Era una noche despejada y tranquila, aunque así no era el cumulo de emociones que tenía dentro de un muchacho de cabello largo hasta los hombros de color negro azulado muy atractivo, de 1 metro 70 cm de alto músculos precisos (para que cualquier hombre o mujer babee incluyéndome) y rasgos andróginos que aún tiene rasgos aun infantiles
Sirius Orión Black caminaba sobre una de las calles aledañas del que fue su hogar durante 16 años, en su interior había un revoltijo de emociones que iban desde la nostalgia, la rabia y la tristeza, siendo la ultima la más fuerte de todas, le dolía que su hermano haya sucumbido a la presión de su familia, siempre fue su sueño salir de esa infernal casa, pero deseaba también darle la libertad a su pequeño hermano, pero su hermanito se había resignado al destino que deseaban sus padres para él y él aunque lo deseara no podía obligarlo a cambiar de parecer, hace 5 minutos antes de salir por la puerta trasera de su casa se despidió de el y le ratifico su apoyo si deseaba dejar de vender su alma a Voldy
El era un gran Gryffindor pero eso no quitaba que pudiera ser un poco Slytherin o que pudiera mostrar un poco de cobardía, en ciertas ocasiones pudiera ser cobarde, astuto e inteligente; solo que muchas veces se recriminaba por ello, y muchísimas más elegía hacerse el tonto y actuar en vez de analizar, como en esa ocasión, sabía que su familia planeaba algo relacionado con la serpiente mayor, por supuesto al señor tenebroso no le bastaba con esclavizar a su hermano sino que también lo quería a el y según los rumores que había escuchado de sus padres Voldy no solo buscaba hacerse de seguidores si no que buscaba alguien para calentarle su cama y tener descendencia, por fortuna ese no era el objetivo principal de Voldy o el escaparse sería una pérdida de tiempo (bueno tiene los Horroclux), sabia que su hermano estaba a salvo ya que no tenia la suficiente cantidad de magia para gestar un bebe, además su hermano sabia muy bien como cuidarse y se sentía orgulloso de el, solo deseaba que esto fuera suficiente
Esa fue la ultima vez que Sirius Orión Black vio por ultima vez la casa en la cual creció por mas de 11 años, se fue sin nada de las riquezas económicas las cuales estuvo rodeado desde la cuna, pero con algo que ellos nunca tendrán amigos, tomo el autobús noctambulo con el destino del Valle de Godric como destino
Le alegraba volver a Hogwarts, y lo que mas le gustaba era volver a ver a James Peter y a su hermoso Lunático su amor secreto y una de tantas cobardías, se dio cuenta que le atraía hacia dos años en su Quinto curso, pero no necesitaba ninguna prueba ni razonamiento para saber que lo amaba desde que lo conoció cuando fue seleccionado para Gryffindor, de inmediato todo de el le atrajo en especial esos ojos color miel le fascinaron y atrajeron su envidia , a pesar de ello en ese instante decidió hacer a esa persona su amigo
Remus seguía igual de guapo de siempre, le encantaba todo de el, en especial cuando le sacaba sonrisas, por ello muchas veces se comportaba como un payaso y un tonto, aunque muchas veces comportarse así le traía dolores de cabeza que no deseaba , un gran ejemplo de ello era Severus Snape, su pretensión al conocerlo fue de ser su amigo pero al ver su agrado por la casa de las serpientes tuvo que acordarse de su familia y un bufido y una mala expresión puso en pie a años de riñas entre ellos; lo único cierto es que Sirius Black amaba con toda su alma a Remus Jhon Lupin y se le rompía el alma que amigo no le haya dirigido la mirada de la misma forma en la que el lo veía, aunque era mejor estar junto a el ya fuera como amigo
Se alegró de ver a su hermano, realmente lo había extrañado, aunque al acercarse este le hizo una réplica de la cara que ponía en ese momento su madre al toparse con “impuros” según ella, con un escalofrió se alejó de aquella a la que alguna vez llamo familia