Capítulo 26
Papá.
Miré el techo nervioso. ¿Las mujeres se hacían estas cosas una vez al mes cuando estaban embarazadas? No quería saberlo, bueno, lo estaba descubriendo ahora, así que no había mucha diferencia.
-Relájate, Ji Yong.
El doctor me miró. Agradecía enormemente que fuera el doctor personal de la empresa, así que era de confianza. Además, le había pedido por favor que no se lo dijera a Yang, nosotros le diríamos… en algún momento. Me volteé y miré a Seung Hyun, él sólo tomó mi mano con cariño y me sonrió, se veía emocionado.
-Ji Yong, estás muy saludable, eso es muy bueno porque necesitas estar lo más sano posible, ya sabes que tu embarazo no es normal, así que entre más cuides de tu salud, mejor saldrá el día del parto –el hombre habló y luego me echó un gel en el estómago.
Yo miraba atentamente, se sentía frío y raro, pero no tenía ni idea para qué rayos era. Quizás era un cremita hidratante para que la piel se mantuviera suave y brillosa. Sí, eso debía ser. Lo miré y entonces el doctor acercó una cosa a mi estómago, ¿y ahora qué era eso? Lo pegó a mi estómago, y lo movió insistente. ¿Qué rayos? Estaba apretando levemente, ¿qué quería? ¡Estaba molestando a mi porotito!
Ahora mi miraba mi estómago… ¡si estaba mucho más gordo! ¿Cómo es que no me di cuenta de que estaba creciendo así? Ahora me vería deforme y feo. Necesitaba hacer una dieta. El doctor me sacó de mis pensamientos.
-Miren…
El doctor nos apuntó a la pantalla que tenía al frente. Yo miré fijamente. ¡Oh, oh! ¡Lo veía! Se veía el porotito. Se notaba su cuerpo y su cabecita formándose en la imagen. El hombre rió de repente, quizás por nuestras miradas perdidas a la pantalla. ¡No podía creerlo! ¡Tenía un bebé dentro! O sea, sí sabía que lo tenía, pero ahora se sentía tan genial verlo. Realmente lo estaba viendo. ¡Ya quería tenerlo en mis brazos! ¿De verdad tenía que esperar otros cinco meses hasta que saliera? ¡Porque yo lo quería ahora! Mis ojos se llenaron de lágrimas, no sé cómo en un principio pensé que sería terrible, sí era tan lindo, ¡tan lindo!
-¿Quieren oírlo? –El doctor nos miró. –Parece que les quiere decir algo.
Yo lo miré y entonces él apretó un botón en su máquina. Segundos después pude escuchar claramente sus latidos. ¡OH POR DIOS! Su corazoncito late muy rápido, bebé precioso. Tiré de la mano de Seung Hyun para decirle lo precioso que era, pero le vi secando sus ojos.
-¿Estás llorando?
-¿Y-Yo? No… se me metió un ‘tendremosunhijo’ en el ojo, nada más.
-10 de cada 10 papá lloran al oírlo –el doctor sonrió. –Ahora, ¿quieren saber el sexo?
-¿Se puede saber eso? –El rostro de Seung Hyun era un poema.
-Ese es obvio –el doctor le miró divertido. –En algún momento debes saberlo, ¿no? Y está entrando en los cuatro meses, ya está a un 99% seguro del sexo.
Seung Hyun abrió sus ojos grandemente, como si le hubieran contado que podía hacer algo casi imposible. Asintió lentamente maravillado y yo sonreír.
-Pues veamos… -el doctor miró y luego se volteó a Seung Hyun. -¿Qué quieres que sea?
-No me importa si es niño o niña, quiero que sea nazca sano –Seung Hyun le miraba casi a punto de llorar de nuevo. Yo apreté su mano.
El doctor miró una vez la pantalla y movió aquella cosa en mi estómago de nuevo, como si estuviera buscando algo en especial. Lo movió un poco a su derecha y entonces nos miró.
-Aquí está –apuntó a la pantalla, la verdad yo sólo veía su cabecita y hacia abajo su cuerpo algo oscuro. -¿No lo ven?
-¿Qué cosa tengo que ver? –Pregunté curioso.
Él se rió.
-Es niña.
Mi corazón latió como loco. Miré a Seung Hyun, este sonreía maravillado. Nos miramos unos segundos y luego nos pusimos a reír.
-Y les cuento que está muy sana –el doctor sonrió de nuevo. –Bien, Ji Yong, debes seguir alimentándote y cuidándote como ahora, nos veremos el próximo mes. No faltes.
-¡No lo haré!
El limpió mi estómago y luego me dejó ponerme de pie para irme. Tomé la mano de Seung Hyun y recibí la ecografía. La miré muchos minutos hasta que Seung me la arrebató.
-¡Yo también quiero conocerla, Ji Yongie! –Se quejó con un puchero y la miró mucho tiempo. -¡Va a ser la más linda!
-¡Claro que lo será! –Le sonreí y le quité la ecografía para mirarla. -¡Será igual a mí!
-Pero… también puede ser igual a mí –yo miré a Seung Hyun y luego sonreí.
-Claro que sí, mi amor –le besé repentinamente y me alejé de él para que nadie nos viera. –Tú eres precioso.
Seung Hyun sonrió y siguió caminando a mi lado hacia el estacionamiento.
-Sabes Ji –me habló cuando nos subíamos al auto. –Creo que el nombre perfecto para ella es Benedetta.
¿Qué? ¿Estará bromeando? Me giré a verle, sus ojos brillaban. Hablaba en serio. ¡Pero era un nombre horrendo! ¿Cómo le explico eso sin herir sus sentimientos? Es que parece nombre de los años 20 antes de cristo.
-¿Por qué le quieres poner así, Seung?
-¡Porque Benedetta era el nombre de una famosa arquitecta Italiana! Deberías ver una de sus creaciones, son geniales.
Ay no… ya iba a empezar…
-¡O le podemos poner Kazuyo! –A Seung le brillaron los ojos. -¡Es una creadora de muebles Japonesa! ¡OH NO, MEJOR ES LINA BO BARDÍ! ¡ES LA CREADORA DE MUEBLES MÁS GENIAL QUE EXISTE! OH, OH, O YA SÉ, JI YONG-
-¡Seung!
Él me miró atento. Maldición, no quiero decirle que no quiero ponerle ningún nombre de ninguna artista de muebles… pero, ¿cómo?
-Claro que sí… -ya después con el pasar de los meses lo olvidaría. –Pero ahora vayamos a casa, ¿sí?
-¡Sí!
~
Entramos lentamente a casa e inmediatamente los chicos se acercaron a toda velocidad a nosotros.
-¡¿HYUUUUUUUNG, CÓMO LES FUE?! –Ji Yong nos miraba emocionado.
-¡Cuéntennos cómo es! –Daesung cargaba a Alex quien reía mientras nos miraba.
-Pero pasen, no se queden en la puerta –Young Bae cerró la puerta y nosotros caminamos hasta que nos sentamos en el sofá grande.
Seungri se sentó entre nosotros y Dae con Young Bae se sentaron a los costados mirándonos. Yo saqué la ecografía, la iba a mostrar, pero Seungri me la quitó de las manos tan rápido como la elevé.
-¡TAN CHIQUITO! –Seungri miró la eco. -¡NO PUEDO CREER QUE LO TENGA AHÍ DENTRO, PRONTO TENDRÁS UNA PANZOTA!
-¡Seungri! –Le regañé. -¡No tendré panzota, idiota! Haré dieta.
-Pero Ji Yongie, el doctor dijo que te tenías que alimentar por dos –Seung Hyun abrió mucho sus ojos.
-Sí, Seung, pero es que si sigo comiendo pareceré bola.
-Pero serás una bolita linda.
-¡Seung!
-Seungri, déjame verlo –Young Bae extendió su mano.
-No, tú no –Seungri le miró y luego le hizo un desprecio. –Tú no por idiota.
-¿Todavía estás resentido por lo de esta mañana? –Le miré confundido.
-¿Yo? No, cómo se te ocurre. Eso es par inmaduros. Además, no tengo por qué estar enojado. JAJAJAJAJAJAJA
-¡Quiero verlo! Daesung intentaba mirar, pero Seungri no le dejaba.
-Es verla –Seung Hyun comenzó.
-¿Qué? –Todos se nos quedaron mirando. Yo elevé mis hombros y luego sonreí.
-Es mujer.
-¡HYUNG! –Seungri sonrió grandemente. -¡AHORA TENDREMOS UN HOMBRECITO Y UNA NIÑITA EN CASA! ¡QUÉ LINDO! ¡QUÉ LINDO!
-¡Felicidades! –Young Bae nos abrazó contento.
-¿Escuchaste eso, Alex? ¡Tendrás una hermanita! –Daesung tomó las manitos de Alex y este se reía. -¡Tendrás que cuidar de ella!
-¡Qué lindo! ¡Habrá una chica en casa! –Seungri habló. -¡Hace muchos años que no hay una chica en casa!
-Eso desde que tú te enamoraste de Young Bae –comentó Seung Hyun de repente. –Porque antes llegabas con muchas mujeres… a veces conocía tres novias tuyas al mes…
-¡Seung Hyun! –Le hice callar antes que siguiera, su rostro nuevamente era un poema.
-¿Si, Ji Yongie?
-¿Yo tenía tantas novias? –Seungri se rascó la cabeza. –Creo que te equivocaste de persona, Hyung… jeje
-Definitivamente eran tus novias… estuviste con casi todas nuestras bailarinas, recuerdas que-
-¡Seung!
-¡Hyung, tendrás una hija! –Seungri cambió el tema. -¡Pero que hermoso!
-No sé por qué siento un aura asesina en este lugar –Daesung miró a Young Bae y este tenía casi un tick en el ojo. Claramente no era genial que tu novio hubiera sido un experto conquistador.
-¿Y ya saben qué nombre le pondrán? –Seungri intentaba cambiar de tema, pero justamente ese tema no quería recordárselo a Seung Hyun.
-¡Benedetta!
-¿Qué?
-¡HAY QUE ALIMENTAR A ALEX! –Dije antes de que los demás le dijeran a Seung Hyun que era un nombre horrible y lastimaran sus sentimientos.
Ya después sabría cómo hacerlo cambiar de opinión, pero sí sabía que decirle que era horrible no era la forma. Daesung asintió y sentó a Alex en su silla de comer frente al sofá grande y fue a la cocina.
-¿Anduviste con todas nuestras bailarinas? –Young Bae preguntó de repente.
-H-hyung… -Seungri le miró asustado. –No… ¡Claro que no!
-No me mientas –Bae le miró serio. –Sé cuándo mientes.
-B-Bueno… con la mayoría…
-¡Ya ves lo que haces! –Le susurré a Seung Hyun, este elevó sus hombros.
-¿Y si estuviste con tantas mujeres porque viniste a mí?
-Pues, ¿no es obvio? –Seungri le miró y luego sonrió. –Porque me enamoré de ti. Ciegamente. ¿Qué puedo hacer? Mi corazón casi se me salía del corazón cuando te acercabas, así que al final sólo lo dejé salir y aquí estamos, felices por la vida, tú y yo, dándonos amor todos los días. Aunque yo no tengo sandía ni anillo, pero ya que, tenemos amor al fin y al cabo.
-Tonto –Young Bae se rió y tiró del brazo de Seungri para que quedara sentado en sus piernas. –Te amo.
-¡Ya está!
Daesung me pasó la comida y entonces yo la revolví un poco y con la cuchara chiquita comencé a darle la comida. Alex jugaba con uno de sus peluches pequeños y abría la boca para recibir la comida cada vez que se la daba.
-Oigan… -Daesung habló de repente. –Saben, estaba pensando y… bueno… no sabemos la fecha de nacimiento de Alex…
De repente se creó un silencio.
-Y comienzo a pensar que está cerca de cumplir 1 año, porque ya da dos pasos solos… y bueno… me gustaría que le hiciéramos una fiestita de cumpleaños o al menor darle un pastel, pero no sabemos el día en que nació…. Y si vamos a ver su registro al gobierno, quizás la policía lo sepa y…
-Tienes razón… -Miré a Daesung unos momentos.
-Hyung, yo no quiero entregar a Alex –Seungri nos miró, terriblemente serio. –Si vamos a la policía, lo más seguro es que lo lleven a un hogar, y no quiero eso, esos lugares son horribles. Para mí es mi hijo, tanto como para ustedes, ¿cierto?
-Sí…
-Pues, el día de su cumpleaños será el día en que llegó a nuestras vidas –Seung Hyun habló de repente. Nosotros le miramos. –El día en que lo conocimos, ese día será el día más importante para nosotros y para él. Así que ese día compraremos pastel y globos.
-Seung… -le miré y luego le regalé un beso en la mejilla. ¡Podía ser tan hermoso!
-El día en que lo conocimos fue… ¡El día de San Valentín!
-¿Por qué pasan tantas cosas el día de San Valentín? –Pregunté entre risas. Ese día también era nuestro aniversario.
-Las cosas buenas pasan los Catorce de Febrero. –Young Bae habló.
-En esas fechas siempre hay sexo desenfrenado, y-
-¡Seungri! –Todos le gritamos al mismo tiempo.
-Papá.
¿Qué…?
Todos nos quedamos en silencio. Un silencio mortal.
Miramos hacia adelante, Alex sonreía grandemente con su peluche en sus manos y nos miraba entre risas con la comisura de sus labios sucia. Mi corazón latía con fuerza y estaba seguro que los demás estaban igual.
-Escucharon… eso… -Young Bae miró a Alex.
-¿No dijo lo que yo creo que dijo? –Seungri le miró atento.
-Me da algo… -Daesung nos miró y luego a Alex.
-Me siento viejo… -nosotros miramos a Seung Hyun. De todo lo que podía decir, ¿decía eso? –Viejo, pero feliz…
No tenía sentido, pero eso no era lo importante ahora.
-¿Qué dijiste, mi amor? –Alex sonrió.
-Pa… -abrí mucho mis ojos. –Pá.
-¡OOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOH!
-AAAAAAAAAAAAAH, LO DIJO, LO DIJO, SU PUTAMADRE –Seungri se puso de pie.
-¡NO PUEDO CREERLO! –Daesung sonreía grandemente.
-¡FUE SU PRIMERA PALABRA! ¿LO EYERON? –Hasta Young Bae parecía desbordar felicidad.
-¡ME DIJO PAPÁ! –Seung Hyun sonrió.
-¿Eh? –Seungri miró a Seung Hyun. -¡Me dijo a mí, lo escuché!
-¡No fue para ti, Seugnri! –Daesung le regañó. -¡Estoy seguro que era a mí!
-¡Cállense todos! –Los callé. -¡Lo dijo mirándome a mí!
-¡Yo creo que sintió mi instinto paternal y me decía a mí! –Young Bae interfirió.
-¡YA CÁLLENSE! –Los hice callar y me puse de pie en frente de Alex. -¿Cierto que me lo dijiste a mí?
-¡No Hyung, tú tendrás tu hija, ella te dirá papá! –Seungri se metió se puso frente a él. -¡Alex me lo dijo a mí!
-¡A ver! –Seung Hyun se puso de pie y nos separó. Dae y Bae también se acercaron. –Arreglaremos esto de manera madura.
-¿Cómo? –Bae le miró.
-Esperemos a quién se lo dice primero.
-¡Vamos, dímelo, Alex!
-¡Nos les hagas caso, bebé, dímelo a mí!
-¡¿Quién es papá?!
-¡Alex, aquí, mi amor!
-¡Alex, yo soy el mejor!
Alex parecía reírse por todas nuestras caras casi encima de él.
-Papá… -dijo mirándome.
-¡JÁ, EN SUS CARAS! –Me puse a saltar. -¡Ese es mi bebé!
-Papá –esta vez miró a Seungri.
-¡ESE SOY YO!
-Papá… -se rió mirando a Daesung. –Papá… Papá… -Miró a Seung Hyun y Young Bae sonriendo.
-Ya que, supongo que nos lo dijo a los cinco –Seungri dijo sonriendo.
-Chicos –Young Bae habló mientras secaba sus lágrimas. –Nuestro bebé está creciendo.
-Nos dijo papás –Daesung sonrió grandemente. -¡Se siente tan gratificante!
-Creo que soy feliz –dije mirándoles. –¡Son la mejor familia que pude tener!
-¡Ay, Hyung! –Seungri me abrazó con fuerza. -¡Me harás llorar!
-¡Abrazo grupal! –Daesung dijo sonriendo.
Inmediatamente sentí a todos abrazándose a mí y entre sí. Realmente era gratificante.
-Papá.
-Me encanta oír eso –Seung Hyun sonrió.