Vacaciones… anheladas vacaciones, la kiseki no sedai no habia hecho nada mejor que ir a vacacionar a la casa de su único amigo. El cual tenía su departamento para él solo, sin ningún adulto que estuviera a cada rato diciéndoles que hacer.
Adjudicarse la casa del moreno pelirrojo se había vuelto una agradable costumbre después de que hubieran cesado las riñas. No era sorpresa para kagami taiga llegar un día y ver a mura con himura devorando lo que tuviera para comer o encontrar aun reservado emperador durmiendo plácidamente en su cama, o hasta llegar en las tardes después de su empleo de medio tiempo y encontrar aun rubio arremetiendo contra su sombra, de solo recodar aquella escena hacia que le tiritara el cuerpo de los nervios.
Y es que por dios no tenían respeto.
Ni hablar de aomine con midorima, esos dos ya ni respetaban la palabra huéspedes, en su piesa había mas ropa de ellos que del tigre.
Ahora cuatro chicos estaban tranquilamente viendo una película… ¿Dije tranquilamente?, bueno dos de ellos estaban en su propio mundo disfrutando de ella, los otros dos aún se preguntaban cómo diantres habían aceptado ver aquello, estaban tiesos de la pura vergüenza ni siquiera miraban a su compañero de al lado menos el espectáculo en vivo que tenían enfrente.
La película ya había terminado y ambos suspiraron de alivio teniendo un cojín en cierta parte de su cuerpo donde la película ya había hecho su trabajo.
–¿Y chicos les gusto?- pregunto el coqueto rubio teniendo en sus piernas a su novio. Ambos lo miraron rojos… y no respondieron – yo creo que si – dijo riéndose recibiendo dos cojines en la cara, ambos chicos se levantaron y se fueron a la habitación de kagami.
–¿Como pudimos ver algo así? – decía uno tratando de calmarse, más bien tratando de calmar su parte baja, trataba de pensar en otra cosa pero las imágenes se le venían una y otra vez a su mente siendo imposible esa tarea – ¡demonios!
–Midorma… será mejor que… vayas al baño y yo me quedo aquí… - dijo entrecortadamente pues él ya había comenzado a sobarse por encima del pantalón, el peliverde abrió los ojos inmensamente al ver aquello
–¡Aomine! ¿No te puedes aguantar?
–Tu si quieres aguanta – dijo sentándose en el suelo desabrochándose el pantalón – yo no aguanto más me duele – saco su miembro, cerró los ojos y lentamente empezó a masturbarse no importándole que Midorima aun estuviera en la habitación.
Se sorprendió cuando escucho que el de lentes cerraba la puerta y caminaba hacia otro rincón de la pieza, se hincaba en al suelo y hacia exactamente lo mismo. Si Daiki podía ¿por que el no?... la película los había dejado prendidos a ambos y el pensar que se podría aguantar ni el mismo se lo había creído, saco su miembro y llevo ambas manos a este con una jugaba con sus testículos mientras que con la otra pasaba su dedo por la punta , subía y bajaba por toda la extensión, de apoco los movimientos de ambos se hicieron más apresurados, sacando sonoros gemidos de sus bocas que no se molestaron en reprimir, intensificaron mas el movimientos de sus manos sintiendo el pronto orgasmo.
De pronto escucharon tocar la puerta, ambos se asustaron pero no por eso dejaron aquello…
–¿Chicos están ahí? - “¿Ka…kagami?... ¿cuándo volvió?” pensaron los dos
–Ss….si – dijo el peliverde como pudo, tratando de que su vos no saliera muy ahogada–
–midorima… ¿esta aomine contigo?.- trato de abrir la puerta – ¿porque está la puerta cerrada?
–si… Taiga estoy a…qui…es que estamos ocupados corri~~endo la cama – se mordió el labio para atrapar el gemido que hubiera salido si no lo hacia.
–¿Se les perdió algo, Necesitan ayuda? – cuando escucharon eso ambos se imaginaron recibiendo “ese” tipo de ayuda de parte del pelirrojo, que aquellas manos que se encontraban en su miembro no fueran las suyas sino las de kagami y por qué no otra cosa también, con esos pensamientos se corrieron, dejando salir todo el semen en sus manos trataron de regular la respiración y se miraron no dando crédito a lo que habían hecho – chicos?
–No te preocupes hyung ya terminamos salemos enseguida – hablo Aomine ya que midorima se encontraba en shock y no se movía, se quedó en silencio y escucho que kagami se alejaba tomo un toalla que estaba cerca y se limpió. Una vez listo camino hacia el peliverde – oye toma – le dejo una toalla y se alejó un poco hasta que escucho la vos de shintarou
–aomine~… - dijo despacito mirando el suelo – me corrí… pensando en él – “en él” pensó “¿se refiere a kagami?” sonrió para sí mismo por lo sincero que era y comprendió que se sintiera mal.
–jajaja no te preocupes – le dijo riéndose encontrándose con los inseguros ojos verdes – Bakagamik tiene la culpa, por preguntar si nos ayudaba en un momento así...- midorima sonrió mas tranquilo. Definitivamente kagami no tenía la culpa pero si lo miraba de “ese” punto de vista sí, kagami tenía toda la culpa…
~*~
Había pasado una semana después de aquello, una semana teniendo sueños extraños con el pleirrojo como protagonista, una semana en la cual no podían ni mirar los ojos fuego que los quemaba por dentro, una semana masturbándose pensando en él y en los sueños que habían ido más allá de un simple toque de manos.
Ahora se encontraban ambos solos en aquel departamento pues todos habían decidió salir, pero ellos no estaban en condiciones de hacerlo, debido a que el último sueño que habían tenido, los tenia devastados. ”Los dos juntos a su “querido amigo” en su habitación tratando de fundirlo mientras el mayor de deshacía por el placer que aomine y midorima le otorgaban”
–Esto está mal – hablo midorima rompiendo el silencio
–Si estamos mal... - dijo aomine y los dos suspiraron con resignación de pronto escucharon la puerta abrirse… era kise
–Disculpen chicos es que se me quedo mi celular – corrió a su habitación y después se apareció de nuevo por el comedor e iba a irse pero se detuvo – ¿que les pasa? Están enojados con kagami-chii? – pregunto preocupado pues había notado la lejanía que estos dos habían tenido con el tigre
–No, no es eso?- dijo midorima – es solo que … - se quedó callado
–Miren no sé qué es lo que les pasa con él, pero deberían hablarlo, saben que kagami haría cualquier cosa por ustedes, será gruñón y todo lo que quieran pero este último tiempo lo hemos conocido y es bastante sensible anda bajoneado porque no sabe qué fue lo que hizo para molestarlos– y asi como llego se fue dejando a los otros dos pensando “haría cualquier cosa por nosotros”, definitivamente esta frase tomo un significado diferente
–¿y?... ¿deberíamos decirle?- pregunto aomine
-Ohh si claro.. “Sabes kagami te deseo, quiero tener sexo contigo y si quieres podemos agregar aomine, en la misma pieza o donde sea, ¿te parece?”… ¿algo si dices tu? – le dijo dejando con la boca abierta al moreno
-Algo así pero no tan directo – dijo y ambos volvieron a suspirar, escucharon de nuevo que la puerta se abría pero esta vez ni se molestaron en mirar – ¿que se te quedo esta vez?
–A mi nada...- lo dos voltearon bruscamente en el sillón al reconocer esa vos – porque no quisieron salir con los chicos? – pregunto sentándose en el sofá enfrente de ellos
–N..no teníamos ganas… disculpa Kagami creo que me iré a mi casa – hablo midorima y se levantó para retirarse seguido de Daiki
Kagami espero un poco camino a la puerta cerrándola de un portazo – Ahora mismo me van a decir que es lo que les pasa conmigo – los dos se voltearon a verlo –¿hice algo que les molestara? – pregunto con su carita triste por lo que Daiki y shintarou se sintieron mal pues su Kagami no sabía nada de las tonteras que pasaban por sus cabezas
–¿Taiga quieres hacer un trio con nosotros? – hablo el moreno dejando helado a kagami y a midorima pensando “y yo era muy directo?”
–¿Perdón?...- lo primero que se le vino a la cabeza era imposible así que lo descarto - un trio de qué?
–ya sabes – hablo aomine. Ya había hablado no había vuelta atrás – tú, yo, midorima… aquí, ¿qué te parece? – ambos estaban muertos de los nervios, pero trataban de no demostrarlo.
Ambos veían como la sorpresa, el susto, la incomprensión y total desconcierto pasaba por el rostro de kagami, pero aun así no había una negativa, eso algo debía significar ¿no?. Aomine se decidió por la primera carta.
El moreno se acercó y poso detrás del pelirrojo. Tomándolo de la cintura, sonrio y e relajo al sentir la rigidez en el cuerpo de taiga, sin duda su tacto no le era del todo desagradable.
–Vamos Taiga – de apoco lo fue guiando a la habitación, siguidos de cerca por el peliverde que no perdía detalle.
Aomine le hablo aloído tensando por completo el cuerpo del pelirrojo, paso su legua delicadamente por su cuello llegando hasta el lóbulo de su oreja donde la mordió sacando un pequeño gemido de la boca de kagami, este cerro los ojos.
No negaría que sentía una gran atracción por ambos, pero ni en sus sueños más locos se habían imaginado estando con los dos, los volvió a abrir cuando sintió que otra lengua pasaba por su cuello. Midorima se había acercado a ellos y ahora besaba delicadamente su cuello”¿cuándo se había sacado la camisa?” se preguntó. Pues el peliverde estaba a torso descubierto, llevo una de sus manos a su pecho, midorima no se aguantó más y lo beso, mordiendo ligeramente su labio inferior para abrirse paso en aquella boca que tantas veces había besado en sus sueños pero que ahora era infinitamente mejor, sonrió al sentir que Taiga de manera torpe le correspondía, sus lenguas se entrelazaban jugando una con la otra.
Aomine le había terminado de desabotonar la camisa negra al pelirrojo y se la retiro delicadamente besando sus hombros y cada parte de su espalda, estaba embelesado, el físico de Taiga era más que atrayente. Volvió a subir y besar a su cuello succionando en ciertas partes.
midorima ahora besaba y dejaba pequeñas marcas por todo su torso, así que el pali azul giro su rostro y beso con brusquedad aquella deliciosa boca, escuchando un leve gemido de kagami por aquel movimiento tan brusco.
–Vamos a la cama – dijo el peliverde arrastrando con él a kagami.
quedo sentado en la cama, abrió las piernas dejando al tigre sentado en medio dándole la espalda, aomine se sacó la camisa y los pantalones quedando solo en ropa interior y volvió a posarse encima de Taiga mientras midorima torturaba cada una de sus tetillas y con su boca devoraba su cuello ”Mm~ mido… midorima no…ahh~~ dejes marcas” hablo como pudo el pelirrojo, sus sentidos se nublaron cuando sintió la mano de aomine en su miembro moviéndola por encima de la tela ”chicos.. yo creo…” – shhh- lo hizo callar Daiki
–No pienses en nada, solo gime para nosotros – lo beso, sus manos se fueron a su cinturón, retirándole por completo el pantalón y la ropa interior – kagami eres hermoso!! – lo volvió a besar y de apoco fue descendiendo por su cuello, su pecho, su abdomen hasta llegar al ansiado miembro del mayor, donde dio una pequeña lamida en la punta “mmg…. Da…daiki~ ah~” gimió su nombre lo cual hizo que su propio miembro creciera en tamaño de lo excitado que estaba.
Comenzó un movimiento lento con sus manos mientras miraba el rostro de extrema excitación de su presa, vio detrás a midorima y ambos sonrieron, aomine llevo su boca al pene de su taiga cubriendo toda la extensión
–Ahhh~~~ - gimió, llevo su mano al cabello de aomine y los apretó con fuerza – ahh~… daiki - sintió que lo tomaban del cabello bruscamente y lo boletaban para prácticamente midormia violar su boca, trato de concentrarse en contestar el beso, lo que resultaba un poco difícil teniendo en cuenta que el moreno subía y bajaba con su boca en su pene mientras sus manos jugaban con sus testículos, mordió inconscientemente a midormia cuando sintió un dedo del moreno rosar su entrada –ao… de… Detente …me .. me voy a correr~ – Daiki detuvo su trabajo, era muy pronto para que lo hiciera aún quedaba lo mejor subió de nuevo y lo beso dándole a probar su propio sabor.
Delicadamente lo levanto y lo puso en cuatro quedando kagami frente a frente con midorima.
Aomine se sacó lo último que le quedaba de ropa y se ganó atrás del pelirrojo rosando su miembro con su entrada, acaricio el trasero suavemente y llevo una mano a la boca de Taiga para que los ensalivara, cuando los sintió lo suficientemente lubricados los retiro y lo dirigió a la entrada del chico, adentro el primero sin mucha dificultad.
Kagami estaba nervioso no le dolia pero era molesto, tampoco se concentraba mucho pues midorima estaba esparciendo besos por todo su rostro se afirmó en sus hombros y llevo su labios a al oído del pelivere “sácatelos” le dijo mordiendo suavemente su oreja.
shintaro sonrió por aquello se levantó y termino por sacarse toda la ropa quedando en las mismas condiciones que aomine y taiga , se sentó nuevamente y al hacerlo kagami llevo su mano al pene erecto del maniático de los horoscopos que reclamaba ser atendido, dio un beso en la punta y pequeñas lamidas por toda la extensión besando con gula sus testículos – hazlo~… – pidió midorima ante la expectativa de tener esa caliente boca envolviendo su palpitante hombría.
El tono casi desesperado causo la riza de kagami. volvió a darle atención a su miembro pero esta vez se lo metió completo en la boca jugando con su lengua – si… si ~ ahh~ - Midorima llevo su mano a los cabellos de taiga para marcar el ritmo que él quería siendo obedecido inmediatamente.
aomine le estaba costando contenerse quería meter su miembro en la pequeña entrada de su pelirrojo y morir dentro de él, ya llevaba el tercer dedo y estaba lo suficientemente dilatado le dio una mirada rápida a midorima y este entendió, tomo el rostro de kagami, lo levanto y lo beso, el peliverde sintió el momento mismo en que su adorado tigre fue penetrado con fuerza por aomine y el gemido de dolor de taiga murió en su boca.
–Lo… lo siento– dijo el peli azul besándolo por toda la espalda mientras esperaba que se acostumbrara, a Taiga le había dolido sí, pero sabía que solo sería un momento, dejo de besar a midorima y volteo su rostro para encontrarse con el de aomine, roso su labios en una casto beso
-no.. te preocupes muéve… ahh~~- aomine había sacado su miembro y volvió adentrase con aun más fuerza repetidas veces,Taiga se concentró en el pene de midorima que aun reclamaba atención y se lo llevo completo a la boca comenzando a succionarlo, siendo un acto desenfrenado de los tres.
aomine por su parte quería partir en dos a taiga, la exquisitez de sus paredes calientes apresando su miembro lo tenían cegado de placer , dejando salir sonoros gemidos de su propia boca, sentía el orgasmo cerca así que llevo su mano al miembro de Taiga para comenzar a masturbarlo.
Kagami estaba completamente excitado aomine con cada embestida golpeaba el punto exacto que lo volvía loco, su cuerpo ya podía sentir los próximos espasmos y la oleada de placer.
Supuso que aomine estaba a punto de correrse y él estaba en las mismas por lo intensifico un más las succiones con su boca y se ayudó con sus manos, en cosa de segundos aomine se corrio dentro de taiga, este en la mano del moren y midorima en la boca de kagami donde este último se tragó hasta lo último.
aomine salió con delicadeza de aquel esculpido cuerpo y este cayó rendido a un lado de la cama, daiki gateo por encima de él lo dio vuelta y beso con dulzura ”gracias~” le sonrió
–No hay de que, fue genial – hablo Taiga una vez recuperando el aliento
–No hemos terminado aún – hablo Midorima recuperándose de su propio orgasmo, kagami se incorporó y gateo hasta el pleiverde – pero si te duele aún… podemos esperar – obviamente no quería eso, quería introducirse dentro del y correrse las veces que pudiera dentro de su taiga.
El pelirrojo le sonrió con ternura por pensar en él, le dolía como el infierno, pero no quería que se quedara sin disfrutar se sentó como pudo encima de midorima con ambas piernas a sus costados.
– hagamos que despierte – dijo juntándose más hacia midorima rozando ambos miembros, se habían corrido recién por los que sus penes habían vuelto a la normalidad unos movimientos más y su miembros habían cobrado vida de nuevo, aomin se les unió y levanto al pelirrojo tomándolo de las piernas.
kagami ya había sido preparado por aomine así que no había necesidad de hacerlo nuevamente midorima tomo su pene y lo puso en la entrada de Taiga y aomine lo fue bajándolo lentamente – ahh~~ - gimió al sentirlo bien adentro, midorima lo acariciaba por sus costados hacia abajo dejando sus manos en su trasero y tomándolo con fuerza, mientras que aomine se puso nuevamente detrás de él besando y succionado todo lo que tenía su paso, sus manos nos dejaron piel sin recorrer, tetillas sin torturar.
kagami empezó a moverse lentamente hacia arriba enterrándose nuevamente chocando con la ingle de midormia “mas… más rápido… nhg… Taiga” pidió entre gemidos el pleiverde, y así lo hiso.
Estaba exhausto, pero aomine lo tomo de las caderas y lo ayudo, midorima estaba por venirse pero quería que kagami también alcanzara de nuevo el orgasmo tomo su miembro y le presiono la punta ”no….shin~….nhg ..ya… me voy…aahh~~ ” , lo masturbo un poco y se vino en la mano de midorima cayendo rendido en su hombro, el pleiverde rápidamente aparto a aomine y recostó a kagami en la cama quedando encima de él disfrutando de como su miembro era apresado por el orgasmo reciente del pelirrojo él estaba cerca del suyo así que le dio un par de estocadas más y se vino dentro de él cayéndole encima, estuvo un rato así hasta que kagami se quejó “mi…midorima~”
– lo siento – se salió con cuidado de él recibiendo un quejido de kagami al sentir el vacío
Kagami quiso levantarse, pero un dolor para nada pequeño en su parte baja, le hizo replanteárselo – creo que no podre moverme en un buen tiempo – Daiki tomo el cobertor de la cama que estaba en el piso y lo tapo , pero no lo miro cuando lo hiso lo que preocupo al tigre – ¿que tienes?
–yo… nosotros lo sentimos – dijo midorima, kagami los vio y se veían avergonzados – nos… dejamos llevar y … -
–Esperen déjenme preguntarles algo? – los dos lo miraron y asintieron – se arrepienten de esto?.. Sean sinceros – les dijo sentándose en la cama con la ayuda de midorima – los dos negaron con la cabeza – ven .. yo tampoco me arrepiento de nada, si no hubiera querido no los habría dejado y punto – les sonrió amablemente siendo correspondido – ahora ayúdenme para ir a lavarme antes de que llegue alguien –les dijo con una sonrojo que competia con su cabello.
–No creo que lleguen hoy – dijo aomine de la nada – ya es tarde y porque no descansamos.
Midorima no espero respuesta y se acomodó a su lado, kagami sintió un ligero calor en el pecho cuando, el moreno también se acuesta a su otro lado y lo abraza protectoramente.
Los minutos pasaron y simplemente no había podido conciliar el sueño, aomine en su espalda y midorima en frente, no dejaba de pensar en lo que había pasado… en lo que el dejo que pasara, siempre había encontrado a aomine atractivo a midorima interesante, pero, ¿que era lo que en realidad sentía? , pensar en aquello le dio miedo he inconscientemente se acurruco entre los dos sintiendo el agarre aún más firme de sus dos amantes, como si tuvieran miedo de que escapara. Con un sentimiento que hasta ese momento desconocía se dejó llevar por la paz y el calor que le emanaban sus dos personas especiales.
~°~
Ya habían pasado tres meses de aquello y dos personitas se encontraban solas en el departamento esperando a otra que les había robado el sueño desde hace ya un tiempo. Con diplomacia al terminar las vacaciones habían echado olímpicamente a toda la tropa de mantenido.s en ese departamento ahora había solo lugar para ellos.
–¿Porque no llega? – dijo un malhumorado aomine
–No te preocupes se retrasó un poco porque kuroko le pidió ayuda para no sé qué cosa- le respondió el peliverde con tranquilidad pero en el fondo estaba igual o peor que Daiki
–Ese kuroko es un acapara tigres…- de pronto se escuchó que habrían la puerta dejando a la vista a su queridísimo pelirrojo
–Hola chicos, perdonen me retrase un poco- cerro la puerta, dio tres pasos y tenía a midorima detrás de él abrazándolo y aspirando su aroma – hola shin-chan – sonrió miro a aomine y este lo miraba extraño
–¿Qué les pasa?
-No nos gusta que pases mucho tiempo con kuroko ..- hablo aomine acercándose lentamente mientras lo besaba en la boca
-aaa… era eso? no sean tontos es mi amigo además el está con Kise – ¿estaban celosos de kuroko?” Rio a verlos así
–Nosotros que somos para ti... – dijo midorima hundiendo su cabeza en el cuello del pelirrojo- que sientes por nosotros – taiga se tensó aomine también ahora lo abrazaba.
Esa pregunta sabía que en cualquier momento llegaría. Pero era a otra a la que tenia miedo
–Yo a ustedes… los amo, con ustedes hago cosas que con nadie más haría ni deseo hacer –estaban felices al escucharlo, ambos ya hace un buen tiempo se dieron cuenta de que se habían enamorado de taiga, pero no estaban seguro de los sentimientos de este –per… pero por favor –titubeo los chicos se preocuparon al sentir la voz decaída y unos claros signos de llanto –no me hagan elegir – le dijo con una profunda pena, quizás estaba siendo egoísta, pero estaba seguro de que si esa pregunta llegaba a ser formulada, se acabaría todo, no sería capaz de hacer una elección por lo que su respuesta seria obvia.
Los dos se miraron y sonrieron en comprensión, los tres habían iniciado la relación de a tres, por lo que para aomine y midorima era lago soportable, ambos pasaban por lo mismo por lo que les era fácil comprenderse, el saber que el amor era reciproco era lo único que necesitaban para seguir en aquella relación… El futuro solo el tiempo lo dirá.
Fin