Una pareja peculiar recostada en la cama en una posición muy empalagosa, un joven de cabellos dorados abrazando a otro por la cintura que se encontraba dandole la espalda, el rubio repartia besos tiernos en el cuello del más pequeño a manera de mimos leyendo un libro de historias comunes para poder dormirse mejor y también al bebé que daba pataditas en el vientre del peliceleste.
Kise: Ya no te duele Kurokocchi?
Sobó su pancita ya abultada y proporcionó besos tiernos en sus mejillas.
Kuroko: Duele un poco pero ya me dio sueño... uhm... pero... lo extraño es que... de alguna forma cuando hablaste se calmó más el bebé
Kise: Quieres que lea la historia?
Kuroko: Hazlo... por favor, quiero dormir un poco... escuchando tu voz a mi oído.
Kise: Esta bien... *cof cof* bien... Había una vez en un reino muy lejano...
El tiempo pasaba y los ojos del peliceleste se iban cerrando, una hora después el menor en brazos se terminó por dormir haciendo un ruido tierno e inocente, el rubio en la posición buscando no moverle y despertarlo le besó la frente y le acobijó con dulzura irremediable, con lentitud fue cerrando los ojos pero antes de dormirse por completo el menor de cabellos celestes susurró con voz casi inaudible
Kuroko: Kise... mi prínci...pe...
Y finalmente silenció en brazos del rubio que sin decir mucho estaba más que feliz, cerró la mirada lento agradeciendo dentro por todo lo que tenía.
~b25;~Kuroko's♥Once upon a time~b25;~
Había una vez, en un reino muy lejano llamado Kiseki un rey. Este rey era muy hemoso y era un estratega muy bueno, todos en el reino lo amaban pero al mismo tiempo le temían. Este rey era peculiar, tenía una imagen diferente a la que muchos tenían, no era alto, tenía un cabello rojizo como la sangre al igual que sus ojos, piel aperlada y tersa.
A su lado tenía a un peculiar séquito, un extravagante chico de lentes y cabellos verdes demasiado obsesivo sus oraciones terminaban con un "nanodayo", también era el médico y traductor del reino, Midorima Shintarou. El jefe de guerra era alto tambien, de tez morena y muy energetico, su nombre era Aomine Daiki. El chef Murasakibara, era de todos el más alto, un cabello violisaceo y medio largo, hasta los hombros, era muy calmado y de una forma de ser muy infaltil pero pese a ello era un experto en defensa cuerpo-cuerpo y con armas blancas. Los tres eran importantes para el rey.
El tiempo pasaba y sin fijarse las personas cambian, el rey Akashi Seijurou, tenía una hermosa prima a quien tomó como su mujer, respondía al nombre de Momoi Satsuki y ella tuvo un pequeño infante de un hombre extranjero que la dejó destrozada cuando este se fue y no le llevó con ella. La razón del porque no la llevó fue porque al momento de nacer el bebé le fue otorgada una maldición por la culpa del rey por parte de un hada con corazón endurecido pero ojos amables.
Como rey siempre deseó un hijo lo tomó como suyo pero detrás de todo deseaba a quien moldear a su imagen y semenjanza, pero algo que le hacía famoso era su gran ego, su inteligencia y habilidades eran solo superadas por aquel inmenso ego a su belleza lo que le llegó a tener en posición un gran espejo, el cual le permitía verse de cuerpo entero, haciendo un hechizo especial ya que solo él sabía como hacer magia con ayuda de la alquimia, con el paso del tiempo ese fue su hobbie y todos los días le preguntaba al espejito "¿Quién de todos es el más guapo del reino?" con eso de desear escuchar que alguien le diga implantó un nuevo hechizo que le permitiera escuchar quien era el más hermoso, el espejo siempre respondía "Tú Seijirou... tú eres el más hermoso de todo el reino", hasta que un día cuando el niño al que llamaron Tetsuya y el apellido de su padre Kuroko, cumplió los 12 años el espejito visó el futuro y este dijo en respuesta por vez primera "En el reino hay un joven, cuya belleza superará la tuya cuando cumpla los 16 años, será el joven más bello y amado del reino..." devastante error al decir eso el espejo puesto a que aquel rey hundido en odio buscó hasta poder saber ¿Quién podría ser esa persona, al día siguiente el rey en vez de hacer su cuestión y luego de una larga y ardua busqueda de un día, el pelirojo llegó hirviendo la sangre de odio. "Espejito, espejito... Ayer en tu indulgencia dijiste palabras que son por demás estúpidas, te ordeno decirme, ¿Cuál es el nombre de aquel joven del cual hablas?" a lo que el espejo mágico respondió "Tetsuya Kuroko es su nombre y él será el futuro rey de la nación, poseerá belleza e inteligencia para poder gobernar, la belleza Seijirou, no es eterna... eso deberías saberlo..." y un golpe fiero rompió parte del espejo mientras este perdía el efecto.
Akashi: Así que Tetsuya... ¿Quien diría que ese infante... llegaría a tener un gran futuro...
Y sin más le ordenó a su corte asesinarlo, el asesinato fue a cargo de los 3 grandes de su séquito, pero ninguno de ellos pudo hacerlo, solo una joven cortesana de la lejanías de igual un rubio cabello y ojos verdosos de mayor estatura le dijo que él se haría cargo, al rey pareció agradarle la idea. Luego se varios años el Kiseki se fracturó y cada uno se fue a un reino colindante o lejano.
El escenario para el joven fue cambiando drásticamente cuando llega a un reino donde se dedicó a la limpieza de la casa de la familia Teiko allí estuvo siendo "sirviente" de la gran familia que de alguna forma siempre le molestaban y le hacían lavar las cosas con amplitud de suciedad, Tetsuya estuvo cansado pero su determinacion era bastante como para demostrarles él podía lavar y planchar tanto como eran las exigencias. Un día a los 15 años y a unos dias para cumplir los 16 este chico tenía una belleza incalculable, una dulzura en mirada al tiempo de seriedad que todos deseaban poseer. La imagen del chico peliceleste llegó a los oídos del principe y rey de un pueblo cercano, este pidió se presentara frente a él, pero en vez de ello la familia Teiko envió a la cabecilla con mente de ser él a quien conociera, el rey mando a matar a quien dió la informacion por lo que el chico no conoció al principe en esos dias.
Se supo que aquel rey daría una fiesta y sería de disfraces, sin embargo aquel que tenga el disfraz más bello sería quien bailaría la pieza más larga con el hermoso principe, quien poseía unos cabellos y ojos dorados, una sonrisa perfecta y amable aunque torpe personalidad, cosa que lo hacía el chico más amado pero víctima de bromas pesadas aunque eso no le importaba si es que podía ver a todos felices. Aquel príncipe recibia el nombre de Ryouta, Kise Ryouta.
El reino vecino de nombre Seirin consternado ante el trato hacia el joven Kuroko y reclamando al chiquillo como parte de su nación se lo llevaron y le cuidaron como debía ser, pero el deseaba poder ir a la fiesta donde se decia conoceria al amor de su vida si llevaba la vesti.enta correcta, un hada que se presentó ante él como Alexandra García le otorgó el vestido más bello de todos pero para que pueda encontrar a su amor debía tener cuidado con dos cosas, una la media noche puesto a que a esa hora el efecto de magia se terminaba y la segunda, las tazas rotas porque él tenía una maldición en donde si se pinchaba un dedo terminaría en un sueño junto al reino entero.
Obviamente a su llegada fue casi imprevista, pero la vestimenta que llevaba era la mas hermosa y conquistó corazones de todos, entre ellos se encontraban todos aquellos que alguna vez protegieron al peliceleste Seijuurou Akashi, Shintarou Midorima, Atshusi Murasakibara y Daiki Aomine y entre ellos estaba la madre del joven Momoi Satsuki, quienes seguían igual en aspecto físicoo, como si la vida les diera belleza e inmortalidad unica.
Cada uno fue a conquistar al chico, sin saber quien era este menor pero ninguno lograba conquistar el corazon del joven peliceleste, mientras el tiempo pasaba las horas se terminaban para él eran cerca de las 10 de la noche y aún no se anunciaba quien seria el que bailaria en conjunto del principe Kise. Las mujeres se rodaban a donde el joven estuviera pero él solo quería bailar de igual forma con aquel peliceleste. Cuando al fin pudo hacerlo tomó su mano y con voz delicada y amable se inclinó besando esa mano dulce.
Kise: Buenas noches... se que ha sido tardado pero... le gustaría poder ser mi pareja en la canción más larga de todas?
Kuroko no se podía creer lo que escuchaba y luego le golpear por el sonrojo que tenía las costillas del príncipe tiernamente, este tomó su cintura y le apegó a su cuerpo. La música sonaba a su máximo potencial y eran movimientos intensivos e inclusive reales. En ese momento Kuroko se sentía de la realeza y se dejaba llevar por la música con gran empatía, con gratitud y una hermosa gran sonrisa que a cada momento flechaba más profundo al rubio que torpemente se le acercaba.
Kise: Ryouta...
Kuroko: eh?
Kise: Ryouta Kise... ese es mi nombre...
Kuroko: Tetsuya Kuroko... un placer su majestad... pero realmente esta fiesta es amable, no hay diferencias entre los reyes y los ciudadanos... todos pueden estar aqui... me gusta el reino..
Kise: Yo... no hago nada por ahora pero... padre es bueno en ello... dice que todos somos iguales...
Sonrió aplacído por el comentario del menor siguió la pieza con una lentitud necesaria. Sus cuerpos estaban tan bien acoplados que el ambiente se comenzaba a sentir incomodo para los presentes.
Kise: Kurokocchi... puedo decirte así?
Kuroko: eh? ¿Porque el cchi, al final de mi nombre?
Kise: Yo agrego el -cchi a quienes les tengo respeto...
Kuroko: pero no me conoces...
Kise: pero quiero conocerte mucho mas...
El rubio acercó sus labios a los del menor, pero este se separó rapidamente al escuchar como una taza cayó y tronó contra el piso. Kuroko asi como escuchó se separó y comenzó a correr siendo atrapado de alguna forma por el joven Kise.
Kise: O...oye... porque te vas... apenas será media noche...
Kuroko: Dejame ir por favor... el... el deseo se termina... por favor...
Kise: Prometeme!
El rubio hubo soltado al menor y este corrió, Kise gritó a pulmon a que el menor a la lejania escuchase.
Kise: PROMETEME... QUE TE VOLVERÉ A VER KUROKOCCHI!
Volteó dando una suave sonrisa y se fue cayendo de su rostro el antifaz hasta que lo unico que vió fue finalmente aquel bello rostro y Kise se sonrojó completamente enamorado de aquella bella imagen que tuvo en brazos sin saberlo, pero en especial de aquellos azulados celeste por color de ojos que le flecho algo más que sencillo, el corazón haciendo un suspiro suave al final cuando regresaba a la fiesta, donde todos miraban a aquel rubio completamente enamorado del chico con quien estuvo bailando.
Kise: Te encontraré... Kurokocchi...
Susurró el joven mientras los demás presentes le miraban sorprendido, aquel chico era quien alguna vez dejaron ir.
"Te encontraré" Palabras sencillas que lentamente se harían probablemente un imposible para ambos, que lentamente fueron supuestos por los otros cuatro reyes. Cada uno era fuerte y para vencerles debia de poder tomar ventaja pero eso no lo sabria si no fuera hasta que uno de esos jovenes le dijera explicitamente lo que realmente sucedio. Un hombre que conocia de mejor fuente la historia de aquel peliceleste.
Ogiwara: Ryouta... de verdad pienso en que debería dejarlo, todo esto, solo los terminara lastimando... a ambos
Dijo aquel castaño que poco a poco iba dando forma a la historia de aquel peliceleste, quien a su vez estaba aplacido con la idea de que alguien lo amaba. Esas palabras que conocia debido a su inocencia, cada dia leia una historia hermosa que hablaba de princesas cumpliendo con su "happy end" o "final feliz" prometido
Kuroko: Riko-san...
Riko: dime Kuroko?
K: es posible encontrar el amor verdadero?
Hyuuga: lo es... pero tienes que aprender a buscar y encontrar
Jumpei: Pero primero... sabes que es el amor?
Izuki: no lo sabe... es como el agua y el aceite... no podria saber...
K: agua... y aceite?
R: pero... hasta el agua y el aceite pueden unirse Izuki... solo es cuestion de aprender a unirlas... sencillo no?
Kagami: he escuchado... que aquel joven ru...
Kuroko: Ryouta... Kise Ryouta...
kagami: tks... ese... anda buscando pistas del paradero de Kuroko... esta bien asi?
Riko: omg una historia de amor... no puede ser... y estoy en primer fila... oh si!!!
H: No deberias ponerte feliz por algo que podria ser una guerra sin fin...
R: pero es divertido e interesante... una batalla por el amor de Kuroko y su ternura irremediable.
Hyuuga: Deje de decir eso.. Riko que no es divertido, igual el esta...
Un ruido sonoro se escucho desde la lejania y lentamente todo el castillo fue a mirarle, solo para encontrarse con un peliceleste tirado en el suelo inmovil, algo le estaba manteniendo dormido. Lo levantaron y llevaron a la cama a donde comenzo a descansar, pero los dias pasaban y nada sucedia. El invierno llego y el lugar lentamente en una fria cuna se convirtio, para inpedir que ello siguiera asi, Riko decidio ponerle en un la caja de cristal y esperar a que algun apuesto principe fuera a levantarle, tal y como eran las historias que se escuchaban en reinos contiguos.
[1 año despues]
Riko: Quien iba a pensar que eso pasaria... justo cuando hablaste Hyuuga...
Intento bromear mientras a su rededor todos miraban tristes el lugar.
Izuki: Lo mejor seria... encontrar a alguien que le ayude... un doctor o un...
Mitobe: ...
Kogane: Tienes razon...
Todos: ...
Kogane: Dice Mitobe que esto solo puede ser por un beso, del amor verdadero~
Riko: NO ESTAMOS PARA ESAS BROMAS!
Izuki: Pero es verdad... despues de todo, nadie se cae asi y sobrevive un año sin comer... encerrado en una caja de cristal, a estas alturas no deberia poder respirar... o minimo deberia estar...
Riko: Ya entendi... ya entendi... entonces solo busquemos... quien pueda resolver un misterio y nos haga reir, podra ser quien tome el...
Hyuuga: oi! Riko... eso no seria justo... nadie podria agradarte
Riko: Hyuuga, corre cien veces alrededor del castillo
Hyuuga: Pero que?!
Riko: Co...rre
Dijo la castaña mientras que los demas comenzaban a movilizarse a otro lado alejados de ella. Tal vez lo mejor seria encontrar a alguien, o que alguien lo encuentre.
Riko: Perfecto... comencemos con los acertijos... e Izuki... tu escribe no hables
Kagami: Excelente idea... no podia haberlo dicho mejor...
Izuki: pero tengo bastantes juegos de palabras que podrian ayudar
Todos: NO LO TIENES!!!
Izuki: hmp! -aun asi tomo nota de todo lo que decian-
Kagami: Yo... podria intentar darle el beso de... ya saben -rasco sonrojado su nuca de manera infantil pero de alguna forma inocente, como solo el tigre sabia serlo.
Riko: Podriamos intentar... porque Kuroko estuvo mucho tiempo a tu lado, pero y si no despierta?
Izuki: Habra que repartir la noticia, a que solo el verdadero amor lograra despertarlo...
Hyuuga: Y si vienen muchos?
Teppei: Podriamos lanzar un hechizo donde solo su verdadero amor pueda entrar y abrir la caja de cristal
Riko: El acertijo! que el acertijo sea nuestra ayuda... quien responda bien el acertijo y tenga una buena razon podra... estar al lado de Kuroko y darle el beso... Excelente idea Izuki, Teppei
Dicho eso, y luego de unos dias. Rondaba por la ciudad una historia de un hermoso principe que reposaba dormido en el bosque encantado, que con una gran belleza creaba el lugar sombrio en un hermoso paraiso a su rededor. Pero que esta en ese lugar porque nadie habia podido darle el beso de amor verdadero, pero que para abrir la caja, se necesitaba de tener un buen corazon y contestar un acertijo que se daria al estar frente a frente con el cristal. Luego de la noticia, muchos huian a sus hogares, otros temian que algun rey dijo eso para proteger a su hija, otros mas avemturados, dormian solo un momento, para luego huir a otros brazos.
En el reino contiguo la noticia corrio como de rayo, y literal un joven rubio busco a quienes hablaban de aquella noticia, hasta abalanzarse a mover al joven que hablaba hasta removerle los pensamientos, dijo a voz que necesotaba saber como era aquel chico, saber si era el amor, la persona de quien se enamoro aquel dia en un simple baile. Kise al escuchar la forma, la imagen casi cae al escuchar que en efecto, era exactamente igual a como le recuerda pero aun se preguntqba como fue que paso todo eso.
Kise: Yo! iré a darle el beso... tal vez no sea el amor verdadero, pero mi amor por el es unico... es sincro. Yo... yo realmente lo amo... se que solo le he visto una vez pero eso fue suficiente para llegarlo a amar! No hace falta vivir a su lado para saber que es una joya en bruto, una joya que pide ser moldeada... y yo sere quien le de ese moldeo
Dijo refiriendose a que le amara y dara todo lo que necesite, porque ha sufrido bastante y no lo merecia, pues lo miraba como si fuese alguien muy inocente, algo poco comun en esos dias.
Riko: Hazlo... pero si no despierta... TE HARE DAR 10000 VUELTAS NO SOLO EN TU CASTILLO... SINO EN TODO TU REINO Y SIN DESCANSO!
Dijo aquella mujer que sabia a que se referia el joven, pero en ese entonces una frase, una imagen se coloco en la mente del joven rubio "Kuroko Tetsuya" su primer encuentro y ahora el momento de poder volver a verlo.
Kise: Kurokocchi... que emocion... waaaah no puedo contenerme...
Pero claro que no fue advertido, como todos, del desafio que deberan de pasar y que todos fallaban. A su llegada a la vereda una hermosa joven de largos cabellos azabache, mirada violeta y rojiza, se mostro ante aquel joven rubio, en un principio no se miraba su rostro bien por un velo que cubria desde su nariz, pasando sus labios hasta el vestido de parte del pecho donde nada mas que aquel largo y oscuro vestido cubria lo demas. Alzo una mano cubrierta de igual forma y una voz suave comenzo a hablar.
Alice: Mi nombre es Alice... Soy quien gobierna y protege este bosque, has pasado el primer circulo... la primer prueba... Kise Ryouta ¿Estas listo para la segunda y ultima prueba, antes de dar el beso a aquel joven que por ahora mantiene una gran maldicion en su cuerpo?
Kise: ...???? erm... no entendi realmente... pero si... estoy listo! Todo sea por estar al lado de Kurokocchi!!
Alice: En ese caso... Kise Ryouta, cuando estes frente a la cana de cristal diras en voz alta la respuesta a mi pregunta siguiente: "¿Que es... que sera...que cuando estan arriba hay luz, pero cuando cubren solo hay oscuridad?"
Dicho ello la joven camino nuevamente a seguir su camino, sin volver a mirarle aunque el chico pidio volver a contrarle la pregunta, ahora estaba hecho un lio preguntandose que pasaria si no responde.
Kise: veamos... cuando esta arriba hay luz... pero cuando se cierra... hay oscuridad...
Siguio analizando y analizando, hasta que llego a la caja de cristal, mirando la imagen de aquel joven embelesado por aquella inocencia que mostraba.
Kise: Kurokocchi... desearia que tus parpados se abrieran para mi... que tu...
Y sin mas la caja se abrio, el rubio casi se caia de la impresion al ver como aquella caja habia tomado aluna de sus palabras, lo que le hizo reir como idiota que era al ver que la respuesta simple y facil. Camino ahora mejor hacia aquel jovial cuerpo y sin mas, beso casto aquellos labios. La mas bella escena que se pudo apreciar mie tras aquel joven le miraba despertar poco a poco, hasta que comenzo a toser como si algo estuviera atorado en su cuerpo, lo que provoco Kise se pusiera nervioso y sin querer le presionara un poco el pecho para ver salir un pedazo de manzana roja salir de sus labios, con ello el joven Tetsuya comenzo a toser menos y luego mirar al contrario, que se mantenia los ojos llorosos.
Kise: Kurokocchi...
Kuroko: Kise-kun...
Kise: Kurokocchi...
Kuroko: Kise-kun...
Kise: Kurokocchi...
Kuroko: Kise-kun...
Kise: pense.... que jamas volveria a verte... todas las noches soñaba con abrazarte y besarte, pero como jamas me dijiste donde vivias...
Comenzo a lagrimear el rubio completamente aferrado al delicado cuerpo del peliceleste.
Kuroko: Kise-kun... duele... y eso es raro...
Un amplio sobrojo cubrio las mejillas del peliceleste.
Kuroko: Raro... pero... lindo...
Dijo mirando con aquellos ojos de enamorado y que desde hacia tiempo atras dejo ver que lo queria aunque por su imagen se crea que no o que carece de sentimientos.
Kise: Quiero...que seas mio... mi pareja, mi amor. Que yo sere, si tu lo deseas... solo para ti... porque sere muy feliz...
Susurro llorando mientras que lentamente las escena se iba borrando y aquel peliceleste se levantaba aferrandose a un rubio que en la cama le escuchaba balbucear:
Kuroko: Si... Kise-kun... te acepto... porque se... que solo tu... me haras tan feliz... que jamas podria dejar... atras tu amor... Kise-kun... te amo...
Kise por su lado miro a aquel joven con lagrimas en los ojos, estaba muevamente enamorado de aquel joven.
Kise: Tambien te amo... Kurokocchi... jamas te dejare de amar
Beso su frente quedando asi una bella imagen guardada en la mente del rubio.