-Dígame señor Wu, ¿Qué clase de negocios? – Le pregunte expectante a esa persona que sería mi posible futuro empleador.
-Tengo una agencia de entretenimiento en corea llamada Midnight. Hago entrenar a mis chicos y chicas en cuanto a baile y canto para hacerlos debutar en un grupo cuando ya estén lo suficientemente listos. Por otro lado, también reciben clases de actuación, radio y televisión para que puedan prosperar en otros campos. Deberías pensar esto que te estoy diciendo luhan, he decidido otorgarte la oportunidad de ser una estrella en corea. ¿No te gustaría ser famoso, tener admiradoras y admiradores? ¿Qué todos quieran saber de ti? ¿Qué quieran ser como tú?-
Wow, la simple idea era tentadora. Se me hacía agua la boca de solo pensar que podría alcanzar mi sueño si tan solo aceptaba la propuesta de Kris.
-Todo suena excelente señor Wu. Digo, Kris. Pero tengo muchas dudas al respecto. Es usted una persona muy bien parecida pero…no sé nada sobre usted o como son sus negocios.- le respondí con un tono apenado, no quería que ese maravilloso y magnifico ser que tenía en frente perdiera la confianza en mí.
-Entiendo Luhan-me dijo resignado- he tenido que pasar por esto muchas veces, pero soy un caza talentos, ¿de acuerdo? Todo lo que quiero es encontrar personas con talento para que yo pueda ayudarles a prosperar. Si quieres podríamos hablar en otro lugar y no aquí en medio de la calle.
-¡No! Ahora no, de hecho debo ir a trabajar. Vera señor Wu... ¡KRIS! no le negare que estoy notoriamente interesado en sus palabras, pero tengo miedo. No sé nada sobre usted, su agencia, contactos, nada, además, será en un país extranjero, ¿Qué pasa si no me va bien?
Estaba muy interesado pero preocupado también, quería irme pero tenía miedo, miedo a fallar, a ser un fracaso. No sabía que debía hacer.
-Lo se luhan, mira- extendió su mano dentro del saco de su traje y extrajo de el una tarjeta de presentación- Aquí tienes mis datos personales. Piénsalo esta noche, medítalo con tu almohada y llámame en la mañana. De verdad espero poder oír tu voz en la mañana diciéndome que aceptas mi oferta.-Sentencio con una increíble y matadora sonrisa.
¿Estaba intentando enamorarme? Quizá lo estaba logrando, bueno, no enamorarme, pero si me hacía tener cierto interés en llamarle.
-Estoy hospedándome en el Hotel EXODUS, creo que sabes cuál es, es uno de los más famosos aquí en china. Te dejare marchar ahora luhan. Por favor, piénsalo y llámame. Esperare tu llamada.- me dijo dándose la vuelta y trazando un camino hacia un lujoso Maserati. Sí que debía tener dinero.
-Lo pensare, lo prometo.-le grite a su espalda mientras él hacia una especie de despedida con su mano.
Camine, o más bien, levite hasta el bar en el que trabajaba, no supe en que momento llegue, solo sé que llegue en un abrir y cerrar de ojos. Todo el camino estuve meditando la valiosa propuesta de Kris. ¿Debía intentar? Pero, ¿y si fracasaba? Igual que todas las noches mi turno comenzaba a las 8:00 pm y terminaba a las 12:00 PM. Debía centrarme en cantar y no pensar en la propuesta de Kris si no quería desafinar y ser el hazme reír de todos. Cumplí mi turno, me despedí del jefe, pero esta vez sin un “nos vemos mañana” no sabía si seguirá trabajando allí luego de aceptar la propuesta de Kris, espera… ¿Ya estaba pensando en aceptar?
Llegue a la habitación que compartía con Lay, por suerte este estaba en su cama con un libro leyendo.
-¿Qué tal el día de hoy Xiao Lu? ¿Trabajaste bien?- pregunto con pereza mi mejor amigo.
-Pues…bien, creo. ¿Qué paso? Pensé que estarías de “Ron y mujerzuelas” con los chicos.- le dije a mi despistado amigo.
-¡Oh! ¡Vamos Lu! Sabes que no soy de esa clase de personas- respondió con un tono de indignado.
-Lo sé. Lay, debo comentarte algo y nadie mejor que tú para darme un consejo.
-Bien, solo…suéltalo. ¿Qué paso? ¿Descubriste que no eres gay?
-¡Ha! Chistoso – le dije mientras ponía mis ojos en blanco- Lay, al salir del teatro un hombre me abordo, era una caza talentos, me vio bailar y quiere explotar mi talento .- le dije esperando la reacción de mi amigo-
-Hmm. Y… ¿Eso es todo?-respondió escéptico.
-Pues…tendría que irme a corea.
-¿¡QUE!? ¿COREA? Luhan ¿irte a otro país? – y ahora sí, Lay estaba echando humo.
-lo sé, lo sé, pero el tipo es un hombre de negocios, mira – le extendí su tarjeta- me dio tarjeta y quiere que hable con el todo respecto al asunto de mi entrenamiento en corea. Lay, podría por fin ser una estrella, un artista.
-está bien, lo siento por gritar, pero…amigo, es otro país. A penas si hablas coreano y no estoy seguro que aquello que Chen te enseño sean buenas palabras, sabes cómo es Chen de bromista.-
Medite las palabras de Lay y si, ahora que lo pensaba, podía hablar coreano gracias a nuestro más cercano compañero de baile Chen, no era tan bueno, pero Lay no podía decirle que no a alguien que le pidiera unirse al Crew. Chen había llegado a china cuando solo tenía 10 años, y aprendió un chino muy fluido pero todo el tiempo hablaba en coreano con sus padres así que podía hablar perfectamente ambos idiomas. Para hacerlo sentir en su hogar le pedí que me enseñara a hablar coreano y así hacerlo hablar en su lengua natal más seguido.
-Pero qué tal si puedo prosperar, Lay, en serio quiero intentarlo.
-Lu, ¿acaso lo conoces? JODER ES OTRO PAIS. ¿Cómo te iras así como así con cualquier tipo a otro país? Lo conociste hoy. ¿Qué sabes de él, de su agencia? ¿Tiene hijos?
Las lágrimas comenzaron a salir casi que por inercia de mis ojos, lo supe porque Lay hizo esa carita que hacia cuando creía que había lastimado a alguien.
-Lo siento, lo siento Lu, de verdad, estoy preocupado es todo. Soy la única persona que tienes y estoy haciéndote esto más difícil, de verdad lo siento. Mira Lu, -resoplo- si crees que debes hacerlo, hazlo. Yo no puedo detenerte, apoyare sea cual sea tu decisión, solo quiero que me prometas algo. Si te vas a corea escríbeme siempre, llámame, tenme al tanto de tu situación económica, física, mental, todo. ¿Lo harás por mí?
Era el mejor. Lay simplemente era el mejor. Lo abrace hasta asfixiarlo.
-Te lo prometo. –le dije secando mis lágrimas.
-¿y? ¿Cuándo te vas?- podía notar su prematura nostalgia, aun no me iba y ya me estaba extrañando.
-No lo sé Lay, me dijo que lo llamara mañana si decidía decir “si”, lo llamare a primera hora para poner un lugar, fecha y hora de encuentro para hablar de ese asunto. Aun no des nada por sentado, debo ir a hablar con Kris y saber si me conviene o no todas sus proposiciones- le respondí con confianza-
-¡Wow!, ya le llamamos Kris, ¿Qué son esas confianzas?- me recrimino con una mirada acusatoria.
-El mismo me pidió llamarle por su nombre y no “Señor Wu” – me defendí.
-Bien, entonces, no se hable más. Mañana hablaras con ese hombre y sabremos si mi amigo se convertirá en una estrella o no…Lu- llamo mi atención y solo le respondí un corto “hmm”- cuando seas famoso ¿No te olvidaras de mí?¿cierto?
Podía estar comiéndome a besos a mi mejor amigo, pero sería muy raro y Lay me miraría con cara de “no me violes”
-No podría olvidarte ni en un millón de años.-le fui totalmente sincero a mi mejor amigo.
-Perfecto. Ahora date una ducha y duerme, apestas a bar.
Él tenía razón, trabajar en un bar solo dejaba en mí el asqueroso aroma a cigarros y alcohol. No trabajaba allí por gusto, lo hacía porque había sido el único lugar en el que me contrataron y necesitaba con urgencia un empleo, pero el dueño se había portado bien conmigo así que decidí quedarme. Me duche e inmediatamente coloque mi cabeza en la almohada caí rendido. Al día siguiente me esperaba una charla con el Señor Wu, o Kris para la comodidad de ambos.
…
…
…
Desperté a las 6:00 AM, me duche, lave mis dientes y me dirigí a la pequeña cocina que tenía la habitación de Lay, solo tome algo de cereal y me dispuse a llamar al señor Wu. Lo hice en el pasillo puesto que no quería despertar a Lay. Me encontraba muy nervioso en esos momentos.
RING
RING
RING
-Bueno, Aquí Kris- me recibió su sexy voz.
-Buenos días, Kris, te habla…-no me dejo terminar.
-Luhan, buenos días, esperaba tu llamada con ansias- si fuera mujer estaría gritando como quinceañera enamorada-
-Kris, estuve pensando su propuesta y he decidido aceptar.
Se hizo un silencio.
-¿De verdad?- respondió casi confundido.
-Sí, de verdad, pero…tal como dije ayer, quiero saber todo acerca de esto. Donde estaré viviendo, números telefónicos, como hare si no manejo muy bien el idioma…-solo era vomito verbal.
-WOW, WOW, calma muñeco, ¿qué tal si llegas a mi hotel y hablamos con mi socios todo al respecto? Te explicaremos todo con calma, punto por punto, detalle por detalle.
-Bien ¿A qué hora quiere verme?- pregunte con toda la calma del caso.
-¡ya mismo! Llega al hotel, ya te he dicho cual, Pregunta en el lobby por mi e inmediatamente te harán subir. Te veo dentro de poco Luhan- y colgó.
Salí apresuradamente, me esperaba un camino largo hacia el hotel EXODUS, el cual implicaba tomar dos autobuses y estar sentado 30 minutos en cada uno. EXODUS era uno de los hoteles más costoso y lujosos de china y se encontraba en la mejor zona de Beijín.
Al cabo de dos horas me encontraba en el EXODUS. Todos, quien entraba y salía se veían elegantes. En cambio yo, allí me encontraba en el lobby con mis converses negros, un polo simple con una camisas de cuadros y unos jeans rotos. Nada mal para un chico de 22 años.
-Buenos días señor, estoy buscando a…-no me dejo terminar, COÑO, al menos me dejarían terminar alguna vez mis frases.
-El señor Wu lo espera en el penthhouse.- respondió un señor de edad avanzada y con cara de gruñón.
Tome cada una de las indicaciones brindadas por la recepcionista y llegue por fin a una gran puerta de madera pulida con el número 1212 en dorado, toque 3 veces pero no hubo respuesta. Vire mis ojos y note un pequeño timbre, CUANTO LUJO. Toque el timbre y la respuesta fue inmediata, la puerta de abrió dejándome ver la magnificencia de aquel lugar, todo estaba lleno de luz ya que esta se filtraba por los grandes ventanales que poseía este piso, solo poda ver a través de ellos el gran cielo azul y a lo lejos la ciudad. Era una vista hermosa.
-Querido luhan, que bueno que has llegado, ven siéntate, ¿Te fue difícil llegar? – pregunto Kris mientras bajaba unas escaleras de cristal en forma de caracol.
-Pues vivo algo retirado, pero aquí estoy- respondí sinceramente.
-Bien entonces, no te hare perder mucho tiempo vale, hablaremos de cosas concretas, mis socios están por llegar, pero no es necesario que tengas confianza con ellos, conmigo basta.
Bien…eso era raro.
-¿Vives solo luhan? ¿Tienes familia?- sus preguntas inmediatas me hicieron abrir los ojos.
-¿Disculpe?- estaba confundido, ¿eso debía el que saberlo?
-quiero conocer a quien hare debutar luhan, dime ¿Tienes familia? ¿Tíos? ¿Con quién vives?
-No tengo a nadie, mis padres murieron y mis tíos que se hicieron cargo de mí no sé dónde están, hui de casa a los 18 y desde entonces lucho por sobrevivir. Vivo con mi mejor amigo, Lay y solo lo tengo a él.- me sentía algo triste, era una persona prácticamente sola.
-Así que… ¿si te vas solo te extrañaría ese amigo tuyo? ¿Lay? –Y…esa pregunta fue muy extraña.
-supongo que sí.
-¿Le comentaste a tu amigo Lay sobre hablar conmigo y debutar?-su tono era serio ahora.
-Sí, siempre le cuento todo, a demás necesitaba que alguien me aconsejara- todo estaba tornándose muy raro con sus preguntas y mis respuestas.
-Bien, escucha luhan, no te pongas nervioso, solo quiero saber a quién debo recurrir en caso tal algo te ocurra.
Bien, eso sí que me tranquilizaba un poco más. Y yo imaginando cosas raras, Kris era un buen tipo.
-¿Eres virgen luhan?- pregunto de sopetón.
-¿¡DISCULPE!? – mi rostro debía estar en el tono de rojo más alto de la escala tonal.
-¡oh vamos! No te escandalices, ¿Qué tiene de malo ser o no serlo? ¿Has tenido novia? O… ¿Novios quizá? –Mi cara debía ser un poema en estos momentos
-Lo sé, pero, es una pregunta muy personal. No creo que sea necesario saber la respuesta.
-No seas cobarde, debo saber de quién debo cuidarme, cuando seas una estrella muchos o muchas querrán alegar que fueron tus novios o novias y eso escandalizaría a tus fans.
Y volvía a tener razón, ¡RAYOS!
-No, no he tenido ni novios ni novias, y sí, soy virgen aun.
Kris tenía una sonrisa ladina en su rostro en estos momentos y yo, estaba muriendo de vergüenza. A mis 22 años nunca me había atrevido a decirle a un chico que me gustaba, nunca tuve novias, solo supe que era gay una vez estando en una práctica uno de los chicos se quitó la camisa y lo vi por mucho tiempo, después de ese día solo me lo imaginaba a el poseyendo mi cuerpo y ya incluso me masturbaba pensando en él. Era patético, lo sé. Hasta que supe que tenía novia y mis erecciones ya no tenían motivo para estar allí.
-Es perfecto. Te daré algo de beber mientras llegan mis socios y hacemos el papeleo adecuado ¿Te parece? –Asentí- ¿Qué quieres? ¿Agua, jugo, cerveza, vodka, ginebra? –me mencionaba cada uno mientras se dirigía a la cocina.
-Solo jugo, gracias, no bebo.- con mi vista recorrí todo el lujoso lugar. Sí que debía tener dinero para pagar su cuenta allí.
Al cabo de unos minutos Kris regreso con un vaso de jugo de naranja en su mano y en la otra traía algo de licor, no estaba seguro que era. Me tendió el jugo a lo que respondí unas educadas gracias y bebí del vaso. Kris sentó en la silla en frente de mí, no hablo por unos minutos. Parpado varias veces, comencé a ver a Kris de manera opaca, mis ojos me traicionaban. Restregué mis manos contra mis ojos y comencé a sentirlos cansados. Deje el jugo sobre la mesa que tenía al lado.
-Luhan, ¿Te encuentras bien?- pero Kris no movía ni un musculo para socorrerme.
Me levante de la silla y di unos pasos, caí estrepitosamente en la baldosa blanca y reluciente, mis ojos estaban muy pesados. Sentí el timbre de la puerta y a Kris pasar por sobre de mí. Fije mi vista en ella y dos hombres vestidos de negro entraron.
-igual que todos, fácil, aunque este abrió la boca y le dijo a alguien más de su supuesto debut, ¿Qué deberíamos hacer? ¿Ir por el otro?-escuche la voz de Kris.
-¿Y llevar dos personas a corea?, No, déjalo así, de todos modos, si nos vamos hoy mismo el no tendrá ninguna oportunidad de comunicarle algo a esa otra persona, actuemos rápido- dijo uno de los desconocidos.
-Vaya, vaya, este es muy bonito Kris, lo quiero para mí. Mira esa carita, podría pasar por una chica- menciono el otro mientras mimaba mi cabello, quería quitármelo de encima pero no poseía las fuerzas para eso.
-no lo toques, animal. ¿Tienes el auto y el Jet listo?- uno de los sujetos asintió- ¿Y su documentación falsa? – otro asentimiento- perfecto. Bien pequeño Luhan, Vamos a hacer una estrella en corea.
Y me sumí por completo en la oscuridad al cerrar mis ojos. Estaba inconciente.