Otro día más de vida, otra vez a la rutina, levantarme, alistarme e irme hacia la escuela; llegar sentarme alejados de todos y atender al profesor. Siempre es lo mismo las personas me evitan, yo no entiendo que hice para que sea así, simplemente no me interesa hacer lo que los demás hacen creo que por eso me ven como un bicho raro.
Tengo una única felicidad que es ver a mi amado a los lejos a pesar de que no sepa de mi existencia yo soy feliz con cada gesto que hace, jamás podré decirle lo que siento porque yo también soy un chico, mi nombre es Lee Chan Hee pero mis padres me dicen Chun Ji. Siempre sueño que estamos juntos y somos felices para siempre, es estupido pero yo también deseo cosas como esas.
Otra clase normal de gimnasia pero me esta dando mucho calor la camiseta que tengo debajo del uniforme, así que pido permiso y me dirijo al baño de caballeros para quitarme la camiseta.
Al estar ahí comienzo a oír un llanto pero supuestamente estoy solo en el lugar además en este día el turno de la tarde no tenia actividades, la escuela estaba desierta pero aún así vuelvo a oír los sollozos. Salgo del baño y me fijo en las demás puertas pero todas estaban abiertas, salgo afuera para ver si alguien cerca estaba llorando pero me encuentro que no ahí absolutamente nadie en todas las instalaciones solo se oye un débil sonido de pelotas picando proveniente del salón de usos múltiples donde esta mi clase, le resto importancia y vuelvo a donde están los otros.
Es otro día pero aún continuo pensado en lo ocurrido ayer en los baños pero me convexo a mi mismo que seguramente no vi al niño, solamente fue eso. Llego a la escuela todo esta bastante normal a excepción de que unos chicos están reunidos en una de las esquina del curso al parece compartiendo rumores.
–‘’La semana pasada se suicido en los baños de hombres’’ – ¿que acabo de oír? ¿Suicidarse? –‘’Ahora se sabe que el chico estaba enamorado de un compañero de clases y que se le declaro, pero lo rechazado horriblemente y como no aguanto con el dolor de las hiriente palabras de su amado, se mato ahorcándose en el baño. –pondría ser ¿que el llanto que oí sea él? Pero en que cosas pienso, esas cosas no existen. Me revolví el cabello para tratar de calmarme.
Intento estar calmado durante todas las clases, pero muchas dudas me estaban carcomiendo por dentro. Salí de la escuela, ya estaba a mitad de camino pero recordé que había olvidado mi libro de literatura debajo del banco así que salí corriendo de nuevo para el establecimiento.
Ya el lugar estaba desierto a razón de que faltaba una hora para la entrada del siguiente turno. Me dirijo a mi salón que se encuentra al final del pasillo de la parte nueva de la escuela. Entre, busco mi banco y como había dicho, ahí estaba mi libro como esperándome, él sabia que volvería, lo tomo y estoy por salir cuando veo a un chico de tal vez mi misma edad que esta acurrucado debajo del ultimo banco de la fila de en medio. Me voy acercando para ver si necesita ayuda pero me detengo seco al ver que se ah comenzado a mover como percatándose de mi presencia.
– ¡Vete de aquí! – ¿que a dicho? No logro entenderle pareciera que ahí eco en el curso –Sal de aquí y no regreses, ella quiere matarte – ¡¿Qué?! De que habla no comprendo, ¿matarme?, ¿porque? –Esta justamente detrás de ti, ¡corre! Ella me mato a mi, yo no quería terminar con mi vida… –por alguna razón no quiero pensar más y salgo corriendo la más rápido que pude del lugar.
Corro sin parar, comienzo a sentir que alguien viene detrás de mi, no quiero darme vuelta pero al final lo hago y veo a una joven persiguiéndome, no está muerta por lo que yo veo. ¿Entonces porque me sigue?
Iba detenerme, ya que no veo que no sea una amenaza, pero antes de parar veo que saca una cuchilla de carnicero, y me mira con mirada típica de un psicópata demente de una película de asesinos cereales.
Mis piernas se sienten débiles no se cuanto correré este pasillo que parece no terminar, un frió recorre mi cuerpo será que esto es la muerte, miro hacia atrás y la joven me apuñalado no sé cuantas veces por la espalda.
–Mira que te hago un favor, tu amado no te ama y para que continuar sufriendo, yo ame como tu y lo único que resulto fue que la persona que amaba me violara y luego me tirara a un riachuelo, creyó que ahí moriría, pero no, aquí estoy, y él esta descuartizado en la sala de su casa. –me pareció que debió sufrir mucho. ¿Pero convertirse asesina? No es la respuesta a tanto dolor.
Siento como la vida se comienza a escapar entre mis manos, todo se pone gris, la noche a caído para mí.
Vuelvo abrir los ojos porque siento como alguien se acerca a mí… Pero ¿que es esto? Mi eterno amor esta aquí, me esta mirando, ¿esta llorando? L.Joe esta derramando lagrimas, ¿por mi? No lo puedo creer, tan solo será lo que mis ojos desean ver, así que tan solo sonrió por tan hermosa imagen.
–No entiendo como llegaste a este descampado pero si solo hubiera estado a tu lado no estaría perdiéndote, Chunji siempre te amado en secreto pero no sabia como decírtelo, tenia miedo del rechazo, tenia miedo de tantas cosas y ahora estas muriendo, ¡soy una idiota! –esto es real la persona a quien amo esta aquí y me ama también, ahora toma mis manos, se acerca a mi rostro lentamente, deposita un tierno beso en mis labios y yo con ello le regalo mi ultimo suspiro de vida.
Soy el estúpido de “L.Joe” como me dicen, que por su orgullo e idiotez, la persona que más amaba en todo este mundo ahora es tan solo un cadáver entre sus brazos, te alzo y te llevo a tus padres, al menos haré que tengas un entierro digno.
Lo único que me reconforta es saber que atraparon a la loca que te asesino, tuvieron que sostenerme entre diez para que no la descuartizara con el mismo cuchillo que te mato.
Si no fuera que siento mis fuerzas desfallecer por saber que hoy serás enterrado, iría hasta al hospital psiquiátrico en el que está internada y le prendería fuego. Me importa de menos la vida de las demás personas.
Veo como la gente comienza a llegar a tu funeral y me pregunto: ¿a que vienen aparecer ahora, que ya estás muerto? Debieron estar cuando aun respirabas.
Aunque tu no lo sabes, yo lo sabia todo de ti, eras el único objetivo de mis ojos a cada momento, cuando volvías de clases siempre te perseguía, me encantaba verte caminar. No lo niego era un acosador pero disfrutaba serlo, me gustaba ser el único que tuviera una lista de tus gustos y disgustos.
Yo era feliz a mi manera y ahora estas bajo tierra, el proceso de pudrición a comenzando, pero extrañamente mi corazón se niega a entrar en ese proceso, no te quiere olvidar, no te quiere dejar y tampoco lo fuerzo hacerlo, porque mi mente y alma están contigo.
No sé cómo hacerlo, pero quiero demostrarte cuanto te amaba, quiero que sepas que mi amor por ti era más grande que el de cualquiera, que era algo incomparable.
Bueno aquí estoy por demostrarte cuanto te ame, que te ame infinitamente. Paso la soga por mi cuello, subo a la pequeña silla de madera, miro al cielo una vez más buscando tu mirada, espérame que pronto estaré en donde tu estas. Suelto mi ultimo suspiro y salto de la pequeña silla…