-¿Cuántos años han pasado ya? –preguntó el rubio de cabello largo a su compañero al frente
-…-Ni siquiera respondió.
¿Por qué?
a) Le valía verga.
b) No le importaba.
c) Ni siquiera quería hablar con el rubio.
d) Todas las anteriores.
-… Oye, Gaara. Te estoy hablando.
-Ya sé. –respondió esquivo.
-¿Por qué no respondes entonces?
-Mira, Naruto –dijo con pesadez –Yo ni siquiera quería venir. Sai me ha obligado.
-¿Sai? –preguntó con un extraño calor en el pecho.
-Sí. Sai. –dijo al mismo tiempo que ponía los ojos en blanco.
-¿Estamos hablando del mismísimo Sai?
-Sí. Sai Shimura. Tu ex.
-¿Qué ha sido de él? –preguntó con una sonrisa boba
-Pues… no mucho, se ha deprimido bastante desde que lo dejaste por el Uchiha.
-Yo no lo dejé porque se me dio la gana. –Dijo afligido –Me obligaron a casarme con Sasuke.
-Pero claro. Si lo preñaste una semana antes de casarte con Sai. Cualquier padre te habría obligado.
-Yo estaba borracho –se excusó.
-Si hubieras amado a Sai como tanto jurabas y perjurabas, no lo habrías engañado de ninguna forma.
-Vale, que sí, yo amo a Sai con toda el alma. Y el hijo de Sasuke ni siquiera es mío.
-¿Cómo que no lo es? –el pelirrojo abrió sus ojos sorprendido –la vieja bruja de Mikoto le dijo a Sai “El nene es igualito a su padre”
-¡Vaya que lo es! –Dijo el rubio neutro –el niño y Suigetsu son como dos gotas de agua.
-¿Suigetsu? ¿El cara de piraña? –preguntó con los ojos como platos
-Ese mismo.
-Vaya. –dijo aún lívido.
-De todas maneras, Gaara, no he venido a hablar de mí, ni de mi vida personal. He venido para…
-Ya sé. –respondió de nuevo en tono cansado.
-¿Entonces? ¿Qué me dices?
-Que no. No volvería con Itachi aun teniendo un arma en la cabeza.
-¡Pero él te ama!
-Pero yo no. Dime, ¿tú volverías con alguien que te usó como reemplazo?
-…No… pero…
-Pero nada, Naruto. Itachi me utilizó para poner celoso a tu primo cuando terminó con él.
-Ahora él ha cambiado.
-Me da igual. Itachi jamás me quiso. Sólo me usó para olvidar a Deidara.
-…
-Además, ¿Por qué haces todo esto? ¿Tu esposito lindo te lo pidió? –dijo con su sarcasmo natural saliendo a flote.
-No es así, Itachi es mi amigo y está sufriendo demasiado por haberte perdido.
-No es mi problema. Que sufra.
-….
-Bien, ya que no tienes más que decir, me retiro. Provecho. Uzumaki.
Naruto se quedó temblando. ¿Dónde estaba ese niño dulce que había conocido?
Ah, claro.
-Itachi lo mató –sonrió con pena.
*//*//*//*//*//*//*//*//*//Hace 5 años. *//*//*//*//*//*//*//*//*//
En antaño, Gaara había sido uno de esos chicos de quienes te enamoras con sólo verlo, sus acciones, sus palabras, su delicadeza, su feminidad… Todo en él era perfecto.
Sin embargo, ahora no era más que un ser déspota lleno de rencor y odio hacia todo aquel que se le acercara a más de diez metros. Con la única excepción de Sai.
¿Qué fue lo que pasó?
Itachi Uchiha.
Eso pasó.
En la universidad, todos conocían a Itachi por ser el chico más guapo de ésta, tener el mejor promedio de su carrera y por haber conquistado a Deidara que por supuesto, era una explosión, la sensualidad e inteligencia hecha persona.
Todo el mundo adoraba al ItaDei, incluso ya los habían bautizado así, pero obviamente, no todo era miel sobre hojuelas. Deidara se había aburrido de Itachi, porque él una vez al tenerlo en sus manos, comenzó a descuidar la relación, hasta incluso evitaba a Deidara por los pasillos. Claramente, el rubio se enfadó muchísimo, así que en una de las múltiples reconciliaciones públicas Deidara hizo algo que no sólo quedaría en la mente de Itachi por un largo tiempo, sino que en la historia de la Universidad.
-Vamos Deidi –suplicó el Uchiha con un ramo de rosas naranjas en la mano –perdóname ¿sí?
-No. –dijo el rubio siguiendo su “diálogo”
-Anda Dei… -susurró en sus oídos
-Ya he dicho que no, Uchiha.
-Es la última vez que lo hago –Dijo Itachi un poco nervioso, eso NO era parte del guión.
-¡Que no! –gritó el rubio furioso arrojando el ramo al suelo.
-… Deidi…
-¡No me llames así! ¡Ya estoy cansado Uchiha! ¡Siempre que peleamos tienes que pedirme perdón frente a mucha gente para que yo quede como el malo! ¡Ya no te soporto! ¡Me evitas cada vez que puedes sólo para hacerte marketing de chico malo! Una buena relación no es así. –dijo más calmado. –Pero ¿sabes? Me da igual, ni siquiera llegué a enamorarme de ti.
-… Pero yo creí que…
-¿Qué por ser un Uchiha automáticamente debía caer a tus pies? –Dijo burlón –Tú no eres irresistible. De cualquiera manera, te dejo. Seguro tienes a varios babeando por ti. Nos vemos. –besó los labios del mayor con mucha suavidad y luego rio con sorna.
Nadie olvidaría la cara de Itachi Uchiha al ver el sensual trasero de Deidara Namikaze alejarse haciendo, con la mano, la seña más popular del mundo.
Jódete Uchiha.
*//*//*//*//*//*//*//*//*//*//*//*//*//*//*//*//*//*//*
-Y como idiota yo, voy y caigo. –dijo Gaara al mirar el cielo nublado. –pero que estupidez.