POV JIMIN
Por fin después de más de una semana viajando llegamos a los alrededores de Whiterun, nuestros caballos seguían el camino empedrado hasta que un guardia nos detuvo
– Disculpen, les recomiendo que no se acerquen mucho hay un oso no muy lejos de aquí y podría ser peligroso – Yo al escuchar eso me emocioné, necesitaba algo de acción así que rápidamente me bajé del caballo dejándoselo a Jhope, en esta ocasión no portaba con algún Peto solo traía mi Gambeson Azul Índigo y mi espada la tenía en mi cinturón, al verla el guardia quiso alarmarse pero lo detuve
– No se preocupe yo me hare cargo de ese oso ¿Dónde está? – El guardia señalo con su dedo y le agradecí, le dije a Jhope que me esperara un poco y este emitió un gesto de molestia. Yo reí y saque mi espada.
Después de caminar varios metros, vi el Oso Gris caminando tranquilamente, yo me escondí en una Roca, era como una pradera no había muchos árboles cerca, por lo que podría verme en cualquier momento, me quede viéndolo un momento hasta que me percate como un chico que mirando un mapa no se dio cuenta del camino y se estrelló con la cola del oso, tropezó y cayó al suelo, el oso giró rápidamente para ver que había chocado con él y cuando vio al chico en el suelo y gritar de miedo se levantó en dos patas,
¿Pero que le pasaba? Antes de que el oso devorara a ese despistado sujeto le lancé una piedra, el oso se movió y sacudió su cabeza, giró a donde estaba y comenzó a caminar hacia mí, no me di cuenta en qué momento pero cuando busque al chico éste ya estaba huyendo a dirección opuesta “De nada” pensé, en eso el oso lanzó un zarpazo, pero lo esquive, busqué rápidamente otra piedra y se la lancé, este se tambaleó un poco y por fin le clave mi espada en un costado, el problema fue que se atoró y me tumbó, caí boca arriba y el oso se puso de pie, rugió feroz y se abalanzó hacia mí, yo rodé y me levanté, tome mi espada clavada y la saqué, volvió a rugir por el dolor, y cuando iba a volver a clavársela alguien le había lanzado una flecha, esta se enterró en uno de los brazos, emitió un rugido mas y salió corriendo, yo mire a Jhope acercándose con los dos caballos y con su arco en una mano
– Ay Jimin, definitivamente los animales no son lo tuyo – Comenzó a reírse – Vamos que ya es tarde – Yo le fruncí el ceño y subí a mi caballo.
Por fin llegamos a Whiterun y en cuanto pasamos las puertas pude notar las miradas de la gente al ver nuestros estandartes provenientes de Ciudad Imperial, todos murmuraban, las madres tomaban a sus hijos; por eso odiaba la mayor parte de Skyrim todos eran unos pueblerinos donde llegaba un extraño y todos creían que era el diablo, solo algunas ciudades apoyaban al Imperio como Solitude y Windhelm, lo ignoramos y llegamos hasta el Castillo, bajamos de nuestros caballos y los amarramos, caminamos hasta la entrada donde un guardia nos detuvo
– Vinimos a ver al Rey Heechul – El guardia mandó llamar a alguien, de repente salió un paladín
–Mi nombre es Leo, por favor síganme – Y comenzó a caminar sin siquiera esperar a que nos presentáramos, Jhope me miro y le hice un ademan de que lo siguiéramos.
Por fin llegamos a donde estaba el Rey, el estaba de pie mirando por el enorme ventanal y su hijo estaba sentado a un lado del trono real
– Mi señor venimos de parte de Ciudad Imperial – Comencé a hablar, haciendo una reverencia junto con Jhope
– Lo sé – Dijo sin siquiera mirarnos
– Estamos aquí porque mi padre Eric dice que solicito una cita con usted para hablar sobre el mal que nos está sacudiendo, el dice que usted tiene la solución
Heechul emitió una risita – Los rumores corren más rápido de lo que creía – Por fin nos miro y empezó a acercarse –Así es, tengo la cura de esta temible enfermedad solo necesito un favor
Fruncí el ceño sabía que iba a querer algo – ¿Cuál sería?
– Verás la persona que conoce la cura ya no tiene ingredientes, y estos están en diferentes regiones de Skyrim así que necesito que lo ayuden a conseguirla les prometo que en cuanto la haga, tendrán una porción suficiente para salvar todo el país de Cyrodil
– ¿Así ese es el negocio? ¿Sabe el Rey de Windhelm que estás haciendo esto?
– ¿Quién Siwon? De verdad quieres que lo sepa, si así lo deseas podemos decirle, para que haga una junta, todos los Reyes de todo Skyrim primeramente se reúnan y debatan el asunto y si todos lo aprueban obviamente Siwon querrá que su país se beneficie primero supongo que tardara como 1 mes en lo que se aprueba y recolecta, y ya después Cyrodil podrá beneficiarse – Heechul me miro seriamente – ¿Es eso lo que quieres? ¿Por qué por mí no ha problema vez a mi hijo sentado ahí? El acaba de ser salvado por la poción de esta persona, ustedes saben que a mí el pueblo no me interesa y puedo esperar 1 año pero… ¿Y ustedes?
Me sonrió maliciosamente, yo me sentí como un ratón arrinconado, gire hacia Jhope – ¿Qué opinas?
Jhope me miro tristemente – Jimin no puedo obligarte a que tomes una decisión sabes que una de las razones urgentes es porque mi madre, hermana de tu padre está enferma
Recordé a mi tía Sunny, comenzó a sentirse mal hace unos días y fue cuando mi padre comenzó a informarse desesperadamente, mire otra vez a Jhope y le sonreí, el me devolvió la sonrisa llena de esperanza
–Esta bien mi señor haremos un trato, nosotros escoltamos a esta persona y en cambio nos darán una cantidad razonable de ese brebaje
– Magnifico – Heechul aplaudió
– Pero, lo necesito por escrito –Nunca confiaría en sus palabras
– Me parece muy bien, escribiremos un contrato – Los dos asentimos
– Acompáñenme – Y seguimos a Heechul…
“Vayan a la posada, pónganse cómodos, partirán a las 8.00 am y nos veremos en la entrada de Whiterun, hoy descansaran ahí busquen a Chansung” fueron las palabras que nos dijo Heechul, en cuanto entramos, fuimos a la barra
– Disculpe señorita – Pregunto Jhope a una mesera –¿Quién es Chansung?
–Es el que está atendiendo la barra – Ella nos miro de pies a cabeza –Se nota que son foráneos– La chica nos guiño un ojo – A que debemos el placer de ver chicos tan atractivos y vistiendo tan elegantemente
Jhope rio, sabía que comenzaría a alardear – Bueno muñeca nosotros venimos de Ciudad Imperial y estamos aquí para escoltar al posible héroe de Whiterun
Ella abrió los ojos –¿Van a escoltar al chico que salvo al hijo del Rey?
– Exacto –Sonrió ladinamente Jhope – Dijeron que necesitaban a los mejores caballeros y pues aquí estamos no podíamos rechazar ayudar las personas indefensas
Yo al escuchar eso se me salió una risa y rodé mis ojos, mire hacia dirección opuesta y vi a un tipo corpulento – Disculpa ¿El es Chansung? – Apunte con mi dedo
– Ah sí es él, ¡Chansung! – Él miro a la chica
– ¿Que paso Bom?
– Estos caballeros están buscándote, te los dejo –Le guiño un ojo a Jhope y se fue a atender las mesas, Jhope la siguió con la mirada hasta que lo golpee en la cabeza “Auch” fue lo único que emitió en cuanto vio a Chansung en frente de nosotros
–¿En qué puedo ayudarlos?
– Yo soy Jimin y el es mi compañero Jhope y venimos por parte del Rey
–¿Ah de Ciudad Imperial verdad?
– Así es
– Si claro aquí están sus llaves arriba están sus habitaciones, si gustan pueden comer aquí también
– Gracias de hecho me estoy muriendo de hambre – Le dije sobándome la barriga,
Chansung rio un poco –Busquen una mesa y siéntanse cómodos
Así lo hicimos y nos sentamos en una mesa alejada de la puerta y lejos del Bardo que tocaba su lira mientras un chico de cabello oscuro lo acompañaba con el canto, Jhope estaba maravillado por la voz de aquel chico porque no escuchaba nada de lo que le decia; la misma mesera vino y nos trajo las platillos, habíamos pedido chuletas de ternera junto con hidromiel, nos relamimos los labios y comenzamos a devorar la comida; de repente entro un tipo que mostraba una gran presencia, portaba su cota de malla y su peto era de hierro, era alto y de tez morena, cabello negro y portaba en su espalda una Claymore
– ¡Hyeongkon! – Grito desde la barra Chansung, el sonrió y se acerco feliz a la barra para darle un fuerte abrazo
– ¿Qué andas haciendo por acá?
– Tengo una misión mi querido amigo, mañana partiremos en la mañana –Al escuchar abrí mis ojos y le di un golpe a Jhope quien casi se ahogaba con el hidromiel
– ¿Qué ocurre? –Terminándose de limpiar la boca con su mano
– ¿Escuchaste? Creo que es él
– ¿El qué?
– A quien vamos a escoltar, míralo –Jhope dejo de comer y lo miro, después de unos segundos movió su cabeza de arriba abajo y sonrió – Se ve bastante capaz de aguantar muchas batallas ¿Verdad?– Le dije feliz, después de mirarlo unas cuantas veces más seguimos comiendo.
Se volvió a abrir la puerta y entro un chico tropezando con la primera mesa, espera un momento ese chico era el mismo que se tropezó con el oso y que salió huyendo sin darme las gracias, emití una mueca de disgusto al ver como buscaba entre las mesas hasta que el otro chico que antes se había estado carcajeando con el bardo le levanto la mano, el sonrió y fue hacia él, no sin antes tumbar una bebida de la mesera, el se disculpó mil veces y ella solo le sonrió
– Pero que fastidioso – pensé en voz alta, Jhope me escuchó
– ¿Qué ocurre?
– ¿Ves a aquel tonto sentado junto con el otro tonto?
– ¿Los tontos que están sentados con el Bardo?
– Si esos, ¿ves ese pelirrojo?, ese fue el inútil que asusto al oso – Jhope lo miro por un momento y comenzó a reírse, yo bufe de molestia y me le quede viendo, el sonreía y reía, parecía como si contara alguna anécdota porque los otros lo miraban atentamente
–¿Jimin? ¿Jimin? – Jhope me hizo despertar
– ¿Qué ocurre?
– Vayamos al burdel
– ¿Qué? –Jhope me miro pícaramente
– Ni siquiera creo que haya aquí
– Bueno cambiémonos y busquemos si hay – Me hizo un puchero y yo cedí, nos levantamos de nuestros lugares y fuimos a nuestras habitaciones.