La tención era intensa estando los dos jóvenes sentados en la sala principal con los mayores de jueces ¿Qué decidirían hacer con el perro?
-¡definitivamente no puede quedarse!...- hablaba muy molesta la mujer, mientras se mantenía lo más alejada posible de la criatura
-lo preguntare una vez más ¿de dónde lo sacaron?...- el moreno volteo a ver al rubio y veía que este se encontraba algo nervioso a pesar de que el mayor ni siquiera había levantado la voz, entonces recordó lo que le dijo “en unos días papá volverá a ser el de antes” ¿qué significaba eso? Ya pronto lo sabría
-bueno… yo…
-es el obsequio de mi novia…- interrumpió el pelinegro causando sorpresa a todos; el rubio volteo a verlo ¿Qué pretendía hacer?- sí no me lo permiten quedar, me iré de esta casa- concluyo sujetando firmemente al animal
-….- el mayor solo lo miraba ¿hablaba en serio? Aun así se le hiso gracioso que aquel chico rebelde que había conocido defendiera así a un pobre cachorro, no parecía ese tipo de persona cuando lo conoció; tal vez mantener al animal no era una mala idea, quizá incluso ese pequeñín uniría a la familia
-¡kurogane deja de decir inconcurrencias! ¡Definitivamente esa cosa no puede….
-he decidido que el perro se queda…- habíainterrumpido el mayor a la mujer causando en esta algo de enfado ¿Qué clase de locura se le había metido en la cabeza? Los dos menores se miraron alegres ¿pero cuál sería la condición?- a cambio- miro firme al moreno- quiero que tu personalmente te encargues de sus cuidados, después de todo es tu perro ¿no?
-…- aquello había dejado confundido al ojirojo ¿hacerse cargo del perro? El nunca había cuidado ningún animal ¿Qué hacer? Miro al rubio, se veía algo nervioso ¿acaso dudaba de que el aceptaría? Fye en verdad quería que el cachorro se quede, y si él lo quería… se asusto un poco de lo que estaba por pensar ¿o pensó muy en el fondo? Todo era confuso, aun así tenían una oportunidad y solo estaba a un paso
-de acuerdo, yo me haré cargo…- el rubio lo miro algo sorprendido ¿hablaba en serio? ¿Tomaría la responsabilidad? El mayor también se sorprendió, como todos los ahí presentes, mientras eran interrumpidos por la llegada de souma
-¿Qué ocurre aquí?...- saludo con aquella pregunta mientras veía al cachorro eh inmediatamente iba asía el- pero que lindo ¿de quién es?- preguntó sosteniendo a la criatura en sus manos
-es de kurogane…- hablo algo seria la mujer mientras volteaba a ver directo en dirección al moreno- tu realmente debes amar a esa chica, como para aceptar una responsabilidad así- aquello causo sorpresa, tanto en la morena menor, el rubio y el mismo kurogane, pero no permitiría que esa mujer lo intimidara, además eso era verdad, aunque no era precisamente una mujer y el animal no era un regalo de su parte
-la verdad sí, amo mucho a esa persona…- contesto mirando serio a la mujer, causando molestia en esta por su mirada retadora; el rubio se avergonzó un poco, se sentía tonto, pues sabía que aquello era mentira, souma solo bajo la mirada, saber eso no le era agradable
-bien, ahora es momento de conseguirle un lugar donde dormir, puede ser en la cocina hasta que crezca y luego lo le compramos una casita en el jardín…- el mayor se oía algo tranquilo, aquel hombre para nada parecía alguien incomprensivo o… malo, sin embargo el moreno podía ver que el rubio no se sentía cómodo con la presencia de su padre ¿a qué se debía eso?
-bien…- hablo feliz la morena menor- como el perro es tuyo, yo te ayudare a cuidarlo- ofreció amablemente mientras entregaba el cachorro al moreno- ¿ya tiene nombre?
-…- aquello dejo estático al moreno ¿si tenía nombre? ¿Cómo diría cual es su nombre? ¿Y si escogía otro?
-sí tiene, es kurotan…- se escucho la alegre voz del rubio, mientras todos quedaban asombrados ¿kurotan? ¿Qué clase de nombre era ese? La morena veía como el moreno trataba de desaparecer de la faz de la tierra
-ah ya veo ¿quisiste asegurarte de que es tuyo?...- souma miraba en dirección al moreno al momento de hablar, mientras este solo deseaba que algo interrumpiera el penoso momento
-bueno, su nombre es… kurotan…- se avergonzó al decir el nombre- pero de cariño lo llamaremos outan ¿de acuerdo?- ante aquella proposición todos asintieron con la cabeza. El ojiazul veía algo animado la escena, era increíble que en aquel momento todos parecían una familia, ojala fuera así siempre; bajo la mirada al recordar que tenía una conversación pendiente con el moreno el sábado ¿Cómo reaccionaría el moreno al saber que él era…? No quería ni mencionarlo, por el momento era mejor disfrutar de lo que sus ojos le mostraban, se preocuparía luego
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La mañana del sábado había llegado y la intranquilidad rondaba en la mente del rubio mientras se dirigía junto al moreno al lugar para contarle todo. Habían dejado a outan con souma, era extraño ver como la morena se había encariñado con el perro en tan poco tiempo, aunque el rubio al principio desconfió, percibió que el cachorro estaría bien
-¿Qué lugar es este?...- preguntó el moreno al ver que el rubio lo había llevado a una pequeña casa frente al mar
-este es mi antiguo hogar, los más felices recuerdos están aquí, como también… los más dolorosos…- el moreno escuchaba con atención las palabras del más bajo, no le gustaba la frase de “los más dolorosos” esperaba que todas sus preguntas fueran respondidas ese día
Entraron en a la casa, por dentro todo se veía bien, tan ordenado, tan limpio; como si aun viviera gente ahí, eso era extraño para el más alto; subieron a las habitaciones de arriba y entraron en una un poco pequeña, en seguida vio un estante y en esta una pequeña muñeca, por alguna extraña razón no se sentía tranquilo
-¿Qué habitación es esta?...- hablo el moreno tratando de llegar a la conversación que le diera la verdad sobre la vida del rubio
-este es mi antiguo cuarto, yo dormía y vivía aquí…- respondió con la voz un tanto nostálgica, el moreno no lograba entender ¿Por qué ese lugar era el indicado para hablar?- antes de empezar, necesito que tú me hables de ti también, no es justo que solo yo …- continuo el menor sonriendo amablemente, causando algo de sonrojo en el mayor
-¿y qué quieres saber?...- preguntó no tan serio, quería romper el ambiente un tanto frio que se había presentado desde que entraron
-¿Cómo fue que terminaste viviendo con la señora mine?...- aquella pregunta lo enmudeció un poco, para él no era fácil hablar de su pasado, pero no podía ser injusto y no responder sabiendo que había pedido al más bajo hacer lo mismo que a él le disgustaba, se dio cuenta hace mucho que podía ser muy egoísta, pero en esta ocasión lo mejor era hablar
-mis padres murieron en un incendio cuando yo tenía ocho años, al no tener ningún familiar cerca, mi tutela fue entregada a mi tía política; la señora mine, fue así como quede en manos de esa mujer…- el rubio se sorprendió de lo frio de sus palabras ¿acaso no le dolía recordar a sus padres? No, no era eso, el moreno en verdad era fuerte y a pesar de doler, él sabía que eso era algo pasado, era sorprendente ver que en parte compartían dolores familiares y se odiaba así mismo por no tener la fuerza del mayor
-¿entonces souma y tu son primos?...- continuaba preguntando, para el moreno era gracioso esa situación, se suponía que el aria las preguntas, era extraño saber que a la final siempre asía lo que el chico de ojos azules quería
-no, souma no es la hija de mi tío, es la hija del antiguo esposo de la señora mine, pero crecí con ella. Luego de que mis padres murieran, mi tío también murió, pero él en un accidente aéreo; entonces la señora mine quedo como la apoderada de todo y malgasto todo el dinero que mis padres me habían dejado. Cuando quedo sin nada, nos dejo a souma y a mí en una casa hogar en una zona rural, ahí crecimos
Después de casi seis años, se caso con tu papá y vino a recogernos, la verdad no viví mucho con ella, siempre supe que era una ambiciosa y malvada- el rubio escuchaba atento al mayor, en verdad había pasado por cosas verdaderamente malas, ahora entendía la actitud de aquella vez cuando lo conoció y porque se portaba así- bien ya te conté, ahora te toca a ti
-…- no sabía cómo empezar a hablar, en verdad esa situación lo incomodaba, veía al mayor, se mostraba atento a lo que diría
-¿cómo es la relación que mantienes con tu padre?...- comenzó de la misma manera que el ojiazul lo hiso, lanzando preguntas, pero él pretendía ser más directo. El rubio solo bajo la cabeza para comenzar a hablar, no sería fácil, pero ya no tenía salida
-no es buena, antes lo era, pero luego de un incidente, el dejo de quererme…- aquello alarmo al moreno a la vez que lo sorprendía ¿dejo de quererlo? ¿A qué se refería?- antes de continuar, necesito que hagas tu promesa- miro en dirección al moreno, el cual se veía muy confundido
-¿y cuál es esa promesa?...- trato de hablar calmado, ahora más que nunca tendría que tratar de manejar la situación de la mejor manera
-promete, que escuches lo que escuches no harás nada al respecto, dejaras las cosas así, puedes odiarme si quieres, incluso aceptare si ya no me hablas nunca más, pero lo que oigas no debe salir de aquí y no le digas jamás a mi padre lo que te contare…- el moreno mostraba sorpresa en su rostro ¿en verdad era algo tan malo? Esa promesa no la podía hacer, y estaba seguro que escuchara lo que escuchara no cambiarían sus sentimientos por aquel chico, sin embargo también era consciente de la terquedad del menor y sabia que si no hacia esa estúpida promesa el menor no hablaría más
-¿Por qué quieres que prometa eso?...- veía que el menor bajaba la cabeza
-solo hazlo, es la única condición que pido…- el moreno estaba en un conflicto interno ¿Qué hacer? Lo mejor en esos momentos era prometer, ya vería después si romper o no esa promesa y cómo hacerlo
-de acuerdo, lo prometo…- soltó un poco serio, sentía inmensas ganas de sostener al rubio y que todo eso parara, era notoria la intranquilidad en el menor y a él no le gustaba eso- ahora habla ¿a qué incidente te refieres?
-…- volvía quedar sin saber cómo comenzar, por lo que tomo aire y comenzó a hablar- por mi culpa mi familia se arruino, destruí la vida de papá y provoque la muerte de mamá…- aquello sorprendió de sobremanera al más alto ¿Qué arruino a su familia? ¿De qué hablaba?
-¿a qué te refieres con eso?...- trataba de mantener la calma, pero le era muy difícil, ahora más que nunca necesitaba saber
-yo hice eso, papá enloqueció y mamá enfermo y murió luego de que yo mate a mi hermano…- aquellas palabras exaltaron al mayor ¿¡que había matado a su hermano!? ¿¡De que hablaba!? Veía como las lagrimas comenzaba a brotar de los ojos del mas bajo
-¿Qué tu… hiciste qué?...- no salía de la impresión, mientras el menor trataba de continuar
-el era mi gemelo, yo quise salvarlo, en verdad que lo intente…- trataba de hablar lo mas calmadamente, pero le era casi imposible, veía al moreno, este se mostraba muy serio ¿Qué acción tomaría ahora? ¿La misma que su padre? No podía guardar silencio, debía continuar- aquel día jugábamos dentro la casa, éramos muy pequeños entonces, apenas habíamos cumplido seis años
Cuando entramos a la cocina, vimos un revolver sobre la mesa, mi hermano sujeto el arma en sus manos
-mira, mira, papá debió olvidarla…- hablaba un niño rubio de seis años a otro de igual apariencia
-debemos devolvérsela, debe de de estar buscándola…- respondió el otro por su parte mostrando clara preocupación
-no debió darse cuenta aun, mejor la dejamos aquí, esto es peligroso…- dijo poniendo el arma en su lugar- ¿ahora a que jugamos?
-a las escondidas…- hablo felizmente el rubio cerca la puerta
-está bien, pero tú me buscaras primero…- dijo alegre, para luego salir corriendo
-no se vale
Era un día tranquilo, no parecía que pudiera pasar algo malo, cuando mi hermano salió, me puse a esperar a que se escondiera, entonces aquella arma llamo mi atención, por lo cual la sostuve en mis manos, entonces el ruido de la puerta al abrirse me asusto y solté el arma asiendo que esta callera al suelo y se disparara.
Escuche solo una queja casi inaudible, cuando mire, mi hermano tenía sangre en la ropa, me asuste mucho y me dispuse a ayudarlo, pero no sabía qué hacer
Este lugar es alejado y no vive gente cerca, trate de llamar a mis padres pero nadie me contestaba, veía como la vida de mi hermano se esfumaba y no podía hacer nada para ayudarle, me quede a su lado y roge para que algo lo salvara, no podía dejar de repetirme que fue mi culpa; mi hermano trataba de convencerme de lo contrario, pero yo era consciente de la realidad. Vi cuando el cerro los ojos para no abrirlos más, y a pesar de rogar y llorar, nada le devolvería la vida
Cuando mis padres llegaron, se volvieron histéricos al ver la escena, papá me culpo en seguida, mientras mamá sujetaba a mi hermano intentando que abriera los ojos, pero ya era tarde. No tardo mucho en llegar la policía, dijeron que había sido un accidente, la pistola era una browning, un arma muy peligrosa, mi padre salió como culpable, pero fue liberado luego de pagar una multa
Luego del funeral, mamá se negó a vivir, no comía, no bebía y tampoco hablaba, por lo que enfermo gravemente, ella no me miraba, yo sabía que me culpaba también; papá se dedico a la bebida, me gritaba todo el tiempo, mi vida cambio radicalmente, nadie tomo en cuenta el dolor que a mí me producía la muerte de mi hermano, pero no me quejaba, porque todo había sido mi culpa y merecía eso y más
Luego de seis meses, mamá falleció también, aumentando así el odio de mi padre asía a mí, deje de ir a la escuela para cuidarlo en casa, y trate lo más que pude de ganarme su perdón…- la voz del rubio se oía quebrantada, kurogane escuchaba con asombro y furia las palabras del menor ¿en verdad aquel hombre podía ser tan cruel? Apretó los puños, sentía furia al ver como el más bajo en verdad se echaba la culpa, claro que él no lo odiaría por eso, si todo había sido un accidente y la principal culpable, fue la irresponsabilidad- dime, después de saber esto ¿tú me odias también?- preguntó con la voz aun quebrada y con el fleco tapando sus ojos ¿Qué clase de pregunta era esa? Se dijo así mismo el moreno, mas su cuerpo no aguanto más y sostuvo aquel pequeño cuerpo entre sus brazos
-tonto ¿cómo podría?…- el menor se asombro por aquel acto, y se aferro más a su pecho, la verdad esperaba una reacción distinta, peor que la que el moreno tuvo cuando le dijo lo de ashura; sin embargo se sintió feliz de lo cálido que era para él ese abrazo, ya se había dado cuenta de que estar cerca del moreno le producía seguridad y un sin fin de sensaciones que jamás había experimentado, ni siquiera con ashura ¿a qué se debía eso?