Eran apenas la 11:00 am y cierto rubio no se sentía muy bien.
-Kibum, ¿Estás aquí?- estaba un muy asustado Taemin.- ¿te encuentras bien?- toco la puerta de uno de los baños.
-si tae no es nada- salía key del baño limpiándose las comisuras de los labios.
-¡Mentira!... desde hace días, semanas es lo mismo, te la vives las mañana inclinado en el retrete, y solo buscas donde dormir.- lo miraba Taemin muy preocupado.
-¡Ya! Tae, está bien saca una cita para el médico.
-Kibum ya has cancelado dos, será la última si sigues así le diré a Minho.
-pero que le paso al mundo, ahora mi propio hijo, me traiciona.-decía un dramático rubio.
-No Omma pero estoy preocupado.
-sí, lo siento estoy algo alterado. La mudanza a la nueva casa. La nueva línea de ropa.- el rubio suspiro.- Si saca la cita, ¿Ya?-lo miraba un Taemin no muy convencido.
-¡Ya! baby, vallamos a terminar.
Los jóvenes diseñadores fueron a seguir con su trabajo, Kibum estaba acomodándole el traje a una modelo cuando comenzó a sentir muy mareado se alejó para poder tomar asiento, pero termino por desmayarse, no alcanzo a tocar el piso ya que unos fuerte brazos lo alcanzaron a sostener.
En otro lado en uno de los mejore edificio de Gangnam se ubicaba las oficinas de la empresa Choi donde trabaja Minho.
-¿y?, como se lo dirás a Yesung.
-no sé, pero será mejor que me de prisa ese bastardo de Siwon está detrás de él.
-es mi imaginación o siento un toque de inseguridad.
-¿Yo?, no, si soy el mejor, nadie se puede comparar al gran Kyuhyun.
-si como sea, seré el padrino ¿no?
- sí y dejar que arruines mi boda, con alguna degenerada escena donde te tiras a Kibum detrás del escenario, con el micro cerca y que todo mundo escuche el “aaaah si Minho, la tienes grande…” o el “oh sí que rico eres gatito…”. No gracias.
- eso fue realmente gracioso.
-Era la boda del Eunhae. Y fueron más noticia ustedes.- decía realmente alterado kyu.
- bueno aún falta ver si Yesung acepta.- dijo el alto saliendo de la oficina del abogado, riendo por la reacción de preocupación de su amigo.
Al en tratar a su oficina, miro a su asistente preocupada.
-¿qué ocurre Sulli?
-¡Oh! Minho que bueno que llegas, llamo Taemin y dijo que Kibum está en el hospital central de Gangnam.- Minho no espero a que dijera nada y salió corriendo, llego al estacionamiento en segundos y salió directo al hospital le importo muy poco el hecho de pasarse mucho semáforos, cuando llego al hospital están Taemin, y Amber la asistente de Kibum.
-Minho
-Taemin ¿Qué le paso a Kibum?
-no sabemos de pronto se desmayó. Se hubiese golpeado si Jonghyun no lo sostiene.
-Jonghyun.- Minho lo miro
-Minho
-gracias por traer a Kibum.- trato de calmarse.
-deberías de cuidarlo mejor.-Minho estaba a punto de reclamar lo antes dicho pero el doctor entro para informar acerca del estado del rubio.
-familiares del joven Kim Kibum.
-Yo soy su esposo.
-Pase, el joven Kibum ha despertado.
Cuando Minho entro miro a key un tanto asustado su perfil era tranquilo pero ya conocía a su gato y en sus ojos miraba miedo mismo que se fue cuando lo miro.
-Minho.- el rubio le sonrió, de la manera más tierna.
-bebe que paso ¿Cómo te sientes?- Kibum respondió un “mejor...”
- el motivo del desmayo en Kibum es normal debido a su estado.
-¿Qué estado?- Minho pregunto rápidamente.
-El joven Kibum esta embarazado. Y bastante de casi un mes.
-E-embarazado…- Minho miro a su rubio esposo y se conmovió al mirar como este ya tenía lágrimas en los gatunos ojos, y una amplia sonrisa, no pudo verlos más hermoso.
-Keroro tendremos un bebe.
-Así es mi vida, nuestro bebe.- el moreno lo estrecho entre sus brazos olvidándose de todo. Solo de la gran noticia que le daban.
Esa misma tarde dieron de alta al rubio después de las recomendaciones pertinentes para su estado, la pareja salió donde ya muchos los esperaban tan emocionados estaban que se olvidaron de los que estaba a fuera esperando la información acerca del estado del rubio.
-chicos. Dijo un alegre Kibum. El primero en correr fue su “hijo”.
-umma ¿Cómo estás?, por que tardaron.
-tranquilo, Tae siento no salir a decirles que key estaba mejor pero estábamos tan alegres que no nos dimos cuenta.
-¿Alegres?
-si Dino serás tío.
-Nooo.- lo alza un alegre Jong.
-¡Hey! Ya, ya que hay que cuidarlo.
-Ya vas a empezar de sobreprotector Minho.- se quejaba Amber, quien se acercaba a felicitar a key.
Una vez fuera del hospital salieron con rumbo a su hogar.
-Kibum ¿Qué quieres de comer?- al no recibir respuesta volteo mirando la más hermosa escena el río puso sus manos sobre su vientre aun plano, mientras ya estaba totalmente dormido, cuando llegaron bajo a su hermoso esposo y lo subió a su recamara lo acomodo y bajo a la cocina para preparar algo a su futura Omma.
Pov key.
Estar embarazado es algo muy… tiene cosas hermosas y cosas difíciles como cuando fuimos a hacer la primera ecografía.
FLASHBACK
-acomódate en la camilla Kibum. Súbete tu camisa y desabotona tu pantalón.- decía un joven doctor. Que entraba al consultorio.
- lo lamento no me presente soy Jaejoong el esposo de Yunho, y el medico que desde hoy te hará las ecografías.
-si gracias.- conteste, iba a hacer lo que me pedía pero Minho se adelantó a hacerlo mientras me miraba de manera intensa. Si no es porque Jae, soltó una risita Minho era capaz de tomarme hay mismo.
-Bien Kibum te colocare gel para poder observar a este pequeño.- me coloco un gel bastante frio y pegajoso, las sensaciones que más me molestan, sin contar que bebí como 10 litros de agua para realizar la ecografía.
-Veamos que tenemos por aquí, él bebe está completamente bien, por su tamaño tendrás aproximadamente 7 semanas, el sexo del bebe aun no es visible pero… o miren al parecer es fotogénico.- y justo en ese momento vi a mi bebe están pequeñito.- prenderé la bocina y taran.- ¡Dios! Se escuchó su hermoso palpitar y ya no podía más estaba hecho un mar de lágrimas pero, ¡Dios! Soy Kibum es inevitable no llorar, mire a Minho quien sostenía mi mano con fuerza, y trata de ocultar su felicidad pero una pequeña lagrima recorre su mejilla, la remuevo con mi pulgar y me mira. Y juro que me si es posible me enamore de el mucho, mucho más.
-es nuestro bebe, gatito, mira están pequeño.
-así es Minho nuestro.- se acercó y me dio un beso en la frente y sin importar el gel se acercó a dejar otro en mi vientre.
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END FLASHBACK
Ya han pasado dos semanas desde la visita al médico y estoy frente al espejo.
-¡Oh no!, amo este pantalón, mi hermosa figura se está perdiendo… bebe.- acariciaba mi vientre que ya está un poco abultado.- y apenas pasamos la décima semana.
- Kibummie de que hablas.- entraba Minho, ya vestido. Con un traje negro que cubría su bien formado y fibroso cuerpo.
-Minho…- Oh no eso salió más como un gemido.
-¿key?- Minho me miro de manera curioso, que este hombre no sabe que en el embarazo el deseo sexual aumenta.
-Keroro, acaso no ves que te ves bastante violarle con ese traje. Me pegue a su cuerpo, y que equivocado estaba claro que Minho sabia del aumento de deseo sexual, ya que podía sentí ala perfección su erección.
-Key… mph… no quiero hacerte daño.
-no lo harás.- le dije besándolo, metiendo mi lengua.- MPH… mmmm.- sentí como Minho me tomaba del trasero y me alzaba yo enrede mis piernas a su cadera y me puso en el lavabo. Nos seguimos besando.
-Tus pezones están más grandes.- miramos mis pezones… es cierto. No respondí ya que Minho los atrapo en su boca, los chupaba, mordía y succionaba de una manera tan deliciosa que ya no aguantaría mucho
- Minho te necesito.- solo sentía como mi entrada se contraía.
- que ansioso gatito.
-¡aaaahhh!...- sentí los dedos de Minho.- ya hazlo estoy preparado para ti Choi.-Minho no lo dudo, y entro de una estocada. Dando en mi punto dulce. Gemí y grite. Ya que Minho seguía golpeando el lugar que me hace ver galaxias enteras.
-Aaaahhh min…ya… ya no aguanto….mmm…mas.- dije llegando al orgasmo entre nuestros estómagos.
-kibummie tu entrada se hace más pequeña… aaaahhh… me aprieta tan rico…aaaahhh.- Minho soltó todo su semen en mi interior.
-mph… gato travieso, tendremos que bañarnos de nuevo.- yo solo reí. Minho me cargo lo sentía aun en mi interior, y nos llevó a la regadera donde entre besos y dulces caricias, me tomo de nuevo, ese día no fuimos al trabajo.
End Pov Key.
Pov Minho.
Llegue a la casa un poco más temprano de lo normal ya no esperaba a ver a mi gato panzoncito, claro que eso solo lo pensaba, ya que si se lo decía a key seguro se enfadaría, por insinuar que esta gordito. Reí ante la imagen que tenia de él haciendo sus dulces y apetecibles pucheros.
Al llegar lo busque en el primer piso pero nada, subí las escaleras subiendo de dos escalones, no había ruido alguno, y me comencé a asustar entre al cuarto y nada, busque en el baño, fui al estudio y hay estaba. Su imagen es perfecta tome mi cámara y no pude evitar tomar un montón de fotos, en todas lucia hermosos. Esta sobre el diván del estudio, entre un montón de cojines. Tenía puesta una de mis playeras que le queda enorme, pero la tiene alzada hasta su pecho, sus manos están sobre su barriguita de ya 6 meses, y solo trae unos diminutos shorts que dejaban ver sus piernas, por el embarazo se le hincharon asiéndolas ver más carnosas y deliciosas. Me recuerda a la vez que salimos a la playa.
FLASHBACK
Entre al carro, en un instante estoy otra vez perdido en esos hermosos ojos gatunos que adquirieron un brillo especial, por el embarazo.
-Vamos, muévete... Sí que tardas, eres tan lento Minho.- maleducado y hermoso como sólo él puede ser. Tomo los helados.
Ese día salimos a dar un paseo marítimo. El carro está aparcado debajo de un pino, cerca de la playa.
-No te he entendido, Minho. ¿Quieres o no el helado?
Estoy agachado sosteniéndolo en brazos para sacarlo del carro, había adquirido la maña de cargarlo cual princesa de cuento.
-¿Cómo que no me has entendido? Mira que eres bobo. Te he dicho que no, key, gracias
Pero no.
-Pero sí que lo quieres, lo sé.
Hay esta mi gato, dulce y testarudo.
-Entonces, ¿por qué me lo preguntas?- reí- Además, ¿te parece que si no lo quisiera no lo
Hubiera comprado? .- y es que key se había adueñado de los dos grandes conos, pero no pude decir no ante la su carita, en vedad quería los dos.
-Eso, ¿ves cómo eres?... ya no me quieres.-decía entre sollozos
-claro que no amor, Yo te amo mucho, mucho, y también a nuestro bebe. Le deje un beso, y extendí una manta, en el capote, para que el calor del metal no lo lastimara y lo deje hay, saboreando sus helados
-¿Te gustan? Uno es de Fresa y otro de menta.
-Pero si a mí no me gusta la menta...
-¡Hace un minuto no querías soltarlo por nada del mundo y ahora te quejas del sabor! Mira que eres tonto. Pruébalo, ya verás cómo te gusta.
-¡Sabré yo si algo nos gusta o no!
-No hables por nuestro hijo. Vamos pruébalo te gustara, que te conozco.
Tras haberlo probado, me lo pasa.
-Hummm... El tuyo está buenísimo.-
-¡Pues entonces tómate el mío!
-No, ahora me apetece el de Fresa.
Y lame su helado mirándome y riendo. ¡Este gato bipolar! Y después se apresura porque el helado se derrite en seguida y se lo mete entero en la boca. Y se ríe. Y luego quiere probar otra vez el mío.
-Vamos Minho, dame un poco del tuyo. -Lo dice adrede, riendo, y estamos apoyados sobre el parabrisas del carro, yo con las piernas abiertas, y el en medio. Es tan hermoso y divertido mirarlo ante sus actitudes infantiles.
Los helados empiezan a deshacerse y a chorrear por su brazo. De vez en cuando recojo con la lengua un poco de Fresa, un poco de menta, asiéndolo estremeces. En las manos, entre los dedos, en las muñecas, en el antebrazo... Suave. Dulce. Parece un niño. Lleva un jersey negro, y unos shorts cortos azul cielo, con dibujos de un azul más oscuro. Lleva sandalias azules y solo Tengo ganas de devorarlo.
-Minho.-suelta un gemido bajito. Beso su cuello y ya no aguanto le hare el amor hay a pleno día. Le quito el jersey. Y por su pecho cuelga y un collar largo con conchas blancas, redondeadas, algunas más pequeñas, otras más grandes. Bailando entre su blanco pecho. Y rozados pezones.
-¡Ay!- un poco de helado ha caído en su pancita.
-Mi pequeño –me acercó y comienzo a hablarle ala pancita donde está mi hijo-. ¿Qué pasa?, ¿te he hecho daño? ¿Tienes frío?
El ríe divertido. Inclino el helado que aún está en su mano derramando otro poco, causándolo un respingo...
-Ay.
-Tienes un poco de menta.- Digo mirando las gotas que resbalan, cerca de sus pezones.
Y sigo así, pintándolo de Fresa y menta en la espalda, detrás del cuello, en la pierna,
y después el cono se rompe. Un pedazo se mete por el borde del short.
-¡Ah, está frio!- lo dice entre gemidos
-¡Pues claro que está frio, es un helado!
Y nos reímos.
-Bobo. Vamos, tómame, hazme tuyo.- gime cerca de mi oído. Mordiendo mi cuello. Maldito gato sensual
En se momento nos devoramos, le quito el resto de la ropa, él se coloca a horcajadas, totalmente desnudo, mordiendo su labio inferior, rojo, húmedo de mi saliva. Saca mi pene que está goteando, de lo excitante que es el momento.
-¿ansioso?
-Siempre es así contigo.- mi descarado esposo comienza a mover su mano de arriba a abajo, lentamente torturándome.
-vamos gatito, no juegues mas.- suelta una traviesa risa de esas que amo, sin dejar de mirarnos, se levanta, y perfila mi pene en su entrada, y se deja caer lentamente, sé que le duele un poco, pero aun así me reta a mantener la vista en sus ojos, y solo atino a cerrar mis dientes fuerte, para no envestirlo, los dos respiramos cuando siento si pequeño y redondo trasero chocar con mis testículos, señal de que mi pene está dentro de el por completo. Comienza a moverse en círculos, con un vaivén lento. Gotas de sudor resbalan por su hermosa carita, mojando los rubios cabellos que se pegan a su frente, que la tiene arrugada del placer, gotas que se pierden en la barriguita.
... Y ese dulce placer, está cerca. Key se mueve sobre mí, arriba y abajo, lentamente, feliz de ser amado. Hermoso. Estamos cerca y lamo sus pezones uno con sabor a menta y otro a Fresa. Menta. Fresa. Menta. Fresa. Menta...Fresaaaaa
ENDFALSHBACK
-Keroro.- tan perdido en los recuerdos esta que no note como mi gato estaba frente a mí, con una travieso sonrisa.
-¿un buen recuerdo?- me dice mirando asía abajo y como no si tengo una erección de campeonato.
-Tu sexy cuerpo.- nos besamos, alzo a mi rubio, y lo llevo a la habitación, que digo. Soy un adicto a hacerle el amor a Kibum.
-Mira Minho esto es hermoso.- el rubio mostraba un vestidito, rosa. Y es que la pareja se acaba de enterar que su bebe sería una hermosa niña.
-Kibummie, creo que ya llevamos bastante ropa.- y es que ya llevaba más de 3 horas comprando ropita, cobijas, y demás cositas para su bebe (http://1.bp.blogspot.com/-vyqT96q0LhA/T4FDeLPKjLI/AAAAAAAAIw8/xnC3Dlep3Jg/s400/conjuntos_bebe_ninas.jpg ).
-Oh mira que padre tan tacaño tienes princesa.- decía un rubio hacia su pancita.
-No es cierto princesa, yo comprare todo lo que me pidas. Se agacho Minho para hablar con su pequeña.
-Minho tengo hambre.- El moreno se puso de pie, y el rubio pasó sus brazos por el cuello del alto y beso a su esposo.
-Te Amo Kibummie, los amo.
-Lo sabemos.