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THE LIE IS NOT OVER por Daydream duet

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Notas del capitulo:

Hoola que tal? se que llegamos retrasadas pero ahora fue Ai-chan quien ha pescado tremendo gripononon y bueno me mando hasta ayer muy tarde y fue inevitable.

como recompenza el cap que tanto esperabhan chan can esta aqui jeje chan cchan chan chan, en verdad espero que les guste.

en fin les dejo leer y nos vemos hsta as notas del final.

Jin.

Sergevich se paseaba de lado a lado de la bodega con suficiencia, su mirada cargada de odio y orgullo, mientras Alexy solo le contemplaba, sin decir palabra alguna…

-          Mis hijos son un par de imbéciles, Maximilian desaprovecho la oportunidad y Leonardo, Agh… ni hablar de él, sigue siendo demasiado blando

-          Leonardo ha sido uno de mis mejores aprendices, es bastante astuto, en cuanto a Maximilian, siempre fue un rebelde, queriendo imponerse según lo que él quisiera, no me sorprende que haya desaprovechado la oportunidad

-          Tengo el siguiente movimiento, no esperaba que todo saliera a la perfección hoy, pero, pronto voy a obtener lo que quiero

-          Que va a pasar con sus hijos?

-          Aun no decido, por lo pronto, veamos cómo actúa Leonardo ante el hermano abnegado, que va a poner su situación política de cabeza

***

Leo despertó mientras escuchaba el ruido del ascensor, odiaba eso, que sus sentidos alerta le hicieran perder unas buenas horas de sueño, trato de conciliar el sueño, eran las 9, no estaba en servicio y pretendía ignorar los asuntos de la oficina alegando una crisis nerviosa después de lo del  día anterior, mas todos sus deseo se vieron interrumpidos, cuando una pelirroja entraba en su habitación con una mirada inusual.

-          Señor…

-          Buenos días Lilian

-          Creo que no son muy buenos…

El pelinegro de desperezo sentándose en la cama y pasándose las manos por  el rostro.

-          Explícate

-          El señor presidente viene para acá, tal vez y a lo mucho en menos de 5 minutos, consiguió una orden de cateo para la oficina y su departamento, me temo que eso no augura nada bueno

-          Mierda, tenemos algo que esconder?

-          Para nuestra suerte, ayer en la madrugada envié a Frank al bar de Maine con todos nuestros papeles, aquí y en la oficina no encontraran nada, más que su reserva de vinos importados

-          Así que ha comenzado a  dudar de mí…

-          Lo siento señor

-          Está bien Lilian, no es tu culpa, solo no debí de haber actuado como lo hice, sabes si han hablado con Phil?

-          Así es, el dijo que habían notado movimientos extraños en los sensores de fuera de la mansión, pero que cuando enviaron al servicio secreto a revisar no había nada, todo estaba normal

-          Bien, dijo algo ha acerca de cómo me entere?

-          No señor nada

-          Bien, juguemos esta pieza, me temo que me tienen en jaque en este movimiento…

Se levanto de la cama, se dirigió al baño dispuesto a tomar una ducha y enfrentaría lo que viniera.

***

-          Franco esto es una completa estupidez y lo sabes

-          Me importa un carajo lo que pienses Miller, necesito explicaciones o te juro que haré lo que sea necesario.-Franco gritaba a su subordinad mientras estaban atorados en el trafico matutino de Manhattan

-          Estas dudando de Archer, es no solo cuestionar su trayectoria si no también su lealtad y sabes que te ha apoyado desde el inicio

-          No me ayudes Miller, bastante tengo ya con todo esto, no puedo pensar nada lógico, pero me temo que todo me hace dudar de él

-          Oh, nuestros empleados de la CIA, EL FBI y todos los imbéciles de SWAT no hacen bien su trabajo

-          Eso también es una posibilidad, todos quienes revisaron esa noche la seguridad de la mansión Biavane  han sido despedidos

-          Bien, hagámoslo a tu manera, pero Archer va a patearte el trasero si él  resulta inocente y lo sabes

-          Ya veremos…

Después de un largo tiempo en el insoportable tráfico, Miller y Franco arribaban a la zona departamental de Leo, el portero les recibió y les acompaño hasta el elevador, presionando para ellos, el Penthouse, 30 pisos después el elevador ceso su movimiento, las puertas se abrieron y los hombres caminaron directo por el pasillo hasta la puerta, franco estaba por aporrear la puerta, pero no fue necesario, tan solo había acercado un poco sus nudillos hasta la fina caoba, pero la pelirroja ya les esperaba en la puerta, abriéndola para ellos.

-          Buenos días señor presidente, señor vicepresidente, pasen por favor

 La pelirroja les hizo un ademan para que se introdujeran en la vivienda, en la estancia estaba un Leo bastante sereno, leyendo sumamente entretenido, mientras una taza de café descansaba en la mesilla frente a él, Franco y Miller se aproximaron hasta él, llamando su atención rápidamente.

-          Franco, Mason, a que debo su visita esta mañana, pasen y siéntense por favor, quieren café?.- el pelinegro sonaba tranquilo, no había deje de burla o falta de respeto en su tono de voz

El presidente y vicepresidente tomaron Lugar en el amplio sillón frente al pelinegro viéndolo de forma acusatoria

-          No, gracias, mi visita es corta Leo, espero que lo sea

-          Que sucede Franco, después de lo de anoche pensé que estarías encerrado en tu oficina todo el día, haciendo investigaciones y demás

-          Precisamente eso hago, pero no desde mi oficina,  lo siento mucho Leo, pero realmente después de lo que sucedió anoche, todas mis opciones recaen en ti

-          Acerca de qué?

-          Como sabias de los explosivos? Como estabas al tanto de que algo iba a suceder? Y de ser así, quien demonios fue tu contacto?

-          No sé de que hablas Franco, claramente el shock de anoche hizo estragos sobre ti, pero un gracias por salvar mi vida y no permitir que dañaran a mi esposa e hija bueno…

-          Con un demonio Leonardo no estoy jugando, sabes que no me estás dando otra opción, como ya sabrás esta mañana se me fueron otorgadas dos órdenes de cateo, tu oficina fue revisada esta mañana y aun falta tu departamento

-          Me estas acusando de el alboroto de anoche?

-          Así es Leo, me estás dando evasivas a las respuestas así que, no sé qué pensar, sabes pensé que esto sería fácil, hablarías y yo no tendría que castigarte, pero… hemos llegado hasta el otro extremo y si no hago nada, viviré con la culpa y la incertidumbre

-          Habla claro por favor

Parándose de su Lugar y junto con él Mason, Franco extendió la mano hacia Miller quien le entrego una carpeta aterciopelada azul marino, el pelinegro lo veía venir desde un principio, pero nunca imagino que estando tan cerca del éxito, el “Mate” estuviera por llegar…

-          Leonardo Archer como el Presidente de los Estados Unidos de América, te delego de tus actividades y de tu puesto, va al igual para Lilian y Frank, has cavado su tumba junto con la tuya

-          Piensa lo que se te dé la gana Franco, adelante pero espero que encuentras a alguien que te lama las suelas como lo he hecho yo todos estos años

-          Esta es tu primera advertencia verbal, Leo, cállate o te voy a confinar a arresto domiciliario

-          Bien, Lilian!!!.- grito, la pelirroja se aproximo hasta el, tendiéndole una pluma, con la cabeza gacha.- ahora retírate por favor, hablaremos en un instante

Leo, firmo el papel que tenía enfrente de él, sobre la mesa de café y con los ojos mas fríos que nunca se hubieran visto y que le causaron escalofríos a Franco, entrego la carpeta

-          Gracias

-          Oh, no hay de que, espero que hayan disfrutado de su visita, ahora por todo lo que más quieran, LARGENSE!  De mi departamento

-          Lo siento, hermano.- Miller le palmeo el hombro y guio a Franco hasta la salida.

En cuanto la puerta hubo sido cerrada, la pelirroja salió de la habitación, vio a Leo y corrió hasta él.

-          Lo lamento señor

-          Ya no importa Lilian, sabíamos que esto iba a pasar, llama a Frank dile que lo necesito precavido no quiero que se acerque a los bares ni a las pandillas, Franco va a tener un ojo en nosotros ahora más que nunca

-          Bien, llamare a Mad para dejarlo a cargo, él y Lens estarán bien por un tiempo sin nosotros

-          Gracias Lilian, tu igual creo que después de todo ya necesitabas vacaciones, diviértete, pero, no uses las cuentas privadas, usa mi cuenta personal, creo que por lo menos Franco va a depositar una buena cantidad para mantenerme tranquilo

-          Aun no me explica una cosa señor

-          Que es Lilian?

-          Que paso anoche?

-          Bien, mi padre se presento después de todo, lo último que supe fue que se planeaba un atentado contra el presidente, así que necesitaba una  distracción  para sacarles a todo de allí, me escabullí hasta el auto y saque mi reserva de explosivos, acomode 10 de los que usamos para las evidencias en los paneles entre los cristales, pensé que solo se sacudiría un poco, pero alguien se me había adelantado, cuando los hice detonar, una carga extra de dinamita exploto, haciendo que la mayoría de los cristales del salón, salieran volando por todas partes, yo estaba bien, pero cuando Frank saco a la última persona consiente, mi padre se presento ante mí, y alego que todo el plan de la noche había sido idea de Maximilian, así que no se que se traiga entre manos esta vez, tenemos que estar atentos infinita veces más listos aun, o esto terminara en la tercera guerra mundial

-          Así que su padre….

-          Es más astuto de lo que hemos creído jamás Lilian, bueno, ya que no hay nada más en mi agenda por… quien sabe cuántos días más… ve a descansar Lilian, pediré comida china y usare Netflix por un rato, hasta que concilie el sueño temprano

-          M…. me temo que no va a poder ser…

-          Qué? Porque no? Después de todo no estoy en servicio, déjame dormir Lilian, hibernar de ser necesario…

-          El señor Ministro lo cito hace semanas a una junta y… creo que le va interesar cierto invitado que de seguro andará por ahí…

-          Agh… tengo que salvarle el trasero una vez más a Franco cierto? Agh… espero una cantidad muy grande por mi despido… bien, dime la hora y el lugar ahí estaré…

 

***

Lo que menos habría esperado en la vida era encontrar a Leo en aquella fiesta, todas las personas representativas, famosas y exitosas del estado se encontraban ahí, sí, pero a Leonardo Archer no le gustaban ese tipo de reuniones así que creyó seguro asistir sin su guardaespaldas/novia, así que cuando le vio unos metros más adelante hizo lo que toda persona madura haría en eso casos, darse la vuelta y huir con la esperanza de no ser descubierto, por desgracia para él la suerte no estaba de su lado en ese momento, Leo lo había notado desde el primer momento que entró en el gran salón y cuando lo vio marcharse se apresuró a detenerle.

-¿creía que te agradaban las fiestas?

-creí que esta seria exclusiva.

-lo es porque estoy aquí.- la expresión de fastidio que mostro el peli plata no era algo de lo que alegrarse pero no pudo evitar sonreír, hacia demasiado tiempo que estaba tan cerca de él como en ese momento.

-hoy día dejan entrar a cualquiera.

-….

-Bueno, si pudieras soltarme, te lo agradecería, me gustaría irme cuanto antes. – y eso no era del todo una mentira, la inesperada cercanía del pelinegro lo desorbito y su perfume lo estaba volviendo loco, si pasaba más tiempo a esa distancia seguro que terminaría obedeciendo a sus impulsos y lo besaría ahí mismo.

-bueno, pues…-

-Archer le estaba buscando…- un hombre alto, de unos 50 años se había acercado a ellos. – oh! Joven Biavane, es un placer verlo aquí. – dijo cuando capto su presencia.

-Barrel, ¿para qué me buscabas?

-El ministro quería presentarte a su hija.

Y aunque a Dilan le molestaba que el pelinegro estuviese teniendo citas concertadas, en ese momento lo vio cómo su oportunidad para escapar y lo agradeció internamente al menos hasta que llego la contestación del alto.

-ah! Cierto, bien, la cosa es que tengo asuntos que resolver con el joven Dilan, esperaba poder discutir con él los nuevos programas de seguridad que las empresas PROX están diseñando, ¿crees que podamos contar con un lugar más privado?- y en ese momento la sonrisa interna del ex castaño se desvaneció.

-Me parece que el despacho se encuentra ocupado pero creo que no habrá ningún problema con que suban a ultima  de las habitaciones del segundo piso, cuentan con una pequeña biblioteca y un escritorio que seguro les servirá.-

-gracias Barrel, nos vemos más tarde. Dilan, ¿me sigues?

Y ante la mirada de los presentes que les habían escuchado y de Barrel que les observaba sonriente, el ojimiel no pudo negarse y termino por seguir al pelinegro, escaleras arriba hasta la habitación más retirada del segundo piso.

Como toda buena mansión de un millonario, el lugar era exquisitamente elegante y lujoso, más que un simple cuarto más, la pequeña biblioteca era realmente una biblioteca como lo había manejado Barrel el sitio bien pasaba por un segundo despacho. Su pensamiento se interrumpió cuando el claro sonido del seguro resonó en la habitación, estaban solos, en la última habitación del segundo piso cuando todos estaban en la planta baja y nadie sin un permiso y sin grandes influencias podía acceder a donde estaban ellos.

Dilan se tensó cuando sintió los brazos fuertes de Leo rodearle por la cintura, mientras este acariciaba con su nariz la línea de su cuello y suspiraba notoriamente su aroma, una corriente eléctrica le recorrió todo el cuerpo… hacia tanto que no lo sentía así, que no tenía el cuerpo del pelinegro y lo sentía completamente suyo, completamente de Dilan Biavane.

-Espera…- llevo sus manos a las del pelinegro e hizo fuerza para que este le soltara pero Leo era por mucho más fuerte que él y lo que menos quería el ojiazul era soltarlo.

-No quiero… te he echado tanto de menos.- le susurro sensualmente al oído y los brazos que lo rodeaban lo presionaron más contra el cuerpo que tenia detrás pudiendo sentir la erección creciente del azabache.

Y esas palabras dejaron helado al peli-plata, sentía lo mismo, le había anhelado con ansias y eso que le estaba haciendo sentir era simplemente maravilloso, El pelinegro no le dio tiempo a más lo giró aún entre sus brazos y le beso apasionadamente, con amor y deseo, un pequeño gemido escapo de los labios, y de esa manera no pudo contenerse más, no podía negarse lo que tanto deseaba y menos si lo tenía  así, paso sus brazos por su cuello y enredó sus dedos en el cabello del pelinegro, se restregó contra él y hundió su nariz en su cuello para deleitarse con esa colonia que le hacía delirar, las manos de Leo se deshicieron del saco que llevaba  Dilan y desfajaron su camisa pasando sus dedos por toda la piel posible, el beso se volvía mas demandante, sus lenguas chocando en una danza por el control y el dominio, una que el ojiazul ganó y que a Dilan le provoco otra corriente de placer porque amaba lo burro y bestia que se ponía cuando era por demás dominante y posesivo.

Dilan retiro también el saco de Leo, paseando sus manos por sobre la fina tela de la camisa y recorriendo su pecho, abdomen y espalda con ansia, Leo desabrocho el cinturón y el pantalón del peli plata y sin esperar a mas metió sus manos en el interior de estos estrujando el trasero del ojimiel y provocando un jadeo de placer en este, el mismo que mando una descarga directo a su entrepierna que comenzaba a doler por la falta de atención.

Saco una de sus manos y le mostro tres dedos a Dilan, no fue necesario más para que el ex castaño entendiera el mensaje tomo la mano y uno a uno lamio los dedos con erotismo hasta dejarlos bien bañados en su saliva, se demoro a propósito en la tarea, todo por disfrutar de la cara de placer y agonía que Leo le regalaba al verle hacer el labor.

En cuanto Dilan soltó el último de los dedos Leo no dio tiempo a mas volviendo a introducir su mano bajo la ropa del castaño y bajando en el proceso los pantalones y calzoncillos de este hasta sus rodillas, con rapidez y maestría introdujo un dedo; la sensación de las paredes del ojimiel apresando su dedo mandaron una oleada de calor por todo su cuerpo, movió su dedo una y otra vez con rapidez e introdujo el segundo y luego el tercero apenas dando tiempo a que el cuerpo del menor se acostumbrara, cuando las caderas del peli plata se movieron en busca de mas contacto Leo no pudo esperar más y saco sus dedos, le dio la vuelta al castaño dejándolo contra la pared y con verdadera habilidad desabrocho su cinturón y se deshizo de sus propios pantalones y ropa interior.

Dilan no podía siquiera quejarse por la brusquedad del pelinegro porque aquello estaba siendo demasiado excitante como para dejarle pensar con coherencia y al sentir a Leo introducirse de golpe en su interior le provoco un gemido que no pudo reprimir y que seguro se escucho más allá de las puertas de la habitación.        

Leo estaba eufórico, había esperado y deseado tanto por ello que ahora que lo tenía solo podía dejarse llevar por sus instintos y comenzar con un vaivén que los estaba llevando al paraíso a ambos, Dilan necesitaba aferrarse a algo, arañaba las paredes en busca de un consuelo a gran excitación que sentía, Leo lo conocía muy bien por lo que llevo una de sus manos a la necesitada erección el ojimiel y comenzó a masturbarlo al ritmo de sus   propias estocadas.

-Leo… yo…

-Calla, no digas nada.

-Pero, esto… esto n… no debería.

-¿No quieres?

-No se trata de si lo quiero, es que al.. Ah… alguien podría.

Y justo en ese momento ambos se quedaron congelados al escuchar el teléfono del pelinegro sonar a sus pies entre la maraña de ropa que habían dejado en el suelo.

-Mierda.- Leo salió con cuidado del interior de Dilan y buscando entre sus prendas tomó el teléfono y contesto la llamada.

La interrupción fue suficiente para que las neuronas de Dilan comenzaran a carburar nuevamente, dándose cuenta de el terrible error que había cometido al dejarse llevar de esa manera, mientras Leo contestaba lo que parecía ser una llamada tortura, sintió lastima por el pobre ser del otro lado de la línea, la expresión del ojiazul dejaba claro que lo asesinaría en cuanto lo tuviera cerca y sin embargo sus palabras al contestar eran completamente cordiales, aprovecho el momento en que el pelinegro dejo de mirarle para acomodarse sus ropas y buscar su saco, ponérselo y salir del lugar sin ser visto por el alto.

***

Leo colgó la llamada maldiciendo al ministro Lewis por la interrupción, claro que la culpa era suya por haber olvidado la reunión con el y otros ministros pero igual seguía odiándole, volvió la vista a donde había dejado al castaño y este ya no se encontraba ahí, recorrió la habitación con esperanza de encontrarlo en la cama o el baño pero no había nadie más aparte de él en aquella habitación, de su boca salieron todas las maldiciones habidas y por haber en cuanto idioma conocía, camino hacia su ropa y se vistió apresuradamente apenas y cuidando los detalles necesarios para que nadie supiera la travesura que acababa de realizar, antes de salir por la puerta hecho una última ojeada al lugar rememorando los momentos que hacía apenas unos minutos acaba de vivir y cerrando de un portazo abandono el lugar y bajo las escaleras para volver a sumergirse en el evento social que se vivía en la planta baja.

 

                                                                ***

Dilan despertó por el sonido de una llamada en su celular, con pereza estiro el brazo para tomar su móvil de la mesilla de noche al lado de la cama y antes de contestar observo el nombre en la pantalla “Alex”, maldiciéndolo por despertarle a las 7 de la mañana de un sábado contesto la llamada.

-Que ocurre?

-Ay! Hola cielo, buenos días… estoy muy bien gracias por preguntar, también te he extrañado.

-Sí, si… lo que sea, ¿Qué pasa?

-Es que no puedo solo llamarte para darte los buenos días?

-Nunca lo haces… ¿por qué empezar hoy? ¿Es que acaso te has enamorado de mí?

-iug no que horror, sin ofender pero no eres mi tipo.

-entonces?

-Bien pues es que después de mucho trabajar y del repentino insomnio creativo de anoche por fin lo conseguí.

-Espera, hablas en serio?

-No bromeo con mi trabajo, tenemos completo acceso a cada movimiento, sabrás donde esta a cada segundo del día si así lo deseas… aunque es un poco acosador, ¿no lo crees?

-Déjate de eso, es una excelente noticia y una preocupación menos.

-Dios, en verdad que el amor provoca hacer locuras.

-disculpa pero no eres quien para hablar… estaré por allá en una hora.

-puedes estar en 15 minutos, por qué la demora?

-bien tengo un pequeño asuntito de que encargarme.- El ojimiel colgó sin esperar respuesta, el asuntito del que tenía que encargarse estaba palpitando entre sus piernas y reclamaba por pronta atención.

Lo mismo que todos los días desde hacía ya poco más de una semana, procuraba entretenerse y trabajar el día entero para no pensar en Leo pero a la hora de dormir era otra historia no podía evitar el soñar una y otra vez con el excitante encuentro que vivió con el pelinegro en aquella fiesta, su sueño repetía las mismas escenas pro en este jamás sonaba un celular para interrumpirlos y en sus sueños se concretaba su deseo, y así despertaba todos los días con una dolorosa erección que se calmaba solo con un baño en tina, muchas fantasías y su propia mano haciendo lo que deseaba hiciera alguien más, una persona en particular.

Después de un excelente orgasmo, se ducho y cambio, el mismo tipo de ropa que usaba cada vez más a menudo, unos jeans y un polo con sus amados converse, monto en su Ducati 848 Evo y se dirigió donde el pelirrojo.

Apenas llegar fue recibido con un eufórico abrazo, Dilan dejo las cervezas que había pasado a comprar sobre la mesa y sentado esperando a que el de ojos verdes preparada el desayuno escucho todo lo que Alex tenía por decirle, aquel completo sistema de vigilancia les abría muchas puertas, era momento de comenzar a trabajar con el siguiente paso de su plan, la lista que había escrito el día que se presentó por segunda vez ante la junta había sufrido algunas modificaciones desde la aparición de Alexander pero seguía siendo la prioridad y ahora con un paso tachado era hora de continuar por el siguiente paso.

 

Notas finales:

bueno espero que en verdad esten facinadas con este cap... y si les gusto, si no, si nos aman, si nos odian, si les gustan los gatos o los perros, si tienen alergias o si tambien estan enfermas jaja lo que sea, dejen su review.

hasta la proxima.

Jin.


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