ONODERA
La narcolepsia es una enfermedad que se caracteriza por tendencias anormales del sueño, insomnio, alucinaciones y extraños episodios en los que repentinamente caes dormido, es algo inevitable, no es algo que puedas controlar…algunos médicos atribuyen a las grandes y exesivas carga de estrés como causa probable de la enfermedad…
Abrio sus ojos lentamente y con algo de dificultad vio un poco borroso, pero pudo distinguir que estaba en una habitación de hospital
-“Maldicion…de nuevo…”- pensó algo irritado mientras se incorporaba en la cama. Aquel olor de ese lugar le repugnaba, ese olor a enfermedad y medicamentos, estaba harto de aquello. Poco después sus ojos se acostumbraron a la luz y solo entonces cuando ya estuvo sentado un punzada en su hombro izquierdo lo hizo soltar un gemido de dolor
– “¿Qué… que ha pasado esta vez? …”- se pregunto apretándose fuertemente el lugar donde le dolía, en ese instante escucho pasos y vio como una enfermera llegaba con algunas vendas
-¡Ah, que bueno que has despertado Rit-chan! –dijo con una amplia sonrisa la joven enfermera
-P-Perdona las molestias Lilly… yo… – otra punzada le recorrió el hombro pero esta vez solo hizo un mueca y se contuvo, la chica le dedico una sonrisa y se acerco a el para empezar a cambiar los vendajes que tenia en el hombro.
Lilly era una joven y amable enfermera de cabellos castaños y mirada color miel, que ya conocía a ritsu hacia un tiempo, sus constantes visitas al hospital hicieron que de alguna manera entablara una amistad con la chica.
-Casi te arrolla un auto Rit-chan …-comento la chica concentrada en su trabajo-… afortunadamente el auto alcanzo a frenar un poco, aun así el impacto y la caída fueron algo fuertes y al final has terminado aqui…- dijo mientras empezaba a poner los nuevos vendajes
-Oh..ya veo…-dijo mirando hacia la ventana de la habitación… estaba molesto, molesto consigo mismo, harto de aquella maldita enfermedad y de que no pudiera controlarla.
En ese instante un alboroto y algunos gritos se escucharon por el pasillo…
-¡Takano-sensei…debe volver ahora mismo! – Gritaba alguno de los ayudantes - ¡Takano-sensei! …-se escuchó como si utensilios y cosas metálicas cayeran al suelo y pasos acercándose a la habitación, la chica soltó un suspiro y con una pequeña sonrisa en el rostro se dirigió a el oji verde
-Tenemos un nuevo medico…- dicho esto, aquel hombre estaba parado en el umbral de la puerta, tan alto, con un cabello castaño oscuro y ojos del mismo color, unos lentes y una larga bata blanca
-Así que ya despertó…- dijo con semblante serio entrando a la habitación y tomando la tabla con la historia médica del oji-verde- Antecedentes de narcolepsia... –leyó en voz alta y lo miro fijamente – y recientemente una leve herida en el hombro izquierdo… - sus ojos no se apartaban del chico y lo hizo sentí algo incómodo, desviando la mirada Ritsu suspiro cansado de ver aquella expresión de reproche en el rostro del medico
-“Ya lo se idiota…no tienes que repetirlo…”- pensó para si mismo - ¿Cuándo puedo ir a casa? – pregunto intentando evadir la mirada del castaño
-Mañana se te dará de alta, con algunos medicamentos que debes tomar para el dolor y unos tranquilizantes…- dijo este dándose media vuela y volviendo a dejar la tablilla sobre la cama del paciente- Lilly…
-¿S-Si? – pregunto algo nerviosa la chica por el semblante del medico
-¿Ya se le ha dado un baño al paciente?- aun con la misma expresión de seriedad en el rostro
-N-No…Bueno … se suponía que ahora que acaba de despertar le iba a ayudar a hac...
-Bien, puedes retirarte…yo lo hare.-dijo sin mas
-¿¡A---AHHH!? – fue la brusca respuesta del oji-esmeralda al escuchar aquello, levantándose rápidamente de la cama y alejandose lo mas posible de aquel hombre- ¡ S-Solo es una herida en el hombro no necesitas tomarte tales molestias!
-P-Pero Sensei…usted… -la chica solo podía sonreír tímidamente e intentar razonar con él, pero era imposible
-He dicho que lo hare yo, ¿Tienes algún problema con eso? – la expresión de su rostro hacia que lilly quisiera salir corriendo de la habitación
-¡Takano –sensei!...- Le grito jadeante uno de los enfermeros quien vestía las ropas de crujía- ¡Tiene que volver a la sala ahora mismo, no puede simplemente irse y dejar el paciente abierto!...¡ESTA EN MEDIO DE UNA CIRUJIA! – aquel tipo no paraba de respirar agitadamente sosteniéndose del umbral como si hubiese corrido kilómetros en segundos
-Tsk… - mascullo el castaño, volvió su mirada nuevamente a Ritsu por un par de segundos y salió de la habitación diciendo - … es un simple trasplante de riñón…no se cuál es el alboroto…
-“Que diablos le pasa a este tipo…”-pensó irritado el oji-verde viéndolo salir de la habitación y volviendo a tomar asiento sobre la cama
-P-perdon por eso Rit-chan… este nuevo medico es algo…ya sabes… -decia lilly sonriendo – pero ¿sabes?-dijo viéndole con ojos brillantes- casi parecía como si estuviera preocupado por ti …
-“Aquí va otra vez…”-penso el chico poniendo los ojos en blanco
-¡Tal vez Takano – sensei se enamoró de ti a primera vista cuando te vio entrar desmayado al hospital! Oh! …y y y ¡Cuando salgas de aquí mañana se declarara frente a todo el hospital y te pedirá que se casen! Ohh! ~ ~ ~ -fantaseaba emocionada la castaña emanando un aura de felicidad y rosas
Para mala suerte de Ritsu su amiga enfermera….era una fujoshi y de cuando en cuando le daban sus ataques
-…. Y les pondrán “James” y “Marie” ,tendrán una casa en la playa y…-continuaba la chica
-Por todos los cielos Lilly…¡Ya basta!- le espeto molesto y algo sonrojado al escucharla hablar de hijos- ¡Además ni si quieran son nombres Japoneses, ese tipo de cosas no va conmigo! …-se puso una mano en la frente intentando calmarse, aquella agitación le había provocado mas dolor en el hombro
-¡Lilly, te necesitamos por aquí! –se escucho gritar fuera de la habitación y en seguida la chica tomo sus cosas y salió corriendo de la habitación haciéndole un ademan de despedida, el castaño la vio partir y suspiro aliviado de no tener que soportar más aquello, volvió su mirada a la ventana… contemplando el cielo, se quedó allí por un rato pensando nuevamente en ese estilo de vida que llevaba, en lo complicado que era todo para el y en “eso”… en aquel pasado que aunque quisiera olvidar no podía hacerlo, sin darse cuenta se quedó dormido… y como siempre soño… soñó con tormentas, desesperación, dolor y amargura.
-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-Un par de horas antes*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-
TAKANO
Como era de esperarse la sala de emergencias estaba bastante movida, doctores y enfermeras corriendo de un lado a otro con camillas, medicamentos y pacientes, aunque a pesar de todo ese día había estado particularmente calmado comparado con otras veces, Masamune Takano, un médico de una bien ganada reputación, había sido trasladado a ese hospital recientemente
-¡Traigan una camilla inmediatamente! – Ordeno a los enfermeros al ver entrar a dos jóvenes, uno de ellos con el otro en brazos, desmayado y con sangre escurriéndole por el brazo izquierdo, estos obedecieron rápidamente - ¿Es usted familiar de él? – Pregunto al algo alterado pelinegro que había traído al chico, mientras los ayudantes se encargaban de llevar al chico a una sala menos concurrida y darle primeros auxilios
-N-no señor…soy … soy un amigo… - El chico lo miraba con preocupación- ¿¡El.. va a estar bien!? – El joven tenia el cabello azabache y tan revuelto que parecía que tuviese un nido de aves allí, sus ojos eran del mismo color que su cabello y sus ropas estaban algo manchadas de la sangre de su compañero- …Todo paso tan rápido, el auto intento parar pero el no se movio y .. yo…yo ..simplemente no pude evitarlo… y luego el no respondia …Esto... –el pobre estaba shockeado y no paraba de balbucear cosas
-Tranquilo, haremos lo que podamos –puso una mano en el hombro del joven intentado darle algo de confianza, se giro y emprendió camino hacia donde se encontraba el otro chico. Al llegar a la pequeña sala, donde lo habían trasladado, los ayudantes le habían rasgado la camisa y estaban tomando sus signos vitales… El castaño lo examino mas detalladamente y entonces cayo en cuenta
-“Este chico es ...”- se sorprendió al descubrirlo y por unos minutos no pudo retirar la vista de aquel muchacho –“La vida es tan irónica a veces...” – esbozo una pequeña sonrisa y se dirigió hacia el para ayudar con sus heridas mientras un recuerdo surcaba su cabeza.
-~-~--~-~-~-~-~-~-Memorias de Takano-~-~-~-~-~-~-~-~
Se paseaba por la biblioteca mas cercana a su casa buscando algún nuevo libro que leer, divagaba por los pasillos pasando el dedo índice por cada uno de los lomos, leyendo rápidamente los nombres esperando que algo le interesara… hasta que repentinamente un ruido de algo cayendo a un par de estantes de donde estaba el lo hizo desconcentrarse, un poco de curiosidad y algo de su instinto de medico, lo hicieron dirigirse hacia el lugar donde había escuchado el escandalo… Cuando llego vio a un joven aparentemente desmayado debajo de una gran pila de libros que habían caído sobre el, rápidamente se apresuró a sacarlo de allí
-Oye… chico, reacciona…-le intentaba despertar Takano, que lo tenia acurrucado en sus brazos dándole pequeñas palmaditas en la cara, pero no había respuesta alguna
-¡Oh! ..-exclamo una señora ya algo mayor que llego por detrás de él- Ya ha vuelto a caer dormido… pobre muchacho… no se preocupe señor, le pasa constantemente… - le dijo con una sonrisa y algo apenada, a pesar de su carácter Takano no dejaba de ser atractivo – Si es tan amable… ¿podría ayudarme a dejarlo por allí? –dijo señalándole unos sillones que estaban cerca
-¿Segura que estará bien?- pregunto algo intrigado dejándolo suavemente sobre el sillón
-Si, vera… este chico… sufre de narcolepsia… Tiene un trabajo en esta biblioteca, aun a pesar de su enfermedad el se esfuerza muchísimo… es un buen chico – la mujer sonrió con algo de lastima
No sabía por qué, pero se quedó allí sentado a su lado, esperando y observándole por un buen rato... ¿Qué se suponía que estaba esperando?, no terminaba de entender ¿por qué no se había ido y ya?, ¿Por qué no podía simplemente seguir buscando un libro?, seguía escudriñando a aquel joven y sin darse cuenta llevo su mano a la cabeza de este y acaricio suavemente su cabello, al contacto el chico se movió un poco y lentamente abrió los ojos, Takano aparto la mano sobresaltado -“¿Qué rayos estaba haciendo?”- se regaño internamente por aquel descuidado, y poco propio de él, acto
Los ojos color esmeralda del chico lo miraron algo confundidos y entonces algo en su interior palpito y se encendió. Una pequeña llama… El chico se levantó de golpe pidiendo disculpas y haciendo reverencias y acto seguido se fue corriendo a hacer su trabajo, Takano lo observo un poco mas desde lejos, confundido y sorprendido de si mismo…
-“¿Qué es esto…?”