Su suerte, mi desdicha...
Me llamo Isabella Miller y quiero contarles mi historia...
Todo empezo el dia en que decidi dejar mi natal Francia para ir a Estados unidos, la razon, creo que estaba buscando algo ¿El que? no lo se, pero algo me impulso a tomar ese avion, aquel 13 de septiembre. En estos momentos de mi vida no puedo decir si aquella decision fue buena o mala pero definitivamente cambio mi vida.
Al llegar a California de inmediato me puse a pensar hacia donde iria y como si estuviera predestinado, lei un cartel que decia New york. No lo pense mucho, compre un boleto para New york y en menos de un dia llegue a aquella cuidad bañada en luces. Me recordaba tanto a mi pais, que de inmediato me senti comoda pero cai en la cuenta de que no tenia donde vivir, aun asi eso no bajo mi optimismo y me dije a mi misma que ya mañana encontraria un departamento, no crei que fuera una tarea tan dificil y tambien pense que aquella tarea solo me llevaria unas horas... Grave error...
Las horas se convirtieron en dias, largos dias en los que yo vagaba por aquella cuidad en busca de un hogar, en cuanto mas caminaba por la metropoli mas menguaba mi optimismo dando paso a un sin fin de preguntas pesimistas. ¿Que pasaria si jamas encuentro un departamento? ¿Vagare por siempre por la cuidad? ¿Tendre que regresar a Francia?
El sol desaparecio junto con mi optimismo y dio paso a la fria noche que congelo todos mis sueños. Cansada de caminar y de vagar avente mis maletas que cayeron en un comodo rincon, me sente en el suelo para pensar en un plan B. Pero estaba tan cansada que lo unico que hice fue cerrar los ojos y entregarme a los brazos de morfeo.
El sonido de una puerta azotandose hizo que abriera de inmediato los ojos y para mi gran sorpresa ya habia amanecido. De inmediato me levante del suelo rogando para que nadie me viera y asi fue, en realidad la calle estaba vacia
-¡No la soporto!- aquel grito me regreso a la realidad, busque rapidamente a la persona que habia gritado y no fue muy dificil ya que era la unica persona- ademas de mi- que estaba en aquella calle. Era una mujer de vientantos años, cabello de un color marron y ojos de un centellante azul, perecia agobiada y algo perturbada, me quise acercar a ella para ver si la podia ayudar en algo pero tan pronto como me vio tomo sus maletas y se marcho dejando la puerta de una casa abierta, de inmediato me senti incomoda, ¿La habia espantado por mi aspecto algo andrajoso? No pude seguir pensando ya que el hermoso sonido de un violin lleno la silenciosa calle.
Curiosa, me acerque a la puerta que aquella mujer dejo abierta, note que aquellas dulces notas provenian del interior de la casa. Extasiada por las notas, sin pensarlo entre a la casa que era bastante espaciosa, con un estilo barroco exquisito. Admire la casa con asombro pero luego me concentre en el sonido que provenia de la planta alta. Subi rapidamente las escaleras para solo encontrarme con la sorpresa de que la casa era en realidad una mansion. Ante mi descubrimiento senti la necesidad de salir corriendo pero algo me detuvo.
¿Coincidencia? ¿Destino? llamenlo como quieran pero se que eso fue lo que me hizo sentir las intensas ganas de saber quien tocaba el violin con tanta maestria. Camine por aquel amplio pasillo para diriguirme hacia la habitacion de donde provenia tan delicado sonido, al estar frente aquella puerta abierta, contuve la respiracion, me asome con cuidado y la vi...
Una hermosa joven de baja estatura, cara simpatica, piel muy blanca, cabello negro rizado hasta la media espalda, sus ojos estaban cerrados y sus manos se movian con intensidad tocando aquel instrumento, cerre los ojos para disfrutar de la melodia pero esta se detuvo arruptamente. Abrio los ojos de golpe y me encontre con unos almendrados ojos esmeralda que me veian con curiosidad, me analizaban
-Buenos dias Doctora- sonrio con inocencia mientras hacia una simpatica reverencia. Yo me quede helada, ¿Acaso aquella chica era adivina?
-¿Como sabes que soy doctora?- pregunte interesada de saber el porque de aquella deduccion
-Sus manos tienen cortes, justo como los que tendria un cirujano, pero usted no es cirujano sino medico forense- dijo simpaticamente, y yo me quede atonita- ¿Como lo se?- ladeo la cabeza con un gesto de diversion- sus manos tienen cortes muy inusuales en las puntas de los dedos, son las marcas de una aguja, en la medicina forence hay una manera especifica de como cortar y coser un cuerpo asi que estas marcas coinciden mas con ese perfil que con el de un cirujano
-eres muy observadora- dije perpleja, ella solo sonrio mientras me volvia a analizar
-gracias doctora, espero que no se ofenda pero ¿Que demonios hace en mi casa?- sus ojos de color esmeralda se volvieron fieros y penetrantes, yo de nuevo me quede desconcertada
-yo vi como se iba una mujer...
-a se llama Alisson y era mi Watson- dijo mientras se masajeaba la sien
-¿Watson?- cuestione soprendida, la joven me miro fijamente, de pronto su rostro se ilumino con una sonrisa traviesa
-Soy una maleducada, Me llamo Evelyn Holmes, soy detective privado- de nuevo me quede boquabierta, aquella jovencita- que segun mis calculos solo tendria como mucho quince años- no podia ser detective, aunque eso explicaba lo muy observadora que era
-¿Detective? Pero si eres una niña- no disimule mi incredulidad, Evelyn solo torcio el gesto mientras chasqueba la lengua
-tengo 18 años, doctora- me miro casi con odio, yo me senti algo avergonzada, la estatura de Evelyn no rebasaba el 1.65, ademas de que sus rasgos aun eran algo infatiles
-disculpe- dije de inmediato- bueno fue un placer conocerla- ella solo arqueo la ceja- perdon por la intromision- pregunte al ver como me miraba
-para nada... Disculpe doctora ¿Cual es su nombre?- pregunto sonriendo con burla, un sonrojo se hizo presente en mi cara, yo no me habia presentado...
-soy Isabella Miller- dije timidamente mientras buscaba de alguna manera el pomo de la puerta
-¿Edad?- se acerco a mi invadiendo todo mi espacio personal- dejeme deducirlo, tiene 24 años
-si- de pronto sus deducciones dejaron de soprenderme, quiza eso era demasiado facil
-no es casada, no tienen novio...- torci el gesto algo enojada, ¿Como podia asegurar que yo no tenia novio?- lo se porque si usted tuviera novio no estaria en mi casa si no con el, aunque por su aspecto andrajoso debo suponer que no ha encontrado un lugar donde quedarse
-¡Wow!- exclame con sarcasmo, ella rio con diversion
Mi primera impresion de Evelyn Holmes fue que era muy inteligente y observadora, pero mientras mas hablaba con ella me di cuenta que solo era una jovencita arrogante que por alguna razon me desagradaba. Con toda la poca dignidad que me quedaba, gire sobre mis talones para retirarme del hogar de la detective
-¿Te vas?- pregunto con desesperacion
Es imposible que en tan solo minutos haya visto tantas facetas en una persona
-si, tengo que encontrar un departamento- sonrei amablemente
-Puedes quedarte aqui... si lo deseas- susurro
-No quiero que tengas problemas con tus padres y...
-vivo sola- ¡Claro! me tense completamente tratando de buscar alguna excusa, pero mientras mas rebuscaba menos encontraba, me rendi despues de unos segundos
-no quiero ser una molestia...- mi ultima defensa
-para nada- tomo mi mano con cariño. De nuevo la mire con sorpresa pero solo me limite a sonreir de igual manera...
Evelyn era una chica que era mas de lo que aparentaba, con el tiempo lo fui descubriendo, pero en ese instante no podia ver mas alla de lo que me dejaba ver. La segui hasta una gran habitacion que al parecer era de Alisson su Watson.
Aun no entendia que se referia a su Watson, pero luego cai en la cuenta de que ella se apellidaba Holmes. Rei ante mi descubrimiento, ella me miro de reojo para reir igual
-bien señorita Miller, la dejo para que descanse- hizo una reverencia, yo asenti mientras veia como la puerta se cerraba
Me acoste en aquella cama, aun no entendia que habia pasado, pero decidi no profundizar en tema, cerre los ojos para caer en un profundo sueño...
Al despertar esa misma tarde me daria cuenta de el porque de las cosas, habia caido en el juego de una jovencita pero no de cualquier jovencita. Una muy lista, observadora, temperamental jovencita...