiera pude crear dos vuelos más en un mismo día porque el aeropuerto no contaba con más opciones en cuanto a aviones disponibles.

Entrar a su sistema no fue una opción desde el principio, pero quise intentarlo.

-¡Sean!-Maxim me llamó-¡Vamos!-observé una última vez a mi alrededor y me encontré con Lucy en la entrada de la fábrica. Estaba utilizando la bata que siempre llevaba desde hace bastante tiempo, su imagen estaba un poco desaliñada, pero eso había dejado de importarle hace bastante

-Recupera a Dany-observé el movimiento de sus labios y asentí al comprender sus palabras. Ella asintió e ingresó a la fábrica.

Di media vuelta y me encaminé a la puerta trasera del automóvil que Maxim conducía. Subí sin mencionar nada mientras el motor se encendía y después me coloqué el cinturón de seguridad

-¿Vamos con buen tiempo?-preguntó Ana a mi lado

-Vamos bien-le respondió Claudio quien ocupaba el lugar de copiloto.

Escuchamos que el automóvil de August se encendía y después él fue quien dio inicio al trayecto rumbo al aeropuerto. Vimos que el automóvil de adentraba al bosque y nosotros esperamos en silencio durante 15 minutos para empezar nuestro camino.

Cuando llegamos a la carretera, dimos vuelta a la dirección contraria que sabíamos August había tomado momentos antes y Maxim se encargó de tomar una velocidad media. Nuestro camino era el más largo así que debíamos de mantener los tiempos.

Para August y su equipo, la ruta que habían tomado hacia el aeropuerto se encontraba a 30 minutos, mientras que, para nosotros el aeropuerto estaba a 65 minutos

-Estuve investigando y descubrí que en el mar báltico hay grandes cantidades de sargazo vejigoso-mencionó Ana mientras Maxim tomaba una carretera internacional que nos iba a llevar rumbo al aeropuerto

-Sí, yo también leí algo sobre esa alga-Claudio giró sobre su asiento y nos observó a ambos-¿Qué pasa con ello?-

-Esa alga es muy buena para la salud, según algunas revistas que leí en línea, pero me preocupa el hecho de que se interponga en mi control sobre el mar-

-¿Crees que eso sea algún gran problema?-pregunté sin dejar de prestar atención hacia la vista que el puente nos otorgaba

-No lo creo, estuve practicando con ayuda de Tom y August algunas cosas y espero que el sargazo me ayude en controlar una mayor cantidad de agua, es una hipótesis y de verdad espero que me funcione-

-Tendrás que ingeniártelas, estamos en camino-le recordó Claudio

-Lo sé-respondió y Claudio decidió cambiar de tema para evitar que Ana se auto desmotivara

-Va a ser divertido hacer como que no nos conocemos-sonrió

-¡Claro que sí! Ya quiero ignorar a Tom si planea hablarme a pesar de que “somos extraños”-Ana continuó la conversación junto a Claudio y decidí ignorarlos hasta que los temas de interés aparecieron y cobraron fuerza entre los cuatro.

Discutimos puntos de interés y creamos diversas soluciones a los problemas que podían presentársenos durante el viaje.

Conforme la discusión avanzaba, nos dimos cuenta que la situación nos agobiaba y poco a poco, las sonrisas en los rostros fueron desapareciendo conforme nos acercábamos al aeropuerto.

Era una misión de alto grado de peligrosidad, pero nos considerábamos capaces de conseguirlo.

Yo confiaba en todos ellos y en las habilidades de cada uno.

-------------------------------------------------------- 

-Ya los vi, están en medio de la fila para pasar a revisar su documentación-mencionó Maxim a mi lado mientras ambos pasábamos otra de las puertas de seguridad del aeropuerto. Asentí y decidí no observar hacia el lugar en donde se encontraban August y su equipo que seguramente, habían llegado hace poco más de 50 minutos.

Observé a mi alrededor y encontré el típico ambiente de un aeropuerto por la mañana. Las personas iban y venían de todas partes arrastrando muy cerca de ellos sus maletas.

Los vuelos se anunciaban por los altavoces mientras que los aviones despegaban o aterrizaban.

Todo estaba normal.

Mi vista encontró a Ana que caminaba animadamente a un lado de Claudio. Ambos mantenían una conversación que se veía muy normal entre amigos que estaban a punto de viajar junto a otros dos amigos los cuales resultábamos ser Maxim y yo.

Acomodé mi mochila sobre mi hombro cuando nos acercamos al mostrador que se nos había asignado para llevar a cabo el check-in y los cuatro preparamos nuestra documentación conforme la fila avanzaba rápidamente.

Nosotros íbamos a viajar en primera clase mientras que los demás habían quedado en clase turista, por supuesto que no fue decisión de nadie más que de la suerte al lanzar una moneda al aire.

Había sido idea de Tomás y de August realizar tal elección y por supuesto, ambos resultaron ser los perdedores.

La fila avanzó otro poco y yo me mantuve observando a mi alrededor mientras Ana, Claudio y Maxim reían entre ellos.

Observé hacia donde August y los demás se encontraban y noté que estaban a 7 personas de pasar al check-in. Presioné el aza de mi mochila y suspiré de alivio al recordar otra pequeña diferencia que los equipos teníamos. August y todo su equipo llevaban maletas pequeñas e individuales, mientras que nosotros solamente llevábamos mochilas de mano.

Fue una ventaja no tener que armar una maleta. Aparte de que me ahorré la molestia de hacerlo.

La fila avanzó otro poco más y me decidí por sacar mi pasaporte. Un pasaporte real que me había conseguido hace poco.

Todos contábamos con un pasaporte, pero los problemas se nos presentaron con August y James; no me sabía muy bien las razones, pero ambos no se encontraban registrados y fue toda una odisea conseguirles documentos. Afortunadamente, Tomás, Claudio y Sergei se encargaron de ese aspecto.

Pude haberles creado sus documentos en regla, pero tuve que atender mi propia documentación. No quería que nos detuvieran en pleno aeropuerto por mi culpa.

Pasó una hora y por fin, Ana fue la primera en presentar sus documentos, los revisaron detalladamente y después de minutos tensos le entregaron su pase de abordar. Ella salió de la fila y fue el turno de Claudio. También pasó su chequeo y se colocó a un lado de Ana. Ambos empezaron a bromear entre ellos hasta que Maxim se les unió

-Sus documentos, por favor-me solicitó la joven que estaba atrás del mostrador y se los entregué.

No pude evitar pasar saliva mientras ella se encargaba de comparar mi rostro con la foto que había en mi pasaporte

-¿Es la primera vez que viaja al extranjero?-preguntó sin apartar su mirada de mi pasaporte, pero mantuve un rostro sin preocupación porque sabía que había dos cámaras detrás del mostrador y en esa única parte del aeropuerto había un total de 15 cámaras que eran 365°.

Las había buscado mientras esperábamos en la fila, ya era una costumbre de la que nunca iba a poder deshacerme

-Así es-por supuesto, todos en el equipo habían viajado por lo menos 3 veces fuera de Rusia, y yo también, pero sin mis documentos en regla porque me movía junto a los del laboratorio. En aviones privados que salían de pistas privadas.

Ante el mundo y los sistemas, esa era la “primera” vez que salía de Rusia

-Permítame un momento-la joven se alejó del mostrador con mi pasaporte entre sus manos e ingresó a una puerta que había atrás de ella.

Me tensé solo un poco

-¿Qué pasa?-Maxim se acercó a mí

-Nada, va a corroborar mi información-suspiré

-Tranquilo amigo, no te traumes por tu primer viaje-dio un golpe amistoso a mi hombro y regresó junto a Ana y Claudio que nos habían prestado atención por un momento. Después, sonrieron hacia mí a pesar de que también se les veía tensos.

Me sentí un poco más tranquilo al darme cuenta de que Maxim había seguido la solución a uno de tantos imprevistos que se nos habían ocurrido durante el trayecto al aeropuerto.

Nuestro diálogo fue, más que nada, para no dar información a los micrófonos que había ocultos en el mostrador. Nadie que estuviera escuchándonos iba a dudar de que ese era mi primer viaje al extranjero.

En menos de 5 minutos, la joven que me había estado atendiendo regresó y colocó de inmediato el sello

-Disculpe la tardanza, tenía que corroborar sus datos porque es la primera vez que viaja fuera de Rusia-

-¿Todo está en orden?-

-Por supuesto-sonrió y me devolvió mi pasaporte junto a mi pase de abordar-Que tenga buen viaje-sonreí y me alejé del mostrador para reunirme con los demás

-Cielos, que miedo-mencionó Ana mientras guardaba mi pasaporte

-Ni que lo digas-le di la razón.

Aceptaba que me había sentido nervioso porque era la primera vez que hacía algo tan… legal

-De acuerdo, todavía nos faltan los filtros de seguridad para ingresar a la sala de espera-se burló Maxim

-Andando-mencionó Claudio y los cuatro caminamos entre el resto de las personas que se movían en el aeropuerto.

Caminamos otro poco más hasta que vi de reojo que August era el primero en entregar sus documentos. Definitivamente, viajar en clase turista no resultaba ser agradable.

Llegamos al filtro de seguridad y cuando fue mi turno, me encargué de sacar todo lo que llevaba en mi mochila como momentos antes me habían indicado. Mis computadoras, teléfono y el resto de mi equipo electrónico salieron a la vista mientras el guardia los revisaba detalladamente

-De acuerdo, colóquese bajo el arco-me indicó y lo hice. El arco de seguridad no me detectó ningún metal y del otro lado mis cosas esperaban por ser nuevamente guardadas.

Pasé sin ninguna complicación y después me reuní con el resto

-Odio los aeropuertos, todavía no abordamos y ya me cansé-Ana se quejó

-Ahora toca esperar a que salga nuestro vuelo-le respondió Claudio y ambos suspiraron.

Pero para suerte de nosotros, la sala de primera clase resultó ser agradable así que pudimos sobrellevar la espera hasta que nuestro vuelo fue anunciado.

El vuelo no pasó a mayores y después de una hora por fin llegamos a nuestro segundo destino; Tallinn, Estonia.

En Tallinn, esperamos durante una hora y media en una cafetería del aeropuerto para que nuestro nuevo vuelo saliera rumbo a Kardla. En algún momento de la espera, fui al baño y me encontré con James y Tomás.

Ellos me ignoraron y yo también a ellos.

Nosotros, estando en esa situación, no nos conocíamos en absoluto.

 

-Pasajeros con destino a la isla de Kardla, favor de dirigirse a la puerta dos-anunciaron por los altavoces e inmediatamente, todos nos encaminamos rumbo a la puerta que nos habían indicado.

Y como ya lo esperábamos, nos encontramos con los demás en la fila para abordar, pero nos ignoramos. Sabíamos que los aviones que iban rumbo a Kardla tenían una capacidad para 19 pasajeros, y ese día, éramos un total de 11 personas los que íbamos a viajar.

No había asientos asignados por lo que no vimos ningún inconveniente en sentarnos un equipo cerca del otro.

Maxim y yo decidimos sentarnos juntos tal y como veníamos haciendo desde que salimos de Rusia

-Es una gran suerte que volemos en medio de una corriente de chorro-mencionó Maxim y asentí mientras acomodaba mi equipaje en el compartimiento que había arriba de nuestros asientos.

La corriente de chorro permitía que los vuelos fueran más rápidos y que los aviones no gastaran tanto combustible. Las aerolíneas debían de ingeniárselas para diseñar sus rutas en las que se toparan con una corriente a chorro.

Era mejor volar hacia la dirección del viento que en su contra.

Tomé asiento a un lado de la ventana y no perdí de vista el exterior durante todo el viaje. Ver una parte del mar báltico desde la altura resultaba ser increíble.

Cuando aterrizamos en Kardla nos recibió una fuerte tormenta.

Tuvimos bastante suerte porque nos enteramos que el resto de los vuelos que provenían de Tallinn iban a ser cancelados por ese día. Tal vez esa era una buena señal o tal vez no, pero no quise pensar más en esa coincidencia.

Bajamos del avión y me centré un poco más porque nos encontrábamos en la isla que nos iba a comunicar con el laboratorio zona cero.

A pesar de la tormenta, salimos del aeropuerto y de inmediato buscamos un taxi que nos iba a llevar hasta Kalana. Nuestro penúltimo destino.

Por supuesto que August y el resto del equipo tomarían un autobús que los iba a llevar hasta Kalana. Nuestro viaje iba a durar alrededor de 40 minutos mientras que al resto les iba a tomar 1 hora.

------------------------------------------------------------------ 

-¡¿En dónde conseguiste estas embarcaciones?!-me sorprendió más el hecho de que Heinz estaba igual de sorprendido que todos nosotros ¿Acaso él tampoco había estado informado?

-Es un P-KS7667-explicó Maxim-Una embarcación diseñada internamente con todo lo que un barco espía necesita, pero exteriormente es parecida a una simple embarcación de pesca-

-Wow-Ana demostró su interés de inmediato-Es increíble-sonrió-De verdad ¿Cómo la conseguiste? ¿¡Cómo conseguiste dos?!-estalló

-Fueron mis contactos-presumió y lo noté demasiado orgulloso con lo que nos había conseguido

Y de verdad que su orgullo lo valía.

Las embarcaciones tenían un tamaño regular; a simple vista se notaba que estaban blindadas, pero parecía ser una simple embarcación con fines de pesca.

Cuando aterrizamos en Kardla el clima no fue el mejor, pero en esa parte de Kalana el clima estaba a nuestro favor. El cielo se mantenía nublado, pero el taxista nos había explicado que era común ese clima sin que necesariamente lloviera.

Lo que sí hacía era frío. Y bastante.

Aparté mi mirada de las embarcaciones y me centré en el mar báltico.

Se encontraba justo frente a nosotros y su imagen, a pesar de la neblina que había a nuestro alrededor, era interesante. El agua tenía un azul bastante agradable a la vista y sus movimientos eran calmados.

-¡Hey! ¡Maxim!-todos volteamos hacia la persona que salía de una embarcación-¿Les gustan?-era un hombre que parecía rondar los 50 años. Tenía barba y muchas canas. A simple vista se notaba que tenía conocimientos bastos en temas marinos

-¿Debo mencionar algo sobre del porqué Maxim conoce a un tipo que está cerca de los 50 años?-murmuró Tomás hacia Ana y después de que ella riera, le dio un codazo a Tomás

-¡Roger!-Maxim se subió a la embarcación para saludar al hombre. Ambos se dieron un apretón y golpearon mutuamente sus espaldas. Al parecer, sí se conocían bastante bien.

Intercambiaron unas cuantas palabras y después nos concentramos en el objetivo que nos había llevado hasta ese lugar

-Caballeros-Roger tomó la palabra-Dama-volteó a ver hacia Ana-El mar báltico no es para cualquiera, Maxim me ha explicado un poco la situación y créanme que deben de estar doscientos por ciento seguros de lo que quieren conseguir una vez que ingresen al mar-nos observó a todos y ninguno mencionó nada ni dio un paso hacia atrás.

Todos estábamos más que seguros de nuestro objetivo

-Déjenme decirles que he escuchado bastante de ese laboratorio-su conversación, empezó a interesarme-El lugar es vigilado por militares altamente calificados-negó varias veces-Es muy complicado acercarse porque se corre con el riego de que lancen un ataque sin siquiera investigar de quiénes se trata; todas sus embarcaciones son controladas cada hora, cada minuto-nadie mencionó nada más y él asintió-Los veo muy convencidos así que me siento muy bien en prestarles dos de las mejores embarcaciones con las que cuento-

-Gracias Roger-Maxim se acercó

-Les compartiré uno que otro dato sobre el laboratorio y además…-se adentró en la embarcación y después salió con un papel doblado a la mitad-Esto les será de mucha ayuda-le entregó a Maxim el papel y él se encargó de revisarlo

-¿Qué es esto?-

-Es el diseño interno del laboratorio, es de hace 5 años, pero puede que continúen con el mismo-explicó

¿Se trataba de un plano?

-¿Cómo lo consiguió?-preguntó Maxim sin dejar de ver el mapa

-Unos antiguos colegas que vivían obsesionados con deshacerse de ese lugar, afortunadamente dejaron esas ideas atrás y ahora se dedican a la pesca-suspiró-Me lo dieron porque saben que a mí no me interesa, pero a ustedes les va a servir de mucho-aseguró-

-Gracias Roger-

Sí, a pesar de que por un momento me sentí como si estuviera escuchando historias de un marinero loco, agradecía la ayuda tan inesperada y tan valiosa que resultaba ser.

 

Por más que lo intentaba, no podía concentrarme. El frío me estaba haciendo temblar y estaba provocando que mis extremidades se entumieran. Tenía miedo de abrir mis puños porque presentía que mis dedos iban a congelarse de inmediato.

Y no quería perder ningún dedo. No en ese momento tan importante.

La única manera de mantenerme con una buena temperatura, era mantener activados mis poderes y utilizar una de las frazadas que encontramos en un compartimiento de la embarcación. James no podía utilizar sus poderes en ese lugar por el momento; no hasta que nos encontráramos más cerca del laboratorio.

Mis poderes, podían disolverse, acoplarse y revolverse con todo lo que nos rodeaba.

Mis ojos se ennegrecieron y entonces fui capaz de ver todas las partículas de energía que nos rodeaban. Se encontraban ahí, alrededor de mí. Flotando a la deriva en espera de estrellarse contra otras para crear corrientes frías de aire que eran las encargadas de provocar que mis dientes castañearan inesperadamente.

Tan solo llevábamos 20 minutos navegando, pero ya no veíamos un principio ni un final, por otro golpe de suerte, Roger nos programó las computadoras con las que contaban las embarcaciones para que nos dirigiéramos hacia la zona “menos” resguardada del laboratorio.

Para ser un marinero al que no le interesaba el laboratorio, sabía uno que otro truco. Quise preguntarle a Maxim sobre esa extraña amistad, ya que resultó ser demasiado efectiva, pero el tiempo estaba sobre nosotros.

Según Roger, debíamos de ganarle a la tormenta que se aproximaba

-Que mal que no puedo darles calor en esta ocasión-James se colocó a mi lado y ambos observamos hacia el frente a pesar de que no podíamos ver nada por la oscuridad de la noche. El barco no podía llevar ninguna luz encendida porque el mar provocaría el efecto reflejo y eso sería llamar demasiado la atención.

Por supuesto que eso último también fue un consejo de Roger

-No está tan mal, es mejor prevenir-le respondí

-Si bueno, los demás están que no soportan el frío-sonrió y observé atrás de mí.

Me encontré con Claudio y Heinz pasando un mal momento.

Sonreí y mi atención regresó al frente ¿Cómo lo estarían pasando en el otro barco?

-No puedo ver nada, espero que no nos estrellemos con nada-James entrecerró sus ojos y asentí. Yo tampoco podía ver nada.

Nuevamente y como toda esa misión, nos estábamos moviendo casi a ciegas.

Daniel tenía que estar en ese laboratorio sí o sí.

 

--------------------------------------------------------------------- 

Narra Maxim

-El radar me está indicando que llegamos a la mejor zona para empezar a crear la distracción-mencioné mientras observaba atentamente todos los puntos que el radar me marcaba; estábamos a 76 kilómetros de nuestro objetivo según las coordenadas que le habían enviado a Sean y parecía ser el momento perfecto para dar inicio a la primera fase de lo que habíamos planeado

-¡De acuerdo!-Ana gritó a mis espaldas y después pasó corriendo a mi lado hasta que llegó a la proa del barco. Tomé la radio-Muy bien James, tenemos que empezar con el plan-anuncié y esperé respuesta

-De acuerdo, me moveré hacia proa-me respondió al instante y esperé su indicación.

La primera fase del plan era crear una neblina bastante densa, una neblina fuera de lo normal. No sabíamos si en el laboratorio contaban con los artefactos necesarios para identificar movimientos sospechosos entre una neblina nada convencional, pero estábamos en ese lugar siendo conscientes del riesgo con el que nos estábamos moviendo.

Sabíamos que podían incluso mandarnos algún misil y provocar una explosión en el momento menos esperado, pero queríamos arriesgarnos a todo

-¡Aquí voy!-gritó Ana desde la proa y le prestamos atención.

Ella empezó a hacer movimientos con sus manos, se notaba que eran movimientos bastante tensos y complicados; era como si estuviera cargando algo que pesaba demasiado y, aparte, era invisible. Sus movimientos poco a poco fueron dando resultados a pesar de lo que había mencionado sobre esa extraña alga.

La embarcación empezó a balancearse de un lado a otro y entonces me asomé un poco.

Encontré los movimientos del mar un poco más marcados; se estaban creando olas que poco a poco empezaban a estrellarse entre ellas.

De un momento a otro, el mar se embraveció a nuestro alrededor.

Ana continuó con los movimientos y me sorprendí con lo que ella estaba provocando. Parecía que de verdad quería controlar todo el mar.

Poco a poco, la neblina empezó a crearse a nuestro alrededor; James estaba haciendo su parte en el otro barco.

Ana debía de crear movimiento en el mar mientras que James, a cada gota que se creaba producto del choque entre las olas, las tomaba entre sus llamas y las vaporizaba.

Era una neblina fuera de lo normal para ese tipo de mar.

Ambos continuaron con su trabajo hasta el punto en que fue ligeramente complicado respirar.

Observé hacia mi mano y me complació el hecho de que incluso eso me fue imposible por la neblina que nos rodeaba.

Presté atención a la débil luz que salía del radar y me percaté de que nos encontrábamos a 50 kilómetros del laboratorio

-¡Bien! ¡Segunda fase!-anuncié

Observé hacia donde August se encontraba, pero por la neblina no pude encontrarlo hasta que vi los chispazos que empezó a crear.

La segunda fase del plan era hacer caer las torres eléctricas con las que el laboratorio contaba y de las que Roger nos había dado a conocer. Gracias a esos nuevos datos nuestro plan había cambiado ligeramente.

Los chispazos aumentaron y el ruido que la electricidad creó al estrellarse consigo misma hizo que me cubriera los oídos si no quería que se me reventaran.

Los rayos rugieron sobre nosotros hasta el punto en que me fue imposible verlos por la luz tan intensa que generaban. August me había explicado, mientras subíamos en la embarcación, que iba a utilizar grandes cantidades de voltaje y amperios. No le entendí mucho en ese tema, pero estuve de acuerdo.

Hubo un momento en que los rayos cayeron a nuestro alrededor y Ana aprovechó esa oportunidad para incrementar el movimiento del mar.

Fue increíble ver cómo los relámpagos se dispersaban dentro del agua. Fue como ver una tormenta dentro del agua.

Por supuesto que ambas energías estaban controladas para evitar que nosotros nos electrocutáramos o que las embarcaciones se voltearan. Ambos eran excelentes en lo que estaban haciendo.

La tormenta continuó a nuestro alrededor mientras nuestro camino continuaba.

En ese punto, seguramente los del laboratorio ya se habían percatado de esos intensos relámpagos y estarían seguros de que una tormenta bastante peligrosa se acercaba.

Llegados a los 25 kilómetros de distancia, tomé la radio

-¡Tomás!-lo llamé y de inmediato obtuve respuesta

-¿Tercera fase?-preguntó

-Prepárate-mantuve cerca de mí la radio y mis poderes brotaron.

La tercera fase nos tocaba a Tomás y a mí.

Al principio de nuestro plan, utilizar nuestros poderes había quedado descartado por que corríamos con el riesgo de que en el laboratorio contaran con detectores a largo alcance, pero Roger desmintió esa posibilidad.

Él aseguraba que el laboratorio no trabajaba con tecnología tan avanzada como otros laboratorios; nos afirmó que ellos dependían de la seguridad de las armas, cámaras, sensores que abarcaban únicamente el perímetro de su construcción y la fuerza humana.

Todavía no entendíamos muy bien cómo funcionaba ese laboratorio y cuáles eran sus objetivos, Roger no pudo darnos una respuesta a esa pregunta y nos aseguró que nadie común y corriente podía acercarse a ese lugar, pero nosotros, con ayuda de nuestros poderes, estábamos creando la excepción a esa regla autoimpuesta

-¡Son 28 mentes!-anunció Tomás por la radio

-¡De acuerdo!-elevé mi voz porque los relámpagos estaban incrementando en potencia.

Mis poderes se activaron y me concentré al máximo. Nos encontrábamos a 12 kilómetros de distancia así que esperaba un buen funcionamiento de mis poderes.

Me concentré hasta el punto en que los relámpagos se escucharon como un eco muy lejano y mis poderes avanzaron rápidamente varios kilómetros adelante de donde nos encontrábamos.

Lo único que conseguía captar era neblina, neblina muy espesa que por un pequeño momento hizo que me desubicara, pero me decidí en agudizar aún más mis habilidades y entonces fui capaz de verlo.

Ahí estaba ¡Justo frente a mí!

Mi visión cambió a 360° y obtuve una imagen completa y elevada del laboratorio.

¡Los planos no mentían! ¡Era un maldito pastel en medio del mar! ¡Ja!

Intenté captar algún sonido, pero el mar estrellándose contra sus paredes era lo único que conseguí. Tampoco encontré movimiento externo por la repentina “tormenta” que se aproximaba.

A simple vista, el lugar me daba la impresión de estar abandonado, pero si Tomás había encontrado un total de 28 mentes, eso quería decir que el movimiento se mantenía internamente.

¿Qué tanto íbamos a poder acercarnos antes de que se percataran de nuestra presencia?

Los ojos me lagrimearon y entonces parpadeé rápidamente. Regresé a la normalidad y tomé la radio

-¡Encontré el laboratorio!-anuncié-De verdad parece un puto pastel abandonado en medio del mar-me reí, su imagen se me había hecho demasiado graciosa-Encontré solo las dos entradas que se muestran en el plano-

-¿Un pastel?-escuché la voz de James-¿Tiene aspecto de una fortaleza?-me reí

-Exactamente-demonios, era tan gracioso

-¿Hacia qué dirección están las entradas?-me preguntó Sean

-Tenemos suerte, una entrada está justo frente a nosotros-de verdad que era mucha la suerte que estábamos teniendo con esa misión

-De acuerdo, prepárense, estamos a 5 kilómetros-

-Sí, estamos preparados-anuncié y no obtuve otra respuesta.

Dejé de lado la radio y caminé hacia la popa, ahí me encontré con un Sergei a punto de sufrir con una hipotermia

-¿Estás bien?-me acerqué y me hinqué a su lado

-Estoy bien-sus labios temblaron-Tener a August cerca de mí me da un poco de calor-asentí y observé hacia August que continuaba creando rayos y relámpagos. Su poder era alucinante-¿Todo va bien?-le presté atención a Sergei

-Sí, estamos a 5 kilómetros-él asintió y comprendí el esfuerzo que estaba a punto de hacer.

El laboratorio parecía que de verdad era un maldito círculo, así que mientras Sean, Tom, Heinz y James se iban a mover rumbo a la derecha, Ana, August y yo nos íbamos a mover hacia la izquierda.

Claudio y Sergei iban a quedarse en las embarcaciones para mantenerlas a salvo. No podíamos arriesgarnos a que nuestro único medio de transporte se destruyera.

El esfuerzo tanto de Claudio como de Sergei era que, mientras el resto entrábamos al laboratorio, ellos iban a quedarse en la intemperie. Vigilando y salvaguardando nuestro transporte. Totalmente expuestos a cualquier tipo de ataque, pero confiábamos en ellos y ellos confiaban en que a nosotros no nos iba a tomar tanto tiempo llevar a cabo la búsqueda.

El laboratorio era pequeño y ese era otro motivo por el que podíamos movernos rápidamente para localizar a Daniel.

Según el plano que Roger nos había compartido, había una zona que catalogamos como el lugar en donde Daniel podía encontrarse.

Había que cruzar varios pasadizos para llegar a ese punto y los mejores para no perderse resultaban ser Sean y Tomás. Ambos eran muy buenos a la hora de atravesar lugares complicados a diferencia del resto de nosotros.

Por eso el rescate de Daniel estaba en sus manos

-¡Lo veo!-gritó Sergei y observé hacia donde él estaba observando.

Frente a nosotros, el laboratorio zona cero se dejó ver.

----------------------------------------------------------------- 

En cuanto Ana y August vieron con sus propios ojos el laboratorio, ambos dieron paso a la cuarta y última fase del plan.

Cuando la supercelda tomó forma sobre nuestras cabezas, Ana empezó a crear impresionantes trombas marinas tornádicas mientras que August se encargó de electrificarlas; James les agregó el toque de potencia desde el otro barco con un poco de fuego que a su paso, fue creando una espesa neblina a su alrededor.

Las 8 creaciones que había a nuestro alrededor dieron la imagen de ser un enorme monstruo que estaba a punto de estrellarse contra el laboratorio.

De repente, unas luces exteriores del laboratorio se encendieron y apuntaron directamente a cada una de las 8 trombas

-¿Se dieron cuenta?-preguntó Sergei a mi lado y yo negué

-No lo creo-faltaba completar la última fase.

Ambas embarcaciones avanzaron y, muy lentamente, ingresamos al centro de las trombas marinas. Fue toda una experiencia ver el mar a nuestro alrededor sin mojarnos ni un poco.

Ana estaba haciendo un trabajo estupendo al igual que August y James.

Los tres parecían respetar los poderes del otro al mezclarse en una perfecta sintonía. Parecía que sus poderes eran viejos amigos tal y como los tres lo eran.

Fue todo un espectáculo.

Las trombas nos rodearon y avanzamos en medio de ellas rumbo al laboratorio. Seguramente esos desgraciados no tenían ni idea de lo que estaba sucediendo en ese preciso momento.

O al menos eso es lo que esperábamos

-¡Tengo justo en frente al laboratorio! ¡Es momento de bajar!-gritó Ana desde la proa y de inmediato saqué la radio

-¡Es momento!-anuncié

-¡De acuerdo!-James me respondió en el momento justo en que una pequeña apertura se hizo en el medio de la tromba

-¡Rápido!-gritó Ana y, después de bastante tiempo, sus brazos descansaron.

Ella fue la primera en salir de la tromba mientras August y yo la seguíamos.

Caímos justo en el borde de una entrada del laboratorio y Ana corrió con el riesgo de caer hacia atrás, pero August tuvo buenos reflejos al sostenerla

-¡¿Cuánto tiempo tenemos hasta que las trombas desaparezcan?¡-les grité sobre el ensordecedor ruido que nos rodeaba

-¡Tendremos 25 minutos!-Ana me respondió-¡El mar se alteró demasiado y podría deshacer todo por cuenta propia!-

-¡Entremos!-mis poderes salieron a la luz y los movimientos a mi alrededor se intensificaron

-¡Por aquí!-escuché la voz de August y ambos lo seguimos.

Empezamos a subir unas escaleras metálicas y mis poderes fueron de gran ayuda en esos momentos porque conseguí escuchar los pasos apresurados de los guardias con los que el laboratorio contaba

-¡Ya vienen!-los alerté e inmediatamente August creó relámpagos que en un dos por tres consiguió deshacerse de los guardias que estaban a nada de encontrarse con nosotros. Los arrojó hacia la inmensidad del mar y continuamos nuestro camino hasta que nos topamos con la puerta metálica con la que el laboratorio contaba

-¡A un lado!-gritó Ana atrás de nosotros y de inmediato la obedecimos al dejarle el espacio libre hacia la puerta.

Ella movió otro poco más sus manos y consiguió que un brazo de la tromba se estrellara contra la puerta hasta el punto en que la derrumbó totalmente.

Ingresamos apresuradamente al lugar

-La tormenta eléctrica creó un daño en su sistema que les va a tomar varios minutos arreglarlo, no hay alarma por el momento-nos informó August en cuanto entramos a uno de los pasillos del laboratorio

-Andando-anuncié y los tres tomamos el camino hacia la izquierda.

Corrimos entre los pasillos y poco a poco fuimos deshaciéndonos de los guardias que nos encontramos en nuestro camino.

Y mientras corríamos, vaya que el laboratorio me sorprendió bastante porque externamente parecía ser una fortaleza antigua y en construcción total de piedra, pero el interior era todo menos piedra y la palabra antigua no le quedaba.

El laboratorio tenía un piso liso y blanco igual que sus paredes y techo, de hecho, parecía tener un toque ligero de modernidad

-¿Por qué las luces de los pasillos no se fundieron?-interrogué a August mientras girábamos

-Sí se fundieron, sentí la baja de energía-aseguró-Estas debes ser luces de emergencia- respondió sin que dejáramos de correr

-¿Hacia dónde deberíamos de ir?- Ana se detuvo justo cuando llegamos a un punto en que tuvimos 3 pasillos frente a nosotros.

El pasillo de en medio estaba totalmente oscuro mientras que los dos de al lado mantenían sus luces tintineando

-¿El pasillo de en medio venía en el plano?-interrogué al no recordarlo

-No, puede que sea una nueva construcción, Roger mencionó que el plano tenía 5 años ¿No?-Ana me respondió y asentí

-¿Será mejor que nos separemos?-sugirió August

-¿Estás loco? Así mueren en las películas de terror-estuve a nada de reírme ante el comentario de Ana

-Vayamos primero por el pasillo de en medio, supongo que será el más complicado-mencioné-Después podremos recorrer los que todavía tienen luz-los tres nos observamos en silencio y asentimos mientras empezábamos a caminar con precaución en medio de ese pasillo oscuro

-¿No puedes crear algo para alumbrarnos?- Ana preguntó y supe que era una pregunta para August

-No lo sé, percibo un olor parecido a alguna clase de combustible, será mejor no arriesgarnos a crear una explosión-estuve de acuerdo.

Continuamos avanzando muy cerca el uno del otro hasta que me estrellé con Ana

-¿Por qué te detienes?-

-Este lugar está lleno de humedad y creo que no es cualquier humedad-mencionó

-¿Qué quieres decir?-ella continuó avanzando al igual que nosotros

-Esta humedad no es por agua limpia o vapor, se siente como humedad de agua sucia, agua infectada-explicó-No lo sé, son bastantes cosas las que percibo en esta humedad-no la interrogué más, ella era la experta en temas que involucraban al agua-Es como si el ambiente estuviera lleno de varias sustancias, no sé identificarlas, se siente extraño-

Entrecerré mis ojos e intenté encontrar­ algo fuera de lo normal entre toda esa oscuridad, pero mis poderes se vieron nublados por un extraño olor que percibí.

Cuando mis ojos lagrimearon y mi nariz se tapó mi poder dejó de responder ¿Por qué?

-¿Tomamos el peor camino?-murmuró August

-Creo que será mejor que avancemos a otra zona-mencioné ya sin muchas ganas de permanecer por más tiempo en ese lugar.

Llevábamos bastante tiempo caminando y no encontrábamos el final ¿Qué tan extenso podía llegar a estar ese pasillo? ¿Por qué no había ninguna luz?

-Elegimos primero este pasillo porque parecía ser el más complicado y no nos equivocamos; no podemos simplemente regresarnos con lo que ya hemos recorrido-escuché el tono molesto de Ana-A mí tampoco me agrada este pasillo, pero no podemos dar vuelta atrás-elevé ambas cejas.

Ana resultó ser toda una chica de cuidado y que consiguió dejarme callado mientras continuábamos avanzando

-Esto me está dando un mal presentimiento ¿Están seguros de que no nos perdimos?-preguntó August después de que caminamos otro tramo más en ese espantoso pasillo

-Avancemos otro poco, la humedad se está “ensuciando” aún más-mencionó Ana y no comprendí del todo hasta que dimos 10 pasos más porque mis ojos, la garganta y mis fosas nasales se irritaron de inmediato al captar un repugnante olor que provenía de no muy lejos de en dónde nos encontrábamos

-¿Qué es ese olor?-murmuró Ana a mi lado

¿Qué era?

-Es asqueroso-mencionó August con su voz ligeramente distorsionada. Al parecer se había cubierto la nariz y la boca. Lo imité porque el olor resultaba ser insoportable

-¿Será una fosa común?-intenté ver más allá de la oscuridad que nos rodeaba, pero no encontré nada más

¿En ese lugar había una fosa común?

¿Estábamos en un lugar en donde se deshacían de los cuerpos?

¿Ahí íbamos a encontrar el cuerpo de Daniel?

-Podría ser, el olor es insoportable-me respondió August

-Aquí hay una puerta-le presté atención a la voz de Ana que se encontraba un poco lejos de mí ¿Había avanzado más mientras August y yo intentábamos descifrar el origen de ese nauseabundo olor?-Toquen la pared de su derecha mientras avanzan-mencionó y de inmediato lo hice.

Mis manos fueron rozando la pared mientras continuaba avanzando hasta que sentí el frío metal de la puerta

-¿La derrumbo?-preguntó August con su voz todavía distorsionada

-Podría ser buena idea-murmuré con dificultad porque el olor no me estaba permitiendo respirar

¿¡Qué demonios era ese fétido olor?!

-¡Aquí voy!-gritó August y escuché un fuerte golpe que desencadenó otro golpe cuando la puerta se estrelló contra el piso.

Los tres nos apartamos de inmediato al percibir con más fuerza ese horrible olor

-No puedo…-escuché un quejido de Ana y después el característico sonido de alguien volviendo el estómago

-¿Estás bien?-intenté encontrarla entre la oscuridad, pero me fue imposible.

Escuché otro par de arcadas hasta que se calmó. Yo me cubrí con el antebrazo, pero mi estómago se revolvió.

El olor era hediondo. Un asco total

Necesitábamos respirar con urgencia

-Vámonos de aquí-busqué entre la oscuridad el brazo de Ana y cuando la encontré, los tres nos alejamos corriendo de ese lugar.

Corrimos todo lo que habíamos recorrido hasta que nos alejamos de todo ese olor tan desagradable

-¡¿Qué carajos fue eso?!-gritó August cuando conseguimos salir del pasillo

-No lo sé, pero fue asqueroso-los tres terminamos con la respiración agitada y cuando me tranquilicé le presté atención a Ana. Ella se veía pálida-¿Te sientes bien?-me acerqué, pero ella se mantuvo con los brazos alrededor de su estómago.

Le tomó varios minutos tranquilizarse

-Eso fue… asqueroso-volteó a verme-¿Habrá cuerpos en ese lugar?-yo negué

-No lo sé, jamás había olido algo tan desagradable-guardamos silencio hasta que nuestras respiraciones se calmaron

-Será mejor que vayamos por los pasillos iluminados-mencionó Ana una vez que consiguió tranquilizarse

-¿Por qué este lugar no estará iluminado?-me auto interrogué al sentir que algo estaba mal. Presentía que lo que nos estaba ocurriendo no podía catalogarse como algo normal.

El olor, la oscuridad… nada parecía ser normal en ese pasillo

-Vamos a revisar los otros pasillos-mencionó August cuando nos calmamos totalmente

-Estoy de acuerdo, no creo que ese pasillo nos sea de ayuda-murmuró Ana, pero todavía la noté pálida

-Entonces… andando-August empezó a caminar rumbo a un pasillo que contaba con energía eléctrica y cuando estuve a nada de dar un paso hacia el pasillo conseguí escuchar algo.

De inmediato, me detuve.

-¿Por qué no avanzas?-Ana dio media vuelta al percatarse de que no le seguía los pasos y August también volteó a verme

-¿Sucede algo?-observé a ambos y justo cuando abrí la boca, una explosión detonó muy cerca de nosotros. Al parecer fue a unos dos pisos de donde nosotros nos encontrábamos

-¡Carajo! ¿¿Qué fue eso!? Nos van a enterrar vivos-observé el tintineo de las lámparas que había sobre nosotros y nuevamente escuché el mismo sonido.

Me decidí por agudizar mi oído pese a la explosión que nos había dejado ligeramente aturdidos

-Creo que eso fue provocado por James, hay que apresurarnos en salir de este lugar, estoy seguro de que este lugar está a nada de colapsar-August estuvo de acuerdo con Ana.

Observé a mis espaldas, pero no encontré nada diferente más que el pasillo que habíamos dejado atrás hace poco

-Maxim, vamos-nuevamente, Ana me presionó en continuar con el camino y entonces decidí no perder más tiempo

-Escucho algo-entrecerré mis ojos y mi oído se agudizó aún más hasta el punto en que el leve movimiento de las cadenas hizo vibrar por completo mi tímpano

-¡Yo no escucho nada más que las putas explosiones que el psicópata de James y su equipo están haciendo!-observé atentamente a August

-Yo creo que Sean también trajo su cargamento de pólvora-Ana intentó bromear pese la situación y negué

-Sean casi nunca utiliza pólvora para las explosiones, él las provoca con sus poderes-expliqué rápidamente mientras daba un paso hacia atrás-Regresemos, quiero ver de dónde proviene ese sonido de cadenas-

-¿Qué? ¿A dónde quieres que regresemos?-Ana me tomó de un brazo-No pienso regresar a ese maldito pasillo ¿Entiendes?-

-No los obligo, ustedes continúen revisando el pasillo, yo regresaré después a este mismo punto-estaba seguro de que el sonido de las cadenas provenía de ese pasillo oscuro y maloliente

-¡¿Otra vez?! ¡Maxim! ¡Ese lugar apesta a muerto!-Ana se desesperó

-Entonces encontraré los cuerpos…-di media vuelta y nuevamente me adentré al pasillo oscuro

-Vamos, no podemos dejarlo-escuché la voz de August a mis espaldas y después los pasos de ambos mientras me seguían

El sonido de las cadenas se hizo un poco más leve, pero constante. Alguien las estaba moviendo y no sabía si era apropósito para atraernos o si eran simples movimientos.

-Vamos, vamos-murmuré mientras los tres empezábamos a correr a lo largo del pasillo. Literalmente, me estaba guiando por el nauseabundo olor para dar con el lugar que habíamos abierto momentos antes.

Me cubrí con el antebrazo mi boca y nariz cuando me acerqué aún más y me decidí por ingresar al lugar a pesar de que no podía ver nada con claridad

-August ¿Puedes alumbrarme un poco?-pregunté

-Solo un poco, mis relámpagos podrían estrellarse con la humedad que hay aquí y podrían provocar algún corto-

-Inténtalo-lo animé

-Bien, con cuidado, crearé una pequeña chispa y tendrán que ver rápidamente el lugar-mencionó

-Hazlo-

-Aquí voy-escuché que calmaba su respiración y, cuando estrelló sus manos entre sí, me sobresalté por el chispazo que se creó

-Lo mantendré solo un poco-anunció mientras que por la pequeña luz que empezaba a crearse a su alrededor, notaba que sus manos iban separándose lentamente hasta provocar que en medio de ellas se creara un relámpago que tenía tonalidades azules, blancas, moradas y amarillas.

Había un relámpago en toda la expresión de la palabra entre las manos de August.

Las venas que había en las manos de August brillaron y su piel se volvió ligeramente traslúcida por lo que pude apreciar muy poco su sangre. Fue algo increíble y más el hecho de que conseguimos alumbrar nuestro alrededor

-Dany…-murmuró Ana mientras avanzaba unos cuantos pasos más dentro de ese lugar y le presté atención-Oh no…-observé a mi alrededor hasta que lo vi.

Observé a detalle la pequeña figura que estaba abrazándose a sí misma en ese oscuro rincón. No pude evitar hacer una mueca.

¿Él era Daniel?

Sean iba a volverse loco.

Continuará en la próxima temporada…

 

Notas finales:

¡Hola!

¿Qué creen?

Leyeron bien xD ¡este es el último capítulo de la primera temporada!

Disculpen por apenas subirlo, pero los días se me fueron inesperadamente xD

Les comunico que me encuentro pensando en si voy a continuar subiendo los nuevos caps en esta misma historia (es decir, no separar la primera de la segunda temporada) o si hacer una nueva. Lo estaré pensando así que por favor manténganse al tanto.

No voy a tardar mucho con la nueva temporada así que espérenla <3 

Muchas gracias. Ustedes son los que continúan leyendome aquí y no sé si me leen en Wattpad, pero muchas gracias. Muchas gracias por todos estos años, pero por fin hemos terminado la primera temporada de esta historia <3

Los amodoro muchísmo, como no tienen ni idea <3

Nos leemos pronto en la nueva temporada, los quiero.

P.D: les recomiendo que vayan a wattpad tan solo para ver la portada que les he preparado <3

Att. Diidi1897 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).