El día había llegado pesado & había seguido igual durante toda la tarde… Akihito tenía pilas de trabajo, & se sentía devastado. Eran las 02:30 am cuándo Akihito terminaba su trabajo, deseando llegar a su cama; No quería estar despierto cuando Asami llegara.
-Vamos, Aki. Solo es una cena.-Insistió Yú.
-Yú, de verdad que no, gracias.-Se corrió para seguir trabajando.
El moreno alto lo acorraló a una de las paredes. El miedo invadió a Akihito. No un miedo de esos que dices “¿Qué carajos me hará?” El miedo de Akihito era Asami… Asami se pondría furioso, si aceptaba la cena & si peor… Le hacía algo.
-A..Asami.-Susurró, viéndolo ahí, parado en el gran umbral.
-¿Ya has terminado?.-Preguntó con la garganta reseca, & sus ojos oscuros.
-S..sí.-Susurró.
El cuerpo del rubio temblaba sin parar… La impotencia que sentía lo hacía jadear. Quería golpear a Yú por ser tan terco, & a Asami… Por razones obvias.
-Lo siento.-Yú lo soltó suspirando, & se retiró.
Akihito recogió sus cosas, & fue detrás de Asami, ambos iban callados en el auto.
-¿Siempre te dejas tocar por todos?.-Preguntó, cuando ambos entraban en la casa.
-¿Qué cosas dices?.-Lo miró como si estuviese loco.
-Eso, te dejas tocar por todos.
-Ah, ¿& tu no?
-Yo hago lo que quiera. Tu no, & ahora estamos hablando de ti.-Dejó su traje en el sofá.
-Tú te follas a todos sin importarte los sentimientos.
-No hables idioteces, por favor, no lo tolero.-Gruñó.-Yo puedo hacer lo que se me antoje, de aquí, no soy el que se deja follar por todos.
-¿& yo soy el que se deja follar por todo el mundo?.-Se volteó a verlo.
-Pues… Si el saco te queda.
-¡Maldito hijo de puta!.-Iba a lanzar un puñetazo, pero el mayor detuvo el golpe con una de sus manos & con la otra, le dio una bofeteada bastante fuerte.
Akihito se soltó con fuerza, & corrió hasta su habitación. Cerró la puerta, echándose a la cama. Las lágrimas saladas hacían que su mejilla le ardiera aún más. El cuerpo de Asami se posicionó sobre él.
-Vete.-Sollozó.
Le sostuvo las manos por encima de la cabeza, & acercó sus labios a la mejilla que ardía en rojo.
-¡Vete, Asami, por favor!.-Gritó apretando los ojos, mientras sus lágrimas caían con rapidez.
Dejó varios besos en la marca que le había dejado.
-Vete.-Lo miró, encontrándose con sus ojos marrones rasgados, con un brillo oscuro.-¿No te das cuenta que todo me duele, qué me haces mal? Creo que para ti nada es suficiente… ¿No te das cuenta de todo el daño que me has hecho?
Asami lo besó en los labios, con una fricción segura.
-No, por favor.-Siguió sollozando.-Ya basta.
Lo llevó a la amplía cama, & Akihito quiso dejar de respirar.
-¿Basta de qué? Tú no quieres que yo me detenga.-Bajó relamiendo sus tetillas, mientras aún tenía apresadas sus manos por encima de su cabellera rubia.
-Sí, quiero que te detengas ahora.-Sollozó.
-¿Seguro quieres que me detenga?
Lo desvistió, & se desvistió él. Akihito se negaba a gemir, se negaba a sentirlo, a todo. Pero ahí estaban esos labios besando los suyos, esos malditos labios que lo besaban de esa manera para hacerlo caer en la trampa, & él lo sabía, pero ya no tenía fuerzas para luchas. & entre llanto & llanto, se dejó llevar.
Las caderas del mayor se impulsaban hacia delante golpeando su punto, haciéndolo sentir delicioso, pero mal, & largaba otro llanto junto a los gemidos. Las lágrimas eran absorbidas por besos, malditos besos. Su cuerpo era rodeado con tanta protección, esa que lo confundía, que lo quería hacer creer que un poco de amor había, pero era solo carnal. La adicción al sexo era lo único, Asami no sabía amar, & eso estaba claro. Sus caricias eran solo una táctica para llevárselo a la cama, solo lo ilusionaba.
El orgasmo los sorprendió a ambos… Jadearon con fuerza, cuando intentaban recuperar los ritmos cardíacos & respiratorios. Akihito nuevamente se sintió vulgar, & menospreciado.
Asami se levantó de la cama, riendo.
-Que me detuviera…-Se burló riendo.
-Te vi.-Susurró, con la voz ronca.
-¿Me viste qué?.-Preguntó, sin mirarlo mientras caminaba hacia el baño, aún riendo/burlándose.
-Te vi haciéndole lo mismo que me haces a mí.-Sollozó.-La vi a ella encima de ti, en ésta cama, en nuestra cama.
Vio el cuerpo de Asami quedarse completamente quieto, tenso.
-Si te cansaste de mí, me lo hubieses dicho. Yo podía irme, nada más simple que eso. Podría haberme levantado, dejar mis sentimientos e irme. Porque tú no sabes el dolor que me provoca éste amor no correspondido.
Asami no se movía, & Akihito se sintió insultado, {Más de lo que ya estaba.}
-¿No vas a decir nada?
-¿Amor no correspondido?
-Yo no debo estar aquí.-Se levantó.
-Akihito espera… Yo puedo…
-No, tú no puedes nada. Ya has hecho demasiado, & yo ya no puedo más, necesito una vida en serio, & no esto que me has dibujado.-Se cambió rápidamente, mientras Asami solo se quedaba ahí, viéndolo, pensando, paralizado, con el rostro sin expresión alguna.
Akihito corrió fuera… & decidió quedarse una semana en casa de Kou.
-¿No piensas salir?.-Preguntó Kou.
-Me voy, Kou…
-¿Qué, a dónde?
-Lejos, no sé. Prometo que te llamaré todos los días.-Levantó las maletas.
-No, Akihito. Debes aprender a vivir aquí, con Asami por ahí, debes acostumbrarte.
-Necesito irme Kou. Yo te agradezco absolutamente todo lo que has hecho por mi.-Lo abrazó con fuerza.-Prometo decirte donde estaré cuándo me instale bien.
-Sé que lo necesitas pero…
-Por favor, es mi decisión.
-Está bien.-Suspiró con tristeza.
Akihito caminaba solo hacia dónde debía dejar su pasaje, para subirse al avión, e irse lejos.
-¡Akihito!.-El hombre de traje llegaba corriendo.
-¿Qué haces aquí?.-Lo miró.
-Akihito…-Jadeó.-Me acosté con ella porque me estaba obsesionando contigo, cada vez te me hacías más necesario, quería comprobar que podía encontrar el mismo placer, el mismo sentimiento en otra persona, & no pude. & me asusté, porque esos sentimientos me ahogaban. Tengo miedo, muchísimo miedo & confieso esa debilidad. Necesito de tu calor todo el bendito tiempo & eso me frustra, & me puso los pelos de punta ver como el se te acercaba.
“Dame un tiempo para poderlo pensar, es que estoy rodeado de emociones que me ahogan. Pensé en decirte de intentarlo una vez más, pero, no quisiera comenzar de nuevo. ”
-Siempre es lo mismo.-Comentó furioso.-Siempre me envuelves de alguna u otra manera, no tienes corazón.
-¡Te necesito!.-Gritó.
-¡No vas a comprarme con esas estúpideces!.-Gritó, alejándose lentamente.
-Tú dices que el amor no es una estupidés.-Comentó desesperado.
-¿Tú me estás hablando del amor?.-Frunció el ceño tragándose los sollozos.
-El amor... Amor que siento cuándo rozo tu piel, cuándo tus labios me besan, cuándo te veo cocinar, cuándo te observo dormir.-Elevó la voz.
-No uses el verbo 'amar' si no sabes lo que realmente significa.-Limpió su rostro.
-¿& yo soy el que no tiene corazón?
-Pues... Si el saco te queda.-Soltó una risa lastimera.-Yo tenía un corazón, & se rompió.-Tomó sus papeles & mochila.-& todo fue tu maldita culpa, espero que lo sientas demasiado, & que algún día alguien te ame, & sepas amar.
-Akihito...
-Fue un placer haberte dejado llegar tan lejos... Suerte en ésta vida, adiós.-& se marchó.
"& si no quieres ni decir en que he fallado, recuerda que también a ti te he perdonado; En cambio tú dices "Lo siento, no te quiero." & te me vas, con ésta historia entre tus dedos."
-FIN.