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En las fauces del lobo por Keiran

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Notas del capitulo:

Capítulo 5 a la lista… debo aclarar que esta historia no es con una trama rápida, es más bien lenta, centrándome en la vida de cada uno de los personajes de la historia, problemas, conflictos, sentimientos… lo importante. Escenas románticas, fantasía, ficción… trato de hacer que se sienta la lectura, que no solo sean unos cuantos renglones que leer y no saber lo que dice… como cuando la mayoría de los alumnos en un salón hacen un resumen seleccionando párrafos al azar sin saber exactamente de que tratan. No. Esta historia no es así…

En cuanto al lemon, lo trato de hacer lo más claro posible… que guste y que se sienta la situación cargada de emociones. Espero y entiendan lo que trato de decir…

Espero les vaya gustando, me siento alegre del que me sigan leyendo… me siento feliz.

A leer!!

Capítulo 5: “Cuando todo está a nuestro favor”

///Narra Lance///

Había llegado la noche en este lugar, las nubes así como así se fueron del cielo debajo de este domo… sinceramente, desde el día que Raven y Rex me salvaron no había vuelto a tener un día tan agitado y emocionante, estaba realmente feliz por conocer a nuevas personas y más a Zed, que aunque no me conocía en lo más mínimo decidió enfrentar a mis propios amigos con tal de que ya no me estuvieran maltratando. Había salido de la sala para pasar a la cocina, al entrar me encontré con un aroma algo delicioso… podía oler pero para nada probaría lo que Darían estaba cocinando, no quería traer un sabor amargo en mi paladar por el resto de la noche.

Llevaba de conocer a Raven y Rex más de cinco años, jamás desde que nací había tenido algún amigo o había estado en contacto con otro vampiro, siempre había vivido entre humanos, en una casa lúgubre, había sido un sirviente… nací para eso. Mi amo siempre me inculco que ser una persona era preocuparse por los demás, y que siempre debía de expresarme de la manera correcta, decir lo que pensaba y lo que sentía era lo correcto… mi manera de ser era así… si estaba enojado, mostraba mi enojo ya fuera gritando o a veces rompiendo algo, si estaba feliz, siempre sonreía, pero si me picaba la curiosidad, entonces hacía lo posible para poder descubrir cualquier cosa que me diera curiosidad, y Zed había causado eso en mi… era tan serio, tan tranquilo y a veces tan agrio que hacía que me preguntara si en verdad podía haber otra persona como él… y más que nada, me agradaba molestarle.

Después de que mi amo falleció, abrí la carta que él había dejado, que la casa siempre sería mi hogar, y que si lo deseaba… podía irme, y conocer el mundo, opte por lo segundo, pero con el problema que me encontré en el mundo exterior era que no sabía cómo vivir en él, no sabía relacionarme con las personas, con los humanos, tendía a vivir entre la oscuridad… estaba preocupado por mi futuro, y al haber convivido con humanos no era capaz de dañarlos, así que ellos me dañaron a mí, en la oscuridad de un callejón me dejaron tirado, estaban a punto de matarme y robar todo lo que tenía, cuando Raven y Rex aparecieron salvándome, desde ese entonces a pesar de que me dijeron que me fuera yo me quede… y unos meses después ya éramos inseparables.

—     ¿En serio les darás de comer eso? — pregunte arrugando la nariz, me asome por encima de los hombros de Zed, quien le estaba ayudando a Darían a partir unos vegetales

—     Si… hasta tu puedes probarlo— me dijo Darían sonriendo— Te va a gustar—

—     No… yo ya comí— les dije alejándome hasta llegar al lado de la puerta

—     Huele delicioso…— menciono Raven desde la otra habitación, si, olía bien, pero no estaban viendo lo que yo— Si así como huele sabe la comida… sería genial—

—     Tú no has visto como lo está preparando…— le dije en alto para que me escuchara— Parecía un litro de aceite… les tapara las arterias—fui con ellos y me senté en mi lugar, viendo como Izzy tenía los brazos debajo de la mesa pero recargaba su cabeza en ella, como si estuviera aburrido

—     No era aceite— me susurro, volteamos a verle y esta vez subió las manos y se cubrió con ellas el rostro— Es el ingrediente secreto de Darían al cocinar, por eso su comida sabe bien hasta para nosotros—

—     ¿Qué es el ingrediente? — le pregunto Zed

—     Si te lo digo ya no sería secreto— le contesto Izzy descubriendo su rostro y sentándose correctamente en la silla— Pero yo no comí por lo mismo… quiero comer lo que él hizo—

Esperamos unos quince minutos más y allí venía Darían, ¿Por qué demonios no había dejado de sonreír? En fin, no entendía como cocinar podía hacer tan feliz a alguien y más si la comida podría llegar a saberte realmente asquerosa, pero bueno, son los gustos de cada quien. Observe como Rex y Raven veían atentamente a Darían servir la comida… estaban atentos a cada movimiento y veía como trataban de oler el mayor tiempo posible el alimento humeante frente de ellos… era obvio que estuvieran así, esos idiotas se comerían cualquier cosa después de no haber podido comer en dos días enteros. Hasta eso…

—     Toma…— me tendieron un platillo y yo dude, era Izzy quien estaba dándomelo, pero no quería…

—     N-No… muchas gracias— les dije— Estoy lleno de la sangre del jabalí…—

—     Vamos no te hagas del rogar— me dijo Rex— Veré tu expresión… ¿recuerdas la vez que le obligamos a comer esa galleta? —miro a Raven y en el solo apareció una sonrisa— Prácticamente te vomitaste en el pavimento—

—     Sabía asquerosa…— dije alejando el plato de mi con los dedos— Por eso… no gracias—

—     Come…— me dijo Darían mientras tomaba una cuchara y tomaba de la olla un trozo de carne con algunos vegetales que creo que eran cebollas y algo de jugo de ese guisado, me hice hacia atrás inconscientemente— Lance… pruébalo, te prometo que sabrá bien—

—     Nooo…— le dije alejándome un poco más— No quiero, ya sé a qué sabrá…—

—     Te quedo exquisito…— dijo Izzy, volteamos con él y estaba comiendo abiertamente frente de todos, pero solo se concentró en su comida, metía en su boca esos trozos de carne y los masticaba con los ojos cerrados, como si quisiera aclarar cada sabor en su boca ¡Qué asco! ¡¿Cómo demonios puede comer eso?! ¿Qué no le sabe mal? —Cómelo Lance… no te arrepentirás— me dijo después de tragar

—     He dicho que no… ya estoy llen-…— tomaron mi mentón, apretaron mis mejillas e introdujeron la cuchara en mi boca de un solo movimiento, Raven y Rex comenzaron a reír, Darían había hecho eso sin permiso, sentí el calor de la comida en el interior de mi boca, pero por alguna razón no me supo a ese característico sabor amargo, como cuando muerdes una semilla de Limón o pruebas el sumo de la cascara de alguna naranja, esta vez saboree el jugo de la carne y los vegetales, tan rico… por dios, comencé a masticarlo, no quería que eso se acabara, sin decir nada me lo trague— Vaya…— fue lo que salió de mi boca

—     ¿quieres más? — Darían me pregunto arrimando el plato sobre la mesa, entregándome la cuchara— Adelante…—

—     Muchas gracias— comencé a comer sin pausas, mire a Raven y Rex y me veían serios, no podían creer que estuviera comiendo como ellos, entre más comía más me encantaba, estos sabores eran adictivos— Que rico Darían… delicioso— dije para casi terminarme el plato

—     Oh por dios sabe genial…— escuche frente a mí y Rex estaba realmente sorprendido— Come Raven, de lo que te estás perdiendo…—seguido introdujo otra cuchara a su boca

Cuando Raven probó la comida, no dijo nada, solo miro a Darían con los ojos sumamente abiertos  y después siguió comiendo sin decir ni una sola palabra… Darían solo sonrió y sirvió un plato para él, sentándose a la mesa a comer, estaba por terminar mi plato cuando de repente escuche una voz a mi lado, salte del susto y tope con Darían quien comenzó a toser, probablemente también lo había asustado, y más porque pegue todo mi trasero a su rostro… la voz era del elfo…

—     ¿Cómo se la están pasando? — pregunto, después de que Darían me había aventado con sus manos por la cintura, yo apenas pude sostener el plato en mis manos ante esa fuerza

—     M-Muy bien Vanimas…— le dijo Izzy— ¿quieres comer? —

—     Si, en un rato más…— Sonrió— de todas maneras es demasiado… no creo que ellos vayan a acabarse todo—

—     Agarre de una vez, porque yo si me lo acabo todo— menciono Rex sonriendo y yo lo mire con molestia mientras se servía por segunda vez en el plato

—     Me alegra que les haya gustado— menciono Darían

—     Yo creí que los elfos eran más pequeños…— dije al ver que ese muchacho estaba prácticamente del mismo tamaño que yo, estaba separando sus cabellos que estaban a su hombro, parecía que estaba preparándolo para hacer una trenza, al mencionar eso el volteo lentamente conmigo, y dejo su cabello para después— Me contaron que los elfos eran pequeños…—

—     Te contaron mal…— me contesto y fue a la sala mientras hablaba— Crecemos normalmente, pero creo que esta es mi estatura final…— regreso con un portarretratos, y nos mostró una fotografía donde estaba el, el hombre pelirrojo al que Zed le decía papa, el padre de Darían de pelos crespos, y el padre de Izzy de la voz autoritaria, él estaba sumamente pequeño en medio de ellos tres— Los padres de estos chicos y yo somos amigos desde hace más de veinte años… media casi un metro con cuarenta centímetros en ese entonces, y solo tenía dieciséis años—me presto el portarretratos y lo vi con detenimiento, después se lo pase a Raven y Rex

—     ¿Espere?... — pregunto Raven con la fotografía en manos— Si eso fue hace veinte años… ¿entonces tienes treinta y seis años? —vio al elfo de arriba abajo— Pareces tener veinte… mides lo mismo que Lance, es como un metro setentaicinco—

—     Los elfos también somos eternos, no envejecemos… tuve suerte de crecer— nos dijo sonriendo, su sonrisa era bonita, sus facciones eran algo delicadas, pero si ponías bastante atención se veían rudas desde algunos ángulos— y mi voz era bastante delgada, como la de una mujer, me alegra que con el tiempo también se me haya hecho grave—

—     Vanimas cambio mucho… pero lo vemos como un igual, jamás le gusto que le dijéramos tío— Darían nos menciono

—     Y jamás lo aceptare, somos amigos…— fue y se sentó a otra de las sillas a la mesa y nos miró— ¿de dónde vienen exactamente? — le pregunto a Raven— ¿Vivian en cuevas o en la ciudad? —

—     B-Bueno… siempre hemos estado viajando, conocemos toda escocia— Raven menciono— vivimos en todas partes…—

—     ¿y no tienen una manada? —

—     No, solo somos Rex y yo… por nuestra cuenta siempre hemos vivido bien, lance también es parte de nosotros, somos una manada de tres— rio con el comentario— aunque dispareja—

—     Es grandioso ver a hombres lobo— contesto Vanimas— todos somos especies únicas, espero y piensen lo mismo…—

—     Claro que si— le dijo Rex

—     Vanimas enséñales unos trucos— menciono Izzy emocionado, fue entonces que note la ausencia de Zed, él no había salido de la cocina con Darían

—     Te entretengo más a ti que a ellos— Vanimas le contesto con una mueca—Me haces sentir como un payaso…—

—     Oh vamos— Izzy hizo un puchero que por nosotros no pasó desapercibido, así que reímos— muéstrales…—

—     Ya que te vez chistoso— le dijo Vanimas alzando las manos— Bien lo are…—se levantó de la silla y vi como claramente sus mejillas iban inflándose conforme pasaba el tiempo, de repente se acercó a la ventana y escupió, pero no era saliva, sino que el chorro no dejaba de caer, era agua… parecía una regadera, di un aplauso, en verdad estaba sorprendido, paro de salir agua de su boca y se limpió, después volvió a hablar— Darían apaga las luces…—

—     Sip…— escuche el rechinar de la silla de Darían mientras se estiraba hasta el apagador y las luces desaparecían, lo vimos en la oscuridad, Vanimas había cruzado sus manos sobre su pecho y parecía concentrado, vi como su cuerpo comenzaba a brillar por algunas zonas y de repente salió una lucecita de él, después más, y más… eran luciérnagas, muchas luciérnagas que alumbraban pequeños espacios de la habitación, abrió los ojos y vimos como las luciérnagas se esparcían por la habitación— soy parte de la naturaleza como yo de ella, es un complemento, soy… los sentimientos del bosque— nos dijo queda y lentamente mientras tomaba con sus manos una luciérnaga y desaparecía al abrir sus manos— El bosque y yo somos uno…—

—     Que genial…— hable alto, de repente la luz regreso— ¿Tu hiciste esta cabaña entonces? —

—     Si… yo hice cada rincón de ella, y también puedo modificarla— toco el suelo de la habitación con su palma y al irla alzando el cuerpo de la madera fue tomando forma elevándose, apareció una silla más en la habitación, las patas eran como troncos de árboles y el respaldo tenia algunas florecillas rojas— puedo hacer y deshacer… háblale a Zed, que él también tiene que comer— me dijo yo solo parpadee, en verdad los elfos eran sorprendentes

Ellos parecían ser muy unidos, aun aunque fui un sirviente, siempre supe lo que era tener una familia… pase por muchas, unos me trataban bien y otras mal, pero siempre fui fiel a las personas, porque al final de todo siempre me dejaban en sus testamentos, siempre procuraba que fueran lo más felices posibles, mi último dueño fue un hombre solitario… llegue a él por un testamento que había dejado mi antigua dueña, él era su hermano, y al tenerme su sonrisa regreso… pero no tuvo descendencia, después de eso me quede solo… y decidí irme al ya no tener a nadie a quien cuidar y hacer feliz. Suena feo el que te suene que eres de la propiedad de alguien… pero para mí no había ningún problema, al final sabía que yo era dueño de mí mismo y de mis pensamientos, con eso tenía suficiente.

Entre a la cocina de una manera silenciosa, vi a Zed de espaldas, meneaba una jarra con algo de agua lentamente… pero parecía estar perdido en sus pensamientos viendo por la ventana, no sé cuánto tiempo exactamente había estado haciendo eso tan distraído, después escuche como suspiro pesadamente y miro hacia la jarra de vidrio que estaba sosteniendo, para ese entonces yo ya había caminado hasta quedar a tan solo dos pasos de él… cuando volteo, me miro por unas milésimas de segundo a los ojos… y después… bueno… no era mi intención.

—     ¡Ahhh! ¡Por dios! — grito lo más agudo que su voz se lo permitió, la jarra salió volando en el aire, dios, su rostro había expresado tan bien el miedo y susto que solo sonreí al verlo, hasta me había empujado, jugo había caído sobre nuestras ropas pero aun así lo veía temblar ante mi presencia, el vidrio de la jarra se había astillado y solo una parte de esta se había quebrado— ¡Hijo de…!— se llevó las manos a su rostro empapado, había querido insultarme, eso me causo aún más gracia— ¡Lance eres un idiota! — se descubrió el rostro y vi la desesperación bañarlo por completo— ¡¿Por qué no me avisas que estas aquí?! — pregunto gritándome

De repente los demás se asomaron, y nos vieron todos mojados… Vanimas comenzó a recoger los vidrios y la jarra, era agua de sandía, sabía igual de bien que la demás comida, que lastima que por mis travesuras se haya desperdiciado.

—     Idiota…— dijo Zed una vez más al estar trapeando el líquido en el suelo

—     Perdona…— le dije desde la entrada, los demás ya estaban a la mesa comiendo tranquilos— Quería sorprendente, estabas tan pensativo…— le susurre y él se detuvo en el momento

—     Si estaba pensando…— contesto y termino de limpiar el suelo

—     ¿en que pensabas? —

—     Un poco en mis padres—

—     Siento molestarte… no es mi intención—

—     Parece como si lo fuera— gruño— Espero que mi ropa te quede bien…—

—     ¿P-Porque tu ropa? — pregunte un tanto confundido

—     No puedes quedarte así… te darás una ducha en mi habitación y te prestare un poco de ropa, mañana lavaras esa que traes puesta— me dijo— pero algo si te advierto, mi baño no tiene agua caliente—

—     N-No, no hay ningún problema con eso…— le dije apenado— Muchas gracias… de nuevo—

—     Descuida… los accidentes pasan— el me miro, y esta vez, me sonrió… sentí una calidez en mi pecho inigualable, como con mi dueño anterior

Pasamos por el comedor y Zed dijo que me llevaría a su habitación a los demás, estaba más que agradecido, mi cuerpo comenzaba a sentirse pegajoso debido al jugo entre mis ropas, era realmente incomodo… parecía que a Zed también le estaba molestando mucho, ya que separaba la tela de su camisa con frecuencia del cuello… Entre y el al encender la luz se dirigió a su closet que estaba al lado de su cama, fije mi vista en las repisas que estaban alrededor de todas su habitación y me quedé asombrado al ver muchas figuras de pequeños animales… como venados, antílopes, jabalíes, lobos salvajes, vi algunos insectos como una mantis religiosa, alguna catalina, claro más grande de tamaño… y había pequeños botes de pinturas, algunas figuras estaban empezadas con algunos brochazos por encima…

—     Que bonitos…— le dije, el volteo a verme

—     Gracias—

—     ¿te gustan mucho los animales? —

—     Si, cada que veo uno nuevo, lo tallo en madera— me contesto, y extendió una camisa de un tono gris oscuro en la cama, después regreso al closet—Es la única camisa que tengo que no tiene cuello de largo, así que discúlpame…—

—     Descuida… está bien, cualquier prenda es buena— sonreí al ver ese tono gris neutro, voltee a ver su closet y toda su ropa estaba igual, no había una que tuviera algún dibujo en frente— no te gustan los dibujos…—

—     No es que no me gusten… uso la ropa para lo que la necesito, no me es necesario lucir algo encima, al final y al cabo solo es para cubrir tu cuerpo—

—     Que aburrido…— fui sincero, pero debo admitir que su razonamiento era muy crudo

—     Lo sé…—regreso a la cama y extendió unos pantalones algo holgados, parecía que también le gustaba la ropa cómoda— Estos son los más chicos que encontré, espero que no se te caigan de la cintura…—

—     Descuida…— tome la ropa en mis manos, cuando voltee me tendió una toalla, ¡Hasta la toalla era negra! — Mm… gracias—

—     Allí está la puerta del baño… te esperare afuera— me dijo

—     Me duchare rápido…—

—     No es necesario, soy paciente… tomate tu tiempo—me sonrió, tomo una de sus figuras y comenzó a pintarla

Entre al cuarto de baño y al fin vi algo que no era oscuro, las baldosas eran blancas y algunas celestes… había algunas de las cosas personales de Zed en el baño, su pasta dental… su cepillo de dientes, y unas cremas protectoras solares, parecía que le agradaba el sol, a pesar de siempre usar ropas oscuras. Me desnude y comencé a ducharme rápidamente, un rápido tallón a mi cabello y a mi cuerpo… su baño era realmente simple, no como algunas personas que le dan su tinte personal… no me sorprendía con lo que era de callado, salí corriendo la cortina y me seque el cuerpo con rapidez, no quería hacerlo esperar tanto… tome la camisa y me la puse, fue cuando abrí los pantalones que la ropa interior calló al suelo ¿también me había prestado esto? Me dio vergüenza, me quedaban algo grandes… pero aun así necesitaba ponérmelos… me puse los pantalones y me quedaron a la perfección, aun así su camisa me quedaba holgada… me veía algo pequeño con su ropa puesta.

Zed era delgado y alto, por eso su ropa era grande, pero aun así yo estaba un tanto más corpulento que el… dudaba si salir del baño o no, comencé a sentirme ridículo al verme por más tiempo en el espejo. Me dio igual, extendí la toalla en el tubo de la cortina y salí del baño, subiéndome los pantalones de vez en cuando, Zed me miro, seguía pintando sus animales y sonrió… pero en burla.

—     Que chistoso…— confeso

—     No te burles… no lo hagas— le dije en queja— es algo grande, que importa—

—     Es que mi ropa es aun dos tallas más grande de lo que debería de ser, por eso se te ve así… yo me siento cómodo con eso, pero… tú te vez más pequeño con ella— sonrió y me dejo ver sus blancos colmillos mientras dejaba sus pinturas y la figura del animal sobre el buró— ¿seguro que no se te cae? —

—     No… está bien—

—     Bien— fue directo al baño y antes de cerrar dijo— pareces un niño…—

—     ¡No es cierto! — grite y escuche una risa opacada por la puerta

Me senté un rato sobre la cama, y suspire muchas veces ¿Qué era lo que estábamos haciendo en este lugar? Raven y Rex han de estar desesperados por irse, el tiempo se nos acaba… tenemos que hacer algo pronto… tenía que ayudar a mis amigos… escuche como se abrió la puerta, era Zed envuelto de la cintura para abajo en la toalla, se dirigió a su closet y así como así, dejo su toalla caer, yo me voltee enseguida avergonzado…

—     ¡Zed! — dije consternado, juro que sentí como mi rostro se calentaba, sentía el calor debajo de mis orejas y cuello, había visto parte de su trasero ¿Qué acaso había cambiado la vergüenza por esa seriedad?

—     ¿Qué? — me pregunto secamente— ¿no has visto a otro hombre desnudo? —

—     S-Si… a Raven y Rex cuando nos bañamos en algún lago o río, pero es diferente— le dije, tratando de inclinar mi cuello para que no regresara a su lugar y verlo

—     ¿en qué sentido es diferente? — me pregunto, escuchaba como movía los ganchos y ropa en su closet

—     Tu y yo no nos conocemos lo suficiente— le conteste

—     Vamos… nuestro cuerpo tiene un parecido, tenemos un pene, pezones…— mi rostro aumento de temperatura con sus palabras— sería diferente si fueras una mujer…—

—     ¿Qué acaso no te incomoda el que te vea? —

—     No… jamás me incomodarías—al escuchar eso, simplemente voltee lentamente y no solo lo vi, lo mire de cuerpo completo, era realmente pálido, pareciera que fuera un fantasma, tenía un lunar en su espalda del lado de su hombro derecho y su cabello suelto se veía realmente hermoso, lo tenía hasta la mitad de la espalda peinado… fue entonces que me miro de reojo que volví a voltearme con pena— La curiosidad mató al gato…— me dijo, yo abrí mis ojos sorprendido

—     ¡Tú fuiste el que dijo qu-…— voltee por puro impulso y lo vi parado frente a mí, mostrándome sus partes privadas sin siquiera cubrirse, traía en sus manos un bóxer, fue allí donde me levante y me lance a su cama como pude boca abajo— ¡Eres un sin vergüenza! — le grite contra la almohada— Creí que eras más serio…— susurre desganado

—     Ya… lo siento, ya me puse la ropa interior— dijo y pude voltear a verlo mejor

—     ¿Me odias no es así? — pregunte

—     No ¿por? —

—     Siento que quieres que me mantenga alejado siempre…—

—     No… sinceramente… — se lo pensó unos momentos y se puso una nueva camisa de manga larga y cuello— Eres la primer persona que quiere estar todo el tiempo conmigo… es cómodo, pero como no estoy acostumbrado, me harto con facilidad—

—     ¿te sientes cómodo conmigo? —

—     Si…— me sonrió, me sentía genial, había conseguido que me regalara otra sonrisa

///Fin Lance///

///Narra Rex///

En verdad era la mejor comida que había probado en toda mi maldita vida… no pare hasta que no estuve completamente satisfecho, en verdad Darian cocinaba muy bien… habíamos estado hablando el rato con ese elfo, para ser sincero para mi todos se veían pequeños… cuando era pequeño pase por muchas situaciones peligrosas por las que Raven siempre terminaba salvándome, pero hubo un día que resultó gravemente herido, desde ese entonces me concentre en ser alguien realmente fuerte para que no tuviera que preocuparse por mí, todo estaba genial, mi estatura me ayudó mucho más… pero noté que mi hermano estaba bostezando a cada tanto, y con razón, ya llevábamos dos días que no habíamos dormido absolutamente nada… y me pego el sueño a mí por acabar de comer.

—     Que sueño…— dijo mi hermano terminando de bostezar

—     Jamás te había visto bostezar así de grande… creí que me ibas a comer enterito— me burle, el solo me codeo y se recargo en la mesa mientras seguía escuchando a Vanimas

—     Si es que ya quieren dormir, Darían e Izzy les prestaran sus camas— nos dijo Vanimas bebiendo algo de agua

—     No hace falta… podemos dormir en los sofás— conteste

—     Sinceramente no creo que quepas en los sofás— mi hermano menciono riendo y esta vez yo lo codee con fuerza

—     Ya deja de burlarte—

—     Vamos Rex… mi cama es grande… puedes dormir en ella— menciono Izzy y sin hacerse esperar comenzó a estirarme del brazo, no entiendo en verdad como a él no le doy miedo, normalmente al andar por la ciudad los humanos se me quedan viendo al verme tan grande— Vamos, una ducha te sentará bien…—

—     N-No me hace falta una ducha, así estoy bien— conteste nervioso

—     Hueles a perro… te tienes que quitar kilos y kilos de tierra, mugre y sudor, aparte, no te has bañado en una semana y media…— mi hermano volvió a burlarse, aunque claro lo que había dicho era mentira, justo me acerque a encestarle un buen golpe en la nuca alguien se amarro a mi torso y me detuvo, la verdad no me esperaba que Izzy me rodeara con sus brazos

—     ¡¿Q-Que…?!—

—     No lo golpees, por favor no peles aquí…—al verlo enseguida mis músculos se relajaron y lo tome con mis manos por los hombros— por favor… no me gustan las peleas—me rogo con la voz atormentada

—     Lo siento… — lo aparte de mi lentamente y me sonrió, no sabía por qué Izzy era exactamente así, en esos momentos lo asimile un poco a mi madre… tenía un carácter dulce y suave, siempre quiso ser pacifica con los demás, incluso con los vampiros y humanos

—     Vamos a mi habitación—me dijo estirando ligeramente mis manos, yo comencé a avanzar, voltee a ver a mi hermano y él estaba viéndome de una manera en la que jamás me había visto, extrañado de mi reacción, cuando alguien más me tocaba lo más normal era aventarlo o comenzar a golpearle por haberse atrevido a hacer eso, pero con Izzy no había sentido esa furia en mi cabeza…

Subí las escaleras junto con Izzy, veía su cabello oscuro, sus ojos grises, su cuerpo delgado… se parecía a uno de los adultos que habían salido de aquí, no había vuelto a ver a Glaw, escuche al andar por el corredor una melodía de piano que venía de otra habitación pero estaba cerrada… tal vez ella estaba adentro descansando. Ella era muy linda, una chica de la que no se sabía que esperar… creo que había llamado mi atención por completo.

Jamás me espere que la noche anterior me encontrara con ellos, primeramente los habíamos perseguido por que llevaban a Lance con ellos, y el muy imbécil se había dejado llevar. Según Raven nos dijo cuando nos liberaron afuera, de las cuerdas, era que no nos podíamos permitir perder más tiempo… era una emergencia y teníamos que conseguir algún sacrificio pronto, al final decidimos que Lance sería la carnada para ese maldito demonio de Dante.

Ese maldito monstruo…

Teníamos que hacer algo pronto, no podíamos quedarnos de brazos cruzados…

—     Aquí tienes una toalla…— escuche la voz de Izzy— en verdad te vez cansado…—

—     Un poco—tome las cosas y me dirigí hasta el baño

—     ¿te puedo hacer una pregunta? —

—     ¿Cuál? —

—     ¿A dónde se irán cuando nuestros padres los dejen irse? — Izzy me veía algo inquieto mientras movía sus manos a cada tanto, se había sentado en su cama y me miraba desde allí, pero en sí, no teníamos a un hogar a donde ir…

—     No lo sé… siempre viajamos mucho—dije suspirando, a decir verdad ya estaba cansado de estar siendo chantajeado por ese monstruo, pero no podía solo hacerlo de lado, Raven estaba dispuesto a cualquier cosa por saber algo de ella…

—     ¿No quisieras quedarte aquí…?— En verdad escuche bien esa pregunta, creo que no…

—     ¿Qué quieres decir? — le pregunte caminando hacia el nuevamente, sentándome a su lado

—     B-Bueno… yo— Izzy bajo su mirada apenado— Yo quisiera seguir teniendo contacto con ustedes… es realmente genial haberlos visto de nuevo… p-por eso, aquí son bienvenidos—

—     Eso lo dices tú… pero tu padre es otra cosa— me levante, dejando un pozo en la cama al lado de el— Después de que nos dejen ir, jamás volveremos a andar por los bosques de escocia… no nos volveremos a ver jamás probablemente, así que no te hagas de esperanzas inútiles…— le dije, tome la perilla de la puerta y el solo me grito

—     ¡Pero somos amigos…!— el rostro de Izzy me hacía ver angustia, miedo— Yo quiero verlos de nuevo…—

—     Izzy…—lo nombre quedamente, en verdad, Izzy era un enorme misterio, es el único chico que conozco que ha tomado nuestra presencia como algo tan importante… en su vida.

¿Qué pasaría si decidiéramos dejar de buscar? Dejar de tratar de encontrar una pista… seguramente Raven siempre se sentiría realmente culpable por no haberlo dado todo. Así que lo único que podía hacer era apoyar a mi hermano… y seguir a su lado.

///Fin Rex///

///Narra Raven///

Entre junto con Darian a su habitación, era amplia, tenía su cama pegada a una de las esquinas y al lado tenía un simple buró con un reloj y unos cuantos libros acomodados en diferentes direcciones, las paredes eran un azul cielo muy tenue, y cuando voltee al techo tenía unas cuantas figuras pegadas al techo, parecían figuras que eran fluorescentes… de estrellas, planetas, galaxias y muchas otras figuras diferentes, había un cuadro en la pared que contrastaba con todo el lugar, era un cuadro oscuro que dejaba ver unos simples ojos en el centro, una mirada sumamente penetrante según mi pensar, era un cuadro hermoso aun así, ya que el color de esos ojos le daba vida por completo… me le quede viendo por unos segundos, y después voltee a verlo a él, que estaba abriendo la ventana de su habitación…

—     ¿Tú lo pintaste? — le pregunte

—     Ah… sí— miro el cuadro y después me miro a mí— No soy muy bueno en eso, pero me esforcé por que quedara lo mejor posible…—

—     Es bonito…— le dije acercándome a verla

—     Sueño con esos ojos con frecuencia…— me dijo acercándose a su closet

—     ¿Los sueñas? — le pregunte

—     Si, cada que me permito el dormir siempre lo hago… es la mirada de tu madre— en esos momentos me quede estático, y voltee a verle con lentitud, el seguía moviendo unas cosas en su closet, pero, para mí el que haya dicho eso fue una total sorpresa, estos ojos que estaban frente mío, alrededor de un color muy oscuro y neutro, resaltaban en toda la pintura… Y si, ahora que ponía más atención a los detalles, eran casi iguales a los de ella… el punto es, ¿Cómo es que los recuerda tan vividos? Ni siquiera yo podía hacerlo tan bien— Raven… ¿la encontraron cuando nos dejaron en el bosque? — me pregunto

Cerré mis ojos lentamente y recordé todo lo que paso esa vez… hace más de quince años, que no había vuelto a ver a mi madre. Me quede en silencio… por un largo tiempo. Sentí como Darian se posaba a mi lado, abrí mis ojos nuevamente, y voltee a verle y nuestras miradas se encontraron, pesadas… tratando de saber qué era lo que cada uno estaba pensando… entreabrí mi boca para responder, para decirle lo que en verdad había pasado, pero me detuve, cerré mi boca nuevamente mientras sus ojos azules me miraban a cada tanto moviéndose en pausas, miraba mi rostro con mucho detenimiento… había cambiado mucho, ya no era ese niño pequeño con el que me había topado hasta caer al suelo, tan solo unas cuantas horas me bastaron para diferenciar al niño del hombre… y aunque extraño, sentía que en algún momento de mi vida tenía que volverlo a ver… en esos quince años algunas veces volví a pensar en ellos, pero ahora tenerlos frente a mí, sinceramente era increíble. De repente escuchamos un grito que interrumpió el silencio que albergaba en la habitación…

—     ¡Darian vamos a hacer una competencia! — gritaron escaleras arriba, era Izzy— ¡¿Quieres participar?! —

—     Ah… ¡Claro en un momento bajo! — grito Darian sonriendo un poco— ¿Quieres ver? —

—     Mm… en verdad, tengo demasiado sueño, espero no te-…—

—     Claro que no, descansa, puedes usar mi cama…— me dio la toalla en manos y se dirigió a la puerta de su habitación— Nosotros estaremos afuera… duerme bien, disculpa si hacemos algo de ruido—

—     G-Gracias descuida…— le dije mirando como abría la puerta y se detenía por completo antes de salir— ¿Qué sucede? —

—     Bueno… la llave derecha es de agua caliente, la izquierda de agua fría, te aviso solamente— me sonrió y ahora si cerró la puerta, escuche la voz de Zed en el corredor y como hablaban, me quede parado en su habitación, voltee de nuevo a ver el cuadro y sonreí, era capaz de pedírselo, en verdad era hermoso…

Esa tarde… las cosas habían salido desastrosas, mi madre estaba herida en el suelo, aun transformada estaba tratando de levantarse para ir hacia donde nosotros nos habíamos ido… Rex y yo habíamos llegado con ella y al vernos suspiro tranquila, pero minutos después ninguno de los dos pudo hacer nada al respecto… Dante, ese monstruo nos había alcanzado… e hizo que Rex y yo nos quedáramos solos entre la oscuridad del bosque y el cielo… gritando, llorando… de desesperación e impotencia.

Me quede parado en medio de la ducha mientras el agua caía en mi cabeza empapando mi cuerpo completamente, en quince años no había podido conseguir absolutamente nada, quería deshacerme de ese maldito sentimiento de culpa, pero Lance se había ofrecido a esto, su plan era bueno, teníamos que creer en nosotros para lograrlo… Tome la toalla del perchero y comencé a secar mi cuerpo, últimamente el estar pensando una y otra vez en lo mismo estaba acabando con mi conciencia, terminaba agotado, tratando de encontrar una maldita solución… al abrir la puerta escuche algunas risas, algunos gritos… fui y me asome a la ventana mientras secaba mi cabello con lentitud, afuera estaba Darian riendo al ver a Izzy en el suelo, Zed estaba parado a su lado sonriendo, y Glaw también estaba a su lado… Vanimas fue y palmeo a Izzy un par de veces sobre su hombro y este comenzó a levantarse…

—     ¿Hacen mucho ruido no es así? — escuche una voz y era mi hermano entrando a la habitación— ¿Qué es lo que están haciendo? —

—     No lo sé…— fije mi vista nuevamente mientras quitaba la toalla de mi cabeza— Parece que están jugando—

Mire y enseguida Izzy se puso en una pose extraña, muchos rayos comenzaron a salir de su cuerpo, mientras Darian hacia un talismán extraño… el dibujo era de una estrella azul, era obvio, era ese talismán de agua que había visto hace años, la energía que despedía Izzy era tanta que alcanzaba a escuchar un zumbido extraño en el aire… fue entonces que algo apareció encima de nosotros que Rex y yo gritamos de una manera vergonzosa…

—     ¡Raven, Rexy holaaa! — Era Lance pescado de arriba de la ventana

—     ¡Eres un idiota! — tome la toalla y comencé a pegarle con ella muchas veces— ¡Nos asustaste imbécil! —

—     Ya, ya déjame… esa era la intención— Lance bajo y se sentó en el tejaban, dejándonos ver apenas si su cabeza por afuera de la ventana— Están concursando…— miro al otro lado— Izzy tiene un control enorme sobre su habilidad—

Al mirar a lo lejos vimos como Izzy hacia una especie de látigo con los rayos y Darian lo esquivaba con su salto, de repente lanzo el chorro de agua e Izzy igual lo esquivo, pero no todo se detuvo allí, el agua comenzó a seguirlo con rapidez, Izzy trato de huir, pero se topó con el cuerpo de Vanimas al no fijarse a donde corría y a ambos les dio ese chorro de agua arrastrándolos por el suelo hasta una de las columnas de la casa, Darian asustado fue corriendo hasta ellos y vi como Vanimas aventaba a Izzy y se levantaba enojado… el elfo movió un poco sus manos y tierra se alzó del suelo haciendo que Izzy que estaba en el suelo tirado se moviera hasta Darian y se pegaran fuertemente el uno con el otro… Glaw y Zed estaban estallando en risas, se sostenían el uno al otro para no dejarse caer al suelo… Lance rio al ver eso un poco… vaya que ellos tenían una buena manera para divertirse, hasta a mí me sacaron una buena sonrisa.

—     Pasado mañana nos iremos…— menciono Lance— ¿Qué piensan hacer? —

—     Es obvio, seguiremos con el plan—le dijo Rex

—     Pienso que solo llevar a Lance será algo sospechoso, Dante jamás lo creerá— les susurre viendo a lo lejos como Darian se levantaba del suelo con su ceño fruncido y se acercaba a Vanimas quien ni se inmutaba ante su enojo

—     ¿entonces qué hacemos? Dante dijo que quería muchas habilidades, magia o lo que fuera— nos dijo Lance— El que yo vaya a la penumbra no ayuda… ningún vampiro me seguirá, soy de clase baja—

—     Tenemos vampiros con habilidades sorprendentes aquí…— les dije, vi como Darian era atrapado entre enredaderas y Vanimas le daba un zape en la nuca

—     ¿No me digas que…?— pregunto mi hermano— ¿quieres que ellos sean el sacrificio? —

—     Más o menos—simplemente estaba improvisando en esos momentos, y era verdad, estaba sumamente desesperado…

—     ¿Pero cómo aremos para llevarlos? — pregunto Lance— Habrá que decirles… para ver si pueden ayu-…—

—     Lo interrumpí—No creo que accedan si se los pedimos, no confió en ellos… así que, ya veré que hago para hacer que nos sigan hasta el portal de la roca—

—     Raven estás seguro de esto…— mi hermano empezó— ¿No deberíamos de decirles? —

—     suspire— estoy desesperado… en estos momentos no me importa a quien sacrificar, Dante fue muy claro, quería cualquier criatura mágica…—

—     ¿Pero ellos? — Lance sonaba dudoso— Nos han tratado bien…—

—     ¿En verdad te has encariñado? Para dejarte aquí si es así…— le dije serio, Lance solo hizo una mueca de disgusto— habla… que no te coma la culpa—

—     No los conozco… me da igual lo que decidas hacer, te apoyare— Lance contesto seguro

—     Bien, veré que hacer… tengo que descansar— me quite de la orilla de la ventana y vi de nuevo el recuadro— No importa que, cualquier cosa sería buena en estos momentos…—

—     Te dejo, tienes mucho que pensar— Rex enseguida camino y salió de la habitación

—     ¿En verdad ellos no te importan en lo más mínimo? —Lance me pregunto recargado en la orilla de la ventana, se había levantado, y me estaba viendo acomodar la almohada

—     No…— conteste y lo mire— Cuando tienes la oportunidad debes de aprovechar la situación y no dejarlo pasar…—

—     Eso lo dices porque desde niño te anduviste solo con Rex— me dijo

—     Tu no estuviste solo, cuidando de alguien más… es difícil, doloroso, lo hago por poder encontrarla, no me importa que dar a cambio— me avente sobre la cama de Darian, solo escuche el suspiro de Lance

—     Entiendo… espero que no te arrepientas de nada—

—     No vale la pena arrepentirse— le conteste y no hubo respuesta, Lance se había quitado de allí y me había dejado solo, voltee hacia el buró con los libros encima y me quede pensando un rato más

Hundí mi cabeza en la almohada y pude oler ese aroma, uno muy dulce, el olor de Darian invadía mis fosas nasales inundándome de un sentimiento extraño, ¿estaba bien lo que estaba tratando de hacer? Tal vez no, pero… quería ver a mi madre, quería saber de ella, quería escuchar su voz… quería abrazarla. Si tan solo supieran la soledad que siento en estos momentos… entenderían cuan duro es vivir con la culpa en tu pecho.

Mis pensamientos quedaron completamente en blanco, y cerré mis ojos poco a poco sobre esa suave almohada, ese aroma, esa esencia me relajo hasta en mis sueños. Y dormí tan tranquilo y relajado como hacía años no lo conseguía…

El que ellos nos creyeran buenos, era nuestra principal arma... solo teniamos que seguir con la misma farsa. 

Notas finales:

Bien final del cap. ¿Cómo hará Raven que su plan comience a funcionar? De seguro tendrá que aprovechar cualquier situación que se le ponga en frente para lograr su cometido… es una sanguijuela :P.

Próximo capítulo 6: “Especial Vanimas: El ave herida”

¿Cómo es que esa ave gigantesca llego hasta ese lugar? ¿Quién es ese chico tan extraño que apareció en su cama? ¿En verdad existen los cambia pieles? ¿Quién ha ordenado a ese chico espiar a los lobos? ¿Y más que eso… porque Rex, Raven y Lance parecen conocerlo? La dulzura es una máscara experta en ocultar la maldad…

Esto y más en el siguiente capítulo. Nos leemos después :D

Chau! 


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