Día 24 : Luz (Light) / Minhyun
Advertencia: suicidio
Era patético, podía admitir eso.
No sus acciones - le gustaba pensar que hacia lo correcto - pero el hecho de él lo había pospuesto tanto le hacía sentirse como un cobarde. Por otra parte, él estaba acostumbrado a sentirse de esa manera.
Minhyun dejó deslizar la hoja afilada de sus dedos mientras se inclinaba hacia atrás y cerró los ojos contra la cruda luz del baño. Un dolor sordo viajó hacia arriba y abajo de sus brazos, no era tan malo como lo que había tenido que soportar cuando había empezado.
Había oído en alguna parte - y no podía recordar cuándo o por qué - que se trataba de una forma bastante indolora de irse. Mentiras.
Nunca le había gustado el dolor. Minhyun nunca había entendido, aún no lo hacia, por qué la gente elegía cortarse o dañarse de otras formas para escapar de sus problemas. La agonía que sintió cuando había forzado aún más a la hoja en su brazo de ninguna manera le hizo sentirse mejor. Con toda honestidad, había estado a punto se retirarla tan pronto como cortó la piel.
La única cosa que había mantenido su mano moviéndose era el pensamiento de esto es todo, sólo un poco más y ya no va a importar.
Con un poco más de dificultad que antes, Minhyun obligó a sus ojos abiertos a mirar a los patrones del cristal empañado en la puerta de la ducha. Las baldosas eran implacables contra su columna vertebral, pero incluso la sensación incómoda de apego de la tela húmeda en su cuerpo se desvanecía. Lo que había sido una corriente abrasadora del agua de la ducha se había vuelto suave y cálida.
Sus párpados se cerraron de nuevo mientras una sonrisa apareció en sus labios.
Así que esto realmente estaba pasando, eh. La pérdida de sangre estaba finalmente tomando efecto en sus sentidos.
No pasaría mucho tiempo ahora.
Minhyun ya ni siquiera podía sentir sus dedos. El aguijón de los cortes verticales en sus brazos había desaparecido y su cabeza había empezado a sentir la luz.
¿Por qué había esperado tanto tiempo para esto?
Bueno, él sabía por qué. Los pensamientos de este exacto momento habían estado llenando su mente desde hacia varios años, pero la diferencia entre entonces y ahora es que ahora tenia la oportunidad de hacerlo realmente.
Sus padres no lo habían sabido, pero su llamada telefónica de 'volveremos tarde a casa', junto con la decisión de su hermana de escaparse por la noche (que nunca antes había hecho, viendo que tomaba con gran orgullo el título de angelito de papá) en un día particularmente malo significaba que Minhyun finalmente podría darle un buen uso a su planificación.
Eso y que finalmente había decidido que ya era suficiente.
Si tenia que ser completamente honesto, habían sido siempre las pequeñas cosas que se interponían en su camino. Pequeñas excusas patéticas de cosas que todavía quería hacer. Quizás la próxima vez, porque aún no estaba listo.
La verdad era que él aún no estaba listo.
La verdad era que no valía la pena esperar hasta que lo estuviera.
Cansado, Minhyun puso su cabeza contra la pared de la ducha y, con una última mirada a las bombillas de luz parpadeante, deseó haber esperado de todos modos.