Día 6 : Cabello / JR y Ren
Jonghyun se consideraba una persona racional. No era de los que reaccionan de forma exagerada o entran en pánico fácilmente. Podía mantener la calma en casi cualquier situación y entender las cosas.
Sin embargo, siempre había excepciones. Tales como levantarse a las 6 de la mañana - en su primer día libre desde hacia meses – debido a los gritos de Dongho.
"¡Oh Dios mío, oh Dios mío, no puedo respirar!"
"¿Dongho? ¿Qué pasa?"
"¡Tienes que venir aquí rápido! Oh Dios mio, Jonghyun," Contuvo su aliento, tosió antes de continuar, " ¡No sé qué hacer! ¡Minki esta-- oh Dios mío--!"
"Dongho ¿Qué pasa con Minki? ¡Dongho!" Jonghyun se puso de pie, poniéndose la primera camisa que pudo encontrar y se apresuró a salir del dormitorio. Se suponía que los demás estaban practicando, no metiéndose en cualquier problema que lograra hacerlo saltar precipitadamente.
Después de que Jonghyun hubiera tropezado en la escalera anoche, su manager recién nombrado le había dado el día libre. El debut todavía estaba a unos pocos meses - un breve descanso no les haría daño. Un día de práctica sin su líder no le haría daño a nadie.
La respiración de Dongho era fuerte y pesada en el altavoz del teléfono, como apenas conteniendo sollozos. "Y-y Aron... Oh Dios, creo que está traumatizado. Jonghyun, ¿Dónde estás? ¡Date prisa! No sé qué hacer-- ¡AH!” Su grito cortó justo cuando Jonghyun salió del edificio del dormitorio. Maldiciendo entre dientes, metió el teléfono en el bolsillo y echó a correr.
Sus piernas dolían. El viento golpeaba en sus oídos.
Ignorando el dolor, corrió más rápido, sus zapatillas con forma de dinosaurio golpeando contra la acera.
Dos cuadras más adelante, tropezó a través de las puertas y subió las escaleras, demasiado preocupado para molestarse en esperar el ascensor.
Redujo la velocidad a unos pasos de la puerta del cuarto de práctica, con el pecho agitado e imaginando lo peor. ¿Y si alguien estaba lastimado? Dongho había sonado sin aliento. Peor aún, la llamada había terminado tan abruptamente con su grito.
Algo había sucedido.
Algo no iba bien.
Jonghyun tragó saliva nerviosamente.
Lo primero que captó su mirada cuando entró en la sala de ensayo fue a Minhyun. Minhyun, sentado en medio de la habitación con sus piernas recogidas contra el pecho, los dedos enredados en su pelo y la mirada perdida sobre las parte superior de sus rodillas.
No era un espectáculo reconfortante en lo más mínimo.
Dongho se tambaleó hacia él, con los ojos llorosos y gimiendo, "¡Jonghyun! ¡Minki-- él... él la mató!"
Jonghyun se congeló. Su sangre se heló y contuvo su respiración. ¿Minki ha matado a alguien?
El rubio se puso de rodillas, sosteniendo el cuerpo mutilado y roto de su teléfono.
Jonghyun nunca antes había querido tanto darle un puñetazo.
"Él la agarró, la tiró al suelo y pisoteó todo su delicado cuerpecito," Dongho explicó, lloriqueando y gimiendo mientras acariciaba la pantalla rota. Se veía tan triste y desconsolado.
Jonghyun se mordió el labio para controlarlas ganas de gritarle lo patético que estaba actuando.
"Por favor, dime que no es esa la razón por la que me has llamado." Estaría llorando por más que un teléfono roto si lo era.
"Oh, cierto," una sonrisa lavó todos los rastros de tristeza en el rostro de Dongho mientras saltaba de nuevo sobre sus pies. "Minki esta acampando en el cuarto de baño por ahora y Aron-- en realidad, no sé a dónde se fue Aron."
"¿Porque?"
Jonghyun no sería capaz de hacer cualquier cosa con sólo sus ubicaciones. Él necesitaba explicaciones. Y rápido, porque su paciencia estaba disminuyendo gradualmente a nada.
"Bueno, la noona estilista realmente se volvió loca con el pelo de Minki... Creo que deberías verlo por ti mismo."
¿El pelo... de Minki?
Todo esto... ¿Fue por el pelo de Minki? ¡Jonghyun se había precipitado al estudio de baile porque el chico había conseguido un corte de pelo!
Pero Dongho había estado a punto de llorar en el teléfono, ¿No? Minki no había roto su teléfono aun, obviamente, y Jonghyun dudaba mucho que Dongho lloraba por cabello. Entonces por qué...
Oh.
Oh.
Dongho no había estado llorando, se había estado riendo. Estaba sin aliento por la risa.
Jonghyun no estaba seguro de a quien quería golpear más; a Dongho o a sí mismo.
Absteniéndose de hacerlo - por ahora, de todos modos - Jonghyun dejó al rubio para que continuase el luto por su teléfono y camino en línea recta hacia el baño.
¿Realmente, qué tan malo podría estar el pelo de Minki? ¿Cómo podría su pelo llevar a todo esto en primer lugar?
Al pasar, una mano salió disparada y agarró su muñeca.
"Soy hetero," susurró Minhyun, mirando fijamente a la cara confundida con ojos asustados, "Juro que soy hetero. Parezco heterosexual, ¿No? Es porque lo soy. Hetero, quiero decir. Yo soy tan hetero."
"Umm..."
"¡Me gustan las chicas!"
Sonrojándose, Minhyun retiró su mano como si hubiera tocado fuego y se acurrucó en una bola de nuevo.
Pues bien.
Jonghyun estaba empezando a pensar que él sabía exactamente lo que estaba pasando. Y si estaba en lo cierto, entonces Minki no había estado bromeando la otra noche y Jonghyun era un imbécil por reírsele en la cara de esa manera.
Sumando las reacciones de los demás por encima de su propia reacción...
No es de extrañar que Minki se había encerrado en el cuarto de baño.
"Minki-ah..." Jonghyun llamó, golpeando sus nudillos contra la puerta del baño.
"¡Vete!"
"Abre la puerta, Minki."
"¿Para que ustedes puedan burlarse de mí un poco más? ¡De ninguna manera!"
Jonghyun difícilmente habría llamado 'burlarse' al trauma recién descubierto de Minhyun. Dongho posiblemente. Y Aron... Bueno Aron era Aron. Él no tenía un huesoserio en su cuerpo.
Incluso cuando trataba de lanzarle un cumplido siempre terminaba en un malentendido.
Jonghyun suspiró. Y hoy supuestamente era su día libre...
Ser líder apestaba.
"Si no abres la puerta ahora mismo, voy a romperla hasta abrirla."
"¡Yah! ¿Kim Jonghyun, me estás amenazando?"
En lugar de contestar, golpeó un puño contra la puerta lo suficientemente fuerte para conseguir su punto. No quería romper nada - él sabía que iba a meterse en problemas, independientemente de su razonamiento, añadiendo que se sentía cansado y realmente sólo quería volver a dormir – aunque si llegaba el momento no lo dudaría.
Por otra parte, Minki no podía permanecer realmente en el cuarto de baño por siempre. Tendría que salir eventualmente.
Justo cuando estaba a punto de golpear la puerta de nuevo, Minki la abrió unos centímetros.
Jonghyun mentalmente soltó un suspiro de alivio.
Minki agarró la capucha de su suéter con fuerza, mirándolo con cautela mientras Jonghyun entraba en el cuarto de baño y cerró la puerta tras de sí. "No te puedes reír como Dongho lo hizo, ¿Entendido?"
Asintió con la cabeza. Tomando una respiración profunda, Minki cerró los ojos y echó hacia atrás la capucha.
Y de ahí salió el pelo rubio decolorado y un nuevo flequillo.
Ah. Así que no había estado bromeando el otro día.
Jonghyun sabía que su maknae tenía una obsesión con la moda excéntrica y más aún con la gente excéntrica. Los diseños peculiares que él y los otros ni siquiera podía esperar para quitarse - y mucho menos querer - Minki los miraba con anhelo en las vidrieras de las tiendas y revistas. Jonghyun no tenia dudas de que se habría vestido de esa manera toda su vida si sólo hubiera tenido el dinero.
Con el debut en la vuelta de la esquina y sus cheques de pago haciéndose reales mientras pasaban su tiempo en el estudio de grabación, Minki había decidido comenzar a vivir de acuerdo con su estilo único.
¿Y la reacción de los demás? Reírse en su cara.
Para su crédito, Jonghyun no había pensado que lo pusiera en práctica. Minki podría haber sido fuerte y exigente a su alrededor, pero una vez fuera de su zona de confort se convertía en tímido y callado.
Tal estilo único no le permitiría a él fundirse con el fondo.
"Se ve bien.”
Minki frunció el ceño, "No necesito que mientas para hacerme sentir mejor."
Por enésima vez en un día, Jonghyun suspiró. Él no estaba mintiendo - su nuevo corte de pelo realmente le gustaba. Puede que no encajara con una cierta parte de su personalidad, pero eso no quería decir que la nueva imagen no fuera un éxito también.
Probarle eso a Minki iba a ser mucho más difícil de lo que le hubiera gustado.