Las clases se acabaron y los chicos se reunieron en la puerta de la escuela para ir hacia la academia de baile. En sus espaldas llevaban la mochila de la escuela, que hoy estaba más llena de lo habitual. Yixing, como el más experimentado en estos temas, les explico que era lo que llevaba él.
-Lo principal es ropa cómoda y elástica, unas buenas bambas para que no te duelan los pies, rodilleras por si acaso hay que hacer algún baile en el suelo y muñequeras.
-¿Tantas cosas se necesitan?-dijo Luhan abriendo mucho los ojos.
-Creo que no llevo ni la mitad-dijo Tao sonriendo mientras se rascaba la cabeza.
-Suponía que no llevaríais muñequeras así que os he traído unas a cada uno-cuando Lay dijo eso empezó a repartir las muñequeras entre sus amigos.-Las lesiones en las muñecas son de las más habituales en los bailarines, hay que ser precavido.
-No hace falta que nos trates así, me esta dando grima-dijo con cara de asco Kris.
-No seas tan duro con Lay, Kris ge-dijo Tao hinchando los mofletes.
-Eso, encima que Lay se preocupa por nosotros-dijo Luhan mientras abrazaba a Lay. Éste noto como le subía el rubor a la cara y Luhan, al darse cuenta, también se sonrojó. Luhan soltó a la presa de su abrazo y avanzo corriendo unos metros con la excusa de que quería llegar lo antes posible.
Entre una tontería y otra llegaron a la academia. Allí les recibió un chico de unos veinte años que parecía ser bastante simpático.
-Hola chicos.¿Supongo que sois los cuatro nuevos bailarines?-les preguntó manteniendo la sonrisa que le acompañaba desde que los chicos habían entrado.
-Así es. Yo soy Tao y ellos son Lay, Luhan y Kris ge-dijo claramente emocionado el más pequeño. Los demás saludaron con la mano, unos con más energía que otros.
-¿Qué os parece si entramos a lo que será vuestra sala de baile?
-Sí, vamos, vamos-dijo Luhan tirando del brazo de Lay.
-No hace falta que nos trate como a niños de cinco años...-dijo Kris refunfuñando.
Cuando entraron a la sala todos se quedaron callados. Era enorme y tenia una pared llena de espejos. En las otras paredes había varias ventanas que daban a la calle y mantenían el lugar perfectamente iluminado. Tao y Luhan entraron con los zapatos, causando mucho ruido a por culpa del parquet. Al darse cuenta se quedaron quietos, sin saber que hacer.
-Parece que lo primero que aprenderéis es que no se puede entrar haciendo mucho alboroto. A la mínima se hace mucho ruido-dijo el chico, riendo por la reacción de los chicos.-Ahora nos sentaremos en el suelo y nos presentaremos-.Cuando todos estuvieron sentados en el suelo creando un círculo prosiguió con la presentación- Yo me llamo Youn-Soo y de ahora en adelante seré vuestro profesor de baile. Me gusta ver películas de acción y mi comida preferida es el deokbokki.
Los chicos se fueron presentando de uno en uno y después el entrenador siguió hablando.
-Lo primero que hacemos cuando tenemos un grupo nuevo es establecer una meta. Para eso os tenéis que preguntar, ¿dónde quiero llegar? En parte tenéis que decidirlo pensando en el grupo, pero también pensando en vosotros mismos. A lo mejor a uno le apetece hacer colaboraciones en conciertos de otros idols, pero otro quiere dedicarse a bailar en musicales.
Los chicos se quedaron pensando pero no tardaron en contestar.
-Queremos entrar en una agencia de entretenimiento-dijo Kris con convicción.
-¿Tenéis alguna preferida o algo así?
-No, cualquiera estaría bien-dijo Tao ilusionado.
-Conque esa es vuestra meta...¿Vosotros dos también estáis de acuerdo?-preguntó Youn-Soo a los dos chicos que aún no habían hablado. Los dos se miraron, todavía incómodos y asintieron.-Entonces la escribiremos aquí en grande.
Youn-Soo cogió un bote de spray negro de su mochila. Agitó el spray y lo presionó. Cuando la pintura empezó a salir escribió en una de las paredes blancas: ENTRAREMOS EN UNA DE LAS MEJOR AGENCIAS. Los chicos se quedaron mirando la pared estupefactos. De vez en cuando desviaban la mirada hacia su entrenador, pero la volvían a fijar en la pared. Youn-Soo dio dos palmadas para sacarlos del trance en el que habían entrado y les ofreció unos rotuladores.
-Si estáis de acuerdo firmad en la pared.
El primero en acercase fue Kris, que como siempre habría camino a sus compañeros. Escribió su nombre y hizo una ralla debajo. Cuando todos lo hubieron hecho empezaron a bailar.
Y así fueron sucediendo los días. Cada día después de la escuela los chicos iban a la academia y bailaban hasta quedar exhaustos. Habían conseguido una gran evolución en su manera de bailar, tan grande era que hasta su profesor de gimnasia en el colegio lo había notado. Tao siguió esforzándose al máximo en sus clases de Wushu, pero a su padre seguía sin gustarle la idea. Poco a poco se acercaba el verano y los chicos cada vez estaban más nerviosos. Habían decidido presentar el baile de la canción Juliette de SHINee.
-Bueno chicos, dentro de dos semanas es el casting de la SM Entertainment. He leído las condiciones y características de muchas agencias y creo que ésta es la que mejor os iría. ¿Qué os parece?-dijo Youn-Soo.
-Por mi bien-dijo Kris.
-Y por nosotros-dijeron Lay, Luhan y Tao abrazándose.
-Pues ahora, a ensayar más duro que nunca-dijo el entrenador con una sonrisa maléfica para asustar a los chicos. Sin embargo, no funcionó. Los cuatro se levantaron más animados que nunca y se colocaron en sus posiciones.
Al acabar el entreno, se ducharon y volvieron a casa. El padre de Tao estaba esperándole en el comedor.
-Tao, me han confirmado que dentro de dos semanas es el campeonato nacional de Wushu.
-Pero dentro de dos semanas...-dijo Tao con miedo.
-¿Hay algún problema?
-No, ninguno...
Tao se despidió de su padre y se fue directamente a la cama. ¿Qué haría ahora? Parecía haber llegado a un callejón sin salida.