Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Venganza y otras cosas por momori

[Reviews - 33]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Otro capítulo más, ya se que esta semana no he actualizado nada pero es que no he podido por problemas con la conexión :( 

Menos mal que está todo solucionado y espero que os guste el capítulo :3

Capítulo 5

Ciel jamás habría imaginado la situación en la que se encontraba, su amo y señor Sebastian estaba abusando de él, de un demonio, si alguien se entera sería una vergüenza y humillación para él, pero nadie se enteraría, de eso estaba seguro, se vengaría y cuando llegara el momento de tomar su alma se iba a enterar….

Fue Sebastian quien rompió el hilo de sus pensamientos.

-Ciel, ¿Lo estás pasando bien?

-Aquí el único que disfruta con esto eres tú.

-No estaría muy seguro dijo Sebastian aumentando aún más el ritmo de su mano sobre el mimbro de Ciel.

-Maldito dijo entre dientes el pobre demonio capaz de incontrolable su cuerpo el cual se estremecía bajo el cuerpo de su amo. Ciel estaba intentando aguantar no quería gemir pero Sebastian se lo estaba poniendo muy difícil, ahora entendía los rumores de las damas acerca de lo buen amante que era…Si seguía con ese ritmo Ciel no aguantaría más.

Sebastian, podía sentir como su mayordomo se arqueaba debido a su mano. Veía como su mayordomo siempre frio y controlador se estaba dejando llevar y eso le ponía aún más, pero ya era hora de que Ciel le hiciera sentir placer de manera más explícita, a demás no quería que este se viniera tan pronto, por lo cual quito sus manos del miembro de Ciel y se apartó un poco de este, Ciel al sentir que las manos de Sebastian le abandonaban respiró aliviado y se tumbó en la cama, ya que Sebastian le había estado sujetando todo el rato.

-Ciel no pienses que esto es algún tipo de descanso, ahora te toca a ti…

-¿Qué? Jamás te haré nada a ti dijo a la defensiva, quiero marcharme, el contrato no decía nada de esto.

-El contrato decía que yo puedo pedir todo lo que quiera y que tú tienes la obligación de dármelo y esto es lo que quiero  y eso de que jamás me harás nada a mí, ¿tengo que recordarte que debes obedecer mis órdenes aunque no quieras…?. Ciel, por favor mírame y ponte de rodillas, es una orden.

Ciel se estremeció, no podía desobedecer… no tuvo más remedio que hacer lo que se le ordenaba. Mientras Sebastian se sentaba en la cama con su espalda apoyada en el cabecero de la cama

-Aquí el único monstruo eres tú le dijo Ciel a su amo una vez colocado como le había dicho, Sebastian se encontraba sentado y desnudo, por favor acércate, mira como me has dejado, tienes que hacer algo por mí dijo Sebastian refiriéndose a su miembro erecto. Se podía intuir lo que iba a pasar a continuación…

-Bien joven Ciel, abre la boca, tienes que comer que estas creciendo, aún eres un niño.

Ciel lo miraba pálido y con cara de odio, ¿Acaso ese humano pretendía obligarle a hacer eso?

Al principio el joven demonio no la abrió y giró la cabeza… para luego volver a mirar a Sebastian a los ojos y abrir la boca mientras se llevaba el miembro de este a su boca.

El miembro de Sebastian era tan grande que el joven demonio tenía dificultades. Lentamente empezó a mover su lengua alrededor de este al mismo tiempo que se movía de arriba abajo mientras se ayudaba de sus manos.

Sebastian estaba en la gloria, su niño se estaba portando muy bien, el sentir la lengua de este moverse y lamer su miembro le ponía loco y también esas pequeñas manos…

Ciel a pesar de encontrarse en esa situación no iba a ser menos, quería ver a Sebastian retorcerse de placer, quería verlo gemir…

-Ciel…ngh…para… lo haces tan bien… me vas a hacer enloquecer…recuérdame que todos los días te pida esto…

El joven demonio al escuchar que parara se separó del miembro de Sebastian, un pequeño hilo de saliva mezclada con semen unía su boca con el miembro de su amo.

-Yo también puedo jugar fuerte Sebastian… La mirada del menor estaba clavada en su amo el cual se encontraba con los ojos cerrados y con cara de placer.

-Me gusta como juegas…

El corazón de Ciel le dio un vuelvo, Sebastian le había mirado con una mirada diferente a todas las anteriores una mirada que reflejaba cariño. Ese maldito… le ponía nervioso, Sebastian sentía algo por él y no lo ocultaba… eso no le disgustaba pero de ahí a corresponderle, sería una relación imposible…Ciel agitó la cabeza otra vez estaba volviendo a pensar esas cosas, tan pronto odiaba a Sebastian como le gustaba… ¿Qué demonios pasará?

-Ciel sabías que hay un dicho que dice que los que pelean se desean…murmuró Sebastian.

-Qué me quieres decir con eso… ¿Qué yo te amo? Jajaja por favor no seas tan ridículo, a parte nuestra relación sería imposible. Ciel dijo esto con burla pero en su interior sentía lo contrario…

Ese comentario no le gusto  nada a Sebastian quien abandonó la expresión de felicidad de antes y ahora miraba duramente a Ciel.

-Aún no hemos acabado Ciel… todavía eres mío.

-Te gusta amenazar por lo que veo, así nadie te podrá querer.

-Tú me amas y si no es ahora me amarás, de eso estoy convencido.

-No lo creo, se te está achicharrando la cabeza con todo esto.

Sebastian volvió a sonreír misteriosamente…

Agarró el cuerpo del menor y lo sentó sobre él, sus miembros se rozaban, ambos se miraron a los ojos sin decir nada, sus cuerpos estaban en éxtasis debido a lo anterior, el contacto entre ellos les provocaba una sensación cálida, estuvieron así mirándose perdidos en la mirada del sin decir nada durante un buen rato. Fue Sebastian quien rompió el silencio.

-Ciel…

-Sebastian…

-No te ordenaré acabar, puedes marcharte si quieres murmuro Sebastian con cara de disgusto.

Ciel le miraba, podía acabar ya y marcharse pero por otro lado tendría que acabar solo…

Sebastian vio como Ciel se levantaba un poco y se apoyaba en sus rodillas, supuso que se marcharía,  y que abandonaría la habitación… pero una vez más su mayordomo le sorprendió.

El pequeño demonio agarró el miembro de Sebastian y se lo colocó en su entrada y dejó caer su cuerpo, ahora tenía el miembro de Sebastian entero dentro.

Ciel gimió, un gemido entre dolor y placer.

Sebastian le miraba atónito, el menor se agarró a los hombros de este y empezó a moverse de arriba abajo, primero suavemente ya que la intrusión del miembro de Sebastian había sido un poco brusca pero una vez pasado el dolor inicial, empezó a moverse un poco más rápido. Ciel tenía los ojos cerrados y la respiración entrecortada mientras que Sebastian se limitaba a dejarse hacer y contemplar a aquel hermoso niño que le volvía loco… Sus miembros estaban duros, el fin vendría pronto si seguían con ese ritmo, además Sebastian quería asentar las últimas estocadas a Ciel por lo que aprovechando la concentración del menor lo levantó velozmente y lo tumbó en la cama mientras que Sebastian se ponía encima de él y le levantaba las caderas para poder poseerle.

De una sola estacada entró en Ciel, el menor que  momentos antes se encontraba encima de Sebastian se sentía desorientado ya que ahora se encontraba debajo y el movimiento era muy fuerte, las estocadas de Sebastian le dolían, eran demasiado para su pequeño cuerpo.

-Se..Sebastian, duele… murmuró Ciel.

Esto volvió aún más loco de placer el cual empezó a dar estocadas aún más profundas.

Ciel gemía ya sin poder contenerse, el dolor le era casi insoportable pero el placer hacía que se olvidase de el.

-Ciel…me vengo…

-Ni… s..se te …ocurra ….dentro gemía Ciel apenas incapaz de pronunciar bien las palabras.

-Tarde… dijo Sebastian.

Ciel  sentía el líquido cálido de Sebastian recorrer sus muslos y su interior, Sebastian se desplomo sobre el cuerpo del menor aprisionándolo.

Ciel todavía seguía necesitando más y Sebastian al pesar de estar exhausto llevó su boca al miembro del joven Ciel y empezó a lamer, el menor tenía los ojos como platos, aún sentía dolor e ira porque Sebastian había acabado dentro de él, pero esa boca le estaba haciendo olvidar todo. La lengua de Sebastian de movía rápidamente, lamiendo ese miembro, Ciel gemía, se iba a venir, a modo de venganza se vino en la boca de Sebastian, ahora sí que estaba satisfecho el menor, pero aún quedaba una última sorpresa, su amo no apartó su boca, se tragó todo el semen del menor y relamió sus labios…

-Estas rico fue lo único que dijo…

 

Notas finales:

Y con estoooo acaba el capítulo, ¿Qué os ha parecido? JOJO

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).