Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

LA ESPADA DE POSEIDÓN por desire nemesis

[Reviews - 52]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

 

 

                                       ¡DEJA QUE ME ACERQUE!

 

 

 

 

 

 

Seto pidió ver al capitán. Cuando llegó a la cabina este le miró de mala manera pues no esperaba buenas nuevas del castaño.

 

¡Vengo a que me explique que clase de comportamiento es ese!—dijo el ojos azules.

 

¡Ja! ¿Y por que yo debería explicarte algo a ti?—preguntó el ojiazul.

 

¡Lo que ha hecho es una atrocidad! Joseph pudo morir por su estúpido interés en probar si lo que decía era cierto. ¿Cómo si no iba a sobrevivir la tormenta si no era agarrado de la cadena del ancla—dijo airado Kaiba.

 

¿En serio cree que puede reclamarme de esa manera? ¿Acaso cree que me importa el destino de su amiguito de tal manera que me sienta arrepentido de lo que le hice? ¡Tengo mis razones y no tengo porque discutirlas con vos! Creí que venía por algo verdaderamente importante pero si era eso haré que se lo lleven de nuevo—bramó el pirata.

 

¡Espera!—exclamó Seto, luego de un momento prosiguió—¡Hay algo que deseo discutir contigo que es quizás lo que esperabas! Queremos saber cual será el destino de mis hombres y mío—

 

Bueno, eso suena más razonable—dijo el otro—Verás, hay unos mercaderes…--y así explicó el futuro que esperaba a los navegantes que habían caído en sus garras.

 

 

 

 

 

 

 

……………

 

 

 

 

 

 

 

Joey supuso que algo malo había pasado al ver la mirada que Seto tenía al volver. Lo había dejado sobre su jergón de paja cubierto por una manta y había aporreado la puerta indignado por lo sucedido. El lo había entrevisto pues sus párpados pesados lo habían traicionado evitando que le disuadiera de tal desatino.

 

Se acercó medio adormilado sin sentir lo que le decía a sus marinos pero las caras de ellos denotaban que las nuevas que traía eran malas.

 

¿Qué diablos…?—preguntó el rubio.

 

¡Tú deberías estar durmiendo después de…!—dijo el capitán.

 

¡Deja eso para después y dime que pasó!—dijo el melado.

 

¿Qué quieres que te diga? ¿Qué se disculpó por lo que te hizo?—preguntó algo molesto Kaiba.

 

Es obvio que eso no lo hará. No me digas que eso es lo que fuiste a hacer. ¡Pensé que eras más sensato!—le retrucó Joseph.

 

¿De que lado estás?—preguntó el ojos azules y el otro se rió provocando primero que se enfadara un poco pero luego reaccionó un poco alegremente y sonrió. Luego recordó algo que lo hizo enseriarse de nuevo--¡Anda! ¡Dime que sucede! ¡Quiero saber! ¿Tengo derecho, no?—preguntó el ojos mieles.

 

No tiene que ver contigo—le aclaró el otro.

 

No importa. ¿Qué es?—preguntó Joseph.

 

Le pregunté que pretendía hacer con mi tripulación y conmigo—le dijo el serio capitán con una mirada sombría.

 

Después de unos segundos de sopesar si debía preguntar o no decidió hacerlo--¿Qué te ha dicho?—

 

El otro lo miró a los ojos—Hay unos tratantes de esclavos en el Golfo de Vizcaya—dijo el otro a modo de respuesta y el rubio sorprendido lo miró de hito en hito.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

………………….

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Estaban todos acostados en la bodega. Era noche cerrada del día siguiente al huracán. Joseph estaba agarrotado de frío, bajo la manta temblaba visiblemente y en la noche helada buscó algo que le diera calor. Seto que dormía a poca distancia del otro en un jergón igual descubrió de pronto que algo se le había metido en la cama.

 

Se despabiló en seguida y miró sorprendido al nuevo habitante de su lecho que por instinto de auto-conservación se apretaba sobre su pecho--¿Qué haces aquí?—le dijo estupefacto.

 

Me muero de frío. ¡Por favor! ¡Deja que me quede un ratito!—estaba medio adormilado al sentir esa fuente radiante cerca suyo todo su organismo se había relajado.

 

El castaño estaba en shock y solo articuló--¡Pero no es lo más apropiado! ¡Oye! Que…--pero se detuvo cuando se dio cuenta de que el otro estaba durmiendo plácidamente arrebujado en contra de él. Una sensación rara invadía al otro al ver la dorada cabeza y los brazos contraídos apoyados contra su pecho.

 

Decidió que si era importante para la salvación del otro no era tan urgente sacarlo de ahí y se durmieron juntos.

 

 

Notas finales:

y?

esto es puppy

no?

arigatou y ja ne

^^


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).